Seguramente los seguidores del Real Madrid habrán respirado con alivio cuando terminó la semana. Nunca antes el equipo blanco había perdido tres partidos en la misma semana. La derrota en Moscú en un partido feo ante el CSKA más endeble en casa que recuerdo en dos décadas acabó con una racha de trece victorias consecutivas en Euroliga. Una oportunidad perdida aunque sea una derrota asumible a principio de temporada. Pero la imagen que se dio en el tropiezo ante Khimki dos días después rozó el esperpento, con un nulo desempeño en defensa que hizo las delicias de un rival lleno de anotadores que lanzaron con mucha comodidad durante todo el encuentro. Un naufragio que no paliaba la reacción en los minutos finales, con todo perdido. Pero los dos frustrantes partidos en Moscú no fueron el final de las desdichas. Echó por la borda una suculenta ventaja conseguida en el primer cuarto ante Baskonia, lleno de dudas debido a su decepcionante temporada, y llenó de moral a un contrincante que acabó firmando su mejor partido de la campaña para endosar al Madrid su primera derrota en casa este curso. El final a una semana desastrosa que evidencia un claro bajón que se suma a las importantes lesiones de Rudy y Randolph y el pobre rendimiento o intrascendencia de algunos refuerzos (Laprovittola y Mejri ya están en el disparadero). El madridismo bien podría exclamar la expresión que coincide con el título del popular programa cómico de ETB, ¡Vaya semanita!
CB Canarias 76 – Estudiantes 59: De nuevo la principal estrategia ofensiva de Vidorreta consistió en meter balones dentro a Shermadini para que hiciera estragos dentro de la zona. Tenía más sentido aún conociendo la debilidad de Estudiantes en el juego interior. Los siete primeros puntos de CB Canarias llegaron del pivot georgiano pero el ataque local se convirtió en tan previsible que Estudiantes colapsó la zona para evitar que le llegaran balones en condiciones. CB Canarias perdió cinco balones en los primeros cinco minutos y los colegiales aprovecharon el desconcierto para ponerse con ventaja por primera vez. Fue una alegría efímera. Dos triples de Gielo sacaron de problemas a los locales, que se asentaron con buenos balones a la zona y una defensa seria que provocó numerosas pérdidas de balón. Estudiantes perdió ocho balones en el primer cuarto, una barbaridad. Encajó un parcial de 18-3 que le complicó el partido en gran medida (25-12, min 11). Vidorreta hizo debutar en el segundo cuarto a Aaron White, un refuerzo importante de nivel Euroliga. Ha tardado poco en demostrar todo lo que puede aportar en La Laguna. A CB Canarias no le costaba mantener la diferencia por encima de los diez puntos gracias al dominio incontestable en el rebote. Estudiantes no lo veía nada claro y se jugaba con demasiada frecuencia tiros poco elaborados que no llevaban a ninguna parte. Sin embargo mostró otra cara tras el descanso.
Juan Palacios volvió muy acertado de vestuarios para dar mayor lucidez al juego ofensivo de Estudiantes. La defensa desconcertó a un CB Canarias con menor tensión en el tercer cuarto. Pressey, muy activo, se hinchó a robar balones. Los dos equipos estuvieron mal en el tiro exterior pero el desacierto le vino peor a los locales, que ya sentían el aliento del Estu en el cogote (46-42, min 27). Hasta ahí llegó la reacción. CB Canarias despertó con buenos cortes por la zona que volvieron a darle aire en la parte final del tercer cuarto. En el último periodo no hubo oposición. Shermadini (21 puntos, 14 rebotes, 31 de valoración, MVP de la jornada) volvió a imponer su autoridad dentro de la zona. Aaron White (13 puntos, 6 rebotes, 16 de valoración) rompió definitivamente el encuentro en unos minutos de acierto pleno. Incluso anotó desde fuera, su punto flaco. Un jugador con experiencia contrastada al más alto nivel europeo que puede suponer un salto de calidad a una plantilla muy seria y contrastada. El parcial de 14-2 desequilibró por completo a Estudiantes (60-44, min 33). Palacios (18 puntos, 6 rebotes, 17 de valoración) era el único que veía aro y él solo no podía sostener a un conjunto colegial que se volvió a desmoronar en el último cuarto. Un mal recurrente. CB Canarias sigue afianzándose y no ve lejos lo más alto de la tabla. En su actual estado de forma y tras un sorteo benigno las opciones del equipo de Vidorreta en la Copa suben como la espuma.
