Acabada la primera jornada de Copa ya tenemos completada la primera semifinal. No hubo sorpresas y los dos cabezas de serie, Barça y Unicaja, avanzan en el torneo para disputarse entre ellos un puesto en la final del domingo. Al equipo azulgrana no le resultó un camino de rosas. Dominó durante casi todo el partido pero no fue capaz de romperlo en ningún momento pese al gran acierto en el tiro exterior, que ya tuvo en los dos encuentros anteriores. Valencia Basket fue un rival competitivo que rindió al nivel digno de una buena plantilla como la que posee pero le fallaron algunos detalles para romper los pronósticos. Unicaja dominó con más claridad en su eliminatoria, donde partía como claro favorito, en cuanto supo controlar el correcalles en el que le quiso meter Bilbao Basket. Tuvo más acierto desde fuera en el festival de triples lanzados en el que se convirtió el partido en algunos momentos y mayor sangre fría para jugar con firmeza los minutos finales y decidir el encuentro en el momento justo. La competición propicia a las sorpresas, aunque cada vez menos, cumplió las exigencias del guion en su primer día. Veamos si llega lo inesperado en el segundo.

Barça 85 – Valencia Basket 80: Se alzaba el telón a esta nueva edición de la Copa y como suele ser habitual en la mayoría de los comienzos los errores y falta de tino fueron protagonistas durante los primeros minutos. Fueron necesarios unos minutos para que se engrasaran las muñecas. Las alternativas en el marcador eran la tónica reinante con el panorama del encuentro por definirse. Sato y Aguilar acaparaban toda la anotación de Valencia Basket. La marcha de ambos al banquillo la notó mucho su equipo. El Barça cogió la delantera tras un 9-2 de parcial aprovechando unos instantes de zozobra de su rival en ataque. Pese a que Dubljevic (19 puntos, 6 rebotes, 18 de valoración) recogió el testigo anotador con diez puntos consecutivos, Hezonja respondió con los primeros destellos de su inagotable reserva de brillantes recursos, incluido un triple espectacular desde 8 metros sobre la bocina de final de primer cuarto (28-21, min 11). Iban llegando los problemas para Valencia Basket. La tercera falta cometida por Dubljevic y entrar en bonus en apenas tres minutos del segundo cuarto no son buenas noticias pero encontró una salida aceptando el intercambio de triples con los azulgranas. El encuentro había entrado en una fase de acierto demoledor de ambos desde la línea de tres. Los triples le permitieron al equipo valenciano hacer la goma pero no remontar. Valencia Basket tenía dos problemas que le creaban serios apuros. Por dentro era inferior al Barça, sacaba poco provecho en la zona. Los bases no estaban funcionando. Nedovic siempre tomaba decisiones erróneas. Sus malas ideas las usó el rival para estirar la diferencia. Van Rossom, falto de ritmo tras un mes lesionado, hacía lo que buenamente podía. A Vives aún le quedan grandes estos envites. Con todo, el daño tampoco era mucho al descanso (44-38, min 20) pero quedaba la sensación que el Barça podía romper el partido sólo con aumentar la intensidad unos minutos. También le podía valer su impresionante racha desde la línea de tres. Le favoreció en el intercambio de canastas que se produjo en los primeros minutos de la segunda mitad. Los jugadores azulgranas eran demoledores desde el triple. Abría brecha poco a poco a golpe de lanzamiento de tres (57-47, min 25) pero Valencia Basket siguió aferrado pese al bombardeo. Mejoró en defensa y encontró por momentos algo de oxígeno por dentro con Loncar. El Barça perdió consistencia a final de cuarto y su rival, que incluso ganó el tercer periodo, se mantuvo vivo y con opciones (62-59, min 30).

