Finalizó la primera vuelta de la Liga Regular y, como ocurre cada temporada, quedaron definidos los ocho participantes en la Copa del Rey. Las tres plazas que aún estaban en juego las ocuparán Andorra, Valencia Basket y Bilbao Basket. La derrota en el Nou Congost no fue obstáculo para Andorra regresara a la Copa gracias a la diferencia de puntos. Valencia Basket arrolló a Joventut en el duelo particular que mantenían ambos por un puesto en la cita de Málaga. Pero la gran sorpresa la dio Bilbao Basket tras vencer en la prórroga en el Palau Blaugrana al Barça, que en menos de 48 horas encajaba su segunda derrota consecutiva en casa. Un golpe de mano que supuso un vuelco a todos los pronósticos para esta jornada. El retorno de Los Hombres de Negro a la Liga ACB está transcurriendo por unos cauces que ni el más optimista de sus aficionados hubiera soñado. Nadie contaba con Bilbao Basket entre los aspirantes a estar en Málaga a mediados de febrero pero lo consiguió con toda brillantez, derrotando a los cuatro equipos españoles que disputan la Euroliga. Las hazañas en Miribilla ante Valencia Basket, Baskonia y, sobre todo, Real Madrid, fueron superadas por el triunfo en Barcelona. No contaba en los cálculos pero Bilbao Basket demostró que es mucho más que un equipo poderoso en casa que aprovecha el desgaste europeo de los grandes. En el Palau Blaugrana selló el billete a fuerza de resistir, remontando catorce puntos, forzando la prórroga a falta de dos segundos, anotando acciones de mucho mérito en el tiempo extra y manteniendo la sangre fría pese a un arbitraje adverso en los segundos finales. Un guion de película para lograr un premio impensable a principio de temporada. Los Hombres de Negro bien podrían cambiar su apodo por Los Matagigantes de Negro tras su serie de hazañas en la primera vuelta.
Obradoiro 73 – Burgos 76: A Burgos no le quedaba otra que vencer en Fontes do Sar y esperar otros resultados para disputar la Copa por primera vez. Su puesta en escena estuvo a la altura de lo exigido. El tiro exterior de Burgos hizo mucho daño durante el primer cuarto pero Obradoiro acusó aún los problemas que tuvo para anotar. Apenas había logrado tres puntos en cuatro minutos y medio de encuentro. Los tiros libres eran el único recurso para anotar. La comodidad con la que jugaba Burgos subió los ánimos de los numerosos aficionados burgaleses presentes en Fontes do Sar. Como es habitual no tardaron en dejarse notar en las gradas. Le llegaron buenos balones a Lima cerca del aro y McFadden anotaba con facilidad. Obradoiro atacó con mayor eficacia al final del primer cuarto pero sólo le sirvió para intercambiar canastas (14-25, min 10). No duró mucho. El desacierto fue común en el segundo cuarto. Obradoiro seguía acusando la falta total de acierto en la línea de tres. Hasta el duodécimo intento no llegó el primer triple de los locales. Costaba horrores anotar, lo que facilitó que Burgos mantuviera la tranquilidad pese a sólo sumar dos puntos en cinco minutos. Una antideportiva sobre Bassas supuso el mejor alivio. Tampoco inquietaba demasiado Obradoiro, Daum (17 puntos, 7 rebotes, 20 de valoración) era la unica amenaza ofensiva durante el segundo cuarto. Las acciones de Bassas en el tramo final del periodo fueron suficientes para que Burgos lograra que la diferencia no bajara de los diez puntos (28-43, min 19). El juego espeso continuó tras el descanso. La baja producción anotadora y las continuas interrupciones le beneficiaban a los visitantes, que seguían disfrutando de una ventaja muy cómoda. Sólo tuvieron un pequeño susto con dos pérdidas de balón que le costaron un 7-0 de parcial (42-49, min 25).
