En Boston tenían un regalo con el que al principio de temporada ni soñaban y eso se notaba en el ambiente. Lebron James se mostraba como un líder para apagar el ánimo local y hasta que no pudieron correr los Celtics no despertaron. Con cinco minutos jugados los Cavaliers contaban con cinco puntos de ventaja. Los locales ajustaron la defensa sobre Lebron pero la salida desde el banquillo de Tristan Thompson volvía dar problemas a Boston que llegaba al final del primer cuarto a seis puntos. Tras el descanso estipulado Lebron salía con la segunda unidad para sostener el ataque y Mozgov se encargaba de la defensa. Todo funcionaba hasta que llegó el cansancio y los Celtics empataban el partido a la mitad del segundo periodo. El tiempo muerto de Blatt no paró el ritmo local, cierto que el resto de titulares aportaban. Sin embargo Boston no paraba, el partido se endurecía y, con una gran defensa, se ponía por delante faltando tres minutos para llegar al descanso. Blatt volvía a hablar con los suyos y, cuando Cleveland se veía cuatro puntos por debajo, Lebron tomaba los mandos. Primero repartió juego y finalizó el segundo cuarto con seis puntos consecutivos gracias a una falta flagrante. Los Celtics perdían por ocho puntos al descanso porque en estático no encontraban opciones y Lebron les había pasado por encima. En dos minutos de segunda parte los Cavaliers volvían a mostrarse débiles en el balance defensivo y el marcador mostraba un empate. Nuevamente aparecieron los problemas del ataque estático local y cinco triples visitantes ampliaban la ventaja a doce puntos. Boston comenzó a repartir mejor el juego y se colocó a seis puntos con tres minutos por jugar. Blatt no quería problemas y paró el partido. Surgieron dos destellos de JR Smith y Cleveland llegaba a los doce minutos finales con ocho puntos de ventaja. Un cuarto final marcado por los continuos intentos de los locales que se estrellaban ante el desacierto exterior. Los seis puntos de desventaja parecían un muro insalvable hasta que Turner acertó con un triple faltando tres minutos.Fue un instante mágico rotó por dos triples de Love y la buena defensa visitante. El tres a cero bajaba el entusiasmo local. Invitado inesperado: Tristan Thompson (Cavaliers)
Tras dos minutos de cuarto partido Stevens paraba el partido, veía que su equipo estaba blando en el rebote para poder ganar y dar una alegría a los aficionados de Boston. El agujero en la zona con Mozgov se notaba, el balón no circulaba y los Cavaliers tomaban confianza. Se iban por siete puntos a mitad de cuarto y Stevens sacaba los suplentes con nuevas energías. Unas energías malgastadas por Olynyk en desprender el hombro de Love que se iba corriendo a los vestuarios. Esa jugada marcó el despertar de los Celtics, que mantenían el ritmo gracias a Sullinger y un buen movimiento de balón. Se encontraban a diez puntos al arrancar el segundo cuarto. Un cuarto donde Cleveland cierra la defensa con Mozgov y James toma el mando del ataque acompañado de Irving. En seis minutos se abre una idstancia de dieciocho puntos y Stevens llama a sus jugadores.Noventa segundos más tarde era Blatt el que solicitaba tiempo muerto, la ventaja estaba en once puntos. Cleveland se ponía más agresivo sobre el balón y rozaban una ventaja de veinte puntos faltando dos minutos. El partido se volvía más físico y Perkins tiraba a Crowder en un bloqueo, este reaccionaba mal y se solucionaba con una doble técnica aparte de sumar la correspondiente falta flagrante al pivot visitante. Al descanso la ventaja se estabilizaba por encima de los veinte puntos tras un desfile de tiros libres. La tónica de partido físico se mantenía en la segunda parte. Crowder se iba a los vestuarios lesionado tras minuto y medio de juego. Había luchado un rebote con JR Smith abusando de físico y este le había soltado el brazo (razón por la que fue expulsado del partido). Viendo las bajas de dos titulares en los visitantes Boston se vino arriba, pero