30 de abril de 2015. Una fecha que a la mayor parte de la gente le sugiere el comienzo de un nuevo puente vacacional. A los más fieles aficionados al baloncesto le sonará ahora mismo al día en el que disputaron sus encuentros aplazados Real Madrid y Barça debido a su participación en los cuartos de final de la Euroliga. Una pequeña jornada aplazada que dejó al Real Madrid rumbo al primer puesto de la Liga Regular por tercera temporada consecutiva tras deshacerse sin problemas de Unicaja en un encuentro que fue un clinic de juego dentro de la zona de Felipe Reyes (Joan Plaza debe pensar qué desayuna Felipe para estar con 34 años aún mejor que cuando el técnico catalán entrenó al Real Madrid) y que garantiza la tercera plaza del Barça, que aún sueña con la segunda visto el bache por el que atraviesa Unicaja, en un partido sencillo pero poco brillante ante Obradoiro. Pero por nada de esto se recordará una fecha que pasará a la historia sino por el debut con el Real Madrid en ACB de Luka Doncic. Con sólo 16 años, la perla más rutilante de la cantera madridista debutaba con el primer equipo en competición oficial. El adolescente esloveno lleva años deslumbrando en categorías inferiores, firmando unos números escandalosos incluso ante jugadores mayores que él. Sólo se le vio un par de minutos en el Palacio de los Deportes pero lo suficiente para verle un detalle, un triple que significó su primera canasta en ACB y que lanzó como todo un veterano, no como un joven asustadizo que tira por aclamación popular. Hemos visto grandes proyectos de jugadores haciendo ruido desde su adolescencia: Ricky Rubio, Mirotic, Hezonja,… pero Doncic puede romper moldes en la historia del baloncesto europeo. Un 30 de abril de 2015 comienza a escribir su leyenda.
Manresa 68 – Fuenlabrada 53: Otro día extraño, un viernes, para un duelo vital en la lucha por la permanencia, La victoria era innegociable para salvar el pellejo. Y como suele ocurrir en duelos tan trascendentales y agónicos la puesta en escena no tuvo nada de brillante. Fuenlabrada salió con el pie cambiado a pista. Un Manresa mucho más metido, al amparo del apoyo del Nou Congost, no comenzó asombrando pero sí con la suficiente intensidad para comenzar con un 8-0. Oscuros nubarrones en los visitantes que fueron incapaces de anotar en los primeros cinco minutos. Ni siquiera aparecía el de siempre, Panko (13 puntos, 12 rebotes, 17 de valoración). Los tiros libres fueron el sustento hasta que logró contener a su rival que se contagió de las imprecisiones del Fuenla. Logró igualar el choque hasta que funcionó el tiro exterior local en unos buenos minutos de los tiradores. El acierto en el tiro de tres permitió que los locales se marcharan por encima de los diez puntos en el marcador. El partido era de Devin White (21 puntos, 9 asistencias, 5 robos, 26 de valoración) que lucía en todas las facetas. Anotaba, dirigía y defendía. Una pesadilla para la que no encontró solución Fuenlabrada. Con la ayuda de Seeley, dejaba el encuentro al borde de la ruptura definitiva tras un fulgurante comienzo de tercer cuarto (43-25, min 25) pero ahí apareció el orgullo del equipo fuenlabreño. Panko no estaba fino en ataque así que la responsabilidad debía tomarla otro. Lo hizo Akindele (12 puntos, 5 rebotes, 17 de valoración) que se impuso claramente dentro de la zona en los últimos minutos del tercer periodo. Llegó uno de los habituales bajones de Manresa en cada partido y la situación se le complicó a los hombres de Pedro Martínez. 4-17 de parcial y el cuadro visitante que salía de la fosa. Fue engordar para morir. Devin White volvió a tomar las riendas en un último cuarto sublime. Fue el hombre del partido, el protagonista que dio alas a Manresa. La exuberencia del juego de White contrastó con un rival desolado que se vino abajo en la recta final. Apenas pudo anotar tres puntos en los últimos cinco minutos, inasumible cuando te juegas la vida. White mantiene las opciones de permanencia de Manresa tras este duelo vital. Las llamas de LEB Oro comienzan a sentirse en Fuenlabrada.