El tiempo muerto de Peñarroya fue providencial para acabar con la falta de regularidad en el juego de Burgos. La fiabilidad de Benite en el tiro libre le sacó del atasco. Los triples de McFadden dejaban el partido visto para sentencia aparentemente (47-65, min 31). McFadden llevaba 6/7 en triples al inicio del último cuarto, había anotado más que todo Obradoiro. Ni el retorno de Vasileaidis,ál que aún se le nota falto de ritmo, solucionó los problemas en el tiro exterior. Los triples comenzaron a llegar en el último cuarto pero parecía tarde, sobre todo tras anotar McFadden su séptimo tiro de tres. Sin embargo los locales lograron meter en un lío insospechado a Burgos con una defensa muy agresiva en los minutos finales. Encontró problemas incluso para lanzar mientras Obradoiro recortaba jugando para los pivots. Daum y Brodziansky (14 puntos, 6 rebotes, 16 de valoración) endosaron un parcial de 10-0 que le dio al encuentro una vida inesperada (67-71, min 37). Un triple de Clark a dos minutos del final supuso un enorme respiro para Burgos, que comenzó a alargar los ataques pero sin conseguir rematar el partido. Se complicaría la existencia en el último minuto. Un 3+1 de Magee puso el 79-76 en el marcador. Ni Clark, que lanzó solo de tres, ni la bandeja de McFadden lograron cerrar el encuentro. Es más, Burgos se metió en un lío cuando Daum sacó canasta y personal tras capturar un rebote ofensivo. Obradoiro podía empatar un partido que tenía perdido al inicio del último cuarto pero acabó ahogándose en la orilla. Daum falló el tiro libre y Brodziansky completó el desatino botándose el balón en la pierna en la última posesión. Burgos salvaba el triunfo pero echaría de menos la ventaja que desperdició.
UCAM Murcia 82 – Unicaja 74: Buena defensa de UCAM Murcia en los minutos iniciales que le permitió dominar el inicio del encuentro. El 8-1 de inicio obligaba a Unicaja a despertar con rapidez si no quería encontrarse en una situación comprometida demasiado pronto. Lo hizo bregando en la zona. Los puntos de Deon Thompson abortaron el intento de escapada local. Los tiros libres mantuvieron por delante a UCAM Murcia hasta que el tiro exterior comenzó a dar resultados. Otro partido más UCAM Murcia destaca en el acierto en el tiro de tres en el primer cuarto. Todo lo contrario que en Unicaja, incapaz de anotar desde fuera. Acabó el primer cuarto con 0/8 en triples. Recurrió a la defensa para salir del apuro en el segundo cuarto. Buen inicio en defensa del que se aprovechó Ejim para anotar al contraataque. Sin embargo a Unicaja le costó muchísimo anotar en estático. Sólo sumaba en transición o tras rebote ofensivo. Difícil hincar el diente a UCAM Murcia si no produces en el cinco contra cinco. Eddie volvió a pista para liderar el ataque local. Sigue en estado de gracia. Un puñal desde el perímetro al que no pudo contrarrestar Unicaja hasta que empezaron a entrar los triples. Los buenos minutos de Jaime Fernández propiciaron un intercambio de canastas en el que se sintió mucho más cómodo el equipo malagueño. Sin Rafa Luz Freire en pista pudo aprovecharse de la tibia defensa de Booker, algo descentrado ante las dificultades que encontraba para anotar. De la mano de Jaime Fernández, Unicaja consiguió igualar el partido al descanso (39-39, min 20).
Una tónica que se mantuvo en los instantes iniciales del tercer cuarto, que ganó en dureza con el paso de los minutos. Mucha pelea en la zona, un cuerpo a cuerpo en el que se maneja muy bien el equipo murciano. Unicaja acabó atascado en el combate de trincheras (54-46, min 28). Cinco minutos sin anotar hasta que Brizuela (17 puntos) le sacó del atasco. Aún el partido estaba muy vivo pero las dos grandes figuras de UCAM Murcia estuvieron sembradas en el último cuarto. Booker (17 puntos) escogió el periodo definitivo para aparecer. Unicaja hizo la goma desesperadamente hasta que los triples de Eddie le pusieron contra las cuerdas (75-65, min 37). Se topaba contra uno de los jugadores más en forma de la competición. Brizuela volvió a tomar la responsabilidad en busca de la remontada a la desperada pero Eddie (27 puntos, 2 robos, 23 de valoración) esperaba el momento de asestar el golpe definitivo. A medio minuto del final anotó su séptimo triple del partido. Se habla de la asombrosa racha en el triple de Rudy Fernández pero la de Jarrell Eddie en los últimos partidos no le va a la zaga. El artífice del triunfo. Tiene suerte Unicaja que ya estaba clasificado para la Copa en calidad de anfitrión. Ni siquiera fue capaz de acabar la primera vuelta entre los ocho primeros. Ya puede espabilar en la segunda porque estará caro un puesto en los playoffs.
