Bueno, antes de iniciar esta crónica, quisiera hacer una fe de erratas que ya comenté en la taberna… pero que no cuesta repetir y que además, visto lo visto hoy, ha lugar. En la crónica anterior puse a Webber de inútil para arriba debido a la lamentable salida que hizo. Si bien su historial de salidas no es el mejor, en la carrera de Australia tenía justificación: se rompió algo de la ECU (Unidad de control del motor) que hizo que el sistema de salida no funcionara bien, además de impedirle la utilización del KERS. Teniendo eso en cuenta, me la envaino, a la par que digo que Webber es el mejor beta tester que puede tener Red Bull.

Y ahora sí… vayamos al GP de Malasia 2013, que pasará a los anales de la historia como “Multi21″… aunque no adelantemos acontecimientos. El Gran Premio se inició el viernes con dos sesiones de entrenamientos libres que venían a confirmar que Raikkonen seguía muy fuerte y sobre todo, que es el que mejor maneja los neumáticos ahora mismo. No obstante, todo esto ocurrió sobre seco. El sábado, sin embargo, la clasificación, o al menos la Q3, que es donde se decide el meollo de la cosa, fue sobre mojado, y aquí fue una vez más Sebastian “frigodedo” Vettel quién logró la pole, y van… Los dos Ferrari clasificaron segundo y tercero, con un Massa quedando otra vez por delante de Alonso esta temporada. Solo una décima, nada de otro mundo… pero teniendo en cuenta que lo normal hasta ahora es que Alonso le sacara 4 o 5 décimas… pues el cambio es significativo. Felipe entiende estos neumáticos mejor que los anteriores, y esto puede ser muy importante para Ferrari. Por detras de los Ferrari se colocaba Hamilton, que está demostrando que entiende bastante bien al Mercedes… y que no ha sido un error tan grave como cabía esperar el irse de McLaren. En quinta posición se colocaba un descontento Mark Webber, molesto por no haber tenido tiempo para dar una vuelta más. Ay Mark, si tú supieras lo que te esperaba… ¿Y el lider del Mundial? Pues Raikkonen acabó séptimo, pero por una de esas decisiones que tiene la FIA, le quitaron inflatable water slide tres posiciones para salir finalmente en décima posición. Me gustaría destacar a parte de todo esto a Jules Bianchi, que con un Marussia le logró meter más de un segundo a Charles Pic, que lleva un Caterham (a priori superior) y un año más de experiencia. Este chico no es manco (por algo está en la academia de pilotos de Ferrari), el problema es que no tiene coche para demostrar gran cosa.

Con la parrilla decidida, se presenta la carrera del domingo. Y, cosas que tiene el correr en Malasia a la hora que corren, justo cuando se abre el pit-lane empieza a caer la típica lluvia tocacojonera que odian los ingenieros, que no deja la pista ni para slicks ni para intermedios. En la tercera curva se ve una procesión de pilotos saliéndose por lo verde, cual dirigente del PP visitando el despacho de Bárcenas. No había prácticamente uno que se escapara. Es precisamente esta curva la que condiciona la elección de los neumáticos mixtos.

Con estas condiciones se apagan lo semáforos. Si bien a priori se esperaba que los dos Ferrari se comieran a Vettel en la salida, lo cierto es que el Red Bull tampoco sale mal (si no me equivoco llevan un sistema de salida desarrollado por Nissan, que es el que desarrollaba el sistema de salida de ese Renault con el que Alonso nos dejaba anonadados). Webber sale también sorprendentemente bien y se coloca segundo tras la segunda curva. Precisamente en esta segunda curva Alonso toca el difusor trasero de Vettel, un ligero toque que sin embargo hace que se le quede el alerón delantero colgando. Situación crítica. En Ferrari tienen un minuto para decidir qué hacer. Viendo el tiempo de vuelta que seguía marcando Alonso, y que podía mantener a Webber… o al menos no perder una minutada, deciden arriesgar y mantenerlo en pista. ¿Resultado? En la frenada de la primera curva, justo al pasar un bache el alerón se descuelga con la mala fortuna que se queda debajo del coche, levantando las dos ruedas delanteras, por lo que deja a Alonso sin dirección y sin 2 frenos. Excursión a una escapatoria con grava (de las pocas que tienen los Tilkódromos) y carrera fuera. A partir de aquí se pueden hacer todas las lecturas que se quieran sobre lo acertado o no de la estrategia de Ferrari. Yo ya he dejado la mía en la bitácora, creo que no es menester repetirla.

Con Alonso fuera, los dos Red Bull se colocan en primera y segunda posición, seguidos por los dos Mercedes de Hamilton y Rosberg, ya que Massa ha vuelto a su más insulsa versión, en la que ni está ni se tobogã inflavel le espera. En estas que Vettel, en torno a la vuelta 6, decide entrar y poner los slicks. Las pasa putas en el primer sector, peleando con otros vehículos… pero al final de la vuelta enseña que es la estrategia correcta y que prácticamente todos siguen. Cuando todos han entrado a cambiar neumáticos, tenemos a los dos Red Bull otra vez en cabeza… pero esta vez es Webber el que está por delante de Vettel. La diferencia es que Vettel está con blandos y Webber con duros que tienen además dos vueltas menos.