Basket Zaragoza 81 – Gran Canaria 62: La firmeza defensiva le permitió a Gran Canaria mandar todo el primer cuarto. Los triples de Costello y Cook aumentaron el parcial de inicio a un 2-10 que alimentaron al comienzo las dudas que dejaron las dos últimas derrotas del equipo maño. Las disipó metiendo balones dentro para recortar rápidamente pese a que Costello (21 puntos, 11 rebotes, 27 de valoración) respondía en la zona y mantenía una ligera ventaja para Gran Canaria. Ennis metió una velocidad más en el segundo cuarto que no le sentó nada bien a los visitantes. Gran Canaria cedió el mando tras perder cuatro balones consecutivos. Para colmo, Ennis (13 puntos, 5 rebotes, 17 de valoración) estaba encendido y anotaba de tres con una facilidad pasmosa, aunque estuviera a ocho metros. Brussino estiró la diferencia para establecer un margen cómodo cerca del descanso (37-27, min 19) pero la ventaja se esfumó entre el final del segundo cuarto y el comienzo del tercero. Acumuló un parcial en contra de 0-10 que le obligaba a reaccionar de inmediato. Lo hizo pero los triples de Gran Canaria abortaron el intento de escapada. Basket Zaragoza recurriría después al juego interior, buscando las cosquillas a un plantel de pivots debilitado por la lesión de Bourousis. Fran Vázquez cargó el rebote ofensivo para mantener por delante al equipo maño. Hlinasson (13 puntos, 4 rebotes, 22 de valoración) continuó con el trabajo del pivot de Chantada. El islandés está progresando satisfactoriamente en Zaragoza. Los hombres altos conservaron la ventaja, los tiradores dispararían a Basket Zaragoza en el marcador. Dos triples de Benzing situaron la diferencia por encima de la decena antes del final del tercer cuarto. Otros dos de Brussino reventaron el choque al inicio del periodo definitivo mientras Gran Canaria se despeñaba en una búsqueda constante del tiro exterior que no tuvo ningún fruto (66-46, min 33). Sin embargo las ganas que pusieron Rabaseda (13 puntos, 6 rebotes, 20 de valoración) y Paulí se contagiaron a sus compañeros. Los robos de balón de una defensa presionante sirvieron para que Gran Canaria lograra un parcial de 2-12 que aún le daba alguna opción pero Brussino (18 puntos, 7 rebotes) decidió el partido con cinco puntos seguidos que ya no tuvieron réplica. El argentino está en su mejor momento desde que llegó a España, fundamental para sacar a Basket Zaragoza del pequeño bache.
Betis 66 – Unicaja 88: Comenzó con fuerza Unicaja el derbi andaluz en Sevilla. Dos triples de Deon Thompson le dieron ventaja desde el inicio. También supo cerrar la zona para que no le llegaran balones a Niang. Curro Segura tuvo que parar el partido para poner fin al 2-10 de salida que había logrado Unicaja. Conger ejerció de revulsivo, atacando el aro con decisión y forzando personales para igualar el marcador. Ahora fue Luis Casimiro quien pidió tiempo muerto. Le vino bien el parón a sus jugadores. Adams lideró la reacción, apuntalada en el acierto en el perímetro, aunque el Betis mantuvo el tipo para intercambiar canastas hasta el final del primer cuarto. El juego se trabó en el segundo periodo. Mucha pelea en las zonas que derivó en un escaso acierto. Le vino peor a los verdiblancos, que trataron de mantener el tipo con triples puntuales pero se desplomaron ante la aparición de un Brizuela (20 puntos, 3 rebotes, 26 de valoración) pletórico que volvió loca a la defensa del Betis. Le entraron las prisas a los locales y acabó jugándose tiros precipitados. La pájara le costó a los locales un 0-11 hasta el descanso que les puso contra las cuerdas (33-49, min 20). Sin embargo el Betis reaccionó tras el paso por vestuarios. Dos triples nada más empezar el tercer cuarto dieron inicio a la remontada. Entre Conger (21 puntos, 3 asistencias, 3 robos, 18 de valoración) y Sipahi lograron meter a los verdiblancos en el partido mientras Unicaja aún trataba de entender que el juego se había reanudado. El parcial de 13-3 debía dar calma al Betis pero enloqueció el partido en el momento menos adecuado. Unicaja pescó en río revuelto. Apareció Brizuela de nuevo para romper el encuentro desde la línea de tres junto a la colaboración de un Toupane (13 puntos, 7 rebotes, 17 de valoración) muy efectivo a seis metros de canasta. Las prisas volvieron al Betis. Sus errores dieron alas a un rival que disfrutaba jugando a toda velocidad. Curro Segura puso una zona 2-3 en el último cuarto que no sirvió para nada. Dejó demasiados espacios que supo aprovechar Unicaja. El Betis estaba fuera del encuentro. Bajó los brazos y no hizo más que perder balones. Estaba claro que se llevaría un serio correctivo (58-83, min 35). Con todo resuelto, Luis Casimiro pudo dar a Ismael Tamba sus primeros minutos en Liga ACB. El canterano debutó anotando un triple contra tabla. Un golpe de fortuna para su estreno en la élite. La guinda a un derbi plácido y feliz para Unicaja.
