Del 13 al 16 de febrero se disputará en Málaga la Copa del Rey de baloncesto del año 2020. Una cita siempre especial, cuatro días frenéticos y ocho aficiones en el mismo pabellón sin que se registren roces ni incidentes. Puro sabor a fiesta del deporte. Hay títulos más importantes pero no es sencillo encontrar uno tan singular y que despierte tanta ilusión. Sólo la victoria te permite avanzar, no hay segundas oportunidades. Emociones al extremo en el Martín Carpena, sede de la edición de este año. Tres semanas antes se celebró en este mismo recinto la gala de entrega de los Premios Goya. Volveremos a disfrutar de una sesión de cine de alto nivel. Esta Copa promete emoción y suspense, un guion incierto por escribir puesto que los pronósticos están muy abiertos. Este año no hay un candidato claro al que señalar como máximo favorito. El posible cruce de semifinales entre los dos grandes futboleros también favorece que se abra el escenario para otros actores inesperados. Un panorama incierto que describiré con detalle en esta entrada, desgranando fortalezas y debilidades de los ocho equipos participantes en esta Copa. ¡Luces, cámara y acción!

BARÇA – VALENCIA BASKET:

El Barça llega a la Copa como líder en solitario de la Liga ACB. La millonaria inversión del equipo azulgrana ha cumplido con el objetivo de colocarle en una situación favorable para competir por todos los títulos, algo que no ocurría desde los tiempos más exitosos de Xavi Pascual. Pesic cuenta con mimbres de sobra para recuperar una hegemonía que el Barça cedió hace años a su eterno rival aunque el camino tampoco ha estado libre de obstáculos. El Barça tiene una plantilla asombrosa, repleta de talento y poderío físico, pero pocos partidos ha ganado con facilidad esta temporada. Muchos rivales le han hecho sufrir. En no pocas ocasiones el talento individual acudió para que los azulgranas salieran airosos. Otras, las menos, no fue suficiente. En demasiados momentos acusó una cierta dependencia sobre Mirotic, el gran fichaje de la temporada en Europa, la joya retornada de la NBA y repudiada por los aficionados del Real Madrid, club en el que se formó y saltó al estrellato. El faro que alumbra el camino del Barça los próximos años, la estrella sobre la que giran otros fichajes rutilantes que aún no tuvieron el impacto esperado a su llegada. Brandon Davies empezó muy fuerte la temporada pero fue a menos con el paso de los meses. Higgins pasó gran parte del curso aquejado de problemas físicos que impidieron que mostrara su mejor versión. En el último partido pareció recuperado y a tono, cercano al nivel de figura continental que tuvo en CSKA.

Fuente: eurohoops.net

En cambio, Abrines y Delaney fueron de menos a más. El alero balear dejó atrás definitivamente el oscuro pozo de la depresión y su aportación en el tiro de tres empieza a resultar interesante. El base estadounidense, que llegó como fichaje de urgencia ante las lesiones de los bases, atraviesa un momento dulce, como el que disfrutó hace cuatro temporadas en Lokomotiv Kuban y que le convirtió en el mejor base en Europa. Incluso decide partidos, como hiciera hace unos días contra Armani Milán (u Olimpia Milán, según guste). Su notable rendimiento palía la ausencia de Heurtel, duda para el torneo tras sufrir un esguince de tobillo ante el equipo italiano. Su concurso resulta importante, no sólo por su clase y desequilibrio sino porque no hay otro base que dé respiro a Delaney. Hanga, pilar defensivo junto a Claver, actuó de director improvisado pero se le ven las carencias en el puesto contra bases contrastados y de primer nivel. La defensa es la otra incógnita. No abundan los jugadores que se caractericen por una gran capacidad defensiva y suele encajar demasiados puntos con mucha frecuencia. En un torneo tan corto y explosivo y con rivales que cuentan con talento de sobra puede penalizar. El buen momento de Kuric, muy acertado en el tiro en los últimos partidos, y lo que pueda dar Tomic si Davies continúa en un tono bajo también son apuntes a tener en cuenta aunque toda esta suma será efectiva si Mirotic sigue acumulando los números espectaculares de gran estrella. Bien lo sabe su rival en esta eliminatoria, sufrió sus efectos hace una semana.

