Llegó la primera sorpresa a la fase final y de qué manera. Burgos pone patas arriba el grupo B tras su merecido triunfo ante el Real Madrid, el primero que consigue contra el equipo blanco. Una mezcla de exceso de confianza, dominio reboteador de Burgos y la incomodidad que produjo el planteamiento de Joan Peñarroya llevaron al actual campeón a una derrota insospechada que le complica la existencia y le obliga a afrontar su próximo partido contra Valencia Basket como una final. Pero no sería justo que el centro de atención no estuviera en Burgos, un equipo que llegaba a esta fase final con ausencias y la téorica etiqueta de rival asequible asignada, pero que se está rebelando contra el destino para protagonizar una enorme sorpresa para todos los aficionados. Joan Peñarroya afirmó que no iban a especular ni a jugar de otra forma contra el Madrid y lo cumplió a rajatabla. Fidelidad en sí mismos que le llevó a la proeza, a superar a un coloso y soñar con un histórico e impensable pase a semifinales. Está en sus manos que esta hazaña no quede en una anécdota y sea la base de una actuación memorable en la historia del club.
Bilbao Basket 79 – Joventut 86 (tras prórroga): A Joventut le costó hilvanar su juego en los primeros minutos de partido. Poca elaboración y lagunas en el juego interior que aprovechó Sulejmanovic. La superioridad en la zona permitió a Bilbao Basket dominar con relativa comodidad (13-6, min 6) hasta que Prepelic apareció en pista. Durán le reservó contra el Barça debido a unas molestias, pero no tardó en este partido en demostrar que su muñeca continúa bien afinada. Su presencia dio mayor seguridad a los verdinegros, que se emplearon con mayor rigor en tareas defensivas. La fortaleza atrás permitió a la Penya salir con rapidez al contraataque. Ocho puntos seguidos de Prepelic dieron la vuelta al marcador antes de finalizar el primer cuarto. Sin embargo, llegó la respuesta de Los Hombres de Negro al comienzo del siguiente periodo con una fuerte defensa y una facilidad pasmosa para cortar por la zona. Joventut abusó del triple y cuando decidió acercarse al aro encontró el recibimiento de Lammers (8 puntos, 6 rebotes, 5 tapones, 4 asistencias, 16 de valoración) en forma de tapón. Le salvaron los rebotes ofensivos, que le permitieron mantenerse cerca en el marcador e, incluso, volver a tomar una ligera ventaja por momentos. Dos triples supusieron que Bilbao Basket se marchara a vestuarios por delante aunque la diferencia era muy escasa (45-43, min 20). Un primer tiempo de alegría anotadora que cambiaría por completo en la reanudación. El tercer cuarto comenzó con ambos equipos muy espesos. Tardó casi tres minutos en moverse el marcador aunque la peor parte se la llevaría Joventut, que se chocó contra la férrea defensa de Bilbao Basket. Los de Mumbrú lograron un 7-0 en los más de cinco minutos que tardó en estrenarse la Penya en la segunda parte. Adquirió un colchón apreciable, pero que resultaba algo escaso tal como estaba de atascado Joventut. La falta de continuidad en su juego evitó que hiciera un daño mayor para respiro de los verdinegros, que salieron del agujero cuando Prepelic (21 puntos, 5 asistencias, 25 de valoración) volvió a ver aro.