Basket Zaragoza 99 – CB Canarias 111: Vidorreta decidió comenzar el partido con dos bases, quizá pensando en controlar más el juego y evitar que Basket Zaragoza impusiera su velocidad desenfrenada. Le salió rana. El equipo maño convirtió los primeros minutos en una locura. Tres triples seguidos y ocho puntos de Brussino (16 puntos, 6 rebotes, 21 de valoración) en dos minutos pusieron en pie al Pabellón Príncipe Felipe. Apenas habían transcurrido dos minutos y el técnico de CB Canarias tenía que pedir tiempo muerto para frenar el 13-2 de inicio. La tormenta que le estaba cayendo encima al equipo lagunero era tremenda. Tuvieron que pasar cuatro minutos y medio hasta que los locales fallaran su primer tiro de campo. Los triples le permitían a Basket Zaragoza mantener a raya a un rival que empezó a atacar con más paciencia pero el acierto impecable no podía durar para siempre. CB Canarias empezó a defender con más eficacia y a correr sin dudarlo. Yusta hizo mucho daño en los contraataques lanzados a toda velocidad. También los triples de CB Canarias estaban bien seleccionados. En apenas cinco minutos el conjunto lagunero dio la vuelta al marcador. Un 2+1 de Yusta completó una remontada meteórica al inicio del segundo cuarto. Sin embargo no quedó tocado Basket Zaragoza tras esta reacción rival. Devolvió el golpe con intereses. Ennis (19 puntos, 8 asistencias, 5 rebotes, 24 de valoración) puso de nuevo el partidos patas arriba con una racha de acierto colosal. Cuatro triples seguidos para la afición maña entrara de nuevo en estado de euforia. La efectividad local en la línea de tres resultaba abrumadora. A mitad de segundo cuarto Basket Zaragoza firmaba 10/14 en triples. Asombroso. En defensa el equipo maño también rayaba a buen nivel. Hlinason defendió bien a Shermadini, que tampoco encontró alivio cuando el pivot islandés cometió su tercera falta. Radovic se convirtió en un filón dentro de la zona, apareciendo por sorpresa para anotar con facilidad. La mejor versión de Basket Zaragoza para dominar con comodidad el encuentro (56-41, min 19).
Sin embargo los locales entraron despistados al segundo tiempo. Justiz apareció por primera vez en el partido pero, muy mermado, apenas aportó algo. La defensa logró mantener la diferencia durante unos minutos pero sin anotar no iba a conservar la calma mucho tiempo. Los exteriores recortaron progresivamente la desventaja, aprovechando los regalos que iba repartiendo Marcelinho Huertas. El juego de CB Canarias giraba sobre el base, que aprovechó que enfrente no había un base puro. No le sentó bien a Basket Zaragoza este nuevo escenario. Perdió varios balones seguidos y le dio la oportunidad a los jugadores de CB Canarias de lanzarse como aviones al contraataque. Yusta (27 puntos, 3 rebotes, 28 de valoración) hizo estragos robando y saliendo en transición. De esta manera CB Canarias logró dar la vuelta al partido (68-70, min 29). No se quedaría ahí, era sólo el principio. CB Canarias descubrió la debilidad rival y se lanzó a degüello. Dos triples de Gielo (17 puntos, 3 rebotes, 22 de valoración) y un 2+1 de Yusta al comienzo del último cuarto colocaron a los de Porfi Fisac al borde del precipicio. Un triple de Dani Díez (12 puntos, 4 rebotes, 16 de valoración) elevó el parcial a un terrorífico 4-27 que marcó el choque (70-84, min 32). Basket Zaragoza no encontró un resquicio para reaccionar. De nada le sirvió anotar de tres, siempre llegaba un triple visitante para golpear un poco más su moral. Huertas (22 puntos, 17 asistencias, 5 robos, 36 de valoración, MVP de la jornada) era el dueño absoluto en la pista, hacía lo que quería cuando quería. Incombustible el jugador brasileño, pilar maestro en el juego de CB Canarias. Fisac ordenó una 1-3-1 como recurso desesperado pero Huertas encontraba los huecos para sortearla. Ahora se movía bien el balón para encontrar a Shermadini (16 puntos, 8 rebotes, 20 de valoración). No fallaba el equipo lagunero, que endosó 66 puntos a su rival en la segunda mitad. Un registro muy doloroso. Basket Zaragoza caía derrotado por segunda jornada consecutiva encajando más de cien puntos. CB Canarias alcanzaba la condición de cabeza de serie en la Copa con todos los honores. No hay que perderle de vista porque va a llegar en muy buen momento de forma.