Fuente: cadenaser.com

Un flojo inicio de temporada motivo que Valencia Basket tuviera que pelear su plaza hasta la última jornada. Una acusada irregularidad que trajo malos resultados y volvió a poner en cuestión el puesto de Jaume Ponsarnau, como ya ocurriera la temporada pasada a estas alturas. Sin embargo, el equipo taronja ha experimentado una clara mejoría que le ha situado entre los ocho primeros tanto en Liga ACB como Euroliga. El buen estado de forma de Colom resultó fundamental para el crecimiento de un Valencia Basket que ya no vive obsesionado por el tiro exterior como en las dos últimas temporadas. La lesión de Loyd, referente en el tiro exterior, obligó a cambiar el juego ofensivo. Los pivots no han perdido la costumbre de romper las defensas saliendo a lanzar a la línea de tres pero tienen mayor presencia en la zona en las últimas semanas. Dubljevic y Labeyrie atraviesan por un buen momento y están más sólidos en la zona que al comienzo de temporada. Ndour ha ayudado con su estimable capacidad atlética al potencial reboteador del conjunto valenciano. La defensa, dura cuando le permiten los contactos, ha contribuido al salto de calidad. Al igual que la creciente aportación de los aleros. El inagotable San Emeterio vive una nueva juventud en los últimos encuentros. Abalde ha ganado en importancia en los esquemas de Ponsarnau y se convirtió en una pieza importante para desarmar las defensas con su potencia para penetrar hacia canasta y un valor para cerrar el rebote. Incluso Sastre, insustancial a principio de temporada, ha ganado presencia con su acierto en el perímetro. Entre los tres consiguieron paliar la ausencia de Loyd. Un equipo en progresión que resulta un hueso para cualquier rival. El Barça ha sufrido en los tres partidos disputados contra Valencia Basket, sobre todo el último celebrado en la Fonteta, en el que se impuso en el último segundo con una canasta de Mirotic. Se impuso en esta misma eliminatoria de cuartos la pasada temporada pero siempre le toca sufrir. No tendrá fácil doblegar a los de Ponsarnau. 

REAL MADRID – BILBAO BASKET:

No llega la Copa en el mejor momento al Real Madrid, que atravesó durante semanas un bache preocupante de juego y confianza traducido en dudas y malos resultados. Algunas decisiones fallidas de Laso dieron carnaza a sus detractores, que siempre los ha tenido y no dudan en minusvalorar a la mínima oportunidad su papel en esta etapa dorada del equipo blanco. La planificación de la plantilla quedó en cuestión. El bajo rendimiento de Laprovittola y la intrascendencia de Mejri despiertan las críticas hacia los fichajes. Sólo Mickey, con un trabajo y rendimiento notables en el juego interior, ha dado la talla. El mal momento de jugadores como Taylor, Causeur, Carroll y, sobre todo Llull (vive sus días más complicados en el Madrid) tampoco ayudó, al igual que las lesiones inoportunas de Randolph y Rudy cuando atravesaban un momento dulce de juego. Un camino lleno de baches que elevó la importancia de Campazzo y Tavares como ejes fundamentales. El base argentino es imprescindible ante la inoperancia de los otros dos bases en este momento, el Madrid es otro equipo sin él. Como la noche y el día. Y aunque Mickey es un valor muy apreciable en la pintura, nada puede esconder la enorme trascendencia de Tavares bajo el aro propio, capaz de condicionar el ataque rival por completo con el poder intimidatorio que posee. Laso incluso ha tirado de ellos dos durante toda la segunda parte de partidos importantes. La última semana ofreció motivos para el optimismo pese a que el equipo blanco no encuentra la consistencia y su mejor juego. Randolph regresó tan inspirado como antes de la lesión. A este nivel no hay dudas que se trata de un jugador que marca diferencias. Thompkins, superados los efectos de su desidia hacia la báscula en verano, vuelve a ser fundamental en el juego ofensivo pero no está claro que juegue ya que entre él, Deck y Mickey se juegan las dos plazas de extracomunitaros. Y Carroll, que atraviesa una situación familiar delicada con la marcha de su mujer e hijos a Estados Unidos, parece que recupera la inspiración. Datos para subir la moral del madridismo aunque el rival que tiene enfrente produce mucho respeto.