No obstante, antes de que se estableciera este cierto equilibrio en la carrera, hemos tenido una ronda por boxes de lo más divertida. Abre la veda Hamilton, que decide ir a cambiar las ruedas de su Mercedes en el box de McLaren . Este tio es sadomasoquista. La de cagadas que le hicieron el año pasado en box… y va el tio y vuelve a por más. Luego Pic y Vergne (creo) han tenido un encuentro erótico festivo en boxes. Mientras uno salia el otro entraba… y se han dado. Y por si fuera poco… la pistola de Force India se ha puesto gilipollas y ha acabado arruinándole la carrera a los dos pilotos, que tenían pinta de entrar en los puntos. Un cacharro de no más de mil euros le ha costao unos cuantos milloncejos a los indios. No obstante, parece que tienen un buen coche y que pueden tocarle los bowlings a más de uno.

Tras la esquizofrenia de los boxes, la carrera en la cabeza parece que se ponía interesante. Vettel se iba a acercando poco a poco a Webber, y lo mismo hacía Hamilton con Vettel. Llegado al punto en el que Vettel tiene casi a tiro a Webber, este dice por radio “quitádmelo de delante. Soy más rápido”, supongo que en clara alusión a Webber. Por radio lo tranquilizan, le piden que mantenga el ritmo, mientras que le piden a Webber que aumente el ritmo unas 5 décimas. Dicho y hecho, Webber acelera y se vuelve a separar de Vettel, que a su vez se dedica a conservar neumáticos para poder intentar alcanzar la victoria en el último stint. Hamilton se estaba acercando a Vettel hasta que sus neumáticos desfallecen.

Por esos momentos de la carrera tenemos una nueva cagada de McLaren en boxes, y van… Le dan la salida a Button con una rueda suelta, que está a punto de salirse del buje y liar la de Saint Quentin. Si bien sería fácil hacer una coña sobre este accidente… la verdad es que uno ha estado unas cuantas veces en la calle de boxes y sabe que la que puede liar una rueda suelta circulando por alli a 40 km/h es de todo menos gracioso. Esa rueda engancha a un mecánico en la pierna y lo deja bien jodido. Si bien me posiciono muchas veces en contra de tanta medida de seguridad, sobre todo en la pista con las escapatorias de asfalto y tal… en el carril de boxes y dentro de los boxes mi posición es la contraria. En primer lugar porque en la pista están unos tíos que se ganan la vida arriesgándola… y por eso cobran. Pero en el carril de boxes hay muchas otras personas. Además de los mecánicos y los miembros de la FIA, hay fotógrafos, bomberos, personal sanitarios o scrutineers, y es a todos estos los que se están poniendo en peligro. Debería de haber mucha más mano dura con estos incidentes en el pit lane (opinión de un servidor).

Bueno, una vez finalizado el discurso, seguimos con un Hamilton que, sin quererlo, inicia la guerra que viene a continuación. Entra el primero a cambiar ruedas. Esto obliga a Vettel a entrar para no perder su posición. Y esto a su vez obliga a Webber a hacer lo mismo. ¿El problema? Que en la vuelta de más que está Webber con los neumáticos gastados y Vettel con los nuevos, este le recorta los cuatro segundos que le llevaba de ventaja, de forma que cuando vuelve a salir Webber a pista, Vettel está pegado a él y empieza a atacarle. Por la radio le dicen a Vettel que se esté tranquilo, que no haga ninguna tontería… Dos vueltas más tarde, Vettel adelanta a Webber a medio metro del muro de boxes. Webber se mantiene y le devuelve la pasada en las curvas 1 y 2. Sin embargo, Vettel lo pasa en la curva 4 traccionando mejor y ya se queda en primera posición. En ese momento un servidor no puede más que pensar “que jodidamente bueno eres, Vettel” a la vez que pienso “que jodidamente locos están estos de Red Bull por dejar que pase esto… pero como aficionado, gracias por no caparlo”.

Mientras ocurre todo esto, por detrás los dos Mercedes también están discutiendo unas cuantas cosas. Rosberg parece cada vez más rápido que Hamilton… pero sin embargo no es listo y elige mal. Le adelanta cuatro veces en la contrarrecta, de forma que en la recta de meta Hamilton se aprovecha del DRS y de la nueva zona de detección, y lo vuelve a adelantar. Así cuatro veces. Coño, a la segunda que te lo hace, espérate detrás de él en la contrarrecta y lo adelantas en la recta de meta, de forma que no te la pueda devolver. La cuestión es que después de repetir la misma maniobra 4 veces, y viendo como giochi gonfiabili se había puesto la cosa de los Red Bull, Ross Brawn decide que se acaba el chiringuito y que aquí de arriesgar, lo justo. Que bastante putas las pasaron el año pasado como para jugar a los coches de choque. En estas, Rosberg cada vez más quemado, y Brawn más hasta los huevos y a punto de decirle “pero vamos a ver, tontoloscojones, que te hemos dejado durante cuatro vueltas y has hecho la misma gilipollez las cuatro veces”, aunque Brawn es demasiado caballeroso como para decir eso, se habrá limitado a explicárselo una vez acabada la carrera.

