Abrines regresó a Barcelona hace año y medio como punto de inicio hacia la salida del túnel al que le condujo su frustrante experiencia en la NBA, víctima de una profunda depresión que suponía un grave problema personal y amenazaba seriamente su carrera deportiva. Su vuelta suponía un nuevo comienzo, un rumbo distinto a su vida en la búsqueda de sí mismo, de la felicidad. La temporada anterior estuvo marcada por el largo camino de la recuperación sobre la cancha; no podía ser de otra forma, sin importar que no pasara de un tono discreto. Tenía que recorrer un túnel muy oscuro, con pasos cortos y cautelosos hasta que apareció en el trayecto el guía adecuado. Jasikevicius ha conseguido rehabilitar por completo a Abrines, que recuperó una fiabilidad asombrosa en el tiro exterior e, incluso, ha evolucionado de tal manera que se ha convertido en un seguro en defensa, el punto flaco que le había perseguido durante toda su carrera y que ahora se convirtió en un valioso añadido a su repertorio. Los siete triples en la Fonteta suponen otra prueba más de que, definitivamente, el largo túnel ha quedado atrás y el horizonte se presenta claro e ilusionante. Quien sabe si Tokio forma parte de él este próximo verano.
PARTIDO DE LA JORNADA 26:
CB Canarias 85 – UCAM Murcia 78: UCAM Murcia firmó un inicio de partido prácticamente perfecto en su visita al Santiago Martín. Con Strawberry a la cabeza, estuvo casi infalible durante buena parte del primer cuarto; de hecho, sólo erró un tiro de campo en los primeros seis minutos de encuentro (17-25, min 6). Además, consiguió atar en corto a Shermadini, que pasó desapercibido durante todo el primer periodo. A CB Canarias le estaban pasando factura las semanas de inactividad en Liga ACB, pero se activó cuando Vidorreta puso a dos bases en pista. Como tantas veces, Marcelinho Huertas ofició de guía, como desatascador del equipo aurinegro. El base brasileño anotó la mitad de los puntos de su equipo en el primer cuarto y fue el salvavidas que permitió a CB Canarias acabar con el dominio inicial de UCAM Murcia. Por otro lado, el segundo componente de la pareja estelar, Shermadini (14 puntos, 2 rebotes, 2 robos, 19 de valoración), dio señales de vida al inicio del segundo cuarto y puso por delante a los locales con cinco puntos consecutivos, pero los de Sito Alonso respondieron de inmediato con dos triples que pusieron con ventaja nuevamente al equipo murciano. La réplica tan rápida de su rival no le vino bien a CB Canarias, que pasó por serios problemas para encontrar tiros cómodos, pero UCAM Murcia no fue capaz de aprovechar el buen rendimiento ofrecido en defensa debido a que los pívots no estuvieron lúcidos en la zona contraria. Al final, CB Canarias se mantuvo a flote forzando personales, lo que le valió para que la desventaja fuera mínima al descanso (40-42, min 20). Le vino bien un marcador tan apretado, puesto que el partido se endureció de forma considerable en el tercer cuarto.
Cómo no, tuvo que aparecer el de siempre para dejar su marca cuando en la cancha se impone un tono áspero. Sadiel Rojas añadió otra gañanada más a su lista con un hachazo sin venir a cuento que le costó la antideportiva. Sospechoso habitual le llaman. No obstante, el intercambio de canastas mantuvo la igualdad en el marcador hasta mediado el tercer cuarto, cuando el desarrollo del partido cambió radicalmente con una sequía anotadora que se prolongó durante muchos minutos. Costaba anotar una barbaridad, aunque a CB Canarias le valía con los toques de genialidad de Huertas (26 puntos, 6 asistencias, 27 de valoración) para dominar ligeramente el encuentro. Un triple de Cavanaugh (11 puntos, 6 rebotes, 16 de valoración) le dio a los locales una ventaja muy interesante (72-63, min 37), habida cuenta de que se trataba de una renta significativa tal como iba el partido y que su rival no metía ni una. UCAM Murcia se encontraba en una situación muy delicada, ya que sólo anotó dos puntos en siete minutos, y no le quedaba otra que apretar en defensa para salir del atasco. Lo consiguió buscando la zona y entregándose a las acciones individuales de Jordan Davis, pero CB Canarias, ya con dos bases en pista, nunca perdió el dominio de la situación. Entre Huertas y Fitipaldo sentenciaron desde el tiro libre un partido que terminó de forma bronca con la expulsión de Rojas tras recibir una técnica. Sus malas pulgas en las derrotas es otra característica en un jugador que confunde, en ocasiones, la intensidad con el macarrismo. En fin, nada podía evitar un triunfo más del conjunto lagunero, al que costará mucho sacar de los cuatro primeros.