Fuente: scoopnest.com

Bilbao Basket es la gran revelación de la temporada. Cualquiera diría que es un recién ascendido. No le falta orgullo y carácter a un equipo diseñado con muy buen tino. Logró su clasificación venciendo al Barça en el Palau Blaugrana pero si esto ya es una hazaña de por sí resulta complicado calificar un dato muy revelador. Ha vencido en los cinco partidos disputados contra equipos de Euroliga, incluyendo triunfos a domicilio en Barcelona y Valencia. Un rival de armas tomar y muy completo. Balvin, Lammers y Sulejmanovic forman un plantel de pivots muy competente y duro en la zona. Kulboka pone el punto de versatilidad con su buena muñeca. Los exteriores, buenos tiradores y con gusto por un juego vertiginoso, no son fáciles de contener. Rafa Martínez ha aportado veterania y amenaza exterior. Rousselle dispone de una facilidad pasmosa para desequilibrar en el uno contra uno y sacarse de la manga tiros inverosímiles. Jaylon Brown, que ya despuntaba en LEB Oro, dio innumerables muestras de rachas anotadoras y talento individual. Su ausencia (fractura en un pie hace dos semanas) se dejará notar. Pero, por encima de todos, está una de las sensaciones de la temporada: Bouteille. Un anotador insaciable que trae por la calle de la amargura a todas las defensas de la Liga ACB. Aún no se encontró antídoto para el alero francés, que acabará pronto en un equipo grande. Tiene talento de sobra para llegar a donde quiera en Europa. La gran amenaza, aunque no única, de un equipo en forma y que incluso aporta razones para que una victoria no se considere una sorpresa. Suena fuerte, incluso delirante, pero así están las cosas. 

Fuente: piratasdelbasket.net

CB CANARIAS – ANDORRA:

CB Canarias empezó la temporada con el reto de olvidar una temporada decepcionante con una plantilla nueva aunque repleta de jugadores expertos y de garantías. Tras el lógico ajuste de un equipo nuevo y un inicio de temporada algo irregular el equipo de La Laguna ha tomado un rumbo firme y exitoso, Entró en la Copa como cabeza de serie, una condición favorecida por un sorteo amable que le presenta una oportunidad única de llegar lejos en esta competición. En dos pilares fundamentales reside el buen momento del equipo entrenado por Vidorreta. Un base y un pivot, los cimientos de un equipo sólido como sostienen los cánones clásicos del baloncesto. Marcelinho Huertas confirmó que no está acabado ni mucho menos. Es el motor de CB Canarias, el generador de juego. Se está hinchando a repartir asistencias, especialmente a un Shermadini con el que ha formado una sociedad temible. El pivot georgiano es un excelente cabeza de ratón, saca todo su potencial en equipos con escasa presión y objetivos de menor exigencia. No es casual que triunfara en Zaragoza y Andorra y pasara sin pena ni gloria en su periplo por Olympiacos y Unicaja. En CB Canarias volvió el jugador rocoso y dominante que causa pavor en los pivots rivales. Se ha convertido en uno de los nombres más destacados de la temporada, en el referente por el que pasa gran parte del poder ofensivo de su equipo. Es insustituible. Bogris, que llegó para darle unos instantes de respiro, por ahora no aporta los minutos de calidad necesarios. Aunque Huertas y Shermadini son fundamentales en CB Canarias, no son los únicos jugadores con una aportación importante. Los aleros están realizando una temporada muy destacada. Dani Díez está lanzando de tres como nunca y aporta un gran trabajo en el rebote. Yusta se ha confirmado como uno de los valores de futuro en el baloncesto español. En el club lagunero ha dispuesto de los minutos necesarios para explotar su potencial para entrar a canasta y su disciplina defensiva. Incluso ha mejorado en el tiro exterior. El fichaje reciente de Aaron White, una contratación de nivel Euroliga, aporta aún lustre y físico a un equipo con aspiraciones. Quizá le falta algo de fiabilidad en el perímetro. Salin está irregular y Lundberg no alcanzó el nivel que tuvo en Manresa. Álex López suele cumplir cuando sale a pista pero no es Marcelinho. Sin embargo, la plantilla tiene nivel de sobra para tenerle muy en cuenta. Caer en el lado sencillo del cuadro le permite soñar con cualquier meta en la Copa.

