En poco más de un mes GBC ha pasado de ser un equipo prácticamente deshauciado a salir de la zona de descenso. Una racha victoriosa obró el milagro para el conjunto donostiarra, señalado como seguro ocupante de una de los dos plazas de descenso a LEB Oro. En muy poco tiempo pasó de un equipo endeble a un rival seguro y competitivo. Aquella remontada a Estudiantes, levantando 22 puntos en contra en Illumbe, reforzó la moral y determinación hasta límites inesperados. Ahora es otro equipo. Los refuerzos que llegaron se acoplaron a la dinámica con rapidez y han subido el nivel de la plantilla. El buen momento de forma de Burjanadze le convirtió en el líder de la rebelión. Vuelve a ser el alero fuerte y determinante que fue en Andorra. El triunfo en Murcia significó salir del pozo de la zona de descenso tras meses de penurias y frustraciones. Está repitiendo el milagro que llevó a la salvación a Joventut la pasada temporada. Ahora le queda lo más complicado. Tiene por delante un calendario terrible. Se enfrenta en las cuatro últimas jornadas a los tres primeros clasificados, enfrascados en una lucha cerrada por el liderato. Todo un reto para el renacido GBC.
Estudiantes 72 – Unicaja 80: La jornada se abría en la festividad del 1 de mayo en el Palacio de los Deportes. Estudiantes no está para festivos, acuciado como está por una complicada situación clasificatoria. Las urgencias se acrecentaron con un mal comienzo de partido. La inspiración de Wiltjer (17 puntos, 4 rebotes) le sirvió a Unicaja para dominar con tranquilidad los primeros minutos del encuentro. En Estudiantes sólo existía Whittington (24 puntos, 2 rebotes, 22 de valoración), autor de diez puntos en los primeros cinco minutos. El único recurso colegial hasta que Josep María Berrocal movió el banquillo. Un parcial de 9-2 puso por primera vez por delante a Estudiantes aunque Unicaja respondió pronto al comienzo del segundo cuarto, devolviendo el parcial encajado. Lessort se encargó de evidenciar todas las carencias de Estudiantes en el juego interior, sobre todo a la hora de defender. Berrocal buscó un cambio con dos bases en pista. Cook (7 puntos, 13 asistencias, 23 de valoración) se forró a repartir asistencias. Hasta ocho contabilizó en la primera mitad. Hakanson (16 puntos) tuvo una aportación más destacada de lo habitual en ataque. Se convirtió en un factor sorpresa en labores ofensivas. Caner-Medley sumó un buen trabajo en la zona a todo lo conseguido por los bases. Sin embargo no fue suficiente para imponer autoridad. Los robos de balón de Dani Díez evitaron males mayores para Unicaja, que logró llegar al descanso por delante (40-42, min 20).
Dos triples del equipo malagueño nada más iniciarse el tercer cuarto reforzaron su posición ventajosa. Aunque Estudiantes buscó a Arteaga con acierto los problemas del Estu en el juego interior eran evidentes. Whittington y Caner-Medley llevaban tres personales. En ataque Estudiantes acusaba el mal día de Clavell. En cambio Unicaja anotaba con una facilidad pasmosa. Sacó tajada de cada ataque en los cuatro minutos y medio iniciales del tercer cuarto. Berrocal pidió tiempo muerto para buscar soluciones (46-59, min 25). Consiguió frenar el ritmo de Unicaja, que acabó enredado en una defensa rival más intensa. Otra vez el recurso de los dos bases en Estudiantes. Los triples de Cook y Hakanson completaron un parcial de 10-0 que metía en el partido a los del Ramiro, que tuvieron dos triples al inicio del último cuarto para empatar el partido. Ocasiones que volaron y no se volverían a presentar. Unicaja castigó los errores de un rival que volvió a descolgarse peligrosamente tras pasar cinco minutos sin anotar (58-70, min 33). Whittington volvió a erigirse como el faro del ataque de Estudiantes pero estuvo demasiado solo. Jaime Fernández, que se llevó algún tímido cántico de censura de su antigua afición, cortó la reacción local. Pese a los fallos de Shermadini en el tramo final la victoria de Unicaja era inevitable. A Estudiantes le faltó acierto. Las bajas de Gentile y Brizuela eran demasiada carga para un equipo con recursos limitados que vuelve a estar con el agua al cuello. Para colmo el siguiente partido es el derbi con el Real Madrid. La afición madridista se relame ante la posibilidad de dar un empujón hacia el abismo a los colegiales.