PARTIDOS DE LA JORNADA 27:
Obradoiro 83 – Unicaja 85: El comienzo en Fontes do Sar se asemejó a la continuación del horrible último cuarto que firmó Unicaja el martes en el Palau Blaugrana, puesto que arrancó el encuentro falto de energía y superado por un rival más intenso y que le endosó un 7-0 de inicio sin que apenas le diera tiempo a asentarse en la pista. Entre Cohen y Robertson (22 puntos, 3 asistencias, 21 de valoración) se bastaron para que Obradoiro dominara con cierta comodidad un primer cuarto que añade otro elemento más a la lista de malos inicios del equipo malagueño (14-6, min 4). Katsikaris pidió más intensidad en el tiempo muerto que solicitó, pero no sirvió de mucho. Deon Thompson continúa en el tono bajo de esta temporada, mientras Enoch hacía mucho daño en el juego interior y Robertson conservaba su inspiración en el perímetro. Si no fuera por Brizuela (19 puntos, 2 rebotes, 2 asistencias, 24 de valoración), que apareció desde el banquillo con la muñeca caliente, Unicaja se podía encontrar con el partido muy cuesta arriba antes de que el primer cuarto llegara a su fin (26-16, min 9). Sin embargo, los jugadores exteriores acudieron al rescate del conjunto de Katsikaris al inicio del siguiente periodo. Jaime Fernández sí fue capaz de romper la defensa rival cuando cortó por la zona y aprovechó el buen trabajo de un quinteto de Unicaja más defensivo. Pese a que dominaba el rebote, la falta de acierto en la línea de tres penalizó a Obradoiro en el segundo cuarto y fue cuestión de tiempo que su rival le echara el guante, algo que consiguió cuando le llegaron buenos balones a Malcom Thomas cerca del aro (30-30, min 15). A Moncho Fernández no le quedó otra opción que volver a contar con su quinteto titular para acabar con los problemas ofensivos. Aunque el regreso de Robertson y Enoch se notó en el primer momento, los balones perdidos le dieron la oportunidad a Unicaja de marcharse con ventaja al descanso (40-41, min 20).
La sucesión de pérdidas de Obradoiro continuó en el tercer cuarto, aunque la falta de continuidad en ataque de Unicaja le permitía mantener el encuentro apretado en todo momento. Los locales recuperaban lentamente el acierto en el tiro de tres y no perdían de vista al equipo malagueño, pese a que los exteriores conseguían que disfrutara de una ligera ventaja. Una tónica invariable toda la segunda mitad, pese a que Unicaja sumaba desde el perímetro al comienzo del último cuarto y amagó con marcharse en el marcador (67-75, min 34). La acumulación de personales de los pívots supuso un freno para los visitantes, ya que Enoch (24 puntos, 8 rebotes, 34 de valoración) aprovechó esta circunstancia para hacer daño bajo el aro y sacar del partido a sus defensores. Tanto Nzosa como Malcom Thomas acabaron eliminados por faltas cuando aún quedaban cinco minutos por jugarse, un problema con tanto tiempo por delante, aunque el tiro exterior de Unicaja volvió a aparecer en el momento más oportuno. Un triple de Bouteille y otro de Brizuela dejaron el triunfo encarrilado para Unicaja (74-83, min 38), pero Obradoiro volvió a sacar partido de la debilidad de Unicaja en el juego interior, ya que los pívots sacaban faltas cada vez que recibían en la zona. Una bandeja de Oliver completó un parcial de 9-0 que igualó a 83 el encuentro, aunque a Unicaja aún le quedaba una posesión para evitar la prórroga. Una bala que no desperdició, puesto que Brizuela estuvo certero desde cinco metros para darle la victoria al conjunto malagueño sobre la bocina. Otro golpe que alarga la mala racha de Obradoiro, que se está complicando enormemente la existencia en las últimas semanas.