Manresa 79 – Andorra 72: Una victoria en el Nou Congost aseguraba la plaza en la Copa para Andorra así que motivación no le faltaba al equipo de Ibon Navarro. Comenzó dominando a un rival nervioso que perdía demasiados balones y cometía con frecuencia faltas en ataque. Tampoco le acompañaba el acierto a Manresa, que en los primeros cinco minutos firmaba un 1/8 en tiros de campo. Tanto desatino permitió dominar el marcador a su rival (4-12, min 5), muy cómodo jugando en transición. Los locales reaccionarían con dos triples consecutivos y aprovechando las pérdidas de balón rivales. Aunque Andorra volvió a arrancar mejor el segundo cuarto, los balones perdidos seguían siendo un lastre. Desperdició once balones en 16 minutos, una cifra muy desfavorable para sus intereses. Le valía el ritmo alto que llevaba el partido pero a la velocidad no le acompañó el acierto. Además cometió faltas demasiado pronto, lo que permitió a Manresa acercarse. Los triples mantenían a Andorra por delante pero encontraron contestación, también desde la línea de tres. Al final la aportación de Llovet en la zona resultó fundamental para que los visitantes llegaran con ventaja al descanso (33-39, min 20).
Sin embargo le duró poco tras la reanudación. Dos triples seguidos enjugaron la diferencia en apenas un minuto. Una canasta de Kravish completó un 8-0 de inicio que puso por primera vez arriba a Manresa. A partir de entonces el partido transcurrió en una igualdad absoluta hasta casi el final de partido. Mucha tensión en la cancha. Juego demasiado acelerado que propició una alternancia continua en el marcador. No le sirvió a Andorra que Llovet y Musli (12 puntos, 10 rebotes, 17 de valoración) fueran recursos fiables en el juego interior. Manresa aprovechó los puntos de Luke Nelson (14 puntos, 8 asistencias, 16 de valoración) y el rebote ofensivo al inicio del último cuarto para continuar al acecho. A los visitantes les acabó pasando factura entrar pronto en bonus. Los tiros libres le dieron una pequeña ventaja a Manresa que significó oro puro. A Andorra le pudieron las prisas y la precipitación en los últimos minutos. Manresa acabó rompiendo el partido al contraataque. Logró un parcial de 2-13 que marcó la suerte del partido (75-66, min 38). Continúa su racha de victorias, la quinta en seis partidos, aunque ésta no tuvo los tintes agónicos de las anteriores. Andorra no hizo los deberes y sólo le quedaba esperar a los resultados del domingo para saber si estaría en la Copa.
Estudiantes 72 – Real Madrid 87: Seguramente estábamos ante el derbi madrileño más desigualado y predecible que se recuerde. Estudiantes, especialmente como local, por historia ha tenido la virtud de llenar el camino de minas a su poderoso vecino por muy fuerte que llegara hasta acabar derrotarle en no pocas ocasiones. Sin embargo, pocos rasgos guardan los colegiales esta temporada respecto a su tradición. ¿Cómo podían conocer la singularidad de esta añeja rivalidad los numerosos extranjeros de la plantilla sin apenas conocimiento del baloncesto español? ¿Cómo transmitir el rasgo competitivo de los derbis cuando la presencia del carácter del Ramiro es apenas residual? Ni siquiera en las gradas se respiraba ambiente de gesta. El peculiar uniforme multicolor que presentó Estudiantes añadió un punto cómico que se acrecentó tras el resultado final. Sin tensión añadida, el Madrid tuvo claro cómo plantear el partido. Con tres hombres altos en pista no había mejor estrategia que meter balones dentro. Thompkins, como alero improvisado, sacó ventaja desde el comienzo del marcaje de Dangubic. El dominio en la zona del equipo blanco fue abrumador. Controlaba el rebote sin oposición y anotaba con mucha comodidad cerca del aro. El 2-10 de inicio no presagiaba nada bueno para los colegiales. Sin embargo, la energía de Juan Palacios y la efectividad de Kadji en la media distancia permitió a Estudiantes arrancar y recortar diferencias. El extraño desacierto de Carroll, que acumuló un fallo tras otro en la línea de tres, facilitó a los locales igualar el marcador al final del primer cuarto (19-19, min 10). Estudiantes aún soñaba con complicarle la vida al equipo blanco. Una sensación efímera. El Madrid había sacado a la pista todos sus cañones para bombardear desde el perímetro. Laprovittola (11 puntos, 10 asistencias, 23 de valoración) anotó dos triples seguidos para iniciar el festival madridista en el tiro exterior. El base argentino rindió a muy buen nivel en el segundo cuarto, viendo aro con facilidad y asistiendo a unos compañeros que acribillaron el aro colegial. Thompkins (18 puntos, 7 asistencias, 6 rebotes, 29 de valoración) continuó con el destrozo. Nadie en el Madrid se arrepiente de esperar a que recuperara su peso, pocos jugadores en su puesto tienen tanta clase en el baloncesto europeo. Lideró el recital ofensivo del Madrid con una actuación en la que influyó en todos los apartados. Un tormento para el Ramiro.