Fuente: mundodeportivo.com

Abrines (16 puntos), que estaba pasando por muchas dificultades defendiendo a Sato y ya estaba con cuatro faltas, cortó la reacción con dos nuevos triples. Continuaba el castigo desde el tiro de tres. El porcentaje, 13/20, resulta desmoralizador para cualquiera. Una bandeja de Navarro ponía la máxima diferencia del partido (70-59, min 32). El partido estaba al borde de la ruptura definitiva. Parecía lógico que Valencia Basket no tardara en caer pero continuó siendo un equipo muy pesado. Otra vez asomó la cabeza con una mayor intensidad en defensa. Al Barça le faltó algo de continuidad para consolidar la ventaja y su rival se mantuvo vivo recurriendo a la garra y el tiro exterior. Regresaba la amenaza valenciana pero el Barça mantuvo la sangre fría. Aprovechó los errores rivales y jugó con buen criterio para los pivots, metiendo balones a Tomic (14 puntos, 7 rebotes, 21 de valoración) y Doellman (16 puntos, 5 rebotes). Podía valer con dejar pasar el tiempo y jugando con cabeza pero tampoco se dio el caso. Valencia Basket siempre regresaba. Un triple, una jugada con garra, una buena defensa. Todo ello le valía para continuar la pelea hasta el final, hasta el último aliento. Una canasta muy trabajada de Dubljevic, tras dos rebotes ofensivos, ponía en el marcador un 82-78 inquietante para el Barça. Los nervios aumentaron más si cabe en la siguiente jugada cuando Huertas, que estuvo a punto de perder el balón un segundo antes, enviaba un pase nefasto a la rubia sentada en la segunda fila. Oportunidad para meter el miedo en el cuerpo y conducir el encuentro a un final de infarto que no se esperaba. Valencia Basket tuvo dos triples para conseguirlo. El aro escupió sus opciones de victoria. Tomic certificaría el triunfo anotando un tiro libre y capturando el rebote ofensivo tras errar su segundo lanzamiento. Tuvo que sudar hasta el último momento ante un rival cabezota que no dio su brazo a torcer pero el Barça terminó cumpliendo los pronósticos para convertirse en el primer semifinalista.

Fuente: eurosport.yahoo.com

Unicaja 86 – Bilbao Basket 78: Para afrontar el partido Unicaja y Bilbao Basket instalaron los cañones de larga distancia con pólvora ilimitada porque no miraron otra cosa que la línea de tres durante muchos minutos. Cada ataque acababa con un triple al menos, un exceso al que no le pusieron coto durante el primer cuarto. No existía otra cosa que la línea de tres, como si estuviera prohibido lanzar más cerca. A Bilbao Basket le vino bien en un principio (6-11, min 5) pero el panorama cambió con la entrada de Granger, que había empezado el partido en el banquillo. Revitalizó el juego de Unicaja, veloz pero bien controlado. Se unió al festival de triples lanzados pero con mucho más tino que todos los demás. Infalible desde la línea de tres, Granger (18 puntos, 4 asistencias, 22 de valoración) le daba la primera ventaja cómoda a Unicaja (29-21, min 14). Sin embargo, cuando lo más conveniente era controlar un poco más el ritmo de juego, el equipo malagueño se enfrascó en el descontrol que generaba el ritmo pasado de vueltas de Bilbao Basket. Se contagió para confundir la velocidad con el tocino, recurriendo de nuevo al tiro de tres sin ton ni son y precipitándose acelerando los ataques cuando el partido no lo requería. Los Hombres de Negro se manejaron mejor en el caos y entre Mumbrú y Marko Todorovic (12 puntos, 5 rebotes, 17 de valoración) igualaron de nuevo el partido tras un parcial de 4-12. La zona 1-3-1 que había planteado Sito Alonso molestaba lo suyo al ataque malagueño que encontraría el desahogo en Kuzminskas (15 puntos, 7 rebotes, 24 de valoración) en los últimos instantes de la primera parte. Los 13 puntos que anotó el alero lituano hasta el descanso sirvieron a Unicaja para marcharse por delante al finalizar el primer tiempo. Mucha igualdad que saltaría por los aires en sólo un minuto, el primero del tercer cuarto. 8-0 de inicio en una salida fulgurante de Unicaja que le ponía el partido de cara a los de Joan Plaza (49-37, min 21). Sito Alonso se vio obligado a pedir tiempo muerto con toda celeridad. Su equipo reaccionó al súbito golpe pero no desarmó a su rival que intercambió canastas con Bilbao Basket dentro de la zona. Los Hombres de Negro eran incapaces de romper la dinámica, de salir del colchón de puntos que Unicaja situaba entre los 7 y 11 puntos. Pasaban los minutos, se consumía el tercer cuarto y la marcha del encuentro seguía siendo muy cómoda para el equipo malagueño. Bilbao Basket buscó reducir diferencias recurriendo al tiro de tres y con dos bases en pista. Esta fórmula funcionó mucho mejor. Acompañado por Raúl López, Colom (17 puntos, 7 rebotes, 3 asistencias, 17 de valoración) jugó más suelto. Los triples de Raúl López y Bertans (17 puntos) y la lucha bajo tableros de Latavious Williams acercaron a Bilbao Basket en el marcador (75-70, min 34). Regresaban la incertidumbre y la emoción pero no perdió la calma Unicaja. Tras el tiempo muerto pedido por Joan Plaza, sus jugadores buscaron el juego interior y no les fue nada mal. Poco a poco la diferencia se estiraba otra vez. Los triples no le entraban ya a Los Hombres de Negro y las opciones de triunfo se esfumaban lentamente hasta que quedar disipadas por completo con un triple de Markovic a falta de 1:48 que ponía una distancia insalvable en el marcador (84-74, min 38). Unicaja sólo tuvo que gestionar con calma los instantes finales para regresar a una semifinal copera seis años después.