Joventut había escapado de una situación comprometida y entró en el último cuarto con todas sus opciones intactas. Aprovechó un buen inicio en el último cuarto para cambiar el guion. Omic se imponía en la zona, Dimitrijevic asistía a placer y los verdinegros se adelantaban en el marcador con un 1-9 de salida. No obstante, la reacción no resultó definitiva para decantar el partido. Para frenar a Omic, Mumbrú puso en pista a la vez a Balvin y Lammers. Dos ‘5’ que se hicieron con el control en la pintura de forma inmediata. Durán reaccionó dando entrando a Prepelic tras el 8-0 de parcial que adelantó de nuevo Bilbao Basket. Los Hombres de Negro disfrutaron de una ligera ventaja en el último minuto, pero dos pérdidas de balón evitaron que pudiera echar el cierre al encuentro. Joventut no iba a perdonar tanto. Prepelic vio el corte por la zona de Morgan para asistir al canadiense, que anotó la bandeja para empatar a 73. El triple errado por Rousselle (18 puntos, 4 asistencias, 16 de valoración) en el último segundo llevó el choque a la prórroga, iniciada igual que acabó el último cuarto reglamentario. Morgan reclamó el protagonismo anotando cinco puntos seguidos, pero encontró respuesta en un batallador Sulejmanovic bajo aros. Varias decisiones precipitadas llevaron a Prepelic al banquillo; no se cortó Durán en prescindir de su gran figura. No le echaría de menos, sobre todo porque Bilbao Basket se despeñó en un último minuto aciago. Dos tiros libres fallados por Lammers y un robo de balón de Ventura a Rafa Martínez dilapidaron las opciones del conjunto de Mumbrú, que tiró definitivamente el partido con una antideportiva cometida por Lammers sobre López-Aróstegui (13 puntos, 5 rebotes, 18 de valoración) en un arranque de frustración. Un pésimo final que deja prácticamente sin opciones a Bilbao Basket de pasar a semifinales.
Unicaja 73 – Barça 84: Tras lo acontecido en la primera jornada, el encuentro contra Unicaja se presentaba como un choque muy complicado para el Barça. Lo refrendó el equipo malagueño con su inicio fulgurante; muy efectivo en el tiro, sobre todo Deon Thompson, y entrando hacia canasta con facilidad ante la flojera defensiva azulgrana. La poca elaboración de los ataques del Barça añadió otro ingrediente más al enfado de Pesic, que no tardó más de tres minutos en solicitar tiempo muerto (13-4, min 4). Para colmo, Mirotic cometió su segunda personal cuando el primer cuarto no había llegado a su mitad. Un panorama poco halagüeño, pero el Barça se fue asentando con el paso por los minutos. Mejoró su trabajo defensivo y provocó que aflorara el individualismo incurable de Josh Adams, que acumuló malos tiros con demasiada facilidad. También abusó Unicaja de triples lejanos y mal seleccionados que difuminaron su gran puesta en escena. Durante el primer cuarto pudo salvar la papeleta gracias a la defensa, pero un 0-10 de parcial al comienzo del segundo periodo puso por delante por primera vez al Barça (20-22, min 13). Curiosamente, el conjunto azulgrana funcionó mejor con Hanga de base que con un Heurtel aún falto de rodaje. El buen trabajo de Unicaja en los primeros minutos se había marchado por el sumidero, pero logró reaccionar una vez perdida la ventaja. El acierto en el tiro de Waczynski y la pelea de Carlos Suárez bajo tableros le asentaron de nuevo en la pista hasta retomar el liderazgo en el marcador. También regresó la intensidad defensiva y el Barça necesitó una pizca de fortuna en un par de ocasiones para conseguir anotar. Como ocurre en cada momento difícil, el ataque azulgrana giró sobre Mirotic, encargado de mantener al Barça a la estela de su rival hasta el descanso (41-38, min 20). No había duda, le esperaba un partido perro a los de Pesic, pero una circunstancia allanó el camino en el tercer cuarto.