la reacción apenas duró un minuto. En seguida estaban todos más pendientes de dar recuerdos al rival que de jugar. No fue hasta los cuatro minutos finales que un para de malos ataques visitantes eran aprovechados por los locales para reducir diferencias en el marcador. Con un cuarto por delante la diferencia bajaba de los diez puntos. Era una distancia con la que los Cavaliers se encontraban muy cómodos, les bastaba con impedir que los locales se acercasen a su canasta y contaban con la participación de sus estrellas en el ataque. Todo bajo control pese a que los Celtics lo intentasen con una zona, la eliminatoria era visitante. Invitado inesperado: Imam Shumpert (Cavaliers)
ELIMINATORIA CERRADA: CAVALIERS GANAN CUATRO A CERO
El inicio del tercer partido mostraba a unos Bulls muy serios en defensa que tomaban las primeras ventajas gracias al acierto de Rose y Butler. En cuanto desapareció ese acierto y Milwaukee comenzó a robar balones el partido cambió. Henson se imponía en las zonas y Thibodeau intentaba calmar el partido. Con dos minutos por jugar el equipo local mandaba por cuatro puntos, pero Chicago superaba los problemas con el rebote ofensivo de Antetokounmpo gracias a la aportación de Tony Snell. En el segundo cuarto el griego continuaba mostrándose imparable para los visitantes que seguían cometiendo los mismos errores que en el primer cuarto. Los Bucks rozaban la decena de puntos a favor y Gibson calentaba el partido intentando cambiar la dinámica. En seguida se notó que no funcionaba, a mitad de segundo cuarto Thibodeau tenía que pedir tiempo muerto. Milwaukee mandaba por quince puntos. Las defensas se pusieron más agresivas sobre el balón y, en cuanto el ataque local bajó su acierto, Chicago bajó la diferencia de los dieciocho puntos a once. Kidd trataba de concentrar a sus jugadores de cara a los tres minutos finales de cuarto. Algo que no resultó, nadie podía entrar en la zona visitante sin tener a un rival delante. Por encima el acierto en el tiro de los Bulls dejaba un escandaloso parcial de catorce a cero en menos de tres minutos. Al descanso el marcador reflejaba que a los bucks sólo le quedaban cuatro puntos de ventaja. Los balones perdidos de Carter-Williams y un par de triples de Dunleavy ponían a Chicago con ventaja en el inicio del tercer cuarto. Una ventaja respondida por los Bucks con dureza en la defensa para poder correr. Ambos equipos se alternaban en el liderato hasta que la defensa visitante apretó. Con tres minutos por jugar, los visitantes tomaban el mando con un chispazo de Derrick Rose. Siete puntos de diferencia marcaban la agenda de Kidd. La desaparición de Rose de la pista, junto con la incorporación de Henson, permitían a Milwaukee situarse a tres puntos con el último cuarto por delante. La salida del periodo final mostró a unos Bulls agresivos en las ayudas sobre el balón y acertados en el tiro exterior. En cuatro minutos se ponían diez puntos arriba. Carter-Williams lo intentaba todo, el ataque de Chicago no podía pisar la zona pero dos triples de Snell mantenían la diferencia al entrar en los tres minutos decisivos. Thibodeau decidía para el partido para afrontar los cien segundos finales, contaban con ocho puntos de ventaja y nadie esperaba lo que sucedió en los siguientes cuarenta segundos. Dos triples de Middleton y un ataque visitante donde sólo dos jugadores tocaban el balón devolvían a los Bulls al banquillo. Ahora los triples visitantes no entraban y Middleton anotaba de dos para poner por delante a los Bucks con once segundos por jugar. Rose sacó una falta en una entrada suicida, anotó un tiro libre y Middleton no acertó con un triple con el defensor encima. La prórroga acumulaba más fallos que aciertos y nadie se despegaba. Lógico porque casi todos los lanzamientos se realizaban a seis metros del aro con el defensor encima. Algo que se repitió en las dos posesiones finales del tiempo extra. Un nuevo empate y una nueva prórroga por delante. Los primeros dos minutos de la segunda prórroga marcó la línea de los minutos adicionales. Tres balones perdidos y dos malos tiros de los Bucks permitían a los visitantes escaparse por ocho puntos. A la vuelta del tiempo muerto de Kidd una gran acción defensiva de Noah y una bandeja de Rose ampliaban la ventaja visitante. Todo lo que quedaba era administrar la ventaja para poner el tres a cero en la serie. Invitado inesperado: Tony Snell (Bulls)
