España ha alcanzado los octavos de final del Eurobasket pero de qué manera. La derrota ante Italia en la tercera jornada aventuraba que el pase se lo jugaría ante Alemania, anfitriona del grupo, en un duro encuentro. El infierno que esperaba puso a prueba el sistema nervioso y el corazón de muchos aficionados. A falta de brillo, España recurrió al carácter y una muy buena actitud defensiva que le permitió dar en el tercer cuarto el estirón que se antojaba decisivo para cerrar el partido y certificar el pase. Sin tanto talento como en los mejores años de esta selección es lo que toca, salir con el cuchillo entre los dientes y suplir con actitud y personalidad todo lo que falta. Sin embargo, el encuentro guardó un final inesperadamente sufrido. Una mala recta final en la que se buscaba más que pasara el tiempo que en mirar el aro, con mucho miedo y muñecas flojas, metió de lleno en la pelea a Alemania y los nervios y el pánico cundió entre los aficionados españoles, aumentados tras una inexplicable decisión arbitral que concedió tres tiros a Schroeder, la eterna amenaza de la selección germana. Su error en el último tiro libre sirvió como final de toda una película de suspense que encogió el corazón. Sufrir para sobrevivir bien podría ser su título, el sino de la selección española en este Eurobasket que sigue adelante aunque a punto estuviera de provocar infartos colectivos.

EL PARTIDO DE ESPAÑA:

Alemania 76 – España 77: No va más. Tanto a España como a Alemania sólo les valía la victoria. El derrotado lo pagaría con la eliminación prematura en este Europeo. Sobra decir que la tensión estaba en un punto máximo. El rugido del O2 al entrar el triple que anotó Nowitzki para inaugurar el marcador era el preludio del paseo por el infierno que debía dar la selección española para lograr el pase. Como no estaba el día para probaturas España recurrió a lo que sabía que funcionaba. Pau Ribas ejercía más como director que Llull, con el día cruzado en la línea de tres. Siempre se buscaba a Pau Gasol (16 puntos, 11 rebotes, 6 asistencias, 29 de valoración), alfa y omega de esta selección que lo necesita más que nunca. Gasol proporcionaba la pequeña ventaja que se disfrutó durante casi todo el primer cuarto pero estaba claro que se iba a sufrir. Schroeder (26 puntos, 7 asistencias, 6 rebotes, 36 de valoración) sería una pesadilla constante. Ha crecido con el paso de los partidos. No es un gran director de juego pero sus facultades para penetrar y tirar desde fuera le convierten en temible. Fue un incordio, mantuvo a su equipo siempre cerca en la primera mitad para aumentar los nervios y la congoja (22-18, min 11). Su combinación con Pleiss también obtuvo buenos réditos. La réplica la encontró Scariolo en Sergio Rodríguez (19 puntos, 3 rebotes, 3 asistencias, 18 de valoración). El Chacho le dio acierto y chispa a España desde su salida a pista. Veloz e infalible, le dio otro aire a España, ya fuera anotando sin fallo o jugando para Pau Gasol, magnífico cerca del aro y con el único lunar de los errores en el tiro libre. España tomaba el mando pero no lograba alcanzar una diferencia cómoda. Cada vez que había ocasión llegaban un par de errores acompañados de un triple alemán que dejaba la distancia bajo mínimos. Los de Scariolo se iban a vestuarios por delante pero quedaba mucho sufrimiento por delante para llegar al objetivo (38-41, min 20).