Basket Zaragoza 104 – Estudiantes 113 (tras prórroga): Dos triples nada más empezar fueron los primeros destellos del sensacional partido que se marcó Brussino, aunque seguro que el argentino no se acordará gratamente de él. No obstante, su acierto contrastaba por entonces con la escasa inspiración ofensiva de Estudiantes, como demuestra que Vicedo fallara dos tiros sencillos bajo el aro. No fue hasta que el partido enloqueció cuando los colegiales encontraron el punto al partido. Los triples de Barea (18 puntos, 7 asistencias, 19 de valoración), que anotó once puntos en el primer cuarto, le sirvieron al Estu para tomar ventaja en el marcador, pero la reacción del equipo maño llegó de inmediato de la mano de otro especialista en el juego individual: Ennis. Anotó ocho puntos consecutivos con los que dio el relevo en la anotación a Brussino y puso por delante otra vez a los locales, que sumaban de tres en tres para tomar distancia paulatinamente. Estudiantes volvió a pasar por una fase ciertamente incómoda y sólo encontraba alivio cuando podía correr. La lesión muscular sufrida por Gentile añadía un problema más a los del Ramiro, que sufrían el acierto del tiro exterior de Basket Zaragoza. Brussino y Harris (23 puntos, 8 rebotes, 5 asistencias, 31 de valoración) hacían añicos la defensa del Estu, que suficiente tuvo con mantener el tipo ante el bombardeo local (51-44, min 20). Aún se le pondría más complicado con el buen arranque del equipo maño en el tercer cuarto, pero los del Ramiro encontraron a tiempo el acierto en el tiro exterior para variar por completo el guion del partido. Los triples les permitieron acercarse rápidamente en el marcador, hasta el punto de dar la vuelta al choque tras una canasta de Arteaga (64-65, min 27).
No fue hasta que su rival completó la remontada cuando Basket Zaragoza reaccionó, de nuevo con Brussino (29 puntos, 4 rebotes, 27 de valoración) como referente ofensivo. Fue el encargado de sostener al equipo maño en plena fase de alternativas en el marcador que no cesó iniciado el último cuarto. En esta ocasión, Ennis y Avramovic (23 puntos, 2 robos, 22 de valoración) libraron un duelo anotador que mantenía el encuentro igualado en todo momento. Edwin Jackson tomó el testigo con cinco puntos seguidos, pero el caudal ofensivo beneficiaba a los locales, que siempre encontraba el auxilio del omnipresente Brussino, llamado a convertirse en el héroe del encuentro (94-88, min 38), pero Estudiantes no había dicho su última palabra. Los triples de Avramovic y Alec Brown igualaron el partido a falta de 29 segundos para los colegiales, que tuvieron la oportunidad de llevarse el partido tras errar Ennis la última posesión de Basket Zaragoza, pero Barea no consiguió anotar el tiro de cinco metros que pudo dar el triunfo a Estudiantes. De todos modos, este fallo no le afecto en demasía, puesto que arrancó la prórroga como dominador absoluto con un triple de Jackson y una canasta y personal de Delgado (12 puntos, 20 rebotes, 26 de valoración). Basket Zaragoza trató de sobrevivir con acciones individuales como recurso para superar una defensa rival que crecía en intensidad, pero Brown puso la sentencia en un pletórico último minuto. Un palmeo y un mate del pívot dejaron el encuentro resuelto, pero, por si fuera poco, le endosó un tapón a Ennis que puso la rúbrica a un triunfo que supone un alivio enorme en la clasificación para Estudiantes.