El cuarto partido de la eliminatoria comenzó con mucha intensidad defensiva y muchos problemas para los ataques. Los Bulls cerraban la zona mientras Milwaukee ajustaba las líneas de pase para robar el balón. Como además Derrick Rose no cuidaba el balón las primeras ventajas eran de los locales. Chicago iba llegando al partido y los Bucks bajaban la energía. Al terminar el pirmer periodo los visitantes mandaban por cuatro puntos. La salida de los suplentes recobró la energía defensiva de los Bucks que llegaban a todos los tiros, tras cinco minutos mandaban en el marcador. Brooks intentaba descentrar a Bayless pero el parcial seguía adelante, veintiuno a dos en menos de cinco minutos. Los Bulls se dejaban atrapar en las esquinas con dos contra uno y los balones perdidos ya superaban la decena. Dudley colocaba con dos triples la diferencia en doce puntos. Sólo los balones perdidos en los locales, y un triple sobre la bocina de Butler, dejaban el marcador empatado al descanso. Comenzó la segunda parte con otra desconcentración visitante. Rose no dirigía, se perdían balones y Milwaukee se ponía por delante. En cuanto se tuvo cuiada con el movimiento del balón y cerró mejor el acceso al aro, la ventaja pasó a ser de Chicago con un Gasol más integrado en el juego. Eso fue respondido por los locales buscando buenas posiciones de tiro para llegar al último cuarto con una ventaja de dos puntos. La mala lectura en ataque de los Bulls, y el acierto de OJ Mayo, volvían a causar una escapada local en tres minutos del último periodo. El tiempo muerto no daba soluciones al ataque del equipo de Illinois y Rose salvaba la situación individualmente en el ataque. En defensa Bayless se aprovechaba de su pasividad y a cuatro minutos para el final del partido Milwaukee estaba ocho puntos por delante. Digamos que Thibodeau volvió a no solucionar nada con el tiempo muerto pero el minuto siguiente fue de locura favorable a Chicago. Rose en individual, triple de Mayo anulado por estar fuera del tiempo de posesión y un triple de Butler a ocho metros de la canasta; dejaban el partido a tres puntos. Pero ese minuto mágico se fue y OJ Mayo devolvía, con un triple, la diferencia a seis puntos con cien segundos por disputar. En esos momentos los Bucks no acertaron con sus tiros dando opciones a los visitantes. Rose y Gasol empataban el partido faltando treinta segundos. Bayless y Rose intentaban entrar a la zona de manera alocada, uno fallaba el tiro, otro perdía el balón. La velocidad para solicitar tiempo tras el robo de Middleton dejaba una última opción a los locales, tenían poco más de un segundo. Se la jugaron bajo canasta con Bayless aprovechando la espalda de Rose y se llevaron el primer partido. Se volvía a Chicago con tres a uno para los Bulls. Invitado inesperado: El banquillo (Bucks)
En la capital de los Estados Unidos no se esperaban el acierto que los Raptors mostraban en la salida del tercer partido. Dígase los Raptors, dígase DeRozan. Washington movía el balón con soltura hacia sus pivots o Bradley Beal pero no era suficiente. Con su equipo siete puntos por debajo Wittman tenía que frenar el partido a mitad de cuarto, habian encajado veintitres puntos sin realizar malos ataques ni malas defensas. El partido seguía el mismo camino pero a Casey no le gustaba la facilidad anotadora local y pedía un tiempo muerto con dos minutos para cerrar el primer cuarto. Gran error, Drew Gooden despertaba a los Wizards en defensa y DeRozan no podía mantener el ritmo al jugar todos los