Fuente: elidealgallego.com

España salió de vestuarios con el cuchillo entre los dientes. Aún no terminaba de afinar en ataque, de nuevo centrada en la producción por dentro de Gasol y Mirotic (12 puntos, 7 rebotes, 16 de valoración), pero entendió que atrás había que apretar con seriedad e implicación. El trabajo defensivo fue impecable. Aunque costaba anotar, a Alemania le resultaba complicado incluso lanzar, sufriendo la cantidad de manos que aparecían para robar el balón. Poco a poco la diferencia se fue abriendo, incluso llegaba algún triple que otro. En pleno desconcierto a Fleming no se le ocurrió otra cosa que sentar a Schroeder y Nowitzki (lento en sus movimientos, acusando el peso de los años). Salvo un par de acciones de Lo, Alemania resultó inoperante ante la intensa defensa española. El acierto en el tiro libre, una velocidad un punto mayor y el regreso de Sergio Rodríguez abrieron el camino hacia la victoria (48-60, min 30). Scariolo pudo darle un pequeño respiro a Pau Gasol aprovechando un colchón que resultaba de oro tal como se desarrollaba el partido. El O2 de Berlin se había quedado mudo. Pese a que la ausencia de Gasol afectó al rendimiento ofensivo de España, la defensa impidió que llegara un susto. Un triple de Llull puso 13 arriba a la selección española (52-65, min 33) y obligó al tiempo muerto de Fleming que se olvidó de instrucciones tácticas y recurrió a la bronca de toda la vida. La arenga surtió efecto. Schroeder continuó haciendo dañó cada vez que encaraba el aro. Lo, que no había hecho casi nada en todo el torneo, le secundó con un par de buenas acciones. España quiso zanjar el tema con un intercambio de canastas pero no sale rentable cuando el rival anota de tres en tres. Alemania anotó en seis jugadas seguidas y se metió de nuevo en el encuentro. El miedo tomaba cuerpo, atenazaba a los jugadores españoles que ya estaban más pendientes que pasara el tiempo en lugar de buscar buenos tiros. Llegaba el pánico a mirar el aro. Incluso Pau Gasol no anotaba en tiros que domina bien. Alemania se acercaba pero los errores y pérdidas evitaron que entrara al asalto. Un triple de Sergio Rodríguez a 1:45 resultó un bálsamo. Con 66-73 en el marcador a un minuto del final bastaba con una buena defensa para cerrar el triunfo. No llegó. Nowitzki anotaba cómoda y rápidamente un triple. Un mal tiro de Sergio Rodríguez acabó en un veloz ataque que supuso un nuevo triple de Lo. Habían saltado todas las alarmas a sólo 22 segundos. Quedaba encomendarse al acierto en los tiros libres. A Llull no le tembló el puso y anotó sus dos tiros. España no quería un triple postrero y se provocó falta sobre Schroeder que tampoco dudó a la hora de anotar sus dos tiros libres. De nuevo Llull recibió personal, la presión otra vez sobre su cabeza. Sangre fría y dos puntos más a falta de 7 segundos. El escenario se repetía. Schroeder emprende una veloz carrera hacia terreno español. Pau Ribas comete falta en su camino y Schroeder lanza posteriormente por si colaba. Vaya si coló. La típica decisión amable con el anfitrión otorgó tres tiros libres que ni el propio árbitro se debe creer. Aparecían de golpe todos los fantasmas. Schroeder anotaba sin problema los dos primeros lanzamientos. La posibilidad de una prórroga aterradora se presentaba como inevitable. Schroeder llevaba 7/7 en tiros libres. Lanzó el octavo. El balón topó con el aro y salió despedido a las manos de Pau Gasol. Su rebote acababa con el sufrimiento. Al borde del infarto España lograba la clasificación para octavos de final. Nunca imaginamos tan arduo camino pero se evitó el desastre para continuar en el torneo.

Fuente: telemetro.com

EL RESTO DE LA JORNADA:

GRUPO A:

Polonia y Finlandia dejaron para la última jornada la lucha por la tercera plaza del grupo. La igualdad y las alternativas en el marcador fueron una constante durante toda la primera mitad. Las acciones individuales de Slaughter (13 puntos, 8 rebotes, 20 de valoración) y el acierto de Waczynski (17 puntos, 4 rebotes, 3 asistencias, 23 de valoración) fueron contestadas por el acierto desde fuera de Finlandia. Koponen (14 puntos, 8 asistencias, 18 de valoración), mucho menos acertado que de costumbre en este Eurobasket, y Huff (17 puntos) se encargaron de darle vida al columpio en el que se convirtió el marcador en los primeros 20 minutos. Tras el descanso Polonia comenzó a dominar basándose en el juego interior. Huff y Nuutinen se encargaron que su rival no cogiera una ventaja seria pero el partido estaba donde Polonia quería. El paso de los minutos fue decantando de su lado el encuentro. Karnowski dio el relevo a Gortat en el trabajo dentro de la zona y la superioridad polaca en el juego interior acabó por resultar decisiva en cuanto Finlandia no encontró el acierto desde el perímetro (56-69, min 35). Polonia pudo disfrutar de un final plácido hasta el 65-78 final que le otorga el tercer puesto y el papel de rival de España en octavos de final. Con la dureza del grupo B tampoco estaban las cosas como para elegir rival, la complicación del cruce está asegurada.