Andorra 92 – Manresa 86 (tras prórroga): Los primeros minutos en el Nou Congost no invitaban a sentarse a pasar la mañana viendo baloncesto, ya que el pobre porcentaje en el tiro de campo convirtió el comienzo del partido en un tormento, especialmente porque ninguno de los dos equipos era capaz de anotar desde fuera. Hasta bien avanzado el primer cuarto no se animó el choque, cuando Manresa varió sus sistemas para buscar con más determinación el juego interior. Ya que no anotaba desde fuera, no era mala opción buscar a los pívots, que dominaron con claridad a los hombres altos de Andorra (19-28, min 15). Le faltaba claridad a un conjunto andorrano muy desdibujado. Sus bases estaban desaparecidos, no funcionaba el tiro exterior y los pívots eran superados en todo momento. Los puntos de Llovet y Sergi García evitaron que su equipo se marchara del partido antes del descanso, pero Andorra continuaba sin encontrarse cuando arrancó el tercer cuarto. Manresa mantenía su dominio aplastante dentro de la zona, bien reflejado por un poderío incontestable en el rebote ofensivo y que le permitía anotar con mucha facilidad. Los locales no eran capaces de seguir el ritmo anotador de los hombres de Pedro Martínez debido a la evidente inferioridad en la zona, el agujero negro por donde se estaban escapando sus opciones de pelear el triunfo (45-58, min 26), pero Andorra reaccionó a tiempo. Cerró mejor la zona mediado el tercer periodo y empezó a producir con más frecuencia cerca del aro en cuanto le llegaron buenos balones a Olumuyiwa, pero la reacción fue cortada al inicio del último cuarto con la facilidad que encontró Eatherton (18 puntos, 7 rebotes, 5 asistencias, 28 de valoración) para sumar en el juego interior.
La reacción quedaba frenada, ya que el conjunto local vio de nuevo cerrados los caminos hacia el aro visitante y sólo lograba sumar desde el tiro libre. Los de Ibon Navarro se quedaban sin argumentos, pero aún les quedaba la baza de apretar los dientes en defensa y ver qué pasaba. En la intensidad atrás estuvo la solución, puesto que se metió en el encuentro robando balones y atacando en transición. A su vez, empezó a funcionar el tiro exterior al mismo tiempo que Hannah (22 puntos, 3 asistencias, 22 de valoración) encontró el rumbo que no halló hasta el momento. Andorra es un equipo diferente cuando Hannah está inspirado, como se pudo comprobar en los últimos minutos. De mano de su base, Andorra endosaba un parcial de 13-2 que ponía el partido al rojo vivo (71-72, min 37). Aunque Manresa trató de recomponerse mirando de nuevo a su juego interior, lo cierto es que ya no había forma de frenar a un Hannah desatado y que igualó a 78 el partido a un minuto del final. Tanto esfuerzo le dio la oportunidad de llevarse el partido en la última posesión, pero Jelinek no anotó el triple frontal que pudo evitar la prórroga. Manresa la iniciaría con más acierto, pero fue un espejismo. Andorra reaccionó de inmediato y no tardó en tomar una ventaja que no paró de aumentar. Un triple de Jelinek, a medio minuto del final, le dio medio partido a los locales, que ya no perderían el control del partido. El parcial de 14-3 resultó decisivo en un triunfo que aprieta aún más la pelea por la codiciada octava plaza, el último billete para los playoffs.