minutos del cuarto. Toronto encaraba el segundo cuarto con sólo dos puntos a su favor. Diferencia que Patterson amplió de salida dando sentido al esfuerzo defensivo del equipo canadiense. Sin embargo esta reacción fue cortada nuevamente por Gooden. Con el partido igualado, a mitad de cuarto, Wittman apostaba otra vez por poner a Porter de cuatro abierto en ataque. Al mismo tiempo le encargaba frenar el acceso de los Raptors a DeRozan y los Wizards tomaban ventaja al poder correr. Tanto ritmo le metieron que Wall se aceleró demasiado, Wittman le explicó cuatro cosas con un tiempo muerto y Washington mandaba por seis puntos al descanso. En la segunda parte ambos equipos intercambiaban golpes en la zona y, poco a poco, los Raptors recortaban la diferencia. Con diez minutos de cuarto jugados lograban ponerse por delante. Al último cuarto se presentaban a dos puntos de Washington. La tensión crecía, especialmente entre los visitantes a los que les costaba anotar. DeRozan perdía la paciencia tras un tapón de Porter y se ganaba una técnica. Los Wizards querían romper el partido pero los nervios estaban disparados y los errores eran costumbre. Un triple de Paul Pierce ponía con cuatro puntos de ventaja a los capitalinos con seis minutos por jugar. Toronto respondía con un triple y una contra tras robo de balón. Wall tomaba los mandos de Washington y volvían a ponerse por delante, Ross igualaba el marcador con un triple y, faltando cuatro minutos, aparecieron Otto Porter y Paul Pierce. Dos triples del joven proyecto y uno del veterano campeón ponían ocho puntos arriba a los Wizards con dos minutos por jugar. Con las dificultades visitantes para anotar parecía suficiente para llevarse la victoria. Sin embargo Porter perdió un balón para demostrar su juventud y Lowry clavaba un triple a todo o nada para situar el partido a tres puntos con cuarenta segundos por delante. Wall exprimió la posesión hasta los dos segundos finales, le dejó el marrrón a Pierce que clavó el triple con quince segundos por disputar. Los triples visitantes ya no entraron y Washington se ponía tres a cero en la serie. Invitado inesperado: Otto Porter, Drew Gooden (Wizards)
Washington tenía claro que no quería tener que visitar Canada en un quinto partido. Para evitarlo cerró los accesos a su canasta con buenas ayudas y compartía el balón con criterio en ataque. Las ventajas eran locales y tras seis minutos de juego Casey llamaba a sus jugadores. Estaban seis puntos por debajo y Lowry se ganaba una técnica por protestar su segunda falta personal. Salir del tiempo muerto con dos balones perdidos y la tercera falta de Lowry ponía el despegue muy sencillo a los Wizards. Tras una racha de acierto en el tiro exterior de los locales, y con Gortat dominando las zonas, Toronto se encontraba a catorce puntos al abrirse el segundo cuarto. Con la salida de los suplentes llegaban los mejores minutos defensivos de los Raptors pero Gooden acertaba de fuera para tranquilizar al público local. Un parcial de trece a cero en menos de tres minutos comandado por Beal, acercaba la diferencia a los veinte puntos a mitad de segundo cuarto. Toronto intentaba recortar desde la defensa y se situaba a doce puntos, pero Washington se encontraba muy cómodo moviendo el balón y al descanso llegaban con dieciseis puntos de ventaja. El tercer cuarto fue definitivo. Se juntó el acierto de los tiradores locales, con la precipitación visitante y el dominio del rebote de Gortat. La diferencia rondaba los veinte puntos y las instrucciones de Casey se quedaban en nada. Con más de treinta puntos de ventaja, el último cuarto quedaba para sestear. Invitado inesperado: Drew Gooden, Otto Porter, Ramon Sessions (Wizards)
ELIMINATORIA CERRADA: WIZARDS GANAN CUATRO A CERO