Fuente: apiedecancha.es

Pocos esperaban a Andorra en esta edición de la Copa pero los hombres de Ibon Navarro estarán en Málaga por méritos propios. No cuenta con una plantilla tan rutilante y compensada como en la etapa de Joan Peñarroya en el banquillo y tuvo que padecer una plaga de lesiones que dejó en cuadro su juego interior pero no fueron obstáculo para que Andorra sorprendiera un año más. La fortaleza en casa y la optimización de recursos le sirvieron para acabar la primera vuelta entre los ocho primeros. Un equipo de juego alegre y veloz con un buen equilibrio ofensivo. La recuperación de los hombres altos lesionados añade valor al conjunto andorrano. Diagne, el gran referente del juego interior, va a llegar a Málaga en un buen nivel. Una buena noticia para Ibon Navarro, que necesita las mejores prestaciones del pivot senegalés. También han recobrado sensaciones Sy, certero en el tiro de tres, y un Tyson Pérez que optará al galardón de jugador revelación del año. Sus facultades físicas y capacidad reboteadora han llamado la atención de Scariolo, que le ha incluido en la lista de convocados de la selección española para los dos primeros compromisos de la fase de clasificación del Eurobasket 2021. Refuerzos de vital importancia para dar un respiro a Musli y Llovet, que llevaron el peso del juego interior mientras estuvieron ausentes. Pero si un jugador tiene especial relevancia en este equipo, ese es Hannah. Único base puro (Guillem Colom tiene un papel residual) y fundamental en los esquemas de Ibon Navarro. Cuando no está en pista Andorra lo suele acusar. Senglin y Massenat son demasiado irregulares y tendentes al individualismo. Con todo, forman un juego exterior interesante junto a David Walker y Jelinek, que ejercen de veteranos en el club y aportan un juego más maduro y fiable. El buen momento de Dejan Todorovic, ya olvidada su larguísima lesión, pone la guinda a una considerable amenaza exterior. No entra en los cálculos de nadie que tenga una trayectoria larga en esta Copa pero por su lado del cuadro no hay ningún rival infranqueable. Se le ha presentado una oportunidad para dar la sorpresa.

