Final de la Conferencia Este

Ni Irving ni Korver se presentaron a jugar el tercer partido de la eliminatoria en Cleveland. Ese aspecto en principio colocaba en desventaja a los Hawks viendo la dinámica de la serie. Sin embargo los locales salían relajados, no aprovechaban las segundas opciones de las que disponían en ataque y veían su defensa desbordada por el movimiento de balón visitante. En cinco minutos Blatt tenía que solicitar un tiempo muerto porque Horford les hacia polvo a seis metros del aro y estaban a ocho puntos. Tras el parón el tiro exterior local despertaba, entre Shumpert y JR Smith colocaban a cuatro puntos el partido a tres minutos de finalizar el primer cuarto. Pese al desacierto de James nada cambió, el rebote ofensivo era local y Atlanta mandaba por sólo tres puntos con un cuarto jugado. Las malas costumbres volvían a los Cavaliers; desacierto en el tiro en ataque, pese al despertar de Lebron, y una defensa desconcertada permitía a los Hawks tomar ocho puntos a su favor a mitad de cuarto. La reacción local llegaba en tres minutos de mayor intensidad defensiva y Cleveland se ponía por delante. Buldenhozer se veía obligado a pedir tiempo para recordar que moviesen el balón. El partido se igualaba pero, quedando treinta segundos para el descanso, Dellavedova se lanzaba sobre la pierna de Horford de igual manera que había ocurrido en el segundo partido sobre Korver (que le supuso la lesión). Horford no se resistía pensando que se podía haber roto la pierna y clavaba el codo en el cuello del base australiano. Era expulsado y la técnica a Dellavedova no quitaba la sensación visitante de que le tomaban el pelo pese a ganar al descanso por un punto. La segunda parte se abría con la sorpresa de ver en el quinteto visitante a Muscala para sustituir a Horford. Y la ternura del joven pivot era aprovechada por los locales para irse por siete puntos a mitad de tercer cuarto. El tiempo muerto visitante reactivaba la circulación de balón visitante y en dos minutos el partido estaba empatado. Lo que ocurrió en los minutos siguientes fue lo esperado,  el acierto visitante bajó con los suplentes y Lebron tomó el mando para llegar al último cuarto con cinco puntos de ventaja. En noventa segundos de último cuarto la diferencia local llegaba a la decena de puntos tras un parcial de siete a cero. Los Cavaliers comenzaban a relajarse, se perdían balones en ataque y la defensa sufría con el juego abierto visitante. A mitad de cuarto la ventaja se quedaba en dos puntos y Thompson cometía su quinta falta personal teniendo que sentarse. Bazemore ponía por delante a los Hawks y Blatt ponía en pista a Thompson. Lebron acumulaba errores y Teague castigaba los cambios defensivos. La diferencia visitante llegaba a los cuatro puntos con cien segundos por delante. En esos cien segundos los Cavaliers recurrieron al tiro libre para anotar, Atlanta falló en la ejecución final bajo canasta y la prórroga era un hecho porque Teague falló un triple tras sobar el balón durante los diecisiete segundos de los que dispusieron los visitantes en la última posesión. El tiempo extra fue de todo menos divertido. Lo primero que se hizo notar fue la enfermería, en menos de un minuto Carroll se iba al banquillo y James se quejaba de un tobillo tras un mal apoyo. Los puntos escaseaban en los visitantes que sólo encontraban anotación desde el tiro libre. Enfrente tampoco Cleveland encontraba la canasta con facilidad. Así las cosas se entraba en el minuto definitivo con ventaja local de un punto. Teague metía la primera canasta en juego de su equipo en la prórroga, un triple que situaba por delante a los Hawks. Lebron tomaba la decisión de hacer un tiro a media distancia, fallaba pero Thompson conseguía una segunda opción para que Lebron solventase el problema. Triple que ponía en cabeza a Cleveland, Teague decidía penetrar ante Lebron y el balón era local con medio minuto por delante. James hacía otra media entrada pero encontraba el tablero para asegurar los dos puntos y dar tres puntos de tranquilidad a su equipo. Shelvin Mack fallaba dos triples y los Cavaliers alcanzaban el tres a cero en la eliminatoria. Invitado inesperado: Matthew Dellavedova (Cavaliers)