Nadie se esperaba el inicio de tercer partido que planteó Brooklyn para su eliminatoria. El equipo local descargaba toda la energía acumulada durante la temporada en defensa y rebote. Era una sorpresa para los Hawks que fallaban canastas sencillas al ver ayudas defensivas inesperadas. Con tres minutos jugados Buldenhozer echaba el freno al ver a su equipo a ocho puntos. La intensidad local continuaba provocando balones perdidos en los visitantes que se pasaban cinco minutos sin anotar en juego. No fue hasta la entrada de los suplentes que Atlanta se centró. Los Nets encontraron dos triples de Bogdanovic y tres malas decisiones de Schroder permitían mandar por quince puntos con el primer cuarto jugado a los locales. En cuatro minutos de segundo cuarto los visitantes redujeron la diferencia a la mitad, era una cuestión de acierto. Hollins sacó a los titulares que desatascaron el ataque y Brooklyn volvía a pegar otro tirón. Un tirón que se quedaba en siete puntos de ventaja al descanso y es que los exteriores no acompañaban a los interiores. El tercer cuarto arrancó con dos balones perdidos locales y Hollins llamó a sus chicos. Un poco más de intensidad y los errores visitantes propiciaban que los Nets siguiesen por delante. Y así iba todo el cuarto; Atlanta trabajaba en defensa, recortaba y cuando podía ponerse por delante ponía su peor juego y vuelta a empezar. Así iba todo hasta que, faltando cuatro minutos para finalizar el periodo, Millsap robó un balón y no falló. Con tres minutos por jugar los Hawks estaban cuatro arriba y Hollins decidía recordar unas cosas a sus chicos. Más carga del rebote, más movimiento de balón y algo de precipitación visitante dejaban un parcial en esos tres minutos de nueve a cero. Malos pases visitantes ante las mejores ayudas defensivas de los Nets y el desacierto en el tiro hacen que la diferencia pase a ser en tres minutos de catorce puntos. Daba igual lo que buscase Buldenhozer con el tiempo muerto, López se hacía grande y los pases a las esquinas para los tiradores eran interceptados. Atlanta hizo un último intento con los titulares pero había demasiada prisa. Brooklyn conseguía su primera victoria en la serie, los Hawks dominaban por dos a uno. Invitado inesperado: Jarret Jack (Nets)
Para el cuarto partido parecía que el ambiente se había relajado en Brooklyn. Ambos equipos mostraban sus cartas en ataque sin poner en excesivos aprietos al rival con la defensa. López dominaba la zona y Deron Williams se aprovechaba. Los Hawks buscaban aprovechar la debilidad defensiva de Deron Williams y circular el balón con velocidad. A mitad de cuarto la defensa visitante subía la intensidad para alejar el ataque local de su aro, Atlanta tomaba una ventaja de siete puntos. Una ventaja que fue respondida al salir los suplentes; Schroder comenzaba a perder balones y fue aprovechado por Jack y López para poner a los Nets con una mínima ventaja al final del primer cuarto. En noventa segundos de segundo periodo quedaba claro que Schroder no podía llevar al equipo, sus nervios le hacían tomar malas decisiones y, viendo que Jack llevaba las riendas del partido, Buldenhozer lo paraba todo con el equipo ocho puntos abajo. Para aumentar la inquietud de los visitantes Horford se iba a los vestuarios para ver el estado de su meñique. Sin embargo la defensa comenzó a leer mejor el ataque y los Hawks se ponían por delante. Hollins acertó poniendo a López y Williams de nuevo en pista y era Buldenhozer el que tenía que solicitar el tiempo muerto. Subía la agresividad en la defensa de ambos equipos; los ataques sufrían, se recurría al triple y la velocidad para superar esos problemas. En ese ritmo Atlanta sacaba ventaja y Hollins llamaba a sus jugadores. Brooklyn llegaba al descanso con seis puntos que recuperar. Teague comenzaba la segunda parte dirigiendo con acierto y la única respuesta local era López. Con un par de balones perdidos visitantes parecían despertar su compañeros pero Teague recomponía a su equipo. Con ocho minutos de segunda parte los visitantes cogían una docena de puntos a su favor. Una pequeña relajación defensiva con los suplentes en pista permitía a los Nets dejar la diferencia