Fuente: hoopshabit.com

Pese a los temores por la baja de Kyle Lowry, en Miami disfrutaban viendo como no eran los únicos con problemas para contar con su quinteto inicial más habitual. En los Celtics veían como, en cuarenta y ocho horas, se quedaban sin Marcus Smart, por un esguince de tobillo, y sin Al Horford al entrar en el protocolo anti-Covid de la NBA. Los tres sustitutos eran los esperados; Gabe Vincent en los locales y Robert Williams III y Derrick White en los visitantes. Sin embargo el inicio no era tan agradable para los locales, el equipo salía frío en ataque y los de Massachusetts no bajaban la intensidad defensiva de la anterior ronda. Jayson Tatum y Jaylen Brown eran los encargados de dirigir el ataque visitante y Erik Spoelstra se desesperaba viendo como la desventaja se acercaba a los diez puntos por los balones perdidos de su ataque. el movimiento de balón visitante era tan sólido, que Robert Williams no tenía problemas para sumar puntos bajo canasta.No tardaba en llegar el turno de los suplentes, Tyler Herro abría la defensa visitante y los Heat lo tenían más fácil para defender. El FTX Arena veía como los suyos tomaban el mando en el marcador. Ime Udoka estabilizaba el ataque de Boston y, dado que los locales volvían a perder el ritmo ofensivo, el pabellón se callaba viendo como su equipo cerraba en desventaja el primer acto. Y lo peor es que la mala dinámica no se quedaba en el banquillo; el ataque local seguía sufriendo y los Celtics encontraban la conexión con su juego interior con facilidad. Además Jaylen Brown se desperezaba, Payton Pritchard se mostraba sólido y la diferencia superaba los dos dígitos a mitad de cuarto. Por encima PJ Tucker se iba a los vestuarios y los de Florida comenzaban a perder la identidad de su juego. Erik Spoelstra variaba su rotación para abrir el campo con sus mejores tiradores, para disfrute de Tyler Herro, pero Tatum seguía cómodo en ataque y, como siempre, Boston tenía facilidad para llevar el balón a sus interiores.Dado el juego mostrado durante la primera mitad, en Miami debían escucharse las palabras del técnico local en los vestuarios. Presentarse en el tercer periodo a ocho puntos, era un mal menor ante las facilidades concedidas a los visitantes. Además el cuadro local tenía una gran noticia para alimentar el ánimo de su afición, PJ Tucker arrancaba la segunda mitad sobre la pista. Ahora los Heat salían a la pista con otra actitud, ya no había conexión visitante con su juego interior y, como su ataque se ponía más agresivo, acababan completando un parcial de diez a uno para ponerse al mando del partido. El enfado de su técnico traía aparejado un tiempo muerto de los Celtics, pero no solucionaba nada. Las ayudas cerraban las opciones visitantes, con Bam Adebayo y Gabe Vincent como protagonistas, y el ataque local se mostraba más reconocible y confiado. Los balones perdidos de su equipo, y el arbitraje, se llevaban las iras de Udoka. El parcial era de veintidos a dos tras seis minutos jugados, gracias a la mejor versión de Jimmy Butler en defensa y ataque. Tras siete minutos Boston conseguía su primera canasta en juego tras el descanso pero, pese a que los locales notaban el cansancio y recibían un parcial de nueve a cero, la respuesta de sus jugadores secundarios era excelente. Tras mandar por más de diez puntos, y ver reducida la ventaja a sólo tres, Miami encontraba el acierto de Vincent, y la intensidad de Dewayne Dedmond, para llegar al cuarto final con diecisiete puntos de ventaja. Naturalmente los Celtics no se iban a rendir; los contactos aumentaban, Adebayo se ganaba una falta flagrante cerrando un rebote y Grant Williams y Max Strus se repartían una técnica para cada uno. Los choques eran constantes, Boston reducía la distancia desde la línea de tiros libres y los diez puntos de ventaja obligaban a Butler a regresar a la pista. El alero salvaba una mala posesión y, tras un par de intercambios de triples, Jimmy Butler se encargaba de cerrar el partido. El FTX Arena podía celebrar la primera victoria de los Heat. Invitado inesperado: Tyler Herro, Dewayne Demond, Gabe Vincent (Heat)

Fuente: hardwoodhoudini.com

El segundo partido traía mejores noticias para Boston puesto que, a pesar de perder a Derrick White, el quinteto inicial volvía a contar con sus miembros habituales, incluyendo a Robert Williams III, y eso se dejaba notar desde el inicio. Su movimiento de balón le permitía tiros claros mientras que, aunque los Heat comenzaban acertando en sus tiros, la agresividad y los contactos de la defensa visitante no permitían demasiados espacios para levantarse. A pesar de ello el FTX Arena estaba entusiasmado porque, con los triples entrando, los suyos tomaban siete puntos de ventaja. Sin embargo no tardaban en dejar de entrar, mientras que en Boston sí acertaban porque su selección de tiro era mejor. Los balones perdidos comenzaban a ser un problema en los locales, Grant Williams y Jaylen Brown lo metían todo y, tras encajar un parcial de veinte a tres en cuatro minutos, en Miami sufrían viendo como su equipo perdía por once puntos al cerrarse el primer cuarto. Y lo peor era que el paso por los banquillos no cambiaba nada sobre la pista, la desconfianza comenzaba a surgir en el cuadro local y Erik Spoelstra paraba el partido porque la distancia entre ambos equipos casi alcanzaba las dos decenas de puntos. Daba igual; Jimmy Butler no daba soltado a Marcus Smart, hasta Payton Pritchard era una amenaza ofensiva y, metiendo casi todo lo que tiraban, los Celtics se iban a los vestuarios en medio de un funeral. Ni el mejor Bam Adebayo había podido responder ante la mejor versión de Jayson Tatum. El FTX Arena se había quedado mudo viendo que tendrían que remontar veinticinco puntos y, pese a que el público quería mantener la esperanza, Miami no encontraba otro recurso ofensivo que Jimmy Butler. Bastaba un poco de apoyo de sus compañeros para dejar la diferencia en diecisiete puntos, pero era demasiado poco ante la mejor versión de equipo visitante, los balones perdidos volvían a ser una pesadilla y, con un Marcus Smart ahora inspirado en el ataque, el último cuarto casi sobraba. Sobre todo porque se confirmaba que, en los locales, PJ Tucker sería baja por una contusión en la rodilla. En pocos minutos todo estaba resuelto, la eliminatoria volvía a Boston con un empate a uno y muchas dudas en los Heat. Invitado inesperado: Payton Pritchard, Grant Williams (Celtics)