La dimisión por sorpresa de Zinedine Zidane como entrenador del Real Madrid ha pillado con el paso cambiado al mundo del fútbol. Nadie podía esperar una decisión así cuatro días después de lograr su tercera Copa de Europa consecutiva como técnico del equipo blanco. Uno de las banquillos más estables y exitosos se mueve sin previo aviso y sin que alguien pudiera siquiera imaginarlo siquiera de guasa con unas cervezas en la mesa de un bar. Ni siquiera lo vio venir Florentino Pérez, al que comunicó el martes Zidane su decisión de marcharse. La cara del presidente del Real Madrid era un poema, desencajada. No es para menos. No podía prever con acontecimiento para el que no tiene alternativas. No existe plan de contigencia porque nadie contemplaba en el club que se pudiera llegar a esta situación. Pero la realidad nos lleva hasta aquí y al equipo blanco le toca mover ficha a contracorriente y de forma improvisada. La incertidumbre sobre el futuro inmediato lleva al madridismo a la siguiente pregunta: ¿ahora qué?

Fuente: elespectador.com

Todo lo que escribo en esta entrada es simple y pura opinión. Ni tengo fuentes ni topos repartidos por el Bernabeu para obtener información. Responde a mi pensamiento y las conclusiones que saco a partir de los hechos. En 2013, Hermes publicó una excelente entrada en la que expresaba sus deseos sobre el futuro del Barça en una especie de análisis de fútbol ficción. Tuve que quedarme con las ganas en ese momento de hacer lo mismo con el Real Madrid tras la marcha de Mourinho pero la falta de tiempo impidió que me pusiera con una tarea que me hacía ilusión. En esta ocasión retomo la idea para abordar mi visión de futuro del Madrid después del paso de Zidane por el banquillo.

Un nuevo inquilino en el banquillo.

Es algo obvio que el banquillo del Madrid genera una presión extraordinaria. Exigencia, entorno complicado e influyente, vestuario lleno de figuras. El técnico francés daba la imagen de sortearla con naturalidad. La perenne sonrisa aparentaba tranquilidad aunque la procesión fuera por dentro. Sin embargo no creo que la principal causa de su adiós esté en acabar quemado. Muy probable que sea un cúmulo de circunstancias pero una pesa por encima de todas. Este verano se avecinaban cambios importantes en la plantilla. Algunos incluso difíciles y traumáticos. Zidane siempre fue partidario de mantener un bloque en el que creía a ciegas. Incluso se opuso al fichaje de Kepa en enero por no alterar el orden de la plantilla, a costar de levantar sospechas de limpiar competencia a su guardia pretoriana. No estuvo dispuesto a pasar por el trago de desprenderse de jugadores fijos o de rebanarse los sesos sobre qué decisión tomar en determinados puestos. Para no romper un plantel que considera suyo tomó la puerta para marcharse en lo más alto. Increíble su palmarés en dos años y medio pese a sus limitadas dotes tácticas y de lectura del juego pero el triunfo le ha acompañado. Deja una pesada herencia sobre los hombres del sustituto.

Fuente: givemesport.com

La mayor urgencia del Real Madrid es encontrar un recambio para Zidane. Las listas de candidatos no han tardado en aparecer en los medios. Si me preguntan mi preferencia no tengo dudas en señalar el relevo del entrenador francés: Jurgen Klopp. Su forma de entender el juego (vertical y ofensivo sin concesiones), su carisma y la apuesta por los jóvenes encajaría muy bien entre la afición madridista. Una quimera. Klopp es Dios en Liverpool, está feliz allí y tiene contrato hasta 2020. Pura fantasía y prefiero analizar las opciones con realismo. La candidatura más sólida es la de Pochettino. Dejó una buena imagen en el doble enfrentamiento contra el Tottenham en la primera fase de la Champions. Su nombre circuló como posible sustituto de Zidane en las horas más bajas del Madrid esta temporada a finales de enero, sin opciones en Liga y eliminado de la Copa por el Leganés. El entrenador argentino ha llevado una evolución lenta pero sensata por equipos pequeños y medianos. Espanyol, Southampton, Tottenham. Al estilo del exitoso periplo de Ernesto Valverde en el eterno rival. Su Tottenham asombró en la primera mitad de temporada con un juego veloz y equilibrado. Capaz de tocar, replegarse o lanzarse a un ataque vertiginoso con la misma facilidad. Esquema versátil en el que no falta la apuesta decidida por los jóvenes. Muchos integrantes de la selección inglesa han pasado por sus manos. Un buen candidato para asentar definitivamente a un gran proyecto como Marco Asensio. Sin embargo, firmó la renovación por el Tottenham la semana pasada y la salida no se antoja sencilla. Durante la mañana algunos medios anunciaron que tenía una cláusula liberatoria en caso de oferta del Real Madrid. Ya ha sido desmentido el rumor. El Real Madrid ya conoce cómo negocia Daniel Levy desde los traspasos de Modric y Bale. No se cierra en banda a vender pero las negociaciones suelen resultar arduas y muy largas, con un coste económico considerable. El Real Madrid no se puede permitir un tiempo de espera prolongado para designar el encargado de su próximo proyecto. Ni un gasto desmesurado en un entrenador.