Fuente: zonadostres.com
Andorra 89 – CB Sevilla 65: Liberado de presión tras las últimas victorias, Andorra salió arrollando a CB Sevilla, incapaz de frenar a Jawai (16 puntos, 8 rebotes, 20 de valoración) que se encuentra definitivamente asentado en el equipo andorrano. Pese al empeño de Porzingis (17 puntos, 5 rebotes, 22 de valoración) y Hernangómez la diferencia no paraba de subir, sobre todo por el acierto local en el tiro exterior. Lo contrario le ocurría a su rival, negado desde la línea de tres. De hecho fue incapaz de anotar un triple en toda la primera parte. Los bases, tanto Schreiner como Sada (4 puntos, 9 asistencias, 5 rebotes, 16 de valoración), dominaban con claridad el ritmo del encuentro, muy acelerado. Andorra siempre encontraba buenas posiciones de tiro gracias a la movilidad de balón. El encuentro quedó casi visto para sentencia al descanso (48-29, min 20). Y por lo que se veía al inicio del tercer cuarto le podía bastar a los locales con jugar al tran tran para mantener las diferencias pero CB Sevilla despertó mediado el periodo. Unos buenos minutos de Woodside (13 puntos, 3 rebotes, 2 asistencias, 18 de valoración) le cambiaron la cara al equipo sevillano. Ya fuera anotando o encontrando al siempre presente Porzingis logró que la diferencia bajara de los diez puntos por un momento pero Andorra no le daría la oportunidad siquiera de inquietar. Tres triples de Shaun Green (17 puntos, 2 rebotes, 17 de valoración) al inicio del último cuarto noquearon definitivamente a CB Sevilla que no tuvo capacidad de reacción a este golpe (76-55, min 35). Andorra pudo disfrutar tranquilamente de los últimos minutos que certificaban su permanencia en la ACB. Objetivo cumplido y con suficiencia, no está mal para la temporada de regreso a la máxima categoría. A CB Sevilla aún le queda mucho por lucha para conseguir lo mismo.
Fuente: piratasdelbasket.net
Bilbao Basket 95 – Joventut 92 (tras prórroga): Los dos equipos revelación de la primera vuelta no atraviesan su mejor momento y necesitaban la victoria para no complicarse la vida de cara a los playoffs. La Penya arrancó mucho mejor. Suton (15 puntos, 8 rebotes, 17 de valoración) y Ventura acapararon la anotación en los primeros minutos del equipo verdinegro que pasaba por encima de Bilbao Basket. No pintaba bien la cosa para los locales (15-27, min 8) por mucho empeño que ponían Raúl López y Bertans (19 puntos, 3 rebotes, 19 de valoración). Hannah (20 puntos) tomó el testigo de la pareja anotadora verdinegra para mantener las diferencias sin problemas hasta que despertó el perímetro de Bilbao Basket. Tres triples consecutivos despertaron a Los Hombres de Negro que pasaron a controlar el ritmo del partido. Ajustaron el marcador y tuvieron ocasiones de sobra incluso para ponerse por delante pero eso lo dejarían para el tercer cuarto. Esta vez regresaron del intermedio mucho mejor que en la puesta en escena inicial. La decisión de Sito Alonso de jugar con dos bases fue la adecuada. Colom (16 puntos, 5 asistencias, 16 de valoración) olvidó su nefasto encuentro ante el Real Madrid y ofreció su cara buena. Anotó y asistió a Marko Todorovic (15 puntos, 10 rebotes, 27 de valoración, MVP de la jornada) que volvió a marcar diferencias dentro de la zona. La ventaja era para Bilbao Basket pero nunca llegó a ser holgada. Suficiente hizo con aguantar hasta el final con opciones, haciendo la goma toda la segunda parte. Pese a todos sus intentos de escapada, entre Hannah y Suton lograron que el encuentro llegara igualado al último minuto. Un triple de Bertans a medio minuto del final ponía un 82-79 que podía valer la victoria. Pero respondió Mallet a 14 segundos de la misma manera tras un saque de fondo. Un nuevo triple que volvía a igualar el marcador y forzaba la prórroga. El aro escupió el lanzamiento de Raúl López que pudo haberlo evitado. Sin embargo Bilbao Basket no dejó de dominar en el tiempo extra. Controló los últimos cinco minutos en todo momento. Dos triples de Mumbrú y la fiabilidad de Raúl López en el tiro libre certificaron una victoria valiosa que mete de nuevo a Bilbao Basket entre los cuatro primeros. Aún le queda pelear a Joventut para asegurarse su puesto en los playoffs.
