Fuente: thestar.com
Por una vez la NBA se abre al público en Diciembre, eso sí, al público televisivo. Tiempo de viajes navideños en busca de las comidas familiares, recordando los buenos propósitos y aposentando los huesos en el sillón para disfrutar en las pantallas de la apertura de la NBA. Mientras, en el exterior, los copos de nieve amenazan con aislarnos del mundo exterior pero, ¿acaso hay mejor plan?
Atlanta Hawks
En Atlanta han decidido que la fase de crecimiento de sus jóvenes jugadores ha llegado a su fín. Por eso los refuerzos ya no van buscando forjar el carácter con jugadores con experiencia. Lo que se busca es rendimiento y, sobre todo, un líder en la pista. Esa, sin duda, es la función principal de Rajon Rondo y Danilo Gallinari en esta franquicia. Junto a ellos llegan un par de secundarios de gran nivel defensivo, y posibilidades de crecimiento ofensivo, con el fichaje (a bajo precio) de Kris Dunn y Solomon Hill más la adquisición, vía traspaso, de Tony Snell. Después refuerzan su posibilidad de tiro exterior, y juego en equipo, con la firma de Bogdan Bogdanovic. Dejando libres para las incorporaciones universitarias un puesto claro en la rotación interior, que será ocupada por Onyeka Okongwu y el puesto de tercer base, donde cuentan con una posibilidad sólida con Skylar Mays. Sin duda una plantilla para aspirar al séptimo lugar de la conferencia Este.
Boston Celtics
No se podía esperar el desmembramiento de los Celtics tras la buena temporada anterior. No sorprende tanto la salida de Gordon Hayward como la escasez de refuerzos en la franquicia de Massachusetts. Hacer contratos cortos a dos veteranos, como Jeff Teague y Tristan Thompson, y completar la plantilla con dos universitarios, todos exteriores, parece dejar al equipo muy tocado. De ellos sólo Aaron Nesmith parece crear cierto entusiasmo en Boston, porque Payton Pritchard se ve como un complemento para el futuro. Pese a ello, y contando con el terremoto producido en su conferencia, los aficionados de los Celtics no esperan otra cosa que ser segundos en su conferencia.
Brooklyn Nets
En busca de una última revolución en Brooklyn han apostado por realizar la cuadratura del círculo. Tras deshacerse de Kenny Atkinson, y contratar a Steve Nash, Sean Marks ha dado un nuevo rumbo a la franquicia neoyorquina. Buscaba la contratación de Jems Harden, pero se ha quedado corto. De modo que se traen pocos refuerzos y muy específicos, Landry Shamet para el tiro exterior, Bruce Brown para la defensa o Jeff Green para dar una polivalencia siempre necesaria. Luego queda la incorporación del draft, un pivot sólido que puede aportar desde el banquillo en poco tiempo, Reggie Perry. Tras recuperar a Kevin Durant lo normal sería ver al equipo en la tercera posición del Este.
Fuente: mainbasket.com
Charlotte Hornets
Sorprende ver a los Hornets siendo agresivos en el mercado, el problema es que dejarse una pasta, y soltar a Nicolas Batum, para traer a un renqueante Gordon Hayward, y firmar a Bismack Biyombo, no parece un gran negocio. Sobre todo cuando el resto de refuerzos, aunque de calidad, vienen de la universidad. Darle una oportunidad a Grant Riller como tercer base tiene su lógica, ahora bien, confiar la dirección del equipo a LaMelo Ball es una jugada de riesgo. De igual manera, reforzar el juego interior con Vernon Carey Jr y Nick Richards parece un movimiento poco entendible, sobre todo porque las virtudes de uno contrastan con la deficiencias del otro. Con este panorama los Hornets deben aspirar al decimocuarto lugar de la conferencia.
Chicago Bulls
El enésimo giro en la dirección de la franquicia de Illinois ha llegado. Para ello se ha puesto al mando a Arturas Karnisovas que, en sus primeras decisiones, ha dejado a la afición un poco tocada. Poner al mando del equipo a Billy Donovan parecía crear cierta expectación por los buenos resultados del técnico en Oklahoma, sin embargo, inmediatamente, llegaba un duro golpe para las ilusiones del público local. La elección en el draft de Patrick Williams (con el número cuatro) rebajaba las expectativas creadas y la otra elección, Marko Simonovic, no ha despertado demasiado interés. Luego llegaban los fichajes de dos jugadores con un contrato corto, un exterior con cierta proyección para aportar desde el banquillo, Zach Norwell Jr, y un sólido veterano exterior, Garrett Temple. Con estas decisiones queda claro que la reconstrucción se aplaza un año y, a menos que el equipo se enganche con buenos resultados al principio, debe acabar en el decimotercer puesto del Este.