Fuente: bulletsforever.com

Rusia y Bosnia disputaban el encuentro de los desahuciados, con el único interés por evitar el último puesto del grupo que tampoco es que consuele algo. A Rusia le sirvió para no irse de vacío tras ganar 61-81 aunque de poco le vale. Permitidme que apenas me entretenga con este partido pero el interés que tenía era nulo. Para los amantes de los números, decir que Fridzon, Zubkov (17 puntos, 7 rebotes, 26 de valoración) y Vorontsevich (15 puntos, 7 rebotes, 4 asistencias, 22 de valoración) fueron vitales en un último cuarto muy bueno que decidió el choque y haciendo olvidar un pésimo inicio en el que Bosnia tuvo mayor motivación. Aunque realmente lo que pasará al olvido es este partido.

Francia e Israel se jugaban la primera plaza en el último encuentro del grupo. Eso en apariencia porque el partido quedó decidido antes de empezar. El seleccionador israelí decidió dar descanso y no alineó un solo minuto a sus tres grandes referentes. Casspi, Eliyahu y Mekel vieron todo el partido desde el banquillo. Imposible hacer frente a Francia sin ellos en pista. Edelstein había entregado la primera plaza sin luchar y decidió ahorrarle esfuerzos a sus figuras para disputar más frescos los octavos de final. Evidentemente los galos no tuvieron ni para empezar. Batum ya marcó las primeras diferencias en los primeros minutos. Los pivots, Gobert (15 puntos, 10 rebotes, 23 de valoración) y Lauvergne (14 puntos, 7 rebotes, 17 de valoración) no tuvieron ni para empezar con el juego interior hebreo. Sin mucha demostración de fuerza Francia alcanzó una diferencia muy cómoda sin tener que esforzarse demasiado (24-38, min 18). Ni siquiera importaba que Parker se tomara el choque a chufla. Por inercia era suficiente para ampliar poco a poco la diferencia ante un rival entregado y que nunca estuvo presente en espíritu en la pista. Collet pudo dar minutos a todos mientras pensaba en las eliminatorias. 61-86 que certifica el pleno de victorias de Francia en la primera fase. Lo esperado aunque ha pasado por más apuros de los previstos antes del torneo.

Fuente: diariomontanes.es

Clasificación: 1º Francia (5-0), 2º Israel (3-2), 3º Polonia (3-2), 4º Finlandia (2-3), 5º Rusia (1-4), 6º Bosnia (1-4).

GRUPO B:

Italia podía arrebatar a Serbia la primera plaza si le derrotaba en el último encuentro pero Pianigiani no confiaba mucho en las posibilidades de conseguirlo puesto que decidió dar descanso a Belinelli que lleva días atravesando problemas físicos aunque en el partido contra España cualquiera lo diría. Una baja de mucho impacto en un equipo que no está sobrado de recursos de tanta calidad. Teodosic se empeñaría en darle la razón a Pianigiani. El base serbio está jugando a un nivel altísimo en los últimos encuentros y resulta determinante en unos partidos que se disputan al son que el toca. Ante Serbia no sólo estuvo brillante en la dirección, también en el tiro. Su pelea infructuosa con los triples de los partidos anteriores tendría éxito ante Italia. Todo le salía al base serbio que se bastaba para destrozar a la defensa rival (25-12, min 8). Tal fue su influencia que cuando se marchó al banquillo su equipo lo notó muchísimo. 2-10 de parcial y Djordjevic tuvo que ponerle en pista de nuevo. Con Teodosic (26 puntos, 8 asistencias, 34 de valoración) de nuevo al mando de las operaciones Serbia recuperó el control. Los 19 puntos de Teodosic al descanso fueron la muestra de su enorme primera parte y la clave para el dominio serbio que se acrecentó en el tercer cuarto con el destrozo que generó Nemanja Bjeliça (19 puntos, 8 rebotes, 4 asistencias, 30 de valoración). La aportación de Gentile (19 puntos, 6 asistencias, 5 rebotes, 20 de valoración) y Gallinari (14 puntos, 5 rebotes, 23 de valoración) ya no era suficiente para aguantar el chaparrón. La sociedad formada por Teodosic y Bjeliça rompió en pedazos el encuentro (74-59, min 30). Pianigiani sacó bandera blanca y comenzó a pensar en el próximo partido pero Serbia no se frenó aunque estuviera muchos hombres de banquillo en pista. Djordjevic ha insuflado una competitividad contagiosa. 101-82 para Serbia, la selección que mejor sensación ha dejado en esta primera fase y en el grupo más duro con diferencia. Su favoritismo se lo ha ganado con creces.

Fuente: directvsports.net

Hiciera lo que hiciera Turquía estaba abocada a terminar cuarta el grupo. Mucha motivación no es que hubiera pero con las facilidades que encontraba Ilyasova (19 puntos, 6 rebotes, 6 asistencias, 27 de valoración) y el acierto pleno de Dixon (28 puntos, 12 rebotes, 4 asistencias, 37 de valoración) no le costó abrir distancia a los de Ataman. Sin embargo el dinamismo y la anarquía puede resultar peligrosa cuando te relajas y encuentra el acierto en los innumerables triples que lanza. Como le pasara a España en el anterior encuentro, Turquía sufrió el recital triplista islandés en el segundo cuarto en cuanto se durmió un poco. Palsson (18 puntos, 4 asistencias, 3 rebotes, 17 de valoración) hizo muchísimo daño desde fuera. Un suplente, Sigurdarson (22 puntos), se puso tibio a anotar. En muy poco tiempo los turcos se encontraron por detrás en el marcador y sólo las acciones eléctricas de Dixon y su muñeca evitaron que se rompiera la igualdad. Este guion ya no se rompió en todo el encuentro. Cada arreón turco que buscaba una diferencia seria en el marcador (74-64, min 29) era contrarrestado por una lluvia de triples de Stefansson y Palsson. El juego islandés es de lo más heterodoxo que te puedes encontrar pero el público se lo pasaba en grande. Tampoco la afición islandesa necesita mucho para estar animada. Gunnarson (16 puntos) se unió a la fiesta del triple en el último cuarto. Turquía encontraba otra mosca cojonera que no dejaba de incordiar desde el perímetro. Ni siquiera le sirvió entrar en la recta final por delante. El propio Gunarsson anotaba un triple lejanísimo en la última posesión islandesa que empataba a 91 el partido y forzaba la prórroga. Apoteósico. Cinco minutos más de diversión aunque la prórroga tuvo poca emoción. Turquía se marchó muy pronto con un parcial de 10-0 y ya no dejó resquicio a la remontada gracias a Dixon y Osman (22 puntos, 6 asistencias, 4 rebotes, 25 de valoración). 111-102 en la despedida de Islandia que al menos se lleva el premio de no dejar indiferente a nadie.

Fuente: piratasdelbasket.net

Clasificación: 1º Serbia (5-0), 2º España (3-2), 3º Italia (3-2), 4º Turquía (3-2), 5º Alemania (1-4), 6º Islandia (0-5).