Volvía Irving al quinteto titular de los Cavaliers en el cuarto partido. Y eso se notaba positivamente en los ataques más atascados. Los locales aprovechaban la debilidad de energía de Atlanta para robar balones por anticipación. La primera escapada era local y Buldenhozer intentaba concentrar a los suyos. Poco podía conseguir, los jugadores estaban desganados y Cleveland no forzaba la máquina en ataque para despegarse. Teague se desesperaba con el marcaje de Dellavedova y la diferencia crecía poco a poco. Volvía Irving a pista para dar descanso a Lebron, el marcador no se alteraba y la aparición en el minuto final de los secundarios, incluída una canasta de Thompson sobre la bocina, ponian a los Cavaliers con una docena de puntos a su favor. El regreso de Lebron para el segundo cuarto trajo otro nuevo distanciamento  local, era cuestión de acierto. Buldenhozer probaba con marcajes desesperados pero Carroll no podía con Mozgov. A mitad de cuarto la diferencia llegaba a los veinte puntos y los Hawks comenzaban a tirar el partido al ver que los locales no frenaban. Viendo la situación Blatt rotaba a sus jugadores más de lo usual y al descanso la diferencia se quedaba en diecisiete puntos. El descanso vino bien para calmar los ánimos caldeados de un Thompson cabreado por un empujón en un rebote. Los visitantes salían otra vez como corderos desánimados, cada vez jugaban más individualmente y Cleveland abría más el hueco mientras se ponía en modo exhibición. Eso provocaba que la distancia entre ambos equipos oscilase entre los quince y los veinte puntos en función de la concentración local. Tristan Thompson era de los pocos que se mantenía al cien por cien y se convertía en protagonista de un nuevo arreón local. Junto con Lebron ponía al equipo de Ohio con veinticinco puntos a su favor. Una distancia que Dellavedova y JR Smith se encargaron de mantener para finiquitar la serie tras siete minutos de cuarto final. Invitado inesperado: JR Smith, Matthew Dellavedova (Cavaliers)

ELIMINATORIA CERRADA: CAVALIERS GANAN CUATRO A CERO

Final de la Conferencia Oeste

Houston ardía en fuego rojo de cara al tercer partido. Con Howard y Terry cogiendo la responsabilidad los tejanos salían a por todas. Como respuesta los Warriors presentaba un movimiento de balón que finalizaban Klay Thompson y Andrew Bogut. Viendo que los visitantes tomaban una ligera ventaja McHale paraba el partido llegando a la mitad del primer cuarto. Cada vez la defensa de Golden State cerraba mejor los espacios y, junto con una buena distribución del balón, colocaba la diferencia visitante en doce puntos al finalizar el primer periodo. El segundo acto presenciaba el duelo entre la potencia de Howard y la agilidad de Iguodala. Como Harden no se entonaba las diferencias se mantenían. Curry retrataba a Howard al robarle un rebote; el pivot, completamente desnortado, cometía dos faltas personales en un minuto y se colocaba con tres. Sin embargo McHale le veía imprescindible y lo mantenía en pista. Algo que no pasó con Bogut diez segundos más tarde, cuando los árbitros decidieron compensar y dejar a ambos equipos sin pivots titulares. Quedaban cinco minutos por disputar y los Warriors mandaban por trece puntos. La baja de Bogut no supuso ningún cambio en el partido, entre otras cosas porque Curry se sumaba al juego coral visitante. Los parones de McHale no conseguían cerrar el agujero. Curry cerraba el cuarto con quince puntos en doce minutos y Houston enfilaba ls vestuarios con una losa de veinticinco puntos para remontar. El tercer cuarto se abría con una técnica a Howard que no auguraba nada bueno. Sin embargo la cuarta falta personal de Bogut con noventa segundos jugados cambiaba el panorama. Los Rockets cargaban el juego en la zona y en dos minutos se colocaban a diecinueve puntos obligando a Kerr a un tiempo muerto. Sólo Curry anotaba pero la defensa mejoraba y con eso los visitantes tenían bastante para distanciarse nuevamente. McHale pedía otro tiempo muerto a mitad de cuarto, volvían a encontrarse a veinticuatro puntos. Por encima salían del tiempo muerto y Howard veía como la cuarta falta le dejaba fuera de juego. Pese a una técnica a Draymond Green los interiores visitantes incrementaban la diferencia. La desesperación provocaba que McHale recurriese a Nick Johnson para lidiar con Curry. Era imparable, el público enmudecía. Se presentaban al último cuarto a más de treinta puntos y el tres a cero en la serie era de Golden State. Invitado inesperado: Festus Ezeli (Warriors)