Fuente: teamtalk.com

La alternativa barajada en caso de no fructificar la opción de Pochettino está en la selección alemana. Joachim Löw aparece como segundo candidato. El hacedor de la modernización del fútbol alemán, introduciendo un juego más técnico y elaborado que deja como complemento el formidable físico de los jugadores germanos. En el mes de enero algún medio publicó que el Real Madrid estaba en negociaciones con Löw y sus exigencias. Según esa información, al seleccionador alemán no le valía ninguno de los tres de arriba, consideraba prescindibles a jugadores como Varane, Modric y Lucas Vázquez, exigía un cambio profundo en la plantilla y depositaba una gran confianza en hombres como Kroos, Isco, Asensio y … ¡¡ Marcos Llorente !!. Cuesta darle credibilidad. Le avala su trayectoria con Alemania pero le falta bagaje a nivel de clubes. La espera para anunciar su fichaje también sería prolongada puesto que se encuentra inmerso en la preparación del Mundial. Hasta mitad de julio no podría hacerse cargo del equipo. Un handicap a tener en cuenta. La rumorología también apuntaba a un hombre de la casa: Guti. Anunció su marcha de los juveniles para entrenar en 1ª división. Algunos le adjudican el premio gordo. Un camino parecido al emprendido por Zidane antes de llegar al primer equipo pero Florentino Pérez no tiene la misma predilección por Guti que por el astro francés. Tampoco ayuda a su candidatura el cambio de la tranquilidad y honestidad de Zidane por la visceralidad y sinceridad sin filtro del canterano. Eso sí, la prensa lo agradecería. De momento sus posibilidades son tenues. Cualquier otro aspirante (Conte, Ancelotti, Sarri, Michel,…) es simple imaginación a menos que se complique en exceso la situación.

En busca de la estrella.

La llegada de un nuevo entrenador afecta seriamente a la situación de la plantilla. La posición de algunos jugadores cambia por completo. En especial para algunos fijos de Zidane. Pese al tercer título de Champions seguido la idea de renovación moderada de la plantilla estaba tomada. Eran necesarios seis o siete fichajes ante el insuficiente rendimiento de los refuerzos de la pasada temporada. Nombres como Achraf, Mayoral, Casilla o Llorente son carne de cañón, listos para salir. Theo o Ceballos no tienen nada claro su permanencia en el club y apuntan a posibles cesiones. Se daba por descontado que la BBC se daría por acabada y alguno de los de arriba saldría del equipo. Indispensables refuerzos de experiencia y nivel para fomentar la competencia. Hay puestos con mayor urgencia que otros a la hora de buscar en el mercado.

Fuente: independent.ie

No hay duda que la primera petición de un entrenador será un delantero. El Real Madrid adoleció de un delantero de gran nivel en muchas fases de la temporada. Hace muchos meses que la prensa infla el globo del faraónico fichaje de Neymar. Nada que rascar por mucho que vendan. A un club como el PSG se sabe cuándo se llega pero no cuándo se sale. Algunos no se han dado cuenta que la llegada de jeques y multimillonarios ha cambiado las reglas del juego y sus clubes son reacios a dejar salir a jugadores importantes aunque lo pidan. Bien conoce Florentino Pérez cómo las gastan en operaciones hostiles y no va a llegar por las bravas a enfrentarse al gobierno de Qatar. Y de existir posibilidad, el desmesurado montante económico, el convulso entorno de Neymar y su complicado carácter desaconsejan tal inversión. El candidato ideal es Lewandowski. El delantero polaco es el gran ‘9’ europeo del último lustro. Goleador contrastado y objeto de deseo del Madrid durante años. A sus 29 años, está en plena madurez. El gran obstáculo es el Bayern. No es un club vendedor y cuesta mucho que se sienten siquiera a hablar. Si no se consigue convencer al equipo bávaro el Real Madrid deberá bajar un peldaño sus pretensiones. Entran en escena nombres como Dzeko, Agüero, Werner,… En Inglaterra se especula con el interés en Martial. Ya serían varios escalones más abajo. Se habló del regreso de Mariano, curtido con éxito en Lyon. La ocurrencia de no poner una cláusula de recompra deja el precio al arbitrio de Jean Michel Aulas. No sería un precio bajo. La repesca del canterano sería reconocer un cuantioso error de cálculo. El que regresará de una cesión de Raúl de Tomas tras una muy buena temporada en el Rayo. Puede ocupar el rol de Mariano y Mayoral en las dos últimas campañas. Un delantero de último recurso. En pretemporada se incorporará el mediático Vinicius, la perla brasileña que se vende como una de las futuras estrellas del fútbol mundial. Con 18 años no será sencillo que encuentre un hueco en la primera plantilla.

