La amarga resaca del triste final de la selección española en el pasado Mundobasket y el futuro de su banquillo aún están dando mucho que hablar mientras nos encaminamos al inicio de una nueva temporada. Otra vez sin darnos cuenta ya estamos metidos en harina porque llega el primer título oficial de la nueva temporada 2014-15, el aperitivo al inicio del curso en la ACB. Es tiempo de Supercopa, la competición con la que echa andar cada año el baloncesto español aunque al final casi nadie se acuerda de incluirla en el haber de quien la consigue cuando llega el momento de revisar la temporada. Se celebra en el Buesa Arena, en Vitoria, el 26 y 27 de septiembre y reúne de nuevo a cuatro equipos en busca del primer entorchado de la campaña: Barça, campeón de Liga; Real Madrid, campeón de Copa y defensor del título; Valencia Basket, campeón de Eurocup; y Baskonia, equipo anfitrión. Un cartel con grandes nombres y alto nivel que será aderezado por el toque de espectáculo que pone el concurso de triples, reminiscencia que permanece del antiguo All-Star.

Tras la breve introducción llega el momento de analizar las dos semifinales de esta Supercopa 2014-15:

REAL MADRID – VALENCIA BASKET:

Fuente: encestando.es

El Real Madrid estrena la temporada con la necesidad de despejar dudas y nubarrones. La pasada campaña se presentaba como la definitiva llegada al Olimpo de un equipo blanco arrollador y espectacular pero el dramático e inesperado cierre, cayendo en la final de la Euroliga ante Maccabi y en ACB ante el Barça, provocó un terremoto imposible de prever un par de meses antes. El gran damnificado fue Pablo Laso debido a su gestión de la plantilla y falta de recursos para afrontar de nuevo las finales. Su crédito está bajo mínimos dentro del club y entre muchos aficionados que acabaron con lo moral por los suelos. Los fichajes tampoco consiguieron recobrar el ánimo. Hacían falta un pivot dominante y un alero de gran nivel europeo y no se colmaron las expectativas. Nocioni es un jugador contrastado y que bien podía ser ese gran alero pero todo indica que seguirá jugando como ala-pivot, donde va perdiendo importancia con los años. Maciulis es un jugador apañado, un buen suplente, pero no más. KC Rivers está a caballo entre escolta y alero y está por ver si añade trabajo a su faceta de tirador. Y Campazzo es un prodigio de técnica y descaro en el puesto de base pero es una incógnita si ofrecerá su repertorio en una competición tan exigente como la ACB. Los refuerzos no tranquilizaron a gran parte de la afición madridista, abrumada con los rutilantes refuerzos que llegaban a la casa azulgrana. Tampoco la pretemporada, gris aunque apenas ha dispuesto de toda la plantilla, ha ayudado a subir el ánimo. El fichaje a última hora de Ayón, para cubrir el hueco en el juego interior, puede calmar las aguas de una hinchada ávida de nombres importantes en un año vital para el futuro y viabilidad del proyecto madridista. Todo esto no quiere decir que la plantilla del Real Madrid sea una piltrafa, todo lo contrario. Conserva un juego exterior temible. Ya no está Mirotic pero los Llull, Rudy, Sergio Rodríguez o Carroll impresionan a cualquiera. Nocioni y Rivers se unen a una batería devastadora desde el perímetro. Ayón, tras no cuajar en su periplo en la NBA, debe convertirse en el gran referente interior. No es un 5 puro pero su juego se adapta como un guante al veloz ataque del Real Madrid. Alivia los males de la irregularidad de Bouroussis o la incertidumbre sobre si Mejri acabará de explotar o no. Siempre estará Felipe Reyes por si hay que lanzarse con el cuchillo entre los dientes. Hay mimbres pero ahora mismo le urge al Madrid recuperar un estado de ánimo alicaído para fortalecer un proyecto y un estilo de juego que ha estado cerca de derrumbarse este pasado verano.

Fuente: gentevalencia.com

Valencia Basket vivió una temporada de ensueño la pasada campaña, convirtiéndose en una alternativa real de poder como lo fuera el Baskonia durante muchos años. Podía haber muerto de éxito, desmembrado por los grandes de Europa, pero el equipo taronja está trabajando muy bien durante las últimas temporadas y ha vuelto a hacerlo en esta ocasión. Se marchó Doellman, la gran figura y MVP de la Liga Regular. También abandonaron el equipo Lafayette, otra pieza importante, y Triguero, recambio útil dentro de la zona, pero ha sabido recomponerse. El mayor éxito ha sido retener a gran parte de la base del conjunto valenciano, en especial Romain Sato que renovó por dos temporadas desoyendo los cantos de sirena de los grandes equipos de Europa. Los refuerzos están a la altura de un equipo ambicioso, con visión de presente y futuro. Harangody, un 3-4 muy fuerte con trayectoria en la NBA, y Kresemir Loncar, un pivot muy duro, refuerzan enormemente el juego interior que tanto sufrió por las lesiones la anterior temporada. Buycks está llamado a convertirse en una de las sensaciones de la temporada y cubre las bajas en un juego exterior que resultó temible el pasado curso. Guillem Vives, uno de los bases más prometedores del baloncesto español y pretendido por los grandes futboleros, marca la apuesta de futuro de Valencia Basket. Todos ellos se unen a los Sato, Ribas, Dubljevic, Rafa Martínez, Aguilar, Van Rossom, Lishchuk y Lucic para formar una plantilla muy interesante y competitiva. Puede ser algo más que un animador que represente una china en el zapato de Real Madrid y Barça. En pretemporada ya le dio un severo revolcón a un Madrid con muchas ausencias y lleno de canteranos pero puede resultarle igual de peligroso a un equipo madridista al completo como bien pudo comprobar la pasada temporada. Perasovic ha imprimido un sello de equipo intenso atrás y alegre en ataque que convierte al Valencia Basket en un rival temible. Sólo la baja de Dubljevic nubla un tanto el panorama pero tiene recursos de sobra. Ahora mismo, en teoría, la diferencia con el Real Madrid es menor que la del equipo blanco con el Barça. Se avecina un partido a cara de perro y muy incierto. Test muy duro para comenzar la temporada.