Gran Canaria 90 – GBC 81: En GBC han encontrado un tesoro en su pareja interior, el aspecto más destacado de su juego en las últimas jornadas. Okouo y Radoncic se han convertido en piezas clave en los sistemas de Nicola y ambos conformaron la base del buen arranque del equipo donostiarra (4-10, min 3). Gran Canaria tardó un poco en arrancar, pero cuando empezó a funcionar el tiro exterior no le costó tomar el mando en el marcador. A golpe de triple, los locales lograron un parcial de 13-2 que recondujo un comienzo de encuentro demasiado frío, pero GBC no se amilanó por la reacción rival y retomó el pulso regresando al plan original. El duelo anotador entre Albicy y Kilpatrick (17 puntos, 5 rebotes, 22 de valoración), por un lado, y los pívots de GBC planteó una fase de alternativas en el marcador que se alargó hasta la mitad del segundo cuarto, cuando Gran Canaria desató un bombardeo desde el perímetro que hizo añicos la defensa visitante. Hasta cinco triples seguidos anotó el cuadro amarillo, con Shurna (17 puntos, 6 rebotes, 22 de valoración) y su peculiar mecánica de tiro como principal artillero en pleno frenesí de acierto en el lanzamiento de tres. Okouo ya no parecía suficiente argumento para mantener el desenfrenado ritmo anotador de Gran Canaria (43-30, min 17), pero GBC logró salvar los muebles en la parte final del segundo cuarto con cinco puntos consecutivos de Magarity en el último minuto. El equipo donostiarra había conseguido minimizar daños y no tardó en acercarse peligrosamente de nuevo con el mismo recurso de siempre. Sólo anotaban Okouo y Radocic, pero GBC no necesitaba más para seguir muy vivo en el encuentro. De hecho, tomó ventaja tras un triple de Faggiano (58-60, min 26), pero encontró rápida respuesta en otros dos más que devolvieron de inmediato a Gran Canaria el mando en el electrónico. Los hombres de Fisac mantenían un pequeño margen, pero no encontraban la forma de quitarse de encima a un rival muy insistente y que siempre encontraba a Okouo (23 puntos, 5 rebotes, 18 de valoración) o la aportación puntual de Faggiano (17 puntos, 4 asistencias, 18 de valoración) para mantenerse al acecho. Sin embargo, a GBC se le acabó la gasolina en los últimos minutos y el cansancio le llevó a perder demasiados balones en el tramo decisivo del encuentro. No perdonó estas concesiones Gran Canaria, que se agarró al tiro de tres para dar el estirón definitivo. Cinco puntos seguidos de Dimsa pusieron la sentencia definitiva (86-74, min 37) a un encuentro que le costó mucho sudor amarrar a Gran Canaria.
Fuente: noticiasdegipuzkoa.eus
Real Madrid 95 – Betis 77: En vísperas de un duelo crucial en la sufrida pelea por acabar entre los ocho primeros la fase regular de la Euroliga, el Real Madrid pasaba por el bálsamo de la Liga ACB para aliviar las penas de la competición europea. La visita del Betis, un rival cómodo sobre el papel, significaba una buena oportunidad para disfrutar de una tarde tranquila y así apuntaba tal como transcurrieron los primeros minutos. A pesar de los errores en el tiro de Taylor, el equipo blanco defendía fuerte, movía el balón con paciencia y disfrutó de un acierto notable en el tiro de tres. Argumentos de peso para tomarse el partido con calma (13-6, min 6), por lo que Laso no tardó demasiado tiempo en ofrecerle un respiro a Tavares. Lo que no cambió fue la reacción de cada rival cuando el pívot se marcha al banquillo, algo habitual en cada encuentro de los madridistas. Pese a que el tiro exterior mantenía por delante al Madrid sin muchos agobios, el Betis seguía cerca porque se encontró mucho más cómodo sin la amenaza del gigante bajo los aros. Los verdiblancos se mostraban eficaces en el rebote ofensivo y Ndoye (16 puntos, 13 rebotes, 21 de valoración) volvió a destapar las vergüenzas de Tyus, que firmó otro partido decepcionante, aunque ya pocos madridistas se sorprenden de su bajo rendimiento. Esta vez, Laso tomó buena nota y lo sustituyó por el joven Vukcevic, que en su primera acción en ataque se sacó de la chistera un 3+1. En apenas unos segundos ya había hecho más que lo que se esperaba de Tyus. Ni mucho menos se impresionó por entrar en pista en un momento importante del partido, en un quinteto donde Causeur y Thompkins (11 puntos, 5 rebotes, 5 asistencias, 18 de valoración) llevaban el peso ofensivo. El regreso de Tavares, acompañando en la pintura a Vukcevic, apuntaba a un golpe casi definitivo en el encuentro (44-32, min 18), pero el Betis apretó los dientes para seguir con vida al descanso. Dos triples de Randle, que ha perdido peso en los planes de Plaza debido a su individualismo extremo, supusieron un pequeño alivio para los béticos, que comenzarían la segunda mitad con algo más de energía. La zona planteada por el Betis supuso una seria molestia para el ataque del Real Madrid, ya que alejó a Tavares del aro verdiblanco.