Los de Laso sólo fallaron un triple en el segundo cuarto, una avalancha que destrozó la moral de Estudiantes. Acabó anulado, sin posibilidad de encontrar tiros sencillos puesto que la defensa madridista también funcionó a gran nivel. Sólo hicieron falta diez minutos para hacer añicos el encuentro. El parcial de 4-21 hasta el descanso dejó a las claras la enorme superioridad del Real Madrid (30-53, min 20). Y lo peor para los colegiales es que se tomó con toda naturalidad. El partido se le podía hacer muy largo. Sólo Palacios y Kadji (19 puntos, 6 rebotes), como en el primer cuarto, tuvieron el nivel competitivo necesario para mirar a la cara a un rival que se podía permitir jugar a medio gas. Bastaba con el terror que imponía Tavares (8 puntos, 8 rebotes, 19 de valoración) y rescatar del olvido el recurso del palomero para aprovechar el pésimo balance defensivo rival. Sólo las pérdidas de balón visitantes y el acierto a media distancia daban algún respiro al Estu, que sólo mostró orgullo en el último cuarto para maquillar el desastre. Demasiado tardó en cargar el rebote ofensivo como si no hubiera un mañana. Avramovic (16 puntos) aprovechó los minutos finales para atesorar unos números muy potables. Puede aportar con minutos. A Laso se lo llevaban los demonios con tanta concesión en el rebote. Como les suele ocurrir, sus jugadores volvieron a relajarse en exceso con una gran ventaja en el marcador. Pero no había espacio para que se complicara el partido. Mickey (20 puntos, 7 rebotes, 22 de valoración) siempre se lo tomó en serio y puso la guinda en el último cuarto a otro partido muy destacable. Y algunos se reían de su fichaje llamándole el ratón Mickey. Que rían, que rían. El derbi fue tan cómodo que Laso pudo darle unos segundos al joven Tisma, decimotercer canterano que debuta a sus órdenes. Otro enorme proyecto de jugador para todos los que siguen el baloncesto de formación y los torneos internacionales en categorías inferiores. Quien sabe si por este debut se recordará un derbi sin historia y que aireó todas las miserias de Estudiantes.
Barça 92 – Bilbao Basket 94 (tras prórroga): La derrota en casa contra Efes Pilsen, segunda consecutiva en Euroliga, aún debía doler porque el comienzo del Barça no fue nada alentador. Frío sobre la cancha, sin acierto en el tiro, sólo logró anotar dos puntos en los primeros cinco minutos. Pero Bilbao Basket tampoco estaba muy allá y a los azulgranas les bastó con retazos de Mirotic y Delaney para tomar una pequeña ventaja. Los Hombres de Negro, que se jugaban una plaza en la Copa en el Palau Blaugrana, se convirtieron en un rival correoso, no obstante. El tiro exterior le permitió mantenerse cerca en el marcador. Dos triples de Rafa Martínez contrarrestaron el acierto local en la línea de tres al comienzo del segundo cuarto. Bilbao Basket equilibró su juego ofensivo metiendo buenos balones a los pivots para tomar la delantera mediado el segundo cuarto (23-24, min 14). Le iba a hacer falta mucho más al Barça para marcar diferencias sobre un rival muy tenaz. Lo consiguió a partir de una buena defensa que le permitió robar balones y cargando con decisión el rebote ofensivo. Los triples se convertían en el único bálsamo en las pocas ocasiones que podía lanzar con comodidad Bilbao Basket. Sólo servían para salvar el tipo ante un Barça que ya parecía definitivamente asentado (41-32, min 20). Una tendencia que se confirmaba tras el descanso. Por simple inercia los azulgranas seguían aumentando la diferencia y marchaban firmes a resolver el partido antes siquiera de terminar el tercer cuarto (50-34, min 24). Pero nada más lejos de la realidad. En lugar de resignarse a su suerte, Bilbao Basket estaba más decidido que nunca a pelear. El premio, un lugar en la Copa, merecía la pena el esfuerzo. Se encomendó a su talentosa línea exterior para dar un vuelco al rumbo del encuentro. Jaylon Brown generó muchos problemas cuando encontró espacios para explotar su velocidad. La muñeca de seda de Bouteille (20 puntos, 3 rebotes, 21 de valoración) hizo estragos un partido más. Menudo anotador. Incluso apareció por sorpresa Lammers (18 puntos, 6 rebotes, 20 de valoración), un guerrero bajo aros del que no conocíamos que dispusiera de un notable tiro de media distancia. Lo sacó a relucir en el Palau Blaugrana con gran efectividad. El Barça se vio sorprendido por la reacción. Regresó la dependencia de Mirotic (24 puntos, 9 rebotes, 35 de valoración), algo demasiado habitual, pero no fue suficiente para frenar a un rival embalado y decidido que logró igualar el marcador al final del tercer cuarto (62-62, min 30). Incluso dispuso de oportunidades para adelantarse que no consiguió transformar al inicio del último periodo.
