Todo el mundo en Oklahoma era consciente de la importancia de ganar el tercer partido de la serie que le enfrentaba a los Spurs. De modo que el arranque fue espectacular por parte de ambos equipos. Sólo un acelerado Westbrook permitía ir por delante a los visitantes. Y la tónica seguía igual hasta la entrada en cancha de los suplentes, un par de balones perdidos daba una ventaja de siete puntos a los tejanos al terminar el cuarto. Pese al regreso de Westbrook, los problemas ofensivos de los Thunder continuaban y el acierto en el triple de los visitantes llevaban la diferencia hasta los quince puntos. Una desventaja que los locales descontaban desde la defensa, agobiando cada pase e impidiendo botar en la zona. En cuanto podían atacar en pocos segundos el equipo parecía otro, el problema llegaba si la defensa no podía frenar a Aldridge o no tapaba un triple. De modo que camino de los vestuarios San Antonio mandaba por cinco puntos pese a todas las dificultades. Westbrook volvía frío tras el descanso y Donovan tenía que parar el partido porque la diferencia se había doblado. La reacción local iba a tirones en función del acierto de sus estrellas y eso permitía un efecto acordeón en el marcador en cuanto se cometían un par de errores. Como los suplentes de Oklahoma salieron más agresivos, los Spurs llegaban al cuarto definitivo con tres puntos de ventaja. La intensidad subía, Aldridge no podía con sus defensores y los Thunder tomaban ventaja de cuatro puntos faltando siete minutos. Popovich recordaba a sus chicos que podían mover el balón y pronto volvían aponerse por delante en el marcador. Lo único que funcionaba en los locales era Durant, así que Leonard pasó a ocuparse de él mientras que Green se quedaba con Westbrook. Durant ya no lo tenía fácil y, aunque Green no podía con Westbrook, Westbrook si podía con Westbrook. Un par de balones perdidos permitían a San Antonio llegar a los noventa segundos finales con siete puntos a su favor. La defensa local subía el nivel y en cuarenta segundos Oklahoma estaba a dos puntos. Los Spurs fallaban, pero Khawi Leonard conseguía el rebote y obligaba a la falta personal para que los tejanos no consumiesen todo el tiempo. Parker y Leonard finiquitaban el partido desde la línea, los Thunder veíancomo el tercer partido de la seire se les iba entre los dedos. San Antonio se ponía en ventaja en la serie. Invitado inesperado: David West (Spurs)

La tensión antes del cuarto partido era muy alta porque Oklahoma se podía ver al borde de la eliminación y la salida de los Spurs asustaba un poco. Básicamente no era que los tejanos hiciesen demasiado pero iban por delante en el marcador con la dirección de Parker y el acierto de Aldridge. Las diferencias eran escasas porque Westbrook se empeñaba en intentar dirigir. Sin embargo el base se ponía nervioso al no poder remontar y se ganaba una técnica. Viendo la situación Donovan quitaba al base del partido y eso le costaba llegar al final del primer cuarto a diez puntos de San Antonio tras unas pérdidas de balón absurdas. Para el segundo cuarto los Thunder salían más agresivos físicamente, los Spurs lo fiaban todo a acciones individuales de Parker y la aproximación local era real. Cada vez el protagonismo de Dion Waiters era mayor en ambas zonas y Popovich se veía obligado al tiempo muerto con el partido en un pañuelo. Inesperadamente apareció la versión más desacertada y egoísta de Durant para devolver a San Antonio una ventaja de ocho puntos al descanso. El paso por los vestuarios no cambió la sensación de que Parker no encontraba la forma de implicar a sus compañeros y pronto Popovich tuvo que llamar a sus chicos. Los contactos en las zonas eran cada vez más duros, Durant sacaba toda su calidad y Oklahoma igualaba el partido. Sólo la aparición de los interiores visitantes en los últimos minutos daban ventaja de cuatro puntos a los Spurs al terminar el tercer cuarto. Una ventaja que, pese a los esfuerzos de los interiores tejanos, pronto quedaría diluída por el acierto de los suplentes locales y la aparición de Durant. A cada minuto quedaba más claro que el juego interior de los Thunder iba creciendo ante unos menguantes Spurs. Como además Durant estaba imparable la confianza crecía entre sus compañeros. Parker aparecía para poner a San Antonio a cuatro puntos pero fue un espejismo; se perdían balones y la diferencia se doblaba en un minuto. Los tiros visitantes ya no entraban y la serie quedaba empatada a dos camino de Texas. Invitado inesperado: Enes Kanter, Dion Waiters (Thunder)