Valencia Basket 83 – Breogán 82: Inicio de partido con enorme acierto. Sólo hubo un error en tiros de campo en los primeros cuatro minutos. Valencia Basket acabó beneficiado de este ritmo anotador. Sus pivots dominaron con claridad en el juego interior. Gerun no lo pasó bien. No estuvo acertado ante el marcaje de los hombres altos locales. El tiro exterior no sirvió de vía de escape a Breogán, que estuvo seis minutos sin anotar. Valencia Basket aprovechó la sequía de su rival. 13-0 de parcial que le otorgaba una ventaja amplia antes de finalizar el primer cuarto (21-8, min 9). Muy tranquilo el equipo de Jaume Ponsarnau pese a disponer de un solo base, Vives. A Joan Sastre le tocó ejercer de base improvisado. Breogán despertó al comenzar el segundo cuarto pero la reacción fue cortada de raíz. Un inmenso Dubljevic (20 puntos, 6 faltas recibidas, 24 de valoración) se convirtió en una pesadilla para la defensa lucense. Aunque Breogán comenzó a anotar de tres no servía para paliar los efectos de Dubljevic. Infalible, sólo erró un lanzamiento en toda la primera mitad. La terminó con 18 puntos. Breogán estaba más suelto en ataque pero en defensa cometía errores muy serios. Valencia Basket salió en el tercer cuarto dispuesto a asestar el golpe de gracia. Apareció Doornekamp al comienzo del periodo para aumentar diferencias. Los visitantes sólo consiguieron entrar en un intercambio de canastas que no llevaba a ninguna parte. El acierto en el tiro exterior de Valencia Basket reventaba el partido (69-48, min 27). Se abría para los locales un final de partido muy tranquilo pero, inesperadamente, llegó la reacción visitante. Tres triples seguidos enchufaron de golpe a Breogán. Redivo (18 puntos) se convirtió en el referente ofensivo que metió a los de Tito Díaz de lleno en el partido. Ponsarnau pidió tiempo muerto cuando el parcial llegó a 0-10 pero no frenó la marcha ascendente rival. Breogán se lo creyó. Se aplicó con mayor determinación en defensa y recortó con rapidez jugando con mucha velocidad. Redivo seguía con la muñeca caliente. Las acciones individuales de McCallum y Lofberg (10 puntos, 6 rebotes, 17 de valoración). El parcial continuó creciendo hasta alcanzar un 0-17 que empataba el partido (79-79, min 36). Increíble pero cierto. Valencia Basket no consiguió anotar un solo tiro de campo en los últimos ocho minutos de partido. Los tiros libres le mantuvieron ligeramente por delante pero Breogán tuvo la ocasión de llevarse el partido en la última jugada. Dispuso de dos triples pero no consiguió anotarlos. Se esfumó la posibilidad de completar una gran remontada y lograr una victoria fundamental para la permanencia.
Burgos 84 – Real Madrid 102: Diego Epifanio apostó por un quinto inicial muy extraño. En el banquillo se quedaban piezas tan importantes en el juego de Burgos como lo son Huskic, Sutton o Frazier. El experimento no le puso salir peor. Burgos se estrelló en la intensidad defensiva del Madrid, que no estaba dispuesto a hacer prisioneros. En ataque pasó por encima a los locales, que ni se enteraron por dónde le llegaban los golpes. Taylor sigue exprimiendo su momento dulce de forma. Ocho puntos en los primeros minutos para liderar a un Real Madrid arrollador. Diego Epifanio pidió tiempo muerto para frenar la avalancha (2-13, min 4). Puso ser peor para su equipo porque el Madrid no aprovechó varios triples para aumentar distancias. Sin embargo al equipo blanco le bastó con el acierto de un Randolph (17 puntos) tan fiable como Taylor en Burgos. El público empezó a mostrar malestar con el arbitraje, sobre todo por la diferencia de personales, pero los colegiados no eran los culpables del correctivo que estaba recibiendo Burgos. Con el regreso de los titulares habituales mejoraron los locales. Se notó la influencia de Huskic (14 puntos, 6 rebotes, 17 de valoración). El rebote ofensivo también le permitió sumar a Burgos. Sin embargo la velocidad en la pista benefició al Madrid, mucho más cómodo y acertado. El tiro exterior del equipo blanco causó estragos. Carroll tenía el día inspirado. Malas noticias para Burgos, que trató de sobrevivir con el rebote ofensivo. No servía porque el Madrid se escapó a golpe de triple (27-43, min 15). 8/13 en tiro de tres acumuló el Real Madrid en los primeros quince minutos. Burgos logró salvar los muebles bregando en el tramo final de la primera mitad. También le ayudó que Ayón estuvo tan flojo en el segundo cuarto como en el partido disputado en Murcia dos días antes.