Presentarse al cuarto partido con la eliminatoria tan cerca de resolverse provocó la relajación de Golden State y eso fue un gran error. Encajó un nueve a cero en dos minutos y Kerr llamaba a sus jugadores disgustado. El problema era que los Rockets se habían calentado, cada vez eran más agresivo en la defensa y la confianza se extendía al ataque. Los triples entraban constantemente y la ventaja local no dejaba de aumentar. Kerr estaba harto y ponía algunos suplente tras cinco minutos de juego. Josh Smith y Curry crecían en protagonismo, se añadía Barbosa pero Harden disparaba el marcador con cinco puntos consecutivos en el minuto final. Cuarenta y cinco puntos tejanos en doce minutos, habían metido ocho de nueve triples intentados y tres de cada cuatro tiros realizados. Habían doblado con la última canasta a unos perplejos Golden State. Al segundo cuarto si se presentaron los visitantes y la ventaja bajaba de la veintena en menos de dos minutos pese a que los tejanos seguían agresivos. Tanta agresividad había que Livingston se ganaba una técnica por pedir una falta. La diferencia fluctuaba en torno a los veinte puntos con el ritmo disparado para anotar más rápido. Cuando el partido estaba más loco Ariza dejó saltar a Curry que cayó sobre su cuello. Tenía que retirarse a los vestuarios con su equipo a diecinueve puntos y seis minutos para llegar al descanso. Kerr convencía a su equipo de que la lesión abría una oportunidad a la remontada, Klay Thompson acertaba y los Rockets veían la diferencia reducirse hasta los trece puntos en dos minutos. Ahora era McHale el cabreado y pese al tiempo muerto la dinámica no cambiaba. El acercamiento visitante estaba a punto de bajar la diferencia de la decena de puntos cuando Shaun Livingston metió la pata por partida doble. Primero precipitó el ataque clave, luego hizo falta a Ariza cuando convertía un triple. La jugada de cuatro puntos y un triple de Terry en la última posesión dieron aire a los tejanos que se iban a los vestuarios manteniendo diez puntos a su favor. En el tercer cuarto se mantenían las diferencias hasta que, con cuatro minutos jugados, Bogut intentaba agarrar a Howard y este se revolvía con el codo. Sorprendentemente no era expulsado del partido y Houston respiraba aliviado porque se sabía que Curry saltaría a pista en breve. A mitad de cuarto la estrella visitante hizo acto de presencia y su salida espoleó a Harden. Un parcial de doce a dos en dos minutos provocaba el tiempo muerto visitante. La distancia entre ambos equipos superaba otra vez la veintena de puntos y sin embargo era Terrence Jones el que se ganaba una técnica. La diferencia se reducía hasta los trece puntos gracias a los suplentes de los Warriors, pero Jones recogia un mal tiro de Harden para dar quince puntos de tranquilidad a los suyos de cara al último cuarto. Unos puntos necesarios para dar descanso a Harden, un descanso que dejó al equipo local limitado en ataque. Con la defensa más activa sobre el balón y el acierto exterior de Thompson los Warriors se ponían a siete puntos. La solución de McHale tras el tiempo muerto, Harden. Enfrente, un quinteto bajo para circular mejor el balón yq eu Curry sacase rendimiento. Los intentos visitantes iba en función del acierto de Curry porque sus compañeros no acertaban. Green cometía su qinta falta personal y como Harden tomaba siempre la decisión correcta Kerr daba orden de hacer faltas a Josh Smith. Thompson también cometía su quinta personal pero la táctica daba resultado. De estar a dieciseis a ver el partido, nuevamente, a diez puntos.Se presentaban tres minutos finales apasionantes pero Harden estaba caliente y cada bola que tocaba entraba por la canasta. Faltando un minuto Golden state se rendía, volvían a casa con el tres a uno en la eliminatoria. Invitado inesperado: Terrence Jones (Rockets)