Le tocaba a los azulgranas encontrar nuevos argumentos para encauzar el partido. Los encontró en el dominio absoluto del rebote ofensivo. La pelea de Oriola (12 rebotes, 7 de ellos ofensivos) por cada captura siempre encontraba premio, se puso morado a rebotear en ataque. Con tantas oportunidades extra el Barça no iba a dejar pasar la ocasión. Se tomaba un respiro (74-66, min 35) pero ni por esas. Rafa Martínez (12 puntos, 3 asistencias, 17 de valoración) contestó con un 3+1 tras el tiempo muerto solicitado por Mumbrú. No había forma de sacar a Bilbao Basket del partido. El Barça se mantuvo por delante metiendo balones dentro a Tomic pero siempre encontraba respuesta. El final igualado estaba garantizado tras perder el balón Ribas por la línea de fondo a 22 segundos del final. Un triple le daba la victoria a Bilbao Basket. Es lo que tuvo en mente Brown durante la última posesión visitante. Se la jugó con un tiro de tres. Rebotó en el aro pero nadie se preocupó de cerrar los caminos hacia él. Lammers apareció por detrás para palmear contra tabla y anotar el 84-84 a dos segundos del final. Aún le quedaba una oportunidad a los azulgranas para acabar con el encuentro. Balón, como no, para Mirotic. Se lanza hacia atrás, puro estilo Nowitzki, pero sin fortuna. Los Hombres de Negro estaban a cinco minutos de lograr el billete para Málaga y, llegados aquí, no iban a renunciar. Sacaron petróleo de la falta de acierto de un rival desnortado y atenazado. Un triple de Mirotic es lo único que consiguió el Barça en cuatro minutos. En cambio a Bilbao Basket le entraban tiros de gran mérito, nada sencillos. Bouteille agitó la varita mágica para anotar dos canastones. Rousselle no le fue a la zaga con un tiro forzado y la mano del defensor en la cara (88-92, min 44). En plena inspiración rival, Delaney se apropió de los galones para jugarse todo. Un triple del base en modo Juan Palomo alargó el desenlace. El Barça tardó demasiado en cometer personal y lo hizo sobre Rafa Martínez, un seguro de vida al que no le tembló el pulso. Le quedaban seis segundos a los de Pesic para evitar otra derrota en casa. Ahora fue Higgins quien buscó el último tiro. Encontró una falta y tres tiros libres. Mumbrú y sus jugadores no daban crédito a la decisión. Pero Higgins tampoco fue capaz de aprovechar el regalo. Falló el segundo tiro libre y tuvo que errar a propósito el tercero en busca del rebote milagroso. El balón acabó saliendo por la línea de banda, con posesión del Barça. Nueve décimas que parecieron dos segundos pero Higgins tampoco tuvo fortuna con un triple forzado. Sí, la gesta ya no la podía impedir nadie. Bilbao Basket asaltaba el Palau Blaugrana y estará en la Copa. Completa el pleno en un escenario de la máxima dificultad. Todos los equipos españoles de Euroliga han mordido el polvo ante los Hombres de Negro en la primera vuelta. Matrícula de honor en su regreso a la Liga ACB.
Gran Canaria 72 – Baskonia 89: El penoso caminar de Baskonia esta temporada encontró más piedras en su trayecto en los primeros minutos en Las Palmas. Gran Canaria anotaba con una facilidad pasmosa. Un Harper desatado lideró un ataque infalible que movía el balón a una velocidad de vértigo y aprovechó el escaso desempeño defensivo del equipo vitoriano, abocado a otro naufragio si continuaba por estos derroteros (19-7, min 4). A diferencia de Baskonia, Gran Canaria aún mantenía algunas opciones de entrar en la Copa y su arranque de partido estuvo a la altura de la motivación. Sin embargo, los hombres de Ivanovic despertaron a tiempo de la caraja. El acierto en el tiro exterior le permitió reaccionar y recortar diferencias al final del primer cuarto aunque el desaprovechamiento del claro dominio del rebote ofensivo en el segundo cuarto impidió que afianzara la remontada. La presencia del gigante Fall en pista obligó a Bourousis a lanzar desde fuera. Dos triples del pivot griego demostraron que el remedio podía funcionar pero el porcentaje en el perímetro fue bajando conforme avanzaba el partido. Gran Canaria ya no encontraba tiros tan sencillos por mor de la mejoría defensiva visitante. Tampoco ayudó el día nefasto de Cook, negado en el tiro y superado por Pierria Henry. Gran Canaria acusó con fuerza sus errores al comienzo del tercer cuarto. Una antideportiva sobre Henry costó cinco puntos que pusieron por delante a Baskonia. Una pérdida de balón permitió a Henry anotar una sencilla bandeja que completó un parcial de 0-11 (47-54, min 23).