Estaba claro que Portland no lo iba a tener fáicl para sumar su primer punto en la eliminatoria contra el equipo de la bahía de San Francisco. Los Warriors salían muy serios con Bogut impidiendo anotación bajo el aro y Klay Thompson siendo la referencia del ataque. Steve Kerr apostaba por su cinco de pequeños y Golden State abría un hueco que Lillard cerraba a golpe de triple. Apareció Barbosa para acompañar a Thompson y Lillard no pudo mantener el ritmo. Golden State mandaba por seis puntos tras la disputa del primer cuarto. Veía Stotts que necesitaba de Lillard desde el inicio del segundo cuarto y sacando manos en defensa para poder correr, los Blazers se ponían por delante. Kerr encontraba la solución en la presencia de Bogut. Poco a poco entraban los titulares pero se notaba que cada vez los Warriors tenían más dificultades para circular el balón. Bogut cometía su tercera falta personal y los de Oregón abrían la distancia. Green y Thompson cerraban el hueco pero era sólo temporal. Las estrellas visitantes notaban el cansancio y los exteriores de Portland ponian una docena de puntos a su favor. La inclusión de Gerald Henderson en el cinco inicial de la segunda mitad junto con la quinta falta de Bogut no auguraba nada bueno a Golden State. Sólo la cuarta falta personal de Mason Plumlee parecía positivo. Sin embargo el desacierto local y el liderazgo de Green obligaba al tiempo muerto de Stotts. Ambos equipos salían a buscar el aro rival con más agresividad, en ese terreno Ed Davis y Aminu eran los triunfadores y el tiempo muerto era visitante. Green y Thompson volvían a la carga, enfrente Lillard anotaba y repartía. Los Blazers se presentaban al último cuarto trece puntos arriba. Un cuarto que se abría con McCollum tomando el lugar de Lillard como director de juego y jugador imparable para la defensa visitante. Tenían que entrar los titulares porque la diferencia incluso aumentaba .Volvía entonces Lillard el partido se ponía a veinte puntos pero llegaron los mejores minutos de  los Warriors. A los locales no les entraban los tiros y en dos minutos Golden State se plantaba once puntos. Por suerte para Portland el acierto volvió a su pareja exterior y conseguían el primer punto de la serie. Invitado inesperado: Allen Crabbe, Ed Davis (Blazers)

Para el cuarto partido se esperaba el regreso de Curry saliendo desde el banquillo de los Warriors. Sin embargo la noticia en el inicio del partido era que las buenas ayudas defensivas de Portland dejaban sin opciones de anotar a Klay Thompson y,con un lillard acertado, Steve Kerr tenía que parar el partido. Todavía tardó Golden State en establecer su ataque, llevaba una canasta en juego a mitad de cuarto, hasta la salida a pista de su estrella. McCollum ponía a los suyos dieciseis puntos por encima y Draymond Green se ganaba una técnica. La agresividad visitante despertaba y Curry se iba desperezando para dejar la diferencia en ocho puntos al finalizar el cuarto. Tras el paso por el banquillo Curry no volvía a pista. El buen tono defensivo continuaba en los Warriors y Speights anotaba triples para mantener la diferencia en espera de los titulares. El equipo visitante crecía desde la defensa, un parcial de diez a cero apretaba el marcador. Se comenzaba a mandar a secundarios con malos porcentajes a los tiros libres. Kerr apostaba por su quinteto bajo, Aminu sacaba provecho de ello y Livingston era expulsado por protestar una falta. Al descanso los Blazers tenían una decena de puntos a su favor. El tercer cuarto amanecía con más contacto físico, cada canasta costaba mucho sudor y, en ese contexto, los Warriors se ponían por delante con un Klay Thompson inspirado y un Green multiplicado. Con el cambio de cuarto se hacía necesario un reconstituyente en el ánimo de la grada y ese fue McCollum con sus triples. Lillard se unía a la fiesta y tenían que responder Thompson y Curry. Portland se iba con un pequeño hueco y aparecía el primer triple de Curry para entrar en los dos minutos finales a un punto. Lillard repartía el balón para poner tres a arriba a los suyos. Harrison Barnes anotaba un triple para empatar y faltando medio minuto Lillard se enredaba con el balón y realizaba un mal tiro. La última posesión era visitante pero Curry demostró su falta de ritmo al fallar un tiro sencillo contra tabla. La prórroga se abría con un tiro de Curry contra tabla que demostraba que estaba dispuesto a todo. Los Blazers sacaban provecho de pasar el balón pero Curry cerraba las diferencias incluso anotando tras rebote ofensivo. Las estrellas locales notaban el cansancio pero Curry seguía acertando. Con un triple ponía cinco puntos arriba a Golden State restando dos minutos, Lillard forzaba demasiado y perdía posesiones importantes. Curry sacaba otro triple para poner la diferencia en ocho puntos entrando al minuto final. Lillard fallaba dos triples y la eliminatoria se ponía tres a uno para los Warriors. Invitado inesperado: Marreese Speights (Warriors)