Unicaja entró pronto en bonus tras el descanso y dejó en bandeja al Barça un buen argumento al que agarrarse. Como el juego no disponía de la solidez necesaria, los azulgranas optaron por forzar personales en cada ataque. El concierto de pito y la sucesión de tiros libres acabó desesperando a los jugadores de Unicaja. Aunque desperdició más tiros libres de la cuenta, al Barça le bastó para arrebatar a su rival el dominio en el marcador y ganar en confianza. Aumentó su intensidad defensiva, consciente que le caían con más facilidad las personales a Unicaja, y dificultó enormemente el juego ofensivo del equipo de Luis Casimiro. Sus jugadores entraron en un serio bache, víctimas de las pérdidas de balón (seis en el tercer cuarto), el mal porcentaje en el triple y la incomprensión hacia un arbitraje que les penalizaba con numerosas faltas. El cabreo aumentó si cabe en el banquillo de Unicaja cuando se pasó por alto un codazo, accidental pero claro, de Heurtel a Alberto Díaz en un ataque azulgrana. Demasiado para una moral en claro descenso. Los tiros libres le valieron al Barça para ganar tiempo hasta que apareciera un plan efectivo en ataque. Lo encontró surtiendo de balones a Tomic (16 puntos, 7 rebotes, 25 de valoración), que se encargó de abrir brecha con buenos movimientos cerca del aro en la parte final del tercer cuarto. La conexión del pivot croata con Hanga le dio muchos beneficios al equipo azulgrana, que asestaba un golpe al partido con un parcial de 2-8 que dejaba a Unicaja tambaleante (58-69, min 32) y con serios problemas para encontrar tiros cómodos. Los triples seguían sin entrar y tampoco ponía fin a las pérdidas de balón. El regreso a pista de Mirotic (19 puntos, 3 asistencias, 17 de valoración) acabó con las escasas esperanzas que tenía el equipo malagueño de remontar el partido. Cinco puntos consecutivos de La perla de Montenegro remataron el encuentro por mucho ánimo que insuflara Luis Casimiro a sus jugadores en los tiempos muertos (63-79, min 36). La situación no tenía remedio. Waczynski (13 puntos, 2 asistencias, 18 de valoración) era el único con acierto en las filas de Unicaja y su esfuerzo sólo valía para que el daño no fuera mayor. Una versión convincente, más seria que brillante, le bastó al Barça para olvidar las dudas que dejó el debut y encarrila su clasificación para semifinales.
Baskonia 79 – CB Canarias 72: El dominio inicial de Baskonia fue cortado por Salin, que se jugaba todo en CB Canarias durante los primeros minutos, aunque en esos instantes el desacierto era nota común para ambos equipos. Esta fase de desconcierto cesó cuando Ivanovic puso en pista a Granger y Vildoza. Con dos bases en el quinteto, el control del partido pasó a manos de Baskonia. La defensa de los hombres que salieron del banquillo hizo mucho daño al ataque rival. Huertas no estaba cómodo y apenas lanzó a canasta en toda la primera mitad. La escasa aportación del base brasileño en el tiro la acusó el conjunto de Vidorreta hasta que Zeisloft ofició de revulsivo con seis puntos seguidos en la parte final del primer cuarto. Sería el encargado de llevar el peso anotador de CB Canarias, el único realmente. La falta de variedad ofensiva facilitó las cosas a un Baskonia que conseguía con mucha facilidad acciones de dos contra una dentro de la zona. Diop y Eric anotaron con mucha comodidad cerca del aro gracias a las asistencias de Shengelia. El juego entre pivots dentro de la zona le dio muchas alegrías a Baskonia en este partido. Con este argumento, el equipo vitoriano abrió distancia hasta llegar al descanso con una ventaja muy tranquilizadora (44-33, min 20). Tras reanudarse el partido, CB Canarias buscó un recurso clásico esta temporada, insistiendo en meter balones dentro a Shermadini (18 puntos, 11 rebotes, 23 de valoración). Estuvo más participativo que en la primera mitad, pero los pivots de Baskonia continuaban anotando con mucha frecuencia para mantener una renta cómoda. Shengelia (21 puntos, 7 asistencias, 6 rebotes, 34 de valoración) se erigía en el gran protagonista en la cancha, favorecido por la buena movilidad de balón de su equipo que le proporcionó buenos tiros. De la mano del ala-pivot, Baskonia se encontraba en condiciones de romper el partido (65-48, min 28), pero CB Canarias despertó de una manera insospechada. Los triples de Radoncic y Fran Guerra, poco dados a lanzar desde fuera, redujeron diferencias al final del tercer cuarto. Aunque respondió con otro triple Diop, otro que no frecuenta la línea de tres, la mayor agresividad defensiva de CB Canarias cambió el guion del encuentro. Un parcial de 3-12 le metía de lleno en el partido, más si cabe tras un triple de Salin que le acercaba peligrosamente en el marcador (70-65, min 35). Sin embargo, el regreso al juego de Vildoza devolvió la calma a Baskonia. Los robos de balón del argentino le dieron aire aunque CB Canarias aún se mantuvo al acecho tras una técnica a Ivanovic. Sí, habéis leído bien, le pitaron una técnica a Ivanovic. Tuvo que ser Shengelia, quien si no, el que prácticamente decidiera el partido con un triple a menos de dos minutos del final. Un golpe definitivo para acabar con cualquier atisbo de apuro en la recta final y sellar el segundo triunfo de Baskonia.