Gran Canaria se vino abajo al verse por detrás en el marcador. La buena defensa de Stauskas dejó maniatado a Harper. Bourousis estuvo demasiado flojo en la zona y falló canastas fáciles bajo el aro. Los años no pasan en balde. Baskonia ganó claramente en intensidad a los locales. El goteo constante de rebotes ofensivos crispó los ánimos de la afición de Gran Canaria, que ya no ocultó su malestar cuando Shields (15 puntos, 9 rebotes, 24 de valoración) anotó un triple sobre la bocina de final del tercer cuarto (55-68, min 30). Ya no pudo reponerse de este mazazo. Acabó hundido, regalando balones ante la eficacia de una defensa de Baskonia efectiva y disciplinada. Shengelia (13 puntos, 6 rebotes, 3 asistencias, 22 de valoración) y Diop (16 puntos, 4 rebotes, 21 de valoración) rompieron definitivamente el partido al comienzo del último periodo. El parcial de 2-19 escocía mucho en el Gran Canaria Arena (55-79, min 32), cansado de la fragilidad mental y falta de agresividad de los de Katsikaris. La reacción llegó demasiado tarde. El empeño en defensa y los contraataques sólo sirvieron para maquillar ligeramente una dura derrota. Baskonia encontró argumentos para buscar la recuperación. Falta le harán en su próximo compromiso en el Palacio de los Deportes contra el Real Madrid.
Valencia Basket 100 – Joventut 70: Si Valencia Basket vencía en la Fonteta tenía billete asegurado para la Copa y si perdía la tendría que ver por la tele. Así de claro y simple, sin vuelta de hoja, como si fuera una ficticia eliminatoria de octavos de final. La victoria por sorpresa de Bilbao Basket en el Palau Blaugrana obligaba a Joventut a ganar por más de 21 puntos, una quimera en una plaza tan dura como Valencia. Pese a ello no cejaría en el empeño, al menos en el primer cuarto. Prepelic y Harangody llevaron el peso ofensivo, con menos acierto del deseado, y Omic replicaba a Labeyrie (13 puntos, 5 rebotes, 16 de valoración) dentro de la zona. Las acciones individuales de Abalde dieron un margen interesante a Valencia Basket cuando el partido se encaminaba hacia el final del primer cuarto (19-12, min 8) pero la salida a pista de Kerem Kanter supuso un revulsivo para los verdinegros. Aprovechó la ausencia de Dubljevic para dominar el juego interior durante unos minutos y se convirtió en el referente ofensivo de la Penya para estrechar el marcador. Fue la última muestra de igualdad en el encuentro. Valencia Basket lo reventaría desde el perímetro. El acierto local en el tiro de tres desequilibró por completo a Joventut. López-Arostegui trató de mantener a su equipo en el minutos finales del segundo cuarto pero poco podía hacer cuando en el aro verdinegro entraba todo lo que lanzaba Valencia Basket desde fuera (48-37, min 20).
Al conjunto taronja sólo le quedaba esperar su oportunidad para dar el zarpazo definitivo. Mientras, los triples de Joan Sastre en el tercer cuarto le bastaban para mantener un amplio margen. Joventut no se encontraba sobre la pista. Sus tiradores no estaban acertados y los problemas se acrecentaban con el paso de los minutos. Cuando Prepelic no está inspirado la vida es mucho más dura en la Penya. Vives (9 puntos, 5 asistencias, 15 de valoración) controlaba el partido a placer, apenas era necesaria la presencia en pista de Colom. La resolución del choque estaba a punto de caramelo. Un triple de Doornekamp completó un parcial de 13-2 que hizo añicos el partido de forma definitiva (70-47, min 28). Con todo perdido, Joventut bajó los brazos. Habían desaparecido sus opciones de triunfo y las esperanzas de Burgos de meterse en la Copa. Valencia Basket disfrutó del objetivo cumplido en un última cuarto muy tranquilo. Marinkovic aprovechó los primeros minutos para reivindicarse. El acierto en el tiro exterior no cesó. Los triples seguían cayendo para elevar la diferencia por encima de los treinta puntos (94-63, min 36) mientras Joventut penaba por la pista, esperando impacientemente que acabara el suplicio. Un festival anotador para saborear la clasificación para la Copa. Le ha costado pero Valencia Basket va a llegar a Málaga como una gran amenaza en la cancha.
