Fuente: clutchpoints.com

Toronto Raptors (2)/Golden State Warriors (1)

Por una vez, y sin que sirva de precedente, los Warriors se presentan a unas finales de la NBA con el factor cancha en su contra. Pese a ello, y a la baja de Kevin Durant y DeMarcus Cousins, su favoritismo es claro. En primer lugar por la semana larga para recuperarse físicamente; un alivio para el equipo ya que ha podido recuperar a Andre Iguodala o Shaun Livingston y puede hacer lo mismo, durante la eliminatoria, con las estrellas no disponibles en este momento. En Toronto no hay demasiadas preocupaciones físicas, pese a que su reposo ha sido de apenas cuatro días, porque las buenas sensaciones jugando tocados de Kawhi Leonard y Kyle Lowry lo enmascaran todo.

En cuanto al juego, poco hay que comentar; con Marc Gasol desesperado por el alto ritmo de partido marcado por Draymond Green, con Danny Green y Lowry  persiguiendo a Klay Thompson y Stephen Curry e Iguodala cerrando los caminos al aro a la estrella canadiense, las opciones de que el Jurassic Park pueda botar con el título son reducidas. Tal vez con la mejor versión de sus suplentes, o con algún invento de Nick Nurse, los Raptors puedan agarrar sus esperanzas sacando una victoria del Scotiabank Arena en uno de los dos primeros partidos y, desde ahí, soñar. Aunque lo normal es que todo acabe en pesadilla, porque Steve Kerr suele estar preparado para todo, porque no es lo mismo defender lo que genera un jugador que lo que genera un equipo y porque, por mucho que se diga, defender ataques que se finalizan en cinco segundos es agotador.

Pronóstico: Warriors ganan cuatro a uno.