El comienzo del tercer cuarto dio esperanzas a la afición burgalesa. El tiro exterior empezaba a funcionar y el rebote ofensivo seguía siendo propiedad local. El Real Madrid estaba más espeso pero encontró la solución en uno de sus secundarios. Causeur disputó sus primeros minutos en el partido en el tercer cuarto pero su puesta en escena resultó decisiva. Penetró a canasta sin descanso. Una jugada que se repitió sin cesar con el mismo resultado: canasta del francés. Frazier padeció innumerables miserias defendiendo a Causeur. El destrozo que causó el escolta madridista fue irreparable. Encontró la colaboración de Randolph para disparar al Madrid en el marcador (51-70, min 26). Por si fuera poco, Causeur cerró el tercer cuarto con dos triples. También desde fuera causó pesadillas. Se marchó al banquillo tras anotar 20 puntos en apenas doce minutos. Recital de uno de los jugadores más desapercibidos pero necesario en el engranaje del Real Madrid. Burgos no pudo sobreponerse. Benite tiró de él en el último cuarto pero fue un esfuerzo inútil. Ayón mejoró en el último cuarto y se adueñó del rebote ofensivo. Carroll y Thompkins acabaron firmando unos números interesantes. Incluso Yusta disfrutó de un buen final de partido. Sólo Llull, falto de ritmo tras la lesión, aún no funciona al nivel que exige el preciso engranaje del Real Madrid. Ganar en Burgos no es fácil. De esta manera es casi impensable.
Fuenlabrada 87 – Basket Zaragoza 88: El duelo entre Eyenga y Okoye protagonizó unos minutos iniciales plenos de acierto. Sólo un error en el tiro en los tres primeros minutos. Pero en cuanto desapareció el acierto local la superioridad de Basket Zaragoza resultó abrumadora. Gran acierto del equipo maño en el tiro de tres que provocó los nervios en Fuenlabrada. Ataques con muy poca paciencia y malas decisiones. Basket Zaragoza no aflojó su vertiginoso ritmo anotador. Okoye (23 puntos, 4 rebotes, 20 de valoración) seguía a lo suyo. La inspiración de Berhanemeskel elevó la diferencia. Basket Zaragoza se marchó de forma irresistible en apenas diez minutos para desesperación y enfado de la afición fuenlabreña. El parcial de 2-21 encajado por su equipo provocó algunos pitos en el pabellón Fernando Martín. El partido había quedado roto en apenas un cuarto (14-35, min 10). Los visitantes no tuvieron problemas para mantener la ventaja cerca de los veinte puntos durante buena parte del segundo periodo. Latavoius Williams (15 puntos, 6 rebotes) ya se va acoplando a su nuevo equipo y estuvo muy activo en el juego interior. Fuenlabrada trató de reaccionar empleándose con mayor intensidad en la zona en defensa. Las transiciones rápidas le permitieron reducir diferencias aunque Okoye se encargó evitar cualquier clase de acercamiento (39-53, min 20). Sin embargo el partido cambió completamente tras el descanso. La defensa local metió en serios apuros a Basket Zaragoza. Se acabó la alegría ofensiva de los de Porfi Fisac. Les costó horrores anotar, se les apagó las luces. Apenas logró cinco puntos en siete minutos. Fuenlabrada encontró en Eyenga un recurso muy valioso en ataque. Él se encargo de liderar la remontada del Fuenla, que en pocos minutos se metió de lleno en el encuentro. El parcial de 12-1 planteó un partido nuevo (56-58, min 26). Fuenlabrada incluso dispuso de dos ocasiones para empatar el partido.