Fuenlabrada 69 – Betis 85: Duelo directo en la parte baja de la tabla que se antojaba de vital importancia en la pelea por la permanencia. Mucha tensión y responsabilidad cuando aún queda toda la segunda vuelta por disputarse. Lo acusó Fuenlabrada cuando le vinieron mal dadas. Comenzó bien, con una buena dirección de Bellas (14 puntos, 5 asistencias, 15 de valoración) y Mockevicius haciendo daño en el juego interior pero los triples del Betis lograron que su ventaja no pasara de una pequeña renta que se esfumó con la entrada a pista de Jerome Jordan. Con él cambió por completo el dominio en la zona, que pasó a manos verdiblancas. El pivot jamaicano adelantó por primera vez a los de Curro Segura, que ya no cederían el mando en el marcador. Almazán, que va ganando peso en el juego ofensivo en los últimos partidos, acabó inspirado el primer cuarto y elevó el parcial a un 2-16 que hizo mucho daño a los locales (16-26, min 11). No encajó nada bien Fuenlabrada verse por debajo en el marcador. Fue un manojo de nervios, víctima de una ansiedad acrecentada con la falta de acierto en el triple. Acabó la primera parte con un 1/13 en el tiro de tres. Un desastre en el perímetro que facilitó las cosas a la defensa rival. Todo el ataque local se basaba en momentos de inspiración individual que de nada servían. El Betis fue mucho más sólido colectivamente. Borg y Whittington mantenían la diferencia en la decena de puntos. Niang apareció al filo del descanso para aprovechar los desajustes en la zona de un rival desquiciado (29-42, min 20).
Nunca perdió el Betis el control de la situación. Continuaba el desatino en el tiro de tres y el Betis aprovechó los malos tiros para seguir haciendo daño en transición. El 3-9 de inicio colocaba a Fuenlabrada en una situación límite que tampoco arregló el tiempo muerto de Jota Cuspinera. Su equipo jugaba a tirones, a impulsos. Los triples seguían sin entrar, agravando el ataque de nervios del Fuenla. El Betis no necesitaba mucho para manejar el partido con tranquilidad. Sipahi (7 puntos, 10 asistencias, 5 rebotes, 18 de valoración) ofició como segundo base improvisado para acompañar a los directores de juego habituales. No lo hizo nada mal, sorprendió a la defensa de Fuenlabrada. La mejoría de Slaughter en la segunda mitad acrecentó el dominio sobre un rival que anotaba a cuentagotas. El intento de remontada la épica en el último cuarto quedó en eso, en un intento. El empeño de Bellas o el acierto puntual de Karvel Anderson no servían sin continuidad. Los tiros libres permitían a los verdiblancos manejar una distancia cómoda. Un triple de Enechonya ponía la sentencia (59-77, min 37) por mucho que Bellas le pusiera orgullo en los últimos minutos. Dos triples en los sesenta segundos finales pusieron la guinda al pastel que saborearon los seguidos del Betis presentes en el Pabellón Fernando Martín. Un triunfo contundente y muy valioso para pensar en la salvación. Este resultado es de los que duele. Jota Cuspinera tiene motivos para pensar que su puesto está en peligro.
El Real Madrid (14-3) finaliza la primera vuelta como líder en solitario tras las derrotas del Barça (13-4) y Basket Zaragoza (12-5). CB Canarias (11-6), Bilbao Basket (10-7), Valencia Basket y Andorra, ambos con 9-8, serán los demás participantes en la Copa junto al anfitrión Unicaja. Ocupan la zona de descenso Fuenlabrada y Estudiantes con 4-13.
El lunes se celebró el sorteo de la Copa del Rey, que deparó estos enfrentamientos en cuartos de final: Real Madrid-Bilbao Basket, Barça-Valencia Basket, CB Canarias-Andorra y Basket Zaragoza-Unicaja. Podemos tener un Clásico en semifinales si los dos grandes futboleros superan la primera eliminatoria.
Leave a Reply
Be the First to Comment!
You must be logged in to post a comment.
You must be logged in to post a comment.