Fuente: eurosport.yahoo.com

Y DIGO YO…:

• Uno de los aspectos más destacados de esta Copa es la ausencia del Baskonia, un clásico al que se le echa mucho de menos en Las Palmas. Sin embargo que el equipo vitoriano no esté presente en el torneo no significa que no haya ni rastro de él. En el primer partido se escucharon gritos de “¡Baskonia, Baskonia!” procedentes de seguidores baskonistas que han viajado para asistir a la Copa. No estará su equipo pero es una afición muy entendida con gusto por el mejor baloncesto. Por eso es tan especial.
• La aportación de Pepu Hernández como comentarista de TVE en la Copa fue elogiada y aplaudida por los aficionados en 2014. Este año se repite experiencia con otro antiguo seleccionador como invitado. Sergio Scariolo no es la alegría de la huerta pero deja comentarios técnicos muy interesantes. Algo que se agradece cuando hace años que el periodismo deportivo reduce los comentarios a tópicos y chascarrillos en detrimento de la docencia táctica y mayor entendimiento del juego.
• Durante las lesiones de gran parte de su juego exterior, el Barça las pasó canutas cuando tenía que atacar defensas muy cerradas desde el perímetro. Los porcentajes eran desoladores para un equipo de las más altas aspiraciones como el Barça. Ha sido regresar los tiradores y cambiar completamente la historia en los últimos partidos. 16/32 ante Galatasaray, 13/22 ante Joventut y 13/21 contra Valencia Basket. El tiro exterior azulgrana ha llegado con las muñecas engrasadas a la Copa.
• Slaughter jugará la Copa del Rey con el Real Madrid tras conseguir ese famoso pasaporte Cotonou que elimina su condición de extracomunitario. Ignoro el país pero me imagino las risas si se le pregunta al bueno de Marcus que lo sitúe en el mapa. Bromas aparte, no entiendo cómo aún no se le ha ocurrido a las mentes pensantes alguna solución para evitar estas nacionalizaciones de pantomima. Prefiero que se permitan seis o siete estadounidenses en una plantilla antes que recurrir a estos disparates.