Y con esto termina la carrera, aunque no quiero irme al podio sin hacer mención al pique que nos han ofrecido Hulkenberg y Raikkonen, que ha sido muy divertido (Hulkenberg me parece un pilotazo), que Grosjean sin hacer ruido (algo impropio de él) ha acabado sexto… y que Massa ha vuelto a hacer su insípida carrera a la que nos tiene acostumbrados por desgracia, y al final ha acabado quinto.

Ya en el podio se nota una calma tensa entre los pilotos de Red Bull, de la que se contagia también un Hamilton que sabe que por ritmo probablemente debería ser cuarto. Vettel y Newey discuten sobre algo que no logro descifrar, cuando aparece en escena Mark Webber, que únicamente se dirige a Vettel para decirle “multi twenty one, multi twenty one“. Tras la ceremonia de entrega de premios, himnos y champagne, llega la entrevista… Hay que ser gilipollas para poner al sosainas de Brundle teniendo a Lauda a mano. Bueno, gilipollas, o no querer que se peguen los pilotos de Red Bull en el podio :D. La cuestión es que Webber confirma lo que algunos habíamos sospechado tras el “multi21″. Vettel se ha pasado por el forro las órdenes de equipo de no atacar. Cosa que confirma Horner posteriormente.

Me temo que toca otra discursito de los míos. Es lo que hay… Vamos a ver, Seb (permíteme tutearte). Sabes que eres uno de mis pilotos favoritos. Sabes que lo eres desde que éramos los dos unos renacuajos y te descubrí en la Fórmula BMW alemana que arrasaste. Sabes que siempre he pensado que ibas a ser un grande. Sabes que cuando ganaste el primer Mundial y alguno decía que era por pura suerte, yo les dije “no te preocupes, dentro de dos años tendrá tres, también de pura suerte”. No me fui mucho. Bueno, en verdad no sabes nada de esto ya que apenas hemos hablado… pero es así. La cuestión es que con todas esas cosas, hoy podría tirar por el camino argumental fácil, decir que lo lógico es que ganes tú que para eso eres el primer piloto, el tío que ha llevado a Red Bull a lo más alto, que Webber tuvo su oportunidad hace tres años y se la dejó en Corea… que eres el tricampeón del mundo más joven de la historia. Que acabas de igualar a Sir Jackie Stewart en victorias. Y mil cosas más. Pero sería cometer un grave error. Sé que esto no lo vas a leer en la vida… pero hay mucha gente de tu entorno que puede tirar por ahí y que te haría mucho mal.

Lo que hoy has hecho es muy grave, porque has traicionado, ya no solo a tu compañero de equipo, un tio que durante estos años te ha sido fiel y que sabes, tú que no lees la prensa, que te admira. Un tío que sabes que hoy ha hecho un carrerón tal que al gran Sebastian Vettel le ha costado sudar sangre para adelantar. Un tío que se merecía una victoria como la que le has quitado, y no una victoria de las que dan risa cuando ya se ha ganado el Mundial. Pero no solo eso, es que también has traicionado a tu equipo. A esos que cuando no estabas contento con el coche, se han pegado toda una madrugada trabajando para que al día siguiente saques no un segundo por vuelta, sino un segundo y medio. A esos que se dejaron los cuernos en Milton Keynes para que el coche tenías en Monza el año pasado se convirtiera en lo que te hizo capaz de ganar cuatro carreras consecutivas para acabar ganando el Mundial. Toda esa gente hoy está decepcionada contigo, y merecen no solo la disculpa tardía que ya has dado, sino que esto no se vuelva a repetir. Porque probablemente Red Bull no sería la mitad de lo que es sin Sebastian Vettel. Pero Sebastian Vettel no sería ni la sombra de lo que es sin Red Bull. Mejor que ahí no vas a estar en ningún otro sitio, que no te engañen. Apuesto la mano a que en la primera entrevista que des una vez te hayas retirado, dirás eso. Así que no seas gilipollas y no repitas lo que has hecho hoy en tu puta vida. No serías el primero en pensarse que era más importante que su equipo. Y ya has podido ver como les ha ido o les fue desde entonces…

Y con esto y un bizcocho, hasta el día 14 a las 8 :D. Siento que la crónica de hoy haya sido menos festiva que otras… pero es lo que tocaba.

P.D.: Felicidades a Fernando Alonso por su GP número 200 . Casi nada. Lástima que no lo haya podido celebrar de otra forma