El equipo blanco perdió peligro, tanto por la menor amenaza de Tavares a cuatro metros del aro como por los continuos fallos de Taylor. Joan Plaza no se cortó en pedir que flotaran tanto a Laprovittola como al alero sueco, consciente de que ninguno de los dos se encuentra en un buen momento en el tiro. Sin embargo, el Betis no aprovechó apenas el pobre rendimiento ofensivo de un quinteto romo y al Madrid le bastaba con la aportación de Deck para mantener una renta tranquilizadora. Laso le sentó pese a que era el jugador madridista más inspirado en ataque, pero su testigo lo recogió su compatriota Laprovittola. Bajo sospecha, blanco de las críticas merecidas de gran parte de los aficionados, se tomó una pequeña revancha en el tramo final del tercer cuarto. El Betis le seguía flotando y Laprovittola penalizó su osadía con tres triples seguidos, el último con personal incluida. En apenas minuto y medio, diez puntos que sacaron del partido a los verdiblancos, que ya habían sucumbido al pánico que desata Tavares bajo el aro. Tres tiros libres remataron un final impecable de cuarto, unos instantes frenéticos en los que Laprovittola (16 puntos, 5 asistencias, 21 de valoración) se pareció al jugador que deslumbró en Joventut. No hizo falta más para noquear a un rival impotente (70-51, min 30). Al Real Madrid le iba a sobrar el último cuarto, por lo que Laso decidió foguear a Vukcevic (11 puntos, 4 rebotes, 3 asistencias, 16 de valoración) todo el último cuarto. El joven pívot de los múltiples pasaportes (puede elegir entre cinco selecciones, incluida la española, en la que jugar) demostró que tiene condiciones. Buena mano, presencia dentro de la zona, notables fundamentos. Es pronto para sacar conclusiones, pero ha dejado motivos para confiar en él y ganarse los minutos de Tyus, que aporta menos que el canterano. Siempre ayuda navegar a favor de viento, ya que el Madrid había destrozado definitivamente el partido desde el perímetro. Ndoye era el único que aportaba algo en el Betis, que ya sólo pensaba en maquillar un tanto la derrota. Es lo que hizo Randle (16 puntos), que está más por la labor de hacer números que arrimar el hombro en situaciones de apuro. No pasó ninguno el Real Madrid, que disfrutó de un encuentro tranquilo a la espera de las emociones fuertes que esperan en Europa.