Clasificación: 1º Baskonia (2-0), 2º Barça (2-0), 3º Unicaja (1-1), 4º Joventut (1-1), 5º CB Canarias (0-2), 6º Bilbao Basket (0-2).
Próxima jornada: CB Canarias-Bilbao Basket, Joventut-Unicaja, Barça-Baskonia.
GRUPO B:
Burgos 87 – Real Madrid 83: La puesta en escena del Real Madrid siguió el mismo patrón que en su debut. Inicio arrollador en el que desbordó por velocidad al quinteto alto, con Javi Vega de alero, que puso de inicio Joan Peñarroya. El 2-12 de inicio hacía pensar en otra avalancha de juego espectacular, pero el Madrid se relajó en exceso y demasiado pronto. Burgos no empezó fino en el tiro de tres, pero cuando encontró el acierto en el triple el partido cambió radicalmente. El juego enloqueció, Jasiel Rivero, como ocurriera con Costello dos días antes, hizo daño cuando salió a lanzar de tres y Burgos dio la vuelta al marcador con un parcial de 16-2 que despertó las iras de Laso. Otra bronca sonada en un tiempo muerto para los anales del técnico madridista. El equipo blanco se las apañó buscando a Tavares (12 puntos, 10 rebotes, 28 de valoración) como principal referencia ofensiva, un recurso que sirvió para enjugar la diferencia. Un par de triples al inicio del segundo cuarto le dieron aire, pero el Madrid no era capaz de escaparse. Se desconocía cuánto tiempo aguantaría Burgos este ritmo anotador, pero no daba muestras de flaqueza. Es más, aprovechó varias malas decisiones en ataque del Real Madrid para volver a tomar la delantera. No estaba nada cómodo el equipo de Laso, dominado de forma clara en el rebote y sin las ideas claras. Laprovittola no estuvo nada afortunado y contribuyó a la confusión, pero Campazzo tampoco arregló nada cuando salió a pista. No llega en forma a la fase final, está claro. Laso tenía motivos para enfadarse, su equipo estaba irreconocible y le daba esperanzas a Burgos para soñar con un triunfo histórico (44-41, min 20). Burgos tuvo aún más argumentos para creerlo con los cinco puntos de McFadden (18 puntos, 3 asistencias, 3 rebotes, 19 de valoración) nada más comenzar el tercer cuarto. Aunque Randolph empezó entonado el periodo, Peñarroya optó por una zona para atar en corto a Tavares. Le preocupaba más que el gigante de Cabo Verde campara a sus anchas que el daño que pudiera hacer el Madrid en el perímetro.