BARÇA – BASKONIA:

Fuente: blogdebasket.com

El Barça vive en un estado de ánimo muy diferente al de su eterno rival. Pasó de la perspectiva de una temporada para olvidar que significaba el final de una etapa, de la histórica humillación en el clásico de semifinales de Euroliga y los pitos del Palau Blaugrana en el cuarto partido de semifinales ACB a coronarse campeón de Liga ante el favoritísimo Real Madrid. Del fracaso al éxito en apenas dos semanas. Este nuevo título liguero, casi inesperado, reforzó la figura de Xavi Pascual del que jamás se puede dudar que forma un equipo competitivo al extremo aunque las circunstancias no sean las mejores. El optimismo no ha parado de crecer desde la consecución de la Liga ACB. Los nuevos fichajes han contribuido a declarar el estado de euforia. Doellman era la joya que perseguían todos los grandes de Europa y ha terminado recalando en Can Barça. Destinado a ocupar el papel que representaba el mejor Lorbek. Satoransky añade juventud, velocidad y poderío físico al puesto de base, todo sumado a la madurez que alcanzó la pasada temporada. Pleiss suma muchos centímetros en la zona para formar junto a Tomic un juego interior de gran altura. Sólo el alero Deshaun Thomas, que sustituye a Papanikolau que emprendió la aventura en la NBA sin saber nadie aún qué demonios pinta allí, representa una incógnita entre las nuevas incorporaciones. Una plantilla larguísima, que cuenta con 15 jugadores si incluimos a los jóvenes Hezonja, el repescado Eriksson, Hakanson y Sulejmanovic. Además ha regresado un Navarro a un nivel alto, lo que significa todo para una plantilla ya poderosa con los Oleson, Huertas, Tomic, Nachbar, Lampe y un Abrines que sigue subiendo peldaños en su evolución. Quizá la mejor plantilla de Europa para afrontar con garantías de éxito todas las competiciones. Si Xavi Pascual continúa sacando todo el jugo de lo que dispone las posibilidades de triunfo son elevadas, el potencial es casi inmejorable.

Fuente: zonadostres.com

Baskonia vive un periodo de reconstrucción. Van quedando atrás aquellos años en los que se convirtió en la tercera vía, la pesadilla de los grandes futboleros. La cuesta abajo del equipo vitoriano ha sido constante en las últimas temporadas y su lugar privilegiado en la ACB ha sido usurpado por Valencia Basket. La decepcionante temporada pasada, donde estuvo en peligro incluso la plaza en los playoffs, obligó a Querejeta a dar otro golpe de timón. Scariolo fue destituido y su puesto lo ocupa su compatriota Marco Crespi el Histerias. Quien le recuerde de su paso por Caja San Fernando en 2001 sabrá muy bien la razón del sobrenombre. No sé si habrá espectáculo en la pista pero en el banquillo está asegurado. La renovación en la plantilla ha sido muy profunda. Abandonaron el equipo piezas vitales como Nocioni o Pleiss junto a la mayoría de los fichajes de la temporada anterior. Sólo San Emeterio, Heurtel y Causeur continúan como pilares importantes del equipo baskonista. El equipo es casi nuevo. La marcha de Pleiss se ha suplido con Tillie. El francés no tiene la presencia intimidatoria del pivot alemán pero fuerza y potencia le sobran como demostró en Murcia. Le acompaña el estadounidense Colton Iverson que no cuenta con muchas referencias. Para el puesto de alero el equipo vitoriano puso sus miras al otro lado del Atlántico, con dos jugadores rebotados de la NBA: el georgiano Shengelia, que pasó de puntillas, y Ryan Gomes, con una dilatada carrera en la mejor liga del mundo. En el perímetro acompaña a Heurtel el veterano Doron Perkins, que no volvió a ser el mismo desde su grave lesión sufrida hace 4 años en Maccabi, y las incógnitas que representan Orlando Johnson y Davis Bertans. Un Baskonia muy renovado con todo por hacer. No le resultará sencillo saltar de la segunda fila en la que mora en estos momentos para acercarse a aquellos gloriosos tiempos no tan lejanos pero que se van difuminando con el paso de los años. Un encuentro de primeras con el Barça no es lo mejor para un equipo en construcción. Pese al apoyo que tendrá de su público no cuenta con muchas opciones de inquietar a los azulgranas.

CONCURSO DE TRIPLES:

El año pasado ya pudimos disfrutar del regreso del concurso de triples a la Supercopa para aportar esa dosis de fiesta y espectáculo heredada del All-Star. El retorno no pudo ser más impactante. La victoria de Josh Ruggles, el adolescente estadounidense que se convirtió en un fenómeno en Youtube por su impresionante acierto en el triple, imponiéndose a los tiradores más consagrados de la ACB provocó que más de uno se frotara los ojos. Ruggles vuelve a estar presente en Vitoria para defender su título. Esta vez los francotiradores profesionales están sobre aviso. Carroll, Abrines, Sato, Corbacho, Baron, Bertans y Andjusic tratarán de evitar un nuevo collejón de este fenómeno de 17 años.

Fuente: encestando.es