Cleveland Cavaliers
En Cleveland siguen su proceso transformador a bajo ritmo. Pocas incorporaciones, de corto recorrido, y mucha tranquilidad para afrontar otra temporada negativa. Damyean Dotson y JaVale McGee son jugadores con experiencia en la liga que cubrirán el expediente y permitirán al equipo competir dignamente. El último hueco llega con la elección universitaria de Isaac Okoro, un alero completo con buena proyección para ser un líder en el plantilla en poco tiempo. Pese a todo, con los mimbres que presenta, a la plantilla le falta equilibrio en las edades para crear un equipo. Se antoja complicado que los Cavaliers puedan evitar el último lugar en la conferencia.
Detroit Pistons
El proyecto de los Pistons ha buscado dar más solidez defensiva con sus traspasos y contrataciones. Al equipo llegan Delon Wright, Rodney McGruder, Mason Plumlee, Josh Jackson y Jerami Grant. Sorprende pues la firma de Jahlil Okafor para poner puntos bajo canasta. Luego definen al equipo con cuatro incorporaciones sólidas desde el draft para el quinteto titulary un refuerzo para el banquillo. Killian Hayes es la esperanza para llevar el juego ofensivo del equipo a otro nivel con su gran desequilibrio en el puesto de base, Isaiah Stewart debe ser la referencia interior para marcar la intensidad defensiva del equipo y aportar pequeños detalles necesarios en ataque y Saddiq Bey será el encargado de sumar puntos desde el exterior. Luego queda el refuerzo de Saben Lee para el banquillo, un base exterior polivalente, con buen tiro y muy explosivo; que necesita trabajo en defensa y tiro para ser un muy buen jugador de banquillo en poco tiempo. Se supone que Dwane Casey debe sacar un rendimiento apropiado a esta plantilla, porque, después de todo, el equipo está hecho para él. Sin embargo, el exceso de juventud en puesto claves, y la falta de puntos en el interior, debe suponer que Detroit acabe siendo el noveno clasificado de su conferencia.
Indiana Pacers
En los Pacers han cambiado de técnico y han buscado dar otra dimensión más ofensiva al juego del equipo con un asistente de los Raptors, Nate Bjorkgren. Lo curios es que para su primer año han buscado jugadores de perfil bajo para reforzar el fondo de su plantilla. Kelan Martin y Jalen Lecque no deben disponer de muchos minutos y dejan a la franquicia con mucho dinero disponible para el año que viene. Eso sí, se han reforzado con un universitario de más nivel para su banquillo. Se trata de Cassius Stanley, un escolta de buenas buenas condiciones físicas destinado a impulsar al banquillo de indiana con su gran velocidad y constante actividad. Se ve pues un equipo que, pese a contar con una nueva dirección desde el banquillo, debe mostrarse conjuntado desde el inicio. No sorprendería ver a los Pacers en el octavo puesto en el Este.
Miami Heat
Dados los buenos resultados de la temporada anterior es lógico que Pat Riley haya buscado no reforzar al equipo en exceso, retocando el equipo con pocas piezas de calidad. No sorprende la llegada de dos jugadores veteranos para subir la presión defensiva, Avery Bradley y Maurice Harkless tienen la experiencia necesaria para no romper la buena dinámica del equipo. La pieza final para completar este mercado ha llegado desde la universidad. Poder obtener a un interior de potencial, como Precious Achiuwa, es una opción que no se podía dejar pasar. Lo más normal es que el equipo acabe en el cuarto puesto de su conferencia.
Fuente: behindthebuckpass.com
Milwaukee Bucks
En Wisconsin andan nerviosos, la mala temporada pasada y la necesidad de renovar a su jugador franquicia esta temporada obligan al equipo a mostrar su mejor versión. No sorprende que hayan arriesgado con una renovación de la plantilla bastante fuerte. Primero obteniendo a un base infravalorado en la liga como Jrue Holiday, luego fichando a secundarios de experiencia sin gran coste como Torrey Craig, DJ Augustine, Jaylen Adams, Bryn Forbes o Bobby Portis. Por último hay que contar con las incorporaciones universitarias para completar el banquillo, de Jordan Nwora y Sam Merrill se espera una aportación inmediata al juego exterior desde el banquillo, de Mamadi Diakite que se gane sus minutos con calma. El problema es que un equipo que presenta muchas dudas y poco tiempo para integrar las nuevas piezas. Lo normal sería ver al equipo siendo el quinto del Este cuando finalice la temporada regular.