Fuenlabrada 90 – Barça 94: Le sentó bien al Barça el triunfo a domicilio contra Fenerbahçe. Salió muy suelto en el Pabellón Fernando Martín, acribillando desde la línea de tres a un rival que ofreció muchas facilidades en la defensa del perímetro. En cinco minutos firmaba un 5/7 en triples que complicaba la existencia a un Fuenlabrada que pasaba por serios apuros en ataque (8-19, min 5). Suficiente tenía con subsistir aunque parecía que la historia del encuentro iba a ser breve. Abrines (18 puntos) dio continuidad al acierto azulgrana en la línea de tres en el segundo cuarto. Continúa en línea ascendente y recuperando buenas sensaciones. Ya sólo le falta regularidad para volver a ser el jugador que fue antes de caer en el profundo pozo de la depresión. En pleno festival de Abrines, el Barça dio un estirón que se antojaba definitivo (20-37, min 14). Ni siquiera hacía falta que Mirotic aportara demasiado. Pero aún esperaba una sorpresa que no resultó muy grata para los azulgranas. Un producto de la casa, Marc García, aguardaba su momento para volver a lucir ante el equipo en el que se crió como jugador. Dos triples del canterano del Barça sacaron del letargo y la resignación a los locales. Fuenlabrada ahora pudo anotar con mayor comodidad. Pese a que los triples rivales seguían llegando, pudo aguantar un intercambio de canastas que le ayudaron a mantener el tipo (36-47, min 20). Ya veía el Fuenla de otro modo el partido. El intercambio de golpes continuó tras el descanso pero a los locales no le daba miedo enfrascarse en un duelo anotador con el Barça. Incluso enseñó los dientes. Dos triples seguidos y un soberbio mate de Eyenga en la cara de Mirotic metía de lleno a Fuenlabrada en la pelea por el partido (48-53, min 24). Justo antes que Cuspinera sentara a Bellas en el banquillo. Fuenlabrada acusó la ausencia en pista de su base titular.
El juego ofensivo perdió claridad y el Barça sacó mucho rédito a los errores rivales. Mirotic (17 puntos, 7 rebotes, 21 de valoración), casi desapercibido hasta entonces, empezó a hacer de las suyas. Tomic (12 puntos, 6 rebotes, 20 de valoración) dominaba bajo tableros. Los azulgranas encontraban mucho espacio para hacer daño en velocidad. Todo el trabajo de Fuenlabrada por la borda en apenas tres minutos. No hizo falta más para encajar un parcial de 2-12 que dejaba la situación muy controlada a su rival. Fuenlabrada tiró de orgullo en el último cuarto para no desconectar del partido. No era cuestión de acabar zarandeado en su propia casa. Afinó en el tiro exterior, Mockevicius peleó con quien fuera dentro de la zona pero de nada le servía intercambiar canastas con el Barça. Necesitaba algo más y lo encontró a tiempo en la figura de Marc García (28 puntos). Hizo aún más daño que en el segundo cuarto, las metía de todos los colores. Ya podía anotar de tres, entrando hacia canasta, forzando personales. Una pesadilla. No hay peor cuña que la de la misma madera, ha jugado dos de sus mejores partidos esta temporada contra el Barça. Animado por el acierto de Marc García, Fuenlabrada apretó atrás. El Barça empezó a perder balones y se complicó un partido que tenía muy controlado. Además no había manera de frenar a Marc García, que se sacó de la manga un enorme triple con la mano de Abrines en la cara para poner el 86-88 en el marcador a poco más de un minuto del final. Claver respondió con otro triple providencial pero Marc García no había dicho su última palabra. Anotó dos tiros libres y le birló el balón a Abrines. Fuenlabrada tenía la posibilidad de igualar pero Anthony Brown (17 puntos, 5 asistencias) se precipitó buscando una canasta rápida. Quedó a medias entre dejar la bandeja y sacar personal y voló una oportunidad única. Aunque no estuvo certero del todo al Barça le bastó con los tiros libres para decidir otro encuentro de Liga ACB que tuvo que sudar para sacarlo adelante.