La decisión fue un acierto, pues la zona aumentó el desasosiego y la precipitación en el juego madridista. En cambio, Burgos disfrutaba sobre la pista. El acierto en el triple le daba una tranquilidad pasmosa, inusitada. Bassas dominaba el juego, superando en todo momento a un Campazzo menor. Laso decidió acompañar a Facu con Llull en la dirección, pero el Madrid no se encontraba. Todo lo contrario, contemplaba cómo Burgos amenazaba con despegarse en el marcador tras un nuevo triple de Rivero (65-55, min 27). Pintaban bastos en el Madrid, cada vez más cercano a una derrota insospechada. Con el juego sumido en la confusión, Laso se entregó al juego eléctrico de Llull, al incendio que pudiera provocar su pirómano particular. No defraudó, convertido de nuevo en El Increíble. Llull y Rudy se encargaron de sostener al Madrid en los peores momentos, de meterle nuevamente en la pelea. Tavares se encargaba de cerrar el aro en defensa. Burgos ya encontraba más problemas para sortearle, ni siquiera valía un dominio aplastante en el rebote. Un triple en carrera de Llull completaba la remontada (72-74, min 34). Los problemas parecían superados, pero Llull desperdició dos ocasiones para lograr una renta más amplia. Lo pagaría el Madrid, que volvió a perder el rumbo cuando Llull y Tavares se marcharon al banquillo. Burgos se rehizo y respondió con un parcial de 7-0. Era real, la victoria era más que posible para los de Joan Peñarroya. Pese a los problemas, Laso mantuvo un quinteto bajito. Un robo y contraataque finalizado por Campazzo igualaba el partido a 81. El Madrid forzaba un final apretado, pero lo jugó de la peor manera. Una bandeja de Campazzo que se quedó corta y dos pérdidas absurdas le llevaron a la derrota. Burgos sólo tuvo que mantenerse firme en el tiro libre para lograr su primera victoria sobre el Real Madrid y soñar con disputar las semifinales. Quien lo hubiera imaginado al comienzo de la fase final. La derrota no es sólo un tropiezo inimaginable del equipo blanco, sino que le obliga a vencer el lunes a Valencia Basket para no marcharse de vacaciones antes de tiempo.
Fuente: mallorcaconfidencial.com
Andorra 88 – Gran Canaria 104: Todo parecido entre el primer cuarto de los dos partidos disputados por Gran Canaria es mera coincidencia. Contra Andorra presentó una defensa muy agresiva que hundió en la miseria a un rival errático e incapaz de frenar la velocidad con la que atacaba su aro. Ibon Navarro paró el partido con 0-10 en contra, pero ahí no se detuvo la caída de su equipo. Los desajustes defensivos permitieron a Bourousis dominar la zona con mucha claridad. Por mucho que Jelinek despertara el ataque en los minutos finales del primer cuarto, su marcha al banquillo devolvió los negros nubarrones al panorama de Andorra. Gran Canaria anotaba en cada posesión en el segundo periodo y no bajó su nivel de intensidad defensiva, hasta el punto de obligar a los jugadores de Andorra a buscar tiros nada sencillos. Costello aumentaba el daño causado en la zona para completar un parcial de 3-14 que dejaba el encuentro destrozado (17-39, min 14). El pivot se hizo daño en el tobillo izquierdo, aunque todo quedó en un susto sin mayor importancia. En apenas 48 horas, la vida al revés para Gran Canaria. Con un futuro nada halagüeño, Andorra se entregó al talento individual. Las entradas a canasta de Hannah y los triples de Todorovic lograron reducir ligeramente la desventaja al descanso (37-52, min 20). Hannah continuó entonado en el comienzo del tercer cuarto, pero el intercambio de canastas dejaba todo como estaba. El mal balance defensivo de Andorra permitía a Gran Canaria salir al contraataque en cada fallo rival. Los tiros libres también suponían un arma fiable para mantener una cómoda ventaja hasta que Cook se marchó al banquillo.