Reaccionó a tiempo Basket Zaragoza. Metió balones dentro y supo forzar personales en los minutos finales del tercer cuarto. La fiabilidad en el tiro libre le permitió al equipo maño superar de nuevo los diez puntos de ventaja (61-72, min 30). Mantuvo la diferencia durante buena parte del último cuarto. Okoye seguía haciendo estragos en la línea de tres. 5/6 para el nigeriano, el jugador revelación de esta temporada. Nadie imaginaba en Zaragoza el resultado que está dando. Fuenlabrada resistía a la desesperada. Las acciones individuales de Kemp (20 puntos, 7 rebotes, 25 de valoración) mantenían una pequeña esperanza. Rowland (9 puntos, 6 asistencias, 5 rebotes, 18 de valoración) apareció a tiempo para revolucionar el partido en los minutos finales. Fisac planteó una zona 2-3 pero no funcionó. Otra entrada a canasta de Kemp puso el 86-87 a 1:10 para el final. Kravtsov (11 puntos, 4 rebotes, 2 tapones, 17 de valoración) dispuso de dos tiros libres para adelantar a Fuenlabrada pero sólo anotó el primero. Lo mismo que hizo McCalebb tras sacar personal después que su equipo lograra dos rebotes ofensivos. Al Fuenla le restaban cuatro segundos para buscar la victoria. Rowland lanzó sobre la bocina un triple a una pierna, al estilo Marcelinho Huertas. Anotó para delirio del pabellón. Pero mientras Fuenlabrada hacía piña para celebrar el triunfo Antonio Conde anuló la canasta. Estaba fuera de tiempo. Ni necesitó la repetición, que le hubiera dado la razón sin duda alguna. Chasco en el Fernando Martín. Unas décimas separaron de un triunfo que prácticamente certificaba la permanencia.
UCAM Murcia 61 – GBC 74: Duelo directo y trascendental en Murcia por la permanencia. GBC demostró que la buena racha que atraviesa no es casualidad. Mantuvo a raya a un rival nervioso y presionado con el tiro exterior, anotando los cuatro primeros triples lanzados que dejaban en nada el esfuerzo de Soko. Le faltaba cabeza y frialdad al juego de UCAM Murcia. Booker es un anotador pero para nada un director sobrio y fiable. Cuando no anota es un lastre y su equipo lo notó. Tuvo mayor temple su juego con la entrada a pista de Lecomte, que ya dejó buenas pinceladas contra el Real Madrid, pero al juego local le sobraba urgencia y faltó tranquilidad. GBC aprovechó el regreso del desconcierto con la vuelta a pista de Booker. Cualquier base del conjunto donostiarra estuvo mejor que él. Incluso un jugador que dispone de pocos minutos, Maiza, que no estuvo mal en el segundo cuarto. Los sucesivos malos tiros de Booker estaban metiendo en problemas a los locales (25-35, min 16). Kyle Hunt logró reducir daños en las postrimerías del segundo cuarto pero UCAM Murcia se despeñó definitivamente con un horrendo tercer cuarto. Presa de la precipitación, era incapaz de anotar. Sólo un tiro libre en los cinco primeros minutos hasta que un triple de Oleson acabó con pertinaz sequía ofensiva. Para entonces GBC se había marchado en el marcador. Los malos tiros facilitaron al equipo de Valdeolmillos salir con velocidad. Nevels (19 puntos) lo agradeció. Booker seguía empeñado en jugarse lo que sea y de cualquier manera. Acabó con la paciencia de Sito Alonso, que lo acabó sentando. GBC controlaba la situación. La falta de acierto en el perímetro de los locales le ayudó a colapsar la zona. El despliegue de Mo Barro cuando atacó el aro dio más resultado de lo habitual. Dani Pérez tranquilizó el encuentro cuando hizo falta. Un triple sobre la bocina del base de GBC puso la máxima diferencia al final del tercer cuarto (42-59, min 30). La afición murciana se sentía entre molesta y resignada ante el mal partido de los suyos. Sito Alonso prescindió de varios jugadores importantes en el último cuarto. UCAM Murcia apeló a la garra en busca de la remontada imposible. Su juego aumentó en intensidad pero no en brillantez. El rebote ofensivo le permitió reducir lentamente (54-63, min 35). GBC también perdió el hilo por unos instantes. Valdeolmillos sustituyó a Rebic tras cometer un par de errores. Maiza no estuvo tan atinado como en el segundo cuarto, sufrió con la presión rival. Sin embargo todo se solucionó con el retorno de Dani Pérez y Burjanadze (13 puntos, 6 rebotes, 18 de valoración). Ambos pusieron la sentencia, abocando a los locales al desastre. Todo se reducía para UCAM Murcia en salvar el basket-average. Lo consiguió con un triple en el último segundo de Kloof después de otro ataque con poco sentido. Lo único salvable del desastre. Después de muchos meses GBC sale de la zona de descenso.