Bilbao Basket 88 – Manresa 77: Dos equipos en plena racha de victorias se daban cita en Miribilla. Comenzó mandando Bilbao Basket pero el buen arranque de partido de Rafa Martínez (13 puntos, 3 rebotes, 17 de valoración) se vería frustrado por las pérdidas de balón de sus compañeros. Para colmo, Sulejmanovic cometía tres faltas de forma absurda. Manresa aprovechó los regalos para endosar un parcial de 1-11 y tomar una ventaja interesante con rapidez (8-16, min 5). Aunque los locales salieron del atolladero en el que le habían metido los balones perdidos su rival mantuvo su renta desde el tiro libre. Dos triples de Dulkys dispararon la ventaja por encima de la decena de puntos (17-28, min 9) y Bilbao Basket ya tenía motivos para empezar a preocuparse. Sin embargo, Los Hombres de Negro encontraron soluciones en el juego interior. Lammers (11 puntos, 8 rebotes, 4 tapones, 21 de valoración) cerró el aro local repartiendo tapones a discreción. Aunque se identifique a Tavares como el intimidador por excelencia es el pivot de Bilbao Basket el máximo taponador de la Liga ACB. Tanto él como Balvin (11 puntos, 3 rebotes, 16 de valoración) dieron la vuelta al marcador con un parcial de 12-0. El trabajo de los pivots y dos triples de Schreiner permitieron a Bilbao Basket disfrutar de una pequeña ventaja al descanso (45-40, min 20). El dominio local se acrecentó en la segunda mitad con un parcial de inicio de 10-1 que propició que los hombres de Mumbrú jugaran a sus anchas. Manresa no era capaz de anotar dentro, estaba completamente superado por la intensidad defensiva de los pivots de Bilbao Basket. Todo su ataque se redujo a los triples de Dani Pérez, inspirado en el perímetro en Miribilla pese a no ser un tirador excelso. Su acierto, no obstante, no evitó que Bilbao Basket prosiguiera su escapada. Anotaba demasiado fácil como para contenerle con un solo jugador (64-50, min 26). Pedro Martínez ordenó buscar el juego exterior para evitar el campo de minas colocado en la zona. Jaylon Brown mantuvo las distancias al inicio del último cuarto pero el acierto le duró poco. En cambio, Dulkys (15 puntos) recuperó la inspiración que tuvo en el primer cuarto desde la línea de tres para mantener en la pelea a Manresa, un rival muy peligroso en finales igualados. Bilbao Basket no dio pie a la incertidumbre. El rebote ofensivo en los últimos dos minutos cercenó todas las opciones que le quedaban a los de Pedro Martínez en cuanto desapareció el acierto en el tiro de tres. Bilbao Basket alarga su momento dulce y apunta a llegar a la Copa como una seria amenaza para cualquiera. En Madrid tienen motivos para temer a Los Hombres de Negro.