Fuente: racocatala.cat
Obradoiro 76 – Real Madrid 85: El Real Madrid lucía su recién recuperado liderato en una plaza caliente y complicada como lo es siempre Fontes do Sar. Encontró un filón muy pronto dentro de la zona en Ayón (18 puntos, 8 rebotes, 24 de valoración) que le hizo la vida imposible a los pivots locales durante todo el primer cuarto. Con algo de ayuda desde fuera de Rivers, el pivot mexicano hizo lo que quiso ante la impotencia de sus defensores para frenarle (10-21, min 8). Pudo limitar daños Obradoiro con los puntos de Triguero (12 puntos, 4 rebotes, 17 de valoración) al final de cuarto pero el escenario del encuentro resultaba muy cómodo para el Madrid. Sin embargo llegó la reacción local en el siguiente periodo. Como le ha ocurrido en demasiadas ocasiones al Real Madrid el segundo cuarto fue el de la siesta. Sin Ayón en pista no resultaba tan fácil atacar. Le costó cuatro minutos anotar y para entonces su rival se le había subido a la chepa. Waczynski (15 puntos, 4 asistencias, 17 de valoración) alimentó la alicaída anotación local para ajustar el marcador. Sin embargo Obradoiro fue incapaz de culminar la remontada. No aprovechó las ocasiones para adelantarse y siempre dejó un resquicio al Madrid para encontrar un alivio. Los puntos de Kleber y las contras de un Pumprla tan trabajador como de costumbre mantuvieron la diferencia muy reducida durante el segundo cuarto pero los de Pablo Laso se marchaban al descanso sin ceder el liderazgo en el marcador. En la reanudación salió a cancha de nuevo Ayón y el ataque madridista incidió con frecuencia cerca del aro. La sociedad del mexicano con Felipe Reyes reparte mejores dividendos con el paso del tiempo. 5-0 de salida que sería, no obstante, neutralizado con un 0-7 de respuesta que igualaba el encuentro (42-42, min 24). Pero de nuevo le faltó a Obradoiro culminar la remontada. No tendría otra oportunidad. El Real Madrid activó el modo tercer cuarto. Ya saben todos los rivales qué significa. La defensa blanca alcanzó la máxima intensidad. Obradoiro sufrió un bloqueo ofensivo debido a la enorme actividad defensiva rival. Los ataques veloces del Real Madrid destrozaban la resistencia local. Para cuando Obradoiro volvió a anotar, cinco minutos después, había descarrilado del choque. Para rematar la faena apareció Carroll, casi inédito tras cometer cuatro personales (con técnica incluida que ya es raro en él) en el segundo cuarto, para destrozar definitivamente el partido en unos minutos fulgurantes. La tormenta perfecta había llegado a Santiago (47-65, min 30). No hubo forma de escapar de ella y el Madrid no iba a soltar a su presa. No al menos hasta dar el partido por concluido mediado el último cuarto. Sergio Rodríguez y los triples de Nocioni acabaron la faena antes de relajarse y darle cuartelillo a Obradoiro que maquilló la derrota en los minutos finales aprovechando la galbana rival. Doncic tuvo otro par de minutos aunque no le dejaran tan buen recuerdo. Se llevó un tapón como recuerdo antes de marchar al Nacional junior donde está arrasando. El Real Madrid se queda a un paso de asegurar el primer puesto de la Liga Regular, con paso firme esperando a la soñada Final Four en Madrid.