Nueva York Knickerbockers
Los Knicks siguen vagando sin rumbo claro en medio de la liga pero, sorprendentemente, este año han buscado reforzar su competitividad con una interesante de jóvenes con buena proyección y veteranos ya curtidos en ser parte del equipo. Alec Burks, Austin Rivers y Nerlens Noel no van a romper al equipo ni discutir el esfuerzo. Desde ese mismo prisma se comprende la firma de Theo Pinson. Luego añaden, vía traspaso, a dos jóvenes jugadores de equipo que todavía deben mostrar su mejor cara. Y quedan las incorporaciones universitarias, todas ellas con la calidad necesaria para dar una vuelta al equipo. Obbi Toppin es un pivot dinámico con grandes posibilidades de liderazgo, Emmanuel Quickley es un escolta tirador que por sus buenas virtudes defensivas, podría disponer de minutos desde el inicio y ser aspirante, con los años, a ser un sexto hombre de los mejores de la liga. Lo que resta por saber es si Tom Thibodeau no estropeará la dinámica con su empeño en el buen tono defensivo. Por ello, pese a sus esfuerzos, los Knicks deben acabar en el duodécimo puesto al terminar la temporada regular.
Orlando Magic
En los Magic confían en seguir entre los ocho mejores esta temporada pero, viendo los escasos refuerzos y su calidad, no parece un objetivo demasiado realista. La firma Dwayne Bacon dará solidez ofensiva a la aportación del banquillo y Cole Anthony es un buen proyecto de futuro para el puesto de base, aunque no para la temporada actual. Por todo ello el futuro del equipo sin un director de juego y pendiente de la recuperación de Jonathan Isaac y Chuma Okeke. No parece la situación ideal para seguir en la brecha, sobre todo porque el resto de equipos no se quedan parados. No sorprendería ver como se clasifican undécimos en su conferencia.
Philadelphia Seventy-Sixers
En Pennsylvania se ha buscado un cambio de rumbo total configurando el equipo en base a las ideas de su nuevo técnico, Glen Rivers. Así se ve un empeño espcial en reforzar el juego interior con jugadores fuertes bajo canasta como Dwight Howard o Tony Bradley. Junto a ellos se suman exteriores ya experimentados en la liga y con una clara tendencia a abrir el campo como Seth Curry, Danny Green o Terrance Ferguson. Quedan entonces los refuerzos univeritarios por cubrir, con dos escolta de gran proyección anotadora Isaiah Joe y Tyrese Maxey, y un pivot dinámico que puede aportar mucha anotación y sorprender desde el inicio, Paul Reed. Con tanto refuerzo, y las ideas muy claras, lo normal sería ver a los Sixers a los mandos de esta conferencia.
Toronto Raptors
El final de temporada dejó claro que se hacía necesario un cambio en la franquicia canadiense para no quedarse anclado en el pasado. Se optó por no renovar a sus caros interiores y traer jugadores de buen nivel más baratos que, tras un contrato corto, dejasen dinero disponible. Así la plantilla de los Raptors ha incorpordo a Aron Baynes, Alex Len o DeAndre Embry. Después optan por incorporar en el draft a un base con posibilidades de jugar minutos este año, y terminar de formarse para ser importante el año que viene, Malachi Flynn, y a un especialista tirador para el fondo del banquillo, Jalen Harris. Toronto debe acabar en la sexta posición al finalizar la temporada regular.
Fuente: thunderousintentions.com
Washington Wizards
Los problemas de los Wizards con John Wall eran constantes y no ha sorprendido su traspaso, lo que sí llama la atención es el botín obtenido. Pese a que Russell Westbrook no está en su mejor momento debe dar otra dimensión al juego de Washington, sobre todo porque no está lesionado y es bien conocido por Scott Brooks, que le entrenó largo tiempo. Además han aprovechado su buena posición en el draft para reforzarse con un exterior de gran calidad, polivalente y capacidad de liderazgo; al sumar a Denis Avdija, y un base sólido para el banquillo con Cassius Winston. Quedan entonces por rellenar puestos secundarios para el banquillo con una mezcla de juventud y experiencia, de Robin López a Jerome Robinson pasando por Raúl Neto. Pese a ello debían luchar para acabar obteniendo el décimo lugar en el Este.
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