Valencia Basket 64 – Barça 80: La marcha irrefrenable del Barça no se inmutó pese a que la Fonteta supone una complicada estación de paso, de la máxima exigencia. Valencia Basket, con un solo base disponible (Vives), debido a la ausencia de Van Rossom y la lesión de Hermansson al poco de entrar en pista, y la mente absorbida por las últimas jornadas de Euroliga, no encontraba argumentos para superar una defensa plena de intensidad y la facilidad y paciencia que tienen los azulgranas para mover el balón y encontrar tiros cómodos. Sin embargo, las numerosas pérdidas de balón y la falta de acierto del Barça en el tiro de tres dieron un pequeño respiro a los de Ponsarnau, que salieron adelante bregando dentro de la zona con más garra que brillo. Sin embargo, la reacción no fue más allá del comienzo del segundo cuarto, hasta que el Barça pudo reconducir su juego. Valencia Basket apenas pisaba la zona y tampoco el tiro exterior le sirvió como una alternativa efectiva. Los tiros libres eran la única fuente de anotación y tampoco la aprovechó al ciento por ciento. Del mismo modo, los numerosos contactos que se permitían en defensa no sirvieron para que descarrilara un Barça que volvía a mover el balón con comodidad y que solucionó los problemas en el perímetro con los triples de Abrines. Aunque el ataque local mejoró en la parte final del segundo cuarto, el intercambio de canastas terminó por favorecer a un Barça que sumaba desde la línea de tres. Los diez balones perdidos por Valencia Basket completaban un primer tiempo lleno de impotencia ante la maquinaria azulgrana (29-41, min 20). No le quedaba otra que apretar en defensa en la reanudación y acelerar un ritmo ofensivo que había atascado la implacable defensa del Barça. El equipo taronja cerró su zona con eficacia en el tercer cuarto, lo que le permitió robar balones y salir en transición.
A Jasikevicius no le hizo gracia el cambio de guion y solicitó tiempo muerto con rapidez, pero el Barça tampoco se encontró cómodo con el cambio a defensa zonal de Valencia Basket tras la interrupción. Se enfangó el equipo azulgrana, que entró en una fase de balones perdidos que devolvió al encuentro a su rival. Hasta ocho pérdidas sumó en unos minutos desconcertantes que pusieron en peligro el triunfo culé; al menos, mientras se sucedían los regalos y Tobey (13 puntos, 5 rebotes, 20 de valoración) dominaba dentro de la zona hasta que dejó el partido con problemas musculares (43-45, min 26). Su marcha dejó sin su principal amenaza a Valencia Basket, al que le costó encontrar otro anotador fiable debido a que Prepelic y Derrick Williams tenían una tarde nefasta. Para entonces, el Barça ya había solucionado sus problemas con las pérdidas y recuperó la tranquilidad con dos triples seguidos. El retorno de la defensa asfixiante condujo a un estado desquiciado a los hombres de Ponsarnau que se agravó con algunas decisiones arbitrales al inicio del último cuarto. El propio entrenador se llevó una técnica en plena fase de enfado colectivo y que precedió a la inevitable resignación ante la eficacia del Barça en el lanzamiento exterior. Los tres triples consecutivos de Marinkovic no sirvieron de nada ante la desaforada racha de acierto de Abrines en el perímetro. Nada que hacer ante su demoledor bombardeo, Valencia Basket se mostró impotente y sin argumentos tras el 7/8 en triples que firmó Abrines (23 puntos, 5 rebotes, 28 de valoración) en la Fonteta. Tras un largo tiempo de oscuridad, esta temporada regresa al nivel que tanto se esperaba y echó de menos. Siempre sale el sol, sobre todo cuando la vida sonríe dentro de un equipo que no frena la marcha arrolladora que le caracteriza desde que comenzó 2021. Otro triunfo inapelable que añadir en el camino sin freno del Barça.