Fuente: teinteresa.es
Unicaja 86 – CAI Zaragoza 90: El liderato perdido en Madrid confirmó las dudas que está dejando Unicaja al entrar en la parte final de temporada. En el Martín Carpena recibía a otro rival envuelto en la incertidumbre, el CAI, pero el equipo malagueño nunca demostró estar más sólido en todo el partido. En el primer cuarto estuvo metido en un duelo de alternativas con el equipo maño que le resultaría más productivo al conjunto entrenado por Ruiz Lorente (18-23, min 11). Kuzminskas (13 puntos, 5 rebotes, 16 de valoración) parecía el único argumento sólido en ataque durante los primeros diez minutos. Cuando al lituano se le sumaron Granger y Will Thomas en su labor en posiciones cercanas al aro la situación mejoró para Unicaja que logró asentarse en el marcador durante buena partes del segundo cuarto (40-34, min 18). Quedó sin efecto tras el buen final de periodo de Jason Robinson (19 puntos, 4 rebotes, 21 de valoración) que lideró un 2-8 de parcial que igualó el marcador al descanso. Mejor aún sería el inicio de la segunda mitad para CAI. Bombardeó a un rival que salió relajado en la defensa del perimetro y al que castigó a base de triples. Y en ataque no iban mejor las cosas para los locales, empanados completamente. El 4-18 de parcial que encajó encendía todas las alarmas en el Carpena (46-60, min 26). Unicaja acudió al Granger-sistema para salir del pozo en el que se había metido. Todo su ataque pasó por las acciones individuales de Jayson Granger (28 puntos, 5 asistencias, 4 rebotes, 31 de valoración) que sostuvo las esperanzas de Unicaja aunque la diferencia siempre era holgada para CAI, muy seguro dentro de la zona y con un buen acierto en los tiros libres de Goulding (16 puntos, 5 rebotes, 4 asistencias, 26 de valoración) y Jelovac (17 puntos, 5 rebotes, 22 de valoración) que mantenía a raya a su rival. Pasaban los minutos y la desventaja no bajaba de los siete puntos. La derrota parecía inevitable (68-79, min 37) pero un triple de Granger y dos más de Calebb Green devolvieron la emoción al encuentro con el 81-83 que figuraba en el marcador a falta de 51 segundos. Sin embargo al CAI no le tembló la mano cada vez que acudió a la línea del tiro libre. Y Toolson perdió un balón decisivo que le entregó definitivamente la victoria al CAI para continuar la lucha para entrar entre los ochos primeros. Unicaja no sólo dice adiós casi definitivamente a la primera plaza sino que ve peligrar la segunda.
Fuente: eurosport.yahoo.com
Barça 76 – Estudiantes 62: El Barça continúa atravesando la convalecencia del duro shock que supuso quedar fuera de la Final Four. Contra Estudiantes ofreció una imagen mustia durante la primera parte aunque eso no impidió que dominara con claridad el primer cuarto debido a que su rival resultaba totalmente inoperante durante muchos minutos. Le bastó el acierto de Abrines (16 puntos, 3 asistencias, 18 de valoración) para coger una buena ventaja en el marcador (16-5, min 9). El equipo colegial estaba ofreciendo una actuación bochornosa en el Palau Blaugrana hasta que Aradori calentó la muñeca y sacó a su equipo de la inmundicia en la que estaba revolcándose. La dirección de Jaime Fernández también le dio otro aire a los del Ramiro. Sirvió al menos para reaccionar, sin brillantez pero con un juego más sólido. En cambio la entrada de hombres de banquillo no le vino muy bien a los azulgranas que bajaron demasiado el pistón. El Estu no dudó en aprovecharlo. Bircevic (13 puntos, 7 rebotes, 20 de valoración) se gustó ante la pasividad defensiva de Pleiss, otra vez más. El rendimiento ofensivo ya era de chirigota. Salvo un par de triples de Nachbar, la nada. Lo raro es que con la imagen tan discreta se fuera al descanso con el marcador igualado (29-29, min 20). Tras el descanso, al menos la actitud local varió bastante. Mayor movilidad en ataque que favoreció a los tiros abiertos y cómodos que tan bien le vienen a Doellman (13 puntos, 5 rebotes, 16 de valoración). Sus números no son malos pero nadie puede tener la sensación que esté triunfando. Abrines también aportaba desde el triple pero el Estudiantes respondió de la misma forma, desde la línea de 6’75. Sus triples le permitieron mantenerse cerca en el marcador hasta que llegó el último cuarto. Ahí el desgaste le pasó factura a los de Txus Vidorreta. Huertas consolidó la ventaja con esos detalles tan singulares y originales que son su sello. La balanza se desnivelaría definitivamente en el juego interior. Tomic, errático hasta entonces, apareció en los últimos minutos para imponerse a los pivots colegiales que tampoco estuvieron muy afortunados. Deshaun Thomas aprovechó la falta de un alero fuerte, con la ausencia de Rabaseda en el partido, para rematar el trabajo (71-60, min 38). Otra victoria sin brillo y que no pasará a la historia pero que le sirve al Barça para acercarse a la segunda posición.
