Fuente: sircharlesincharge.com

El primer partido de las finales de este año, arrancaban con mucha frialdad, tanto en el ambiente, como en los jugadores. La principal novedad de los quintetos iniciales llegaba en el equipo de Los Angeles, donde Dwight Howard se asentaba en el quinteto titular. Pese a ello la defensa angelina se mostraba permisiva desde el arranque, las estrellas angelinas no daban seguido el ritmo anotador de los Heat y, pese al tiempo muerto de Frank Vogel, la diferencia sobrepasaba los diez puntos. Goran Dragic, Jae Crowder y Jimmy Butler habían sido los impulsores del despegue completando un parcial de trece a cero. Ante los problemas anotadores de su equipo, el técnico angelino recurría a sus suplentes. Rajon Rondo rompía el parcial y sacaba el mejor juego ofensivo de sus compañeros. Anthony Davis, jugando de pivot, cobraba protagonismo sin LeBron James en pista y la defensa se ajustaba mejor en las ayudas. Dos triples de Kentavious Caldwell-Pope rebajaban la distancia hasta los ocho puntos y, con el regreso de su estrella, la franquicia californiana completaba un parcial de diecinueve a tres que ponían a los Lakers por delante al finalizar el primer cuarto.

El segundo periodo, sin embargo, recuperaba la mejor versión del ataque de Miami, gracias al acierto exterior de Tyler Herro los de Florida volvían a tomar el mando en el marcador. Tras una breve llamada al orden de Vogel su equipo se acordaba de jugar por dentro y compartiendo el balón. La diferencia angelina volvía a crecer, LeBron descansaba y Davis volvía sacar su mejor juego como pivot de referencia. La intimidación, y la buena actividad en las ayudas, comenzaban a dejar seco el ataque de los Heat. El acierto con los triples llevaba la distancia hasta los dos dígitos, ni la zona frenaba a los Lakers. Por encima Butler se torcía un tobillo, aunque seguía sobre la pista, y el regreso a pista de un LeBron fresco dejaba la desventaja de Miami en diecisiete puntos al descanso.

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Tras el paso por los vestuarios llegaba la sorpresa de ver a Herro como base titular en lugar de Dragic, El base esloveno no volvería al partido y cambio se hacía notar de inmediato. El escolta no repartía juego y, pese a que los triples angelinos no entraba, el rebote ofensivo permitía a los Lakers elevar el listón por encima de los veinte puntos. Y los de púrpura y oro no frenaban, Bam Adebayo se tenía que ir a los vestuarios con problemas en el hombro y la diferencia superaba las tres decenas. vista la situación llegaba la relajación angelina y, como los suplentes de los Heat sacaban el orgullo dirigidos por Kendrick Dunn, la distancia se reducía ligeramente.

El último acto amanecía con el canto desesperado del banquillo de Miami. El parcial, de diez a dos, duraba dos minutos gracias a un buen movimiento sin balón de sus jugadores y una defensa compacta. Entonces la defensa californiana se ponía seria, llegaban las estrellas angelinas al rescate y la primera victoria era para los Lakers. Invitado inesperado: Rajon Rondo, Alex Caruso, Kyle Kuzma (Lakers)