Real Madrid 94 – Baskonia 95: Un duelo con aroma a partido grande desde hace muchos años pero degradado en apariencia debido a la mala temporada de Baskonia. El Real Madrid buscó el remedio a su mala semana en Euroliga comenzando el choque en tromba. Atacar el aro con decisión le valió para sacar personales de tiro con mucha facilidad. Baskonia siempre las cometía a destiempo en los primeros minutos. Campazzo castigó dos pérdidas rivales con cinco puntos y colocó la primera diferencia destacable en el marcador. Fue el comienzo de su recital en el primer cuarto. El Madrid hizo un auténtico destrozo desde el perímetro. Deck gozó de un inusual acierto en la línea de tres. Si él era capaz de anotar dos triples sin fallo qué se podía esperar de tiradores consagrados. Campazzo (27 puntos, 4 asistencias, 23 de valoración) dio rienda suelta a su inagotable inspiración anotando desde el 6’75. Acabó el primer cuarto con trece puntos y se marcharía al banquillo tras liderar un parcial de 15-2 que dejaba el partido muy de cara para el Madrid (25-10, min 7). Baskonia se encontraba fuera de onda, mortificado por el 6/8 en triples de un rival que colapsaba con éxito la zona. Los balones de Henry a Fall suponían el único alivio. Sin embargo el rebote ofensivo se convirtió en un arma valiosa para entrar de lleno en el encuentro. El segundo cuarto sería muy diferente, con un protagonista indiscutible. Henry fue un paso más allá que Campazzo en cuanto a brillo en la pista se refiere. Le salió todo, ya fuera asistir o anotar de cualquier forma posible. No hubo forma de frenarle. Acabó minando la moral de los suplentes del Madrid, improductivos por completo. Aunque Causeur trató de sacar del atasco a los de Laso tras cuatro minutos sin anotar la maquinaria no arrancaba. Ya no es noticia que el rival se recupere cuando Laprovittola está en pista. Enésimo fiasco del base argentino. El Madrid no es partidario de cortar a jugadores en la etapa de Laso pero Laprovittola está dando motivos sobrados para que se revise esa postura esta temporada. Contrastó el hundimiento con el auge de un Pierria Henry (26 puntos, 5 rebotes, 3 asistencias, 27 de valoración) que hizo lo que quiso y se marchó al descanso con 19 puntos. La noche y el día. El quinteto alto que colocó Ivanovic, con Polonara como alero, le funcionó a la perfección y provocó el caos en un Real Madrid que sólo anotó seis puntos en todo el segundo cuarto, record negativo del equipo blanco en un cuarto como local en la Liga ACB. Había pasado del éxtasis anotador de los primeros diez minutos a la nada absoluta (38-39, min 20). Lo peor para los madridistas es que empiezan a ser habituales estos altibajos.
Baskonia aprovechó la buena ola para comenzar con fuera el tercer cuarto pero el 0-5 inicial se vio empañado por los gestos de dolor de Henry, que tuvo que marcharse al banquillo durante unos minutos. El Madrid aprovechó la ausencia del base estadounidense para recomponerse. Llull (23 puntos, 2 asistencias, 18 de valoración) tiró de galones para poner el partido patas arriba. Janning trató de contrarrestarle con dos triples pero lo único que acabó con el fulgor de Llull fue un tiempo muerto de Ivanovic. El parón devolvió a la buena senda a Baskonia, fiable en el tiro exterior y dominador absoluto del rebote. El regreso de Henry apuntaló la superioridad visitante. Shengelia (16 puntos), que estuvo bien defendido por Garuba durante el primer cuarto, empezaba a aparecer. El Madrid se atascó, volvió a jugar a rebufo, a expensas de un rival que parecía tenerlo todo controlado (52-59, min 27). El acierto de Deck (13 puntos, 2 asistencias, 17 de valoración), al que nunca le faltó arrojo para lanzarse sobre el aro rival, sostuvieron al Madrid hasta que llegó un giro del guion al inicio del último cuarto. El acierto en el tiro de tres permitió al equipo blanco igualar el marcador. Ahora los suplentes sí aportaban. Felipe Reyes producía bajo el aro, Campazzo volvía a estar desatado, infalible en la línea de tres, y la defensa al fin daba sensación de intensidad. El parcial de 16-4 cambiaba el encuentro (78-70, min 34). El Madrid había dado la vuelta a una situación comprometida pero lo que tanto le costó revertir lo desperdició en apenas dos minutos. Un par de pérdidas de Causeur las aprovechó Henry para enjugar la diferencia en poco más de un minuto. Baskonia había vuelto al partido para quedarse. A Polonara (12 puntos, 9 rebotes, 21 de valoración) le salía todo, incluso sacarse de la manga una manoletina. Le ha sentado bien el cambió de técnico a un jugador que durante meses pasó como un bulto sospechoso.