Bilbao Basket 72 – Baskonia 85: La delicada situación clasificatoria provocaba que Bilbao Basket llegara muy exigido al derbi con Baskonia en Miribilla. No es el equipo vitoriano un rival sobre el que buscar una victoria con urgencia, pero Los Hombres de Negro supieron contener en los primeros minutos a un contrincante demasiado acelerado y que no se preocupó por cuidar el balón. Serron anotó los siete primeros puntos de Bilbao Basket, convirtiéndose en un insospechado referente ofensivo. Entre lesiones y un nivel discreto, el jugador belga no se ha distinguido en el conjunto bilbaíno por su capacidad anotadora. Sin embargo, Serron no encontró acompañamiento y a Baskonia le bastó con forzar personales para amagar con la escapada (9-15, min 6), aunque el intento quedó frustrado por una antideportiva de Henry sobre Jaylon Brown. Dos triples de Rousselle, de su personal estilo circense, y los tiros libres anotados por Brown propiciaron un parcial de 10-0 que devolvía la ventaja a Bilbao Basket, pero el respiro no duró demasiado. El partido entró en una fase de gran acierto en el triple que le acabó beneficiando a Baskonia, en buena medida porque disfrutó del enorme segundo cuarto que realizó Zoran Dragic. En apenas unos minutos, el escolta esloveno marcó el terreno con cuatro triples sin fallo; un hecho sorprendente puesto que no es consumado especialista en el tiro de tres y destaca en mayor medida por su facilidad para entrar hacia canasta. Sin embargo, que anotara con tanta facilidad desde el perímetro no fue motivo suficiente para que olvidara su mejor virtud. De hecho, cada vez que cortó por la zona sacaba acciones de 2+1 con relativa comodidad. Zoran Dragic (25 puntos, 3 rebotes, 26 de valoración) acabó la primera parte con 21 puntos, casi la mitad de la anotación de Baskonia. Un recital que firmaría su hermano Goran, el artista principal de la familia. De todos modos, no todo fueron buenas noticias para el equipo vitoriano, que perderá a Jekiri cerca de dos meses tras lesionarse la rodilla en una pelea por el rebote con Balvin.
No obstante, la desgracia del pívot francés no afectó en el derbi a Baskonia, que ampliaba su ventaja de forma inexorable ante un rival que dependía en exceso del tiro exterior. Mientras entraron los triples, Bilbao Basket mantuvo el tipo, pero cuando el acierto desde fuera se convirtió en un hecho más aislado vio cada vez más lejos a los de Ivanovic. Para colmo, Vildoza comenzó el tercer cuarto inspirado, con cinco puntos seguidos que presagiaban un rápido desenlace (47-60, min 22), pero Rousselle (18 puntos) apareció nuevamente para mantener dentro del partido a su equipo, liderando un parcial de 9-0 que incluso se pudo ampliar de no ser porque Bilbao Basket no tuvo fortuna cuando peleó bajo el aro. Vildoza había perdido el rumbo e Ivanovic no dudó en sustituirle por Henry, buscando otro enfoque para el juego del equipo vitoriano. La presencia del base estadounidense añadió mayor capacidad defensiva y otra velocidad al ataque visitante, ambos aspectos cruciales para imponer lentamente la superioridad física de Baskonia. Por mucho que Balvin (9 puntos, 14 rebotes, 20 de valoración) se fajara valerosamente bajo tableros, la capacidad para atacar el aro de Giedraitis, Polonara o Diop evitaba cualquier acercamiento. Cuando el pívot checo se marchó al banquillo, nadie más osó contestar el poderío rival en el juego interior. Huskic no es lo mismo y tampoco Brown o Kulboka estaban lúcidos como para ofrecer una alternativa en el perímetro. No había forma de impedir lo inevitable, la ruptura definitiva del partido ya entrado en el último cuarto (57-80, min 35). Ivanovic ya podía ofrecerle unos minutos a los más habituales; no había que temer ninguna reacción pese a que Bilbao Basket logró maquillar la desventaja en la recta final. Baskonia se reencuentra con el triunfo en la Liga ACB antes de afrontar la dura pelea que espera en las jornadas finales de Euroliga.
Descansa: CB Canarias.
El encuentro que disputan Fuenlabrada y UCAM Murcia se disputará este martes 23. Por otro lado, el partido Burgos-Joventut quedó aplazado para el 16 de abril debido al conocido brote de coronavirus que afecta a la plantilla del equipo burgalés.
Las victorias de los cuatro primeros esta jornada mantienen la situación reinante en la parte alta de la tabla. Sigue líder el Real Madrid (24-1), seguido de Barça (22-3), Baskonia (20-6) y CB Canarias (19-5). Unicaja (13-13) conserva su lugar en la octava plaza y marca el corte de los playoffs. Una semana más, GBC (6-19) y Bilbao Basket (6-20) ocupan las plazas de descenso.
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