Fuente: eurosport.com

BASKET ZARAGOZA – UNICAJA:

Basket Zaragoza sorprendió la pasada temporada plantándose en las semifinales de la Liga ACB. No fue un hecho aislado y casual. La confirmación esta campaña se transformó en sensación para convertirse en uno de los animadores de la competición. Zaragoza volvió a disfrutar de un juego de mucho nivel, a la altura del inolvidable CAI en los años 80 y principios de los 90. Un equipo atrevido, veloz y con talento para plantar cara a cualquiera. Los dos grandes futboleros mordieron el polvo con estrépito en sus visitas al Príncipe Felipe. Durante toda la temporada es un asiduo de la parte alta de la clasificación aunque la Copa le hubiera venido mejor que se disputara hace un mes. Ha bajado un tanto su nivel, sobre todo fuera de casa donde ha recibido algunas derrotas contundentes. La lesión de Justiz ha afectado seriamente el juego interior, el pivot cubano estaba realizando una temporada muy notable y a Fran Vázquez ya se le van notando los años. No obstante, tampoco faltan recursos en la pintura. Hlinason está sacando mayor partido a su altura en su paso por Zaragoza y Radovic disfruta del mejor momento de su carrera. El ala-pivot montegrino siempre fue un jugador estimable en las temporadas que lleva en España pero nunca antes tuvo este impacto. Su dominio del rebote ofensivo y su capacidad para hacer daño tanto en la zona como tirando de tres le han convertido en fundamental para Basket Zaragoza. Pero si eficaz es el juego interior, el plantel de bajitos del equipo maño genera una ilusión enorme. Reúne una juventud y atrevimiento que son ya marca de la casa. Alocén, ya fichado y cedido por el Real Madrid, continúa quemando etapas como una de las grandes promesas del baloncesto español. El gran artífice del ritmo frenético en el que se desenvuelve Basket Zaragoza, el contrapunto a la sobriedad y veteranía de San Miguel. Barreiro, ya asentado como pieza importante en el engranaje de Porfi Fisac tras una lenta progresión, y la frescura y descaro de un Krejci en claro ascenso completan un tridente joven y con mucho talento aunque no falta veteranía en el perímetro. Benzing, reconvertido en alero abierto, la fiabilidad en el tiro de Seeley y las rachas demoledoras en el triple de Dylan Ennis completan un tiro exterior con mucho empaque. Como dije anteriormente, Basket Zaragoza no llega en plenitud pero muchos ojos estarán pendientes del equipo maño como alternativa a los más poderosos. Veremos cómo lidia con esa responsabilidad.

Fuente: piratasdelbasket.net

Unicaja se clasificó por su condición de equipo anfitrión porque no fue capaz de acabar la primera vuelta entre los siete primeros. Una trayectoria decepcionante por juego y resultados, marcada por una acuciante irregularidad. Capaz de vencer en Barcelona y Vitoria (aunque esta temporada el Buesa Arena no es una cancha especialmente complicada) y de caer en casa ante rivales menores. Una marcha vacilante llena de vaivenes con un juego un tanto insulso. Le han faltado referentes, sobre todo en el juego interior. Gerun y Deon Thompson no han dado el resultado esperado. Elegar está resultando intrascendente y Rubén Guerrero le pone empeño y ganas pero le faltan experiencia y fundamentos por pulir. El juego exterior no ha seguido una línea firme. Jaime Fernández está un peldaño por debajo del rendimiento ofrecido la pasada temporada y Josh Adams es capaz de cambiar un partido con su muñeca y portentosas facultades físicas o desaparecer con la misma facilidad. Toupane y Waczynski cumplen en la posición de alero pero sin destacar. Por ello, el equipo malagueño decidió reforzarse con Darío Brizuela a mitad de temporada. Le ha dado más frescura al juego exterior de Unicaja, que al menos ha logrado alcanzar puestos de playoffs en las últimas jornadas, pero nunca se sabe qué versión se verá del equipo malagueño. Siempre le queda el bloque de jugadores nacionales, la guardia pretoriana con Carlos Suárez al mando y Alberto Díaz como líder espiritual sobre la cancha. Los irreductibles de Luis Casimiro, los jugadores que mejor conectan con un Martín Carpena que será clave en las opciones de Unicaja. El ambiente mágico de su cancha es el mejor argumento al que se puede agarrar el equipo malagueño para trazar un punto de inflexión a una temporada insustancial.

Fuente: malagahoy.es