GRUPO C:

Macedonia necesitaba el triunfo para clasificarse pero en ningún momento tuvo recursos para amenazar a una Eslovenia que hizo lo justo para ganar con solvencia. Con Zoran Dragic (20 puntos, 5 rebotes, 19 de valoración) en plan líder y bien secundado por Omic (14 puntos, 11 rebotes, 24 de valoración), pivot que correr muy bien al contraataque, Eslovenia hizo mucho daño en el primer cuarto a un rival atenazado y completamente superado (19-6, min 7) aunque logró reponerse en el segundo periodo aprovechando la relajación de los hombres de rotación de Eslovenia. De la mano de Ilievski (15 puntos), Macedonia se acercó en los postrimerías del segundo cuarto (28-24, min 18) pero su rival nunca perdió la compostura. Una faena de aliño, bien interpretada por Dragic, bastó para que Eslovenia alcanzara en el tercer cuarto un colchón de diez puntos que pudo mantener con mucha facilidad. Macedonia se hundía en sus limitaciones y la ansiedad terminó por derrumbar. 62-51 para Eslovenia en un partido de poco brillo pero suficiente para mandar a casa a Macedonia que está muy lejos de aquel equipo que sorprendió hace cuatro años en Lituania con su cuarta plaza.

Fuente: acb.com

Georgia era otra necesitada del triunfo para aspirar a la clasificación. Croacia no se jugaba nada y esta circunstancia alimentó la indolencia de un equipo con tendencia a disiparse con demasiada facilidad. El partido resultó lamentable durante muchos momentos. A Georgia le pesó la responsabilidad y la falta de solidez durante muchos momentos. A Croacia, su falta de ganas y motivación. Georgia mandaba durante la mayor parte por simple cuestión de motivación. Le bastaba el trabajo de Shengelia (11 puntos, 6 rebotes, 5 asistencias, 23 de valoración) y Sanikidze (12 puntos, 5 rebotes, 4 asistencias, 23 de valoración) o un par de triples seguidos de Markoishvilii pero faltaba regularidad en su juego. No la encontró hasta el último cuarto cuando un 14-0 de parcial le dio la tranquilidad. Croacia ni intentó oponer resistencia, durante todo el encuentro estaba a otra cosa pese a jugar en casa. 71-57 con el que Georgia consigue su clasificación. Arregló en las dos últimas jornada un inicio desastroso de torneo. Lujo que te puedes permitir en un grupo tan desigualado.

Grecia ya tenía asegurado el primer puesto y tenía como postre a Holanda, la perita en dulce que resultó amarga y difícil de digerir para todos los rivales. Katsikaris dio día libre a Spanoulis pensando en choques de mucha más trascendencia. La verdad que el día festivo se lo tomó todo el equipo porque vagueó en demasía. Holanda vio el percal y no dudó en lanzarse a por la que sería una victoria de mucho prestigio y que le daría un histórico pase a octavos de final. Dominó durante prácticamente todo el primer tiempo echándole muchas más ganas que los helenos. Debió sonrojar a Katsikaris la falta de empeño de sus jugadores porque decidió apretarles las clavijas mediado el segundo cuarto. Grecia apretó y logró frenar a un rival demasiado acelerado en ocasiones. Todo ello con los suplentes en pista, el quinteto de gladiadores que no hace prisioneros y que devolvió la ventaja a la selección griega. Ya no abandonaría el liderazgo en el marcador aunque le costó mucho abrir brecha. Sin Spanoulis falta un verdadero referente anotador. La diferencia se fue abriendo lentamente y gracias a un muy buen trabajo defensivo que consiguió que a Holanda le costara la vida anotar (61-50, min 35). Sin duda el mayor potencial de los de Katsikaris es su colectivo. Sin embargo los holandeses no arrojaron la toalla. Norel apareció en los últimos minutos para pintarle la cara a los pivots griegos. 0-9 de parcial que alimentó las esperanzas holandesas. Incluso Holanda disfrutó de dos oportunidades para empatar pero las desaprovechó, cosa que no hizo Bouroussis con un triple a un minuto del final que tumbó definitivamente a los holandeses. 68-65 que mantiene invicta a Grecia. Holanda se marcha con la cabeza muy alta, salió con dignidad para darle en los morros a todos los incrédulos que se preguntaban qué hacía allí.