en ocho puntos para encarar el último cuarto. Naturalmente los locales salían con el cuchillo entre los dientes en defensa para estos minutos decisivos. Lo sorprendente era ver cuatro jugadores bajos en los locales y a Williams dirigiendo a los suyos con maestría aprovechando los espacios. Con una racha de triples sin fallo Brooklyn lograba empatar el partido en tres minutos. Y nadie frenaba, Williams acertaba en sus decisiones y la defensa colapsaba el ataque visitante. Buldenhozer se desesperaba viendo que, tras seis minutos, eran superados por seis puntos. Para solucionar los problemas en ataque ponía a Antic y consiguió su objetivo, abrir la defensa. Como además el acierto de los Nets era menor los Hawks se ponían por delante con dos minutos por jugar. En esos momentos, en que el ánimo local podía decaer, Williams clavó un triple desde nueve metros (con el defensor encima) en el último segundo de posesión. Así despertaba a la afición y devolvía el liderato local al marcador. López ampliaba la ventaja y se entraba con una ventaja de tres puntos al minuto final. Un minuto que permitió ver que Atlanta se sabía la lesión, se cerró sobre Williams y Lopez en dos posesiones y Millsap dejaba un mate para empatar el partido. Williams volvía a fallar y había un tiempo muerto visitante. Los seis segundos que quedaban Millsap los malgastó botando para evitar a su defensor, empate y cinco minutos extra. Korver y el rebote ofensivo eran las armas de cada equipo en el inicio de la prórroga. Nadie se despegaba hasta los cien segundos finales; un gran movimiento de balón local y una precipitación de Teague colocaban a Brooklyn tres puntos por delante en el minuto final. En ese momento los Hawks eligieron a Korver como salvador olvidando la zona. Tres posesiones terminadas en sus manos con tiros forzados fallados dejaban veinte segundos en el reloj para los Nets, la falta era obligada. Todo se terminó desde el tiro libre, la victoria local ponía el empate a dos en la eliminatoria. Invitado inesperado: Alan Anderson (Nets)
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3 Comments on "PRIMERA RONDA EN EL ESTE 2015. CAPITULO II"
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Pues ya tenemos dos semifinalistas en el Este. Uno, el esperado; el otro, WAS, ha barrido contra pronóstico. Cosas de cada elminatoria: 1)CLE-BOS: La sanción a Smith y la lesión de Love (Olynyk debió soltarle antes, pero no me pareció juego sucio) pesaran y mucho en segunda ronda, pero CLE puede descansar tranquilo, sabiendo que CHI (y no digamos si pasa MIL) va a llegar agotado a la siguiente serie. 2)CHI-MIL: eliminatoria muy peleada contra pronóstico. Thibodeau no está muy brillante que digamos, Butler amaga con cargar con las culpas pero aquí los que tienen que dar el punto “de… Read more »
Soluciones de Chicago: McDermott titular por ser más tirador que Dunleavy (aunque sólo juegue los 6 minutos de inicio), Dunleavy desde el banco estará más cómodo con Mirotic generando espacios y Butler o Snell sobre Carter-Williams. Entre que los Nets juegan más en equipo (y las estrellas quieren demostrar) y que los tiradores están con el cansancio de fin de temporada. En Toronto la temporada ha sido larga, Lowry ha cargado con demasiado juego. Johnson es el perfecto sexto hombre pero no debe ser titular y Ross ha sido carcomido por la desconfianza de Casey. El primero en salir será… Read more »
-Tema Chicago: Mc Dermott está señalado por Thibodeau, ya sea porque no le gusta o porque por sistema los novatos (Butler, Snell, Mirotic porque tiró la puerta abajo) en su primer año con él nunca juegan. Lo poco que se le ha visto me ha gustado, pero me parece que tendrá que venir otro entrenador para que sea importante, una pena porque en la uni era una estrella. Está claro que algún ajuste tiene que hacer, lo de Carter-Williams es problemático porque no es sólo él, Kidd juega con 5 hombres por encima de los 2 metros con todas las… Read more »