Fuente: europapress.es
Gipuzkoa Basket 77 – CB Canarias 76 (tras prórroga): Los malos resultados de las últimas jornadas han acercado peligrosamente a Gipuzkoa Basket. Estaba recolectando papeletas para chamuscarse a final de temporada. Huelga decir que una nueva derrota en casa le colocaría en una situación muy delicada. La necesidad se hizo virtud. Doblas (18 puntos, 9 rebotes, 23 de valoración) se hizo poderoso en el juego interior durante los primeros minutos y llevó en volandas a los locales que se marcharon de inicio con un 9-0 que provocó que Alejandro Martínez pidiera tiempo muerto. Le vino como agua de mayo al equipo de La Laguna porque se asentó en la pista definitivamente para ir recortando diferencias. Los triples de Dani Díez (19 puntos, 14 rebotes, 26 de valoración) mantenían a Gipuzkoa Basket por delante pero los problemas llegaban cuando tuvo que dar descanso Ponsarnau a sus hombres importantes. El banquillo del equipo donostiarra no ofrece muchas garantías y lo acusó. Sikma (12 puntos, 6 rebotes, 3 asistencias, 19 de valoración) aprovechó la ausencia de Doblas para dominar la zona. Beirán (10 puntos, 6 rebotes, 17 de valoración) hizo lo propio en el puesto de alero cuando Dani Díez recuperaba resuello en el banquillo. Un buen trabajo colectivo le permitió a CB Canarias dominar el encuentro a partir de entonces. El sufrimiento se agudizó en los locales en la segunda mitad. Tenía que recurrir a arranques individuales para impedir que CB Canarias se marchara definitivamente. El trabajo duro de Doblas bajo tableros y las acciones de Jordi Grimau (14 puntos, 5 rebotes, 3 asistencias, 21 de valoración) que sigue ejerciendo de revulsivo en los momentos duros eran los recursos pero cada vez que los titulares se cogían un par de minutos de respiro en el banquillo el drama aparecía para Gipuzkoa Basket que naufragaba en pista con los cambios. Los triples de Saúl Blanco dejaron al equipo local en una situación casi crítica (55-68, min 33). Ponsarnau lo fió todo a meter a toda la artillería en pista y que pase lo que tenga que pasar hasta que revienten. Ahí apareció el orgullo y compromiso de los pilares de Gipuzkoa Basket. Dani Díez comenzó la remontada con dos triples. Doblas siguió cargando en la zona hasta la extenuación. La defensa ahora se ejecutaba con el cuchillo entre los dientes. Un triple de Jared Jordan completaba el 14-0 de parcial que adelantaba en el último minuto a los locales. Júbilo en Illumbe que pudo pasar a desolación con la falta cometida sobre Richotti. Sin embargo el escolta argentino falló el segundo tiro libre y el encuentro iba a la prórroga no apta para cardíacos. Tanta tensión no era buena, sobre todo para el juego. Costaba un mundo anotar. Gipuzkoa Basket sudó para labrarse una pequeña renta que Rost enjugó con dos triples. Una buena asistencia bajo el aro le permitió a Dani Díez empatar a 76 a 38 segundos. CB Canarias desperdició su ataque y acabó cometiendo personal sobre Jared Jordan. Prefería la última posesión a defender. Jordan sólo aprovechó uno de sus tiros libres, la decisión en manos de CB Canarias. Rost encontró un triple librado desde la esquina, una posición cómoda. El balón topó con el aro y el triunfo agónico permite a Gipuzkoa Basket seguir fuera de la zona de descenso. Oportunidad desperdiciada para CB Canarias que sin embargo se acerca a una victoria de la zona de playoffs tras su victoria en el derbi canario aplazado que se disputó el pasado jueves.
Fuente: basketinsular.wordpress.com
Otros resultados: Gran Canaria 90 – Valencia Basket 76, Baskonia 77 – UCAM Murcia 85.
El Real Madrid (26-5) mucho más líder y a un paso de asegurar la primera plaza de la Liga Regular. Unicaja (28-7) pierde gas y ve como se acerca peligrosamente el Barça (26-9). Bilbao Basket (19-12) recupera la cuarta posición. Gran Canaria (16-15) cierra la zona de playoffs pero igualado con CAI y con una victoria de ventaja sobre CB Canarias y UCAM Murcia. La zona de descenso la siguen ocupando Manresa (9-22) y un Fuenlabrada (8-23) que necesita casi un milagro para salvarse.
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