Fuente: piratasdelbasket.net

Clasificación: 1º Grecia (5-0), 2º Croacia (3-2), 3º Eslovenia (3-2), 4º Georgia (2-3), 5º Macedonia (1-4), 6º Holanda (1-4).

GRUPO D:

El grupo de la risa ha acabado tan igualado, por abajo claro está, que todos tenían opciones de clasificación en la última jornada. Ucrania y Bélgica se jugaban la primera plaza en liza. Los ucranianos dominaron claramente en la primera mitad. Fesenko (20 puntos, 11 rebotes, 24 de valoración) se adueñó completamente de la zona e hizo muchísimo daño en el juego interior a una Bélgica con serios problemas para anotar y que se veía abocada al desastre tras anotar sólo 25 puntos a un minuto para el descanso (39-25, min 19). Ucrania tenía el camino despejado pero tiró en ese minuto que restaba todo el trabajo por el sumidero. Concatenación de errores que propiciaron un 0-10 en un solo minuto. Bélgica había salvado la situación y se marchaba a vestuarios con otra cara, se había salvado del desastre. En la segunda mitad impuso su mayor variedad de recursos. Tras unos minutos de tanteo, entre Van Rossom (14 puntos, 6 asistencias, 16 de valoración) y Gillet dieron un duro golpe a Ucrania en el tercer cuarto. La puntilla llegó con tres triples consecutivos al inicio del último periodo que supusieron un 0-9 de inicio (54-67, min 32) y una diferencia casi definitiva. Ucrania se agarró a Fesenko para alimentar sus escasas esperanzas. Una seria caraja belga durante medio cuarto facilitó las cosas para una remontada que mantenía a los ucranianos con vida al llegar los dos últimos minutos (70-74, min 38) pero Van Rossom se encargó en los momentos finales de mantener la calma y cerrar la victoria por 71–79 que valía el pase a octavos.

Fuente: acb.com

Nadie se podía imaginar que Estonia llegaría al final de la primera fase con opciones de clasificación pero así era. Curiosidades del grupo de la risa. Y cerca estuvo de darle un disgusto a su vecina Letonia en su propia casa. Los letones comenzaron con una empanada monumental que les pudo costar muy cara. De inicio se llevaron un 0-11 y sin anestesia que dejó al pabellón de Riga en estado catatónico, sensación que aumentaba ante la imposibilidad de su selección de salir del letargo. Estonia disfrutaba sobre la pista, el sueño de una milagrosa clasificación era real. Dominaba de cabo a rabo a una Letonia errática y muy displicente en defensa (25-41, min 17). Sorprende este inicio cuando una derrota le dejaba fuera de combate. A los estonios les entraba todo desde fuera, el partido les salía ni soñado. Aunque las alarmas llevaban demasiado tiempo sonando a todo volumen los anfitriones no despertaron hasta el inicio del tercer cuarto. Debió caer una buena bronca al descanso porque salieron con otra actitud. Mucha más intensidad defensiva, una mejor lectura del juego de Strelnieks (21 puntos, 5 rebotes, 3 asistencias, 34 de valoración) y el acierto exterior de Timma (15 puntos, 6 rebotes, 18 de valoración) permitieron una rápida remontada. 16-3 de parcial que daba la vuelta al partido en apenas ocho minutos. Estonia continuó agarrada al partido hasta la mitad del último cuarto pero en ese momento se quedó sin fuerzas. Letonia sumó de tres en tres y un 9-0 de parcial fue suficiente para acabar con la resistencia estonia (71-60, min 38). La afición letona pudo suspirar y celebrar el pase a octavos, sufrido pero ya en el bolsillo con el 75-64 final.