Gran Canaria acusó la ausencia en pista de su base titular, sobre todo porque Senglin (13 puntos, 3 asistencias, 15 de valoración) empezó a sentir cómodo sin Cook enfrente. Lecomte no supo qué hacer con él y Katsikaris apostó por Paulí como base improvisado. Una decisión que sólo dio fruto en los primeros instantes, ya que Senglin seguía campando a sus anchas. Sus acciones individuales estaban cambiando el partido, junto al buen porcentaje en triples que atesoraba Andorra. Siempre le quedaban los tiros libres a Gran Canaria para salir de apuros. Ibon Navarro acabó muy molesto con la enorme diferencia en falta señaladas entre los dos equipos. Sin embargo, Andorra no frenó su remontada aunque Bourousis (19 puntos, 2 rebotes, 23 de valoración) sostuviera a Gran Canaria al inicio del último cuarto. A golpe de triple, Andorra se metió de lleno en el partido (75-79, min 33). Efectivamente, el partido era lo opuesto al debut en absolutamente todo. Katsikaris no pudo esperar más y devolvió a la cancha a Omar Cook. El veterano base sería el factor desequilibrante en los últimos minutos, en los que firmó una actuación portentosa. Diez puntos seguidos de Cook abrieron una brecha insalvable en el marcador, puesto que Andorra ya no pudo oponer más resistencia desde el perímetro. Exhibición absoluta de tiro, defensa y visión de juego de un base incombustible. Costello también apareció en el tramo final para dejar claro que sus problemas en el tobillo quedaron en un susto sin importancia. Los trece puntos de Cook (21 puntos, 10 asistencias, 3 robos, 30 de valoración) en los cinco minutos finales resultaron fundamentales para amarrar un triunfo que permite a Gran Canaria mantener intactas sus opciones de pasar a semifinales.
Valencia Basket 89 – Basket Zaragoza 71: Basket Zaragoza sorprendió con un cambio palpable en su concepto de juego. Ante lo mermado que está su juego interior, optó por recurrir con mucha mayor frecuencia al tiro de tres. No le funcionó durante los primeros minutos, en los que estuvo errático de cara al aro. Sus defensas alternativas tampoco fueron efectivas para contener a un Valencia Basket que comenzó más inspirado. Porfi Fisac cambió a zona 2-3, pero no le costó a su rival romperla sin muchos problemas. Le fue mucho mejor al equipo maño cuando buscó con un poco más de entusiasmo el juego interior. Le sirvió para lograr un parcial de 0-7 que le dio su primera ventaja en el encuentro. Consiguió alimentar dudas en Valencia Basket, acrecentadas con dos triples lejanos de Benzing al final del primer cuarto. El conjunto de Jaume Ponsarnau perdió el acierto en el tiro exterior y comenzó a atascarse de forma preocupante. Aunque Dubljevic estrechó el marcador con dos buenas acciones cerca del aro, la respuesta llegó con otros dos triples de Benzing. La muñeca del alero alemán sirvió de acicate para que Basket Zaragoza recuperara su mejor juego. Cuando acabó la inspiración de Benzing, llegó el turno para Alocén, desatado durante todo el segundo cuarto. Durante unos minutos, Basket Zaragoza recuperaba el juego veloz y descarado que tanto impresionó esta temporada. La diferencia empezaba a tomar un cariz serio (30-43, min 18) y en Valencia tenían motivos para temer en otro varapalo de un favorito.