Andorra 91 – Obradoiro 72: El buen comienzo de Andorra en el tiro exterior no le dio buena espina a Moncho Fernández. Apenas tardó tres minutos en solicitar tiempo muerto. Su equipo ya iba 9-2 abajo en el marcador pero reaccionó de inmediato. El ataque andorrano se estaba convirtiendo en predecible, sólo tiraba de tres. Cuando desapareció el acierto llegó la oportunidad para el conjunto gallego. La aprovechó usando las mismas armas que Andorra. Tres triples de De Zeeuw, muy acertado en los últimos partidos, dieron la vuelta al marcador (14-18, min 9). Una técnica a Diagne tras una ostentosa protesta a una personal le costó la tercera falta. Problemas en el juego interior pero Andorra convirtió el inconveniente en una ventaja. Buscó con insistencia a Jerome Jordan (16 puntos, 6 rebotes, 18 de valoración) y le dio muy buen resultado. Obradoiro también abandonó el tiro exterior, recurriendo ahora a las penetraciones. No le funcionó, Andorra cerró bien la zona. Los locales respondieron con un parcial de 14-2 al arreón rival al final del primer cuarto. Obradoiro retomó el plan original. Despertó con dos triples consecutivos sobre la bocina pero Andorra contestó de la misma manera a cada triples rival (44-35, min 20). En la segunda mitad el partido estuvo bajo control de Andorra en todo momento. Jordan superó en todo momento a un desconocido Llovet. Los triples en caída de Vitali elevaban la diferencia por encima de los diez puntos. Obradoido empezó a desesperarse y perder demasiados balones. El acierto en el triple de los locales rompió el partido. Jelinek estuvo muy seguro desde la esquina. Un triple lejano de Ennis en el último segundo puso la guinda a un tercer cuarto muy serio y efectivo de Andorra (71-53, min 30). Obradoiro tenía poco que hacer. Buscó a Brodziansky dentro, permitió a Vasileiadis lanzar lo que quisiera desde la línea de tres. Nada. Albicy (11 puntos, 7 asistencias, 16 de valoración) tenía la situación bajo control. Las penetraciones de Ennis (16 puntos) y Upshaw mantuvieron una diferencia muy amplia hasta el final. Andorra aún mantiene vivas algunas opciones para entrar en los playoffs. Obradoiro aún no aseguró la permanencia pero tiene margen sobre la zona de descenso.
Gran Canaria 77 – Barça 97: Los malos resultados en la última semana llevaron al Barça a la obligación de vencer a domicilio a Gran Canaria para mantener el liderato. Impensable hace unos días pero los azulgranas se complicaron la recta final de la Liga Regular. Sin embargo Gran Canaria opuso menor resistencia de la esperada. Desde el comienzo penó desde la línea de tres. No acertaba desde fuera y el Barça disfrutaba de una ligera ventaja pese a jugar con el freno de mano echado. La entrada a pista de Heurtel dio otro aire al conjunto de Pesic. El ataque azulgrana alcanzó un ritmo mucho más vivo. Los malos ataques locales también ayudaron a salir a toda velocidad. Demasiadas pérdidas de Gran Canaria, impotente y padeciendo en cada ataque. Hasta diez en la primera mitad. Sólo Wiley (19 puntos, 8 rebotes, 20 de valoración) suponía una amenaza para la defensa del Barça. Por momentos rozó el ridículo el conjunto de Pedro Martínez, arrollado por la agresiva defensa y el acierto en el triple de los azulgranas. Claver (13 puntos, 9 rebotes, 23 de valoración) corrió el contraataque con mucha facilidad. Elevó la ventaja por encima de los veinte puntos (19-39, min 14). Gran Canaria buscó la reacción con una presión alta pero tampoco sorprendió a los hombres de Pesic durante mucho tiempo. Repitió los mismos errores en el tercer cuarto. Se empezó en lanzar triples pese a que no entraba uno. Wiley seguía siendo el único recurso fiable. Gran Canaria apeló a la garra, a dejarlo todo en defensa. Un esfuerzo para despertar a la afición. El parcial de 11-3 supuso el último esfuerzo para la resistencia. El Barça acalló al Gran Canaria Arena con dos triples. Su acierto en el perímetro contrastó con el desastre local en el 6’75. 1/16 en triples al final del tercer cuarto, todo un naufragio de la línea exterior. Heurtel (20 puntos, 7 asistencias, 28 de valoración, MVP de la jornada) puso la puntilla. El partido era suyo. Bajo su batuta el Barça logró un parcial de 2-16 que convirtió en un pesado trámite el último cuarto (46-73, min 30). Pesic pudo dar un descanso a sus jugadores más importantes pero el Barça no aflojó. Las acciones individuales no sirvieron a Gran Canaria para maquillar. Los triples de Pau Ribas mantuvieron la abultada diferencia. En los minutos finales Eriksson, desaparecido debido a la gran defensa azulgrana, maquilló sus números. De poco servía. El Barça cerraba la mala racha de resultados y conservó el liderato con más facilidad de lo previsto. A Gran Canaria aún le quedará luchar para asegurar la permanencia.