Para el final quedaba el duelo por el liderato del grupo entre República Checa y Lituania. Los checos empezaron fuerte con un 7-0 de inicio que le permitiría dominar toda la primera mitad. Lituania dejó muy malas sensaciones de nuevo en el primer tiempo, sin un juego ordenado y claro y con Kalnietis chupando hasta la saciedad para no conseguir nada. El base lituano es capaz de mandar a la basura un partido cuando tiene el día cruzado. En cambio Satoransky (11 puntos, 15 asistencias, 9 rebotes, 22 de valoración) sí ofrecía luz a su equipo. No estaba acertado en el tiro pero su dirección fue ejemplar. Entendió que era día para el protagonismo de los demás y fue clave para el dominio checo en el primer tiempo (37-27, min 20). Pero el partido cambió tras el descanso. Lituania salió muy enchufada y redujo la diferencia a la nada rápidamente con un 0-9 de salida. El dominio había cambiado de manos. Valanciunas (13 puntos, 10 rebotes, 3 tapones, 25 de valoración) se imponía a Vesely en la zona, Kuzminskas (18 puntos, 7 rebotes, 25 de valoración) disfrutaba de sus mejores minutos del campeonato y Milaknis golpeaba desde el perímetro. Ahora eran los checos los que sufrían sobre la pista. El panorama se le oscureció con tres personales de Vesely en el último cuarto que le dejaban fuera del partido pero Lituania se bloqueó de nuevo cuando mejor se le ponían las cosas. Los secundarios checos aparecieron para aprovechar el mal momento rival e igualar de nuevo el partido pero la República Checa acabó contagiándose de los problemas lituanos en los últimos minutos que resultaron penosos ya que ninguno de los dos equipos fue capaz de anotar en los tres últimos minutos el 69-69 en el marcador. La prórroga decidiría el liderato del grupo. El protagonista sería la moneda al aire que resulta Kalnietis. Arregló su mal partido con dos triples consecutivos en el tiempo extra que rompieron el partido. Siempre capaz de lo mejor y lo peor, esta vez apareció cuando era necesario. 81-85 para Lituania que acaba líder pero su juego es manifiestamente mejorable.

Fuente: acb.com

Clasificación: 1º Lituania (4-1), 2º Letonia (3-2), 3º República Checa (3-2), 4º Bélgica (3-2), 5º Estonia (1-4), 6º Ucrania (1-4).

Los octavos de final quedan con los siguientes emparejamientos. El sábado se disputan en Lille cuatro partidos: Letonia-Eslovenia,  Grecia-Bélgica, España-Polonia, Francia-Turquía. El domingo, los otros cuatro: Croacia-República Checa, Serbia-Finlandia, Israel-Italia y Lituania-Georgia.

Y DIGO YO…:

• Alemania no ha tenido mucha suerte en esta primera fase. Contra Serbia cayó en el último segundo. Italia le batió tras forzar la prórroga sobre la bocina. Y contra España, Schroeder cometió su único error en los tiros libres en el lanzamiento que podía llevar al tiempo extra. Los anfitriones suelen contar habitualmente con algo de suerte a su favor pero los alemanes la han tenido en contra. Con una pizca de fortuna el resultado podía haber sido muy diferente.
• Nowitzki terminó el Europeo con una emotiva despedida del O2 de Berlin. A sus 37 años, el partido contra España pudo ser el último como internacional. La última función de un genio capaz de conseguir que una plantilla mediocre disputara las semifinales del Europeo 2001, lograra el bronce en el Mundial 2002 y la plata en el Europeo 2005. Se despide una leyenda.
• Otra leyenda, Pau Gasol. Ante Islandia se convirtió en el máximo anotador español en un Eurobasket, superando a nada menos que Epi. Un hecho que marca la importancia de Pau Gasol en la etapa más brillante del baloncesto español. Será muy complicado encontrar alguien de su calibre en muchísimo tiempo.
• En 1993 un triple de Welp en el Eurobasket de Alemania eliminó a España en cuartos de final. En 2015, un tiro libre errado de Schroeder en el último instante deja fuera del torneo a los germanos. Distintos finales para un duelo que resulta siempre dramático en tierras alemanas.
• La ampliación a 24 equipos ha incluido demasiados partidos de relleno pero al menos ha permitido disfrutar de la fiesta a aficiones poco acostumbradas a disfrutar de un Europeo. El ambiente que generaron las aficiones de Islandia, Finlandia o Estonia jugando fuera de su país fue inmejorable y dio mucha vida a partidos que podían resultar sosos e infumables. Por ellos quizá merezca la pena.