El 2-15 de parcial adelantó nuevamente a Baskonia y puso su moral por las nubes. Ni siquiera la quinta falta de Henry, un serio varapalo con el partido que estaba realizando, afectó a su imparable marcha. Stauskas no estuvo nada mal como base improvisando, aportando puntos y buenos balones para Fall (16 puntos, 6 rebotes, 3 tapones, 16 de valoración), muy superior a Tavares durante el partido. Lo que no sabemos es cómo aguantó el Madrid el temporal, la marcha de un rival que sólo falló un tiro en cinco minutos. Pero lo hizo. Un triple de Llull desde la esquina puso el 91-91 a 51 segundos del final. A pesar de todo, el Madrid iba a tener su oportunidad en un final igualado. Baskonia confió su suerte en Shengelia, el referente de siempre durante los últimos años. Jugó los cuarenta minutos, un hecho de otra época, pero no acusó cansancio alguno en el momento de la verdad. Encaró a Tavares, se deshizo de él con un quiebro en velocidad y anotó con un mate lleno de fuerza y rabia. La misma jugada que le dio la victoria en Euroliga a Baskonia contra el Barça. También sería decisiva en el Palacio de los Deportes. Campazzo buscó una personal en la siguiente jugada pero los árbitros no señalaron nada en la defensa de Shields. Podría serlo pero Campazzo forzó demasiado con tiempo suficiente para elaborar una jugada. Dos tiros libres anotados por Shengelia pusieron el partido en las manos de Baskonia. Dio igual que Llull anotara una de sus mandarinas a la desesperada y el propio Shengelia fallara los dos siguientes tiros libres. No había tiempo para milagros. Baskonia se reivindicaba con un triunfo de gran altura que suponía la primera derrota en casa en la temporada del Real Madrid. El broche a una semana nefasta para el equipo blanco.
Valencia Basket 82 – UCAM Murcia 62: El dominio inicial de Valencia Basket quedó frenado de inmediato por dos acciones de Askia Booker. No se necesitaba mucho más para igualar un partido que demandaba ideas frescas. El juego era un tanto espeso y el acierto se convirtió en un bien escaso sobre la pista. Valencia Basket no encontró la oportunidad de tomar distancia hasta la parte final del primer cuarto. Labeyrie (16 puntos, 7 rebotes, 20 de valoración) se encargó de abrir una pequeña brecha que se agrandó hasta una dimensión considerable en el segundo periodo. UCAM Murcia no era capaz de encontrar tiros sencillos y penó en la pista en los minutos que pasó Booker en el banquillo. Eddie estaba bien defendido, el tiro exterior no funcionaba y los pivots no eran capaces de superar la intensa defensa local. Apenas anotaba un punto por minuto el equipo murciano en el segundo cuarto. A Valencia Basket le bastaron los puntos de Motum y San Emeterio para romper el partido irremediablemente. Por simple inercia decantaba pronto el partido (39-19, min 17) pese a que los dos triples que anotó Eddie en el último minuto minimizaron ligeramente los daños. El juego alocado que se instaló tras el descanso tampoco trajo un cambio para UCAM Murcia. La diferencia permanecía estable hasta que la calma llegó a la pista. Quizá excesiva puesto que el partido se enredó. Demasiadas faltas personales que condujeron a un carrusel de tiros libres. Los tiros libres le valían a Valencia Basket para mantener la tranquilidad. UCAM Murcia seguía sin producir bajo el aro y a los locales les bastaba con algún triple bien seleccionado para continuar su marcha sin sobresaltos. Hasta el inicio del último cuarto no encontró la inspiración en el juego exterior el conjunto de Sito Alonso, curiosamente sin Booker en pista. Le sirvió para mantener un duelo de triples durante un par de minutos pero poco duró la alegría. Regresó el desacierto, la falta de argumentos para superar una defensa muy sólida en la zona. Sito Alonso buscó un recurso de emergencia flotando a Labeyrie pero sin acierto ni regularidad no había nada que hacer. Echó de menos la producción del juego interior en un día que Eddie no estaba para recitales. Un triunfo muy cómodo de Valencia Basket para terminar una semana muy exitosa. Ya asentado entre los ocho primeros de la Euroliga, sigue dando pasos para llegar a la Copa en un gran momento. Apunta al tapado aunque cayera en la parte dura del cuadro.
Otros resultados: Burgos 92 – Joventut 89, Andorra 93 – Obradoiro 69.
El Barça atrapa al Real Madrid en lo más alto de la clasificación, que ambos lideran con 14-4. Se acercan los dos perseguidores, Basket Zaragoza (13-5) y CB Canarias (12-6). Aunque cuatro equipos están igualados con 10-8, Unicaja cierra el corte entre los ocho primeros. Fuenlabrada y Estudiantes ocupan otra jornada los puestos de descenso, ambos con 4-14.
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