Baskonia 82 – Manresa 71: La victoria del viernes en el Palau Blaugrana había metido a Baskonia de lleno en la pelea por el liderato final de la Liga Regular. La resaca duró demasiado porque el primer cuarto del equipo vitoriano fue para olvidar. Muchos regalos que acabaron pronto con la paciencia de Perasovic. No le hizo ninguna gracia que su equipo sólo anotara dos pírricos puntos en los primeros cinco minutos. Le salvó a Baskonia que Manresa tampoco estuviera muy lúcido. En cuanto los locales pudieron correr lograron un parcial de 7-0 para dar la vuelta al marcador. Ahora fue Peñarroya quien solicitó tiempo muerto. Cortó el amago de remontada y regresaron las pérdidas al equipo vitoriano. Ocho balones perdidos en el primer cuarto, una barbaridad. Suerte tuvo en no sufrir apenas daños tras un primer cuarto tan flojo. No podía ir a peor. La reacción fue fulgurante en el segundo periodo. La dirección de Huertas (14 puntos, 8 asistencias, 19 de valoración) mejoró radicalmente el juego de Baskonia. Manresa aguantó el tipo durante unos minutos con el acierto de Murphy y las acciones individuales de Lundberg pero el juego local había alcanzado otra velocidad. Los triples de Baskonia comenzaron a abrir diferencias. Huertas empezaba a encontrar a Shengelia (14 puntos, 6 rebotes, 3 robos, 23 de valoración) con facilidad. 10-0 de parcial que daba a Baskonia la primera ventaja seria del encuentro (36-27, min 17). Shields mejoró tras su errático inicio de encuentro y elevó la diferencia a los diez puntos al descanso. A Manresa le pesaron sus bajas en la segunda mitad. La lesión de Lalanne provocó que todo el peso del juego interior recayera en Sakho. Sus problemas de personales fueron una rémora. Huertas seguía sacando el balón afuera para que sus compañeros disfrutaran de tiros cómodos. La velocidad en ataque de Baskonia fue una bendición para Hilliard (16 puntos, 4 rebotes), que puso el espectáculo durante el tercer cuarto. Impresionante su combinación con Vildoza para anotar un mate que iba directo a las mejores jugadas de la semana. Los de Perasovic se marcharon de forma inexorable (65-49, min 30). Manresa dependió demasiado de Lundberg (20 puntos, 5 rebotes, 5 asistencias, 28 de valoración), el único capaz de crear problemas en la defensa de Baskonia. Lo máximo que logró fue acercar a Manresa a los diez puntos pero faltó colaboración para bajar de esa barrera. El rebote ofensivo no fue suficiente ayuda. Demasiada juventud en el banquillo visitante. Manresa dispuso de siete jugadores nacionales en este partido. Una anécdota en los tiempos que corren en el baloncesto español. Baskonia gestionó el último cuarto con mucha comodidad para cerrar una plácida victoria que le mantiene al acecho del liderato.
El CB Canarias 79 – Joventut 72 se disputó el 24 de abril debido a la presencia de CB Canarias en la Final Four de la FIBA Champions League, tercera competición europea en importancia. Se quedó a un paso de su segundo título. Perdió la final ante la Virtus Bolonia por 73-61. La mítica Virtus vuelve al panorama internacional.
Se mantienen las posiciones en la parte alta de la tabla, liderada por Barça y Real Madrid con 24-6, seguidos de cerca por Baskonia (23-7). Valencia Basket (20-10) se afianza en la cuarta posició. Joventut, Manresa y Basket Zaragoza cierran los puestos de playoffs con 16-14. UCAM Murcia cae a la zona de descenso, igualado con Breogán a 9-21.
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