Sin embargo, el partido cambió radicalmente tras el descanso. Valencia Basket movió mejor el balón, recuperó el acierto en el tiro de tres y defendió con más intensidad y eficacia. Aunque un breve momento de desacierto permitió a Ennis cortar la reacción, el conjunto taronja recuperó definitivamente el mando con la dirección de Colom. La zona impuesta por Ponsarnau secó por completo al ataque de Basket Zaragoza, al que le costaba anotar incluso los tiros libres. El acierto de Loyd dio la vuelta al marcador en la recta final del tercer cuarto (59-54, min 29) aunque aún le llevó un tiempo romper el partido a Valencia Basket. Sus pérdidas de balón le dieron un respiro a su rival, que sólo se encontraba cómodo cuando podía correr al contraataque. Además, la zona del equipo maño resultó muy indigesta durante buena parte del último cuarto. Un triple de Radovic completaba un parcial de 0-7 que igualaba el marcador (67-67, min 35). Brussino dispuso de otro triple para adelantar a Basket Zaragoza, pero con el error del argentino se le escapó la última oportunidad. Al equipo maño se le acabó la gasolina en el tramo final y acabó arrollado por un contrincante que sumaba de tres en cada jugada. Valencia Basket rompió el choque con un parcial de 16-0 que resultó definitivo para la suerte del encuentro. Valencia Basket podía disfrutar de su segundo triunfo antes de afrontar un duelo vital contra el Real Madrid.
Clasificación: 1º Valencia Basket (2-0), 2º Burgos (2-0), 3º Real Madrid (1-1), 4º Gran Canaria (1-1), 5º Basket Zaragoza (0-2), 6º Andorra (0-2).
Próxima jornada: Gran Canaria-Burgos, Real Madrid-Valencia Basket, Basket Zaragoza-Andorra.
Y DIGO YO…:
- La carrera de Peñarroya como entrenador no ha hecho ruido para muchos aficionados, pero merece una valoración mucho más destacada. Convirtió a Andorra en un equipo atractivo y capaz de ponérselo muy difícil a los poderosos. La temporada pasada, consiguió que Manresa entrara en playoffs un año después de ascender y, en Burgos, está firmando la mejor campaña de la historia del club. Quizá es hora que un equipo con ambiciones repare en él para ocupar el banquillo.
- Burgos no cuenta en esta fase final con Earl Clark, que rescindió su contrato, y Huskic, lesionado. Pero la ausencia de su pareja titular de pivots no ha impedido un buen rendimiento dentro de la zona. Jasiel Rivero, que apenas jugó en Liga ACB por el cupo de extranjeros, y Pablo Aguilar, recién llegado al club, están aportando mucha capacidad reboteadora y amenaza exterior. Apic, que ofreció un rendimiento pobre hasta el parón, se ha convertido en una valiosa pieza de refresco. Un ejemplo de construcción de equipo ante las dificultades.
- Aunque el potencial de la plantilla del Real Madrid es inmenso, todos los especialistas coinciden en que la base del rendimiento del equipo blanco radica en el desequilibrio que generan en sus posiciones Campazzo y Tavares. Un gran base y un gran pivot, los cimientos clásicos en la formación de un buen equipo de baloncesto. En los dos primeros partidos ha quedado patente que Campazzo ha llegado a la fase final lejos de su mejor nivel. Un problema de consideración para Laso, puesto que necesita la mejor versión del base para salir del lío en el que se metió su equipo. Puede que tenga que confiar en que las buenas sensaciones que transmite Llull tengan continuidad.
- Unicaja firmó en el primer partido, contra CB Canarias, un 52% en el triple. Un porcentaje sobresaliente que no se repitió contra el Barça, donde fracasó en el tiro exterior y acabó con un pobre 15%. La irregularidad en el tiro de tres ha perseguido al equipo malagueño durante toda la temporada. El lado oscuro en el perímetro apareció en el peor momento, contra el rival más poderoso del grupo.
- La semana pasada corrieron rumores sobre el interés de CSKA Moscú en pagar la cláusula de rescisión de Shengelia. En los últimos años, el ala-pivot georgiano, referente indiscutible en Baskonia, ha destacado como uno de los mejores de Europa en su posición y figuró en la agenda de los grandes del Viejo Continente, aunque aún nadie ha podido sacarle de Vitoria. Querejeta estará en vela confiando que se repita un año más porque cuesta imaginar la vida en Baskonia sin Shengelia, que en esta fase final sigue ofreciendo el alto rendimiento de costumbre.
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