Fuente: marketingdeportivomd.com

Un nuevo entrenador puede reactivar al eterno debate de la portería. No había duda sobre incorporar un nuevo guardameta que compitiera con Keylor Navas. Con Zidane en el banquillo bastaba un reserva competente. Dependiendo del nuevo técnico la perspectiva puede ser muy diferente. Los entrenadores son muy peculiares con sus gustos en la portería. Si Navas no es de su agrado las posibilidades que se ponga en marcha la contratación de un portero de primer nivel son altas. Se habla mucho de Alisson, portero brasileño de la Roma. Impresionó por sus reflejos aunque tenga dificultades para blocar. Un clon de Keylor Navas pero más joven. No es lo más sensato contar con dos porteros de características idénticas. Volverán los nombres ilustres a la palestra. La historia de todos los años de De Gea aunque su precio sea elevadísimo y Mourinho no esté dispuesto a traspasarle. Courtois lleva tiempo postulándose. Le queda un año de contrato y le sobran ganas de regresar a Madrid. Su pobre actuación en el Camp Nou en la vuelta de octavos de Champions no le dejó en buen lugar. ¿Oblak? El sueño imposible para todos. Incluso hay quien apunta la romántica apuesta por Buffon, libre tras anunciar su marcha de la Juventus. En un club como el Madrid podía estar su última oportunidad para proclamarse campeón de Europa pero dudo que se baraje un portero de 40 años cuando hay que mirar al futuro. Ahora quizá se lamente más si cabe el empecinamiento de Zidane en no fichar a Kepa en enero…

Reforzar la suplencia.

Los laterales han sido posiciones sin un reserva de garantías. Achraf y Theo no han cubierto las expectativas ni de lejos. Cada ausencia de Carvajal o Marcelo suponía un drama. Urgen relevos contrastados que puedan rendir a mucho mayor nivel que los suplentes de esta temporada. Para el lateral derecho gana enteros el fichaje de Odriozola. Una apuesta de futuro. Veloz y poderoso, un puñal por la banda derecha aunque aún tenga que pulir muchos detalles del oficio de defensor. Cláusula de 40 millones, asequible para el poder económico del Real Madrid. La pega es que Carvajal tiene mucho recorrido por delante y dos jugadores con aspiración a la titularidad en un puesto tan específico pueden generar un problema. Quizá es más razonable un jugador veterano que llegue para dar relevos ocasiones a Carvajal. Sí se puede apuntar a un fichaje joven en el lateral izquierdo puesto que Marcelo va entrando en años y sus lagunas defensivas son bien conocidas. Las opciones son más reducidas en esta posición. Alaba se deja querer pero el duro obstáculo del Bayern vuelve a estar por medio. Utópicos juegos florales. Si no se repara en la edad, Monreal podría ser un buen acompañamiento para Marcelo. No sería tan costoso sacarle de un Arsenal decadente.

Fuente: futbolistos.es

Los otros dos refuerzos son más opcionales pero nada descartables. Cobra fuerza la contratación de un central consagrado. Concretamente, Giménez. Cláusula de 65 millones y guerra asegurada con el Atlético. Con Ramos y Varane en el rango de intocables y Nacho como suplente de garantías quizá sea más sensato optar por un central experto que pueda entrar en rotaciones. Los nombres de Manolas o Skrilian no mejoran lo que hay. Toca comerse la cabeza aunque no me parece imprescindible un refuerzo en este puesto. Sí veo más apremiante un nuevo jugador en el centro del campo salvo que el nuevo entrenador confíe en Ceballos. Si sale junto a Llorente hará falta un hombre más en la medular. Ahora bien, depende del nuevo esquema de juego el tipo de jugador. ¿Defensivo? ¿Creador? ¿Con llegada? Opciones hay para todos los gustos aunque quizá sea más apremiante del primer tipo. Casemiro no tiene sustituto natural. Weigl apuntaba maneras hace dos temporadas, una suerte de nuevo Busquets, pero se ha estancado. Rabiot sería una gran apuesta por su juego versátil en el medio. Me encanta pero, claro, está en el PSG… El nombre de Erikssen surge recientemente en los mentideros. Vertical y último pase de fantasía. Pochettino lo traería encantado pero volvemos a Daniel Levy y su agresividad negociadora. ¿Retorno a la opción Pogba? Las borregas mejor que las compren otros…

Se esperan unos próximos días muy agitados en el Real Madrid. La polvareda levantada por la marcha de Zidane animarán la atención y el mercado hasta el inicio del Mundial. Los especuladores y vendeburras están de enhorabuena. ¡Qué comience la lista de la compra!