Ya tenemos la final preparada. A partir del próximo miércoles, Real Madrid y Baskonia se enfrentarán con el título de la Liga ACB en juego. El equipo vitoriano dejó en la cuneta en el cuarto partido de la semifinal. Un duelo duro, intenso, de enorme desgaste. Decidido en la prórroga por la mala cabeza de Baskonia en el último minuto del tiempo reglamentario. Pudo enmendar la plana en el tiempo extra, resistiendo al empuje de un Barça con la moral recobrada pero que se quedó sin gasolina en el momento de la verdad. Despedida honrosa aunque no sirve para cumplir expectativas en la máxima competición nacional. El final del camino que puede ser el punto y final de la carrera de Navarro. No hay indicios ni nada confirmado pero no es un secreto que la trayectoria deportiva de La Bomba está muy cerca de terminar. Un final de carrera convertido en un triste vagar. Una dura agonía que no hace justicia con uno de los símbolos de la etapa más brillante del baloncesto español. ¡Qué importante es saber parar a tiempo! La derrota en el Palau Blaugrana contra Baskonia pudo ser su último partido. Dentro de unos días sabremos si ha llegado el final de camino para Navarro. Un camino inolvidable pero demasiado largo.
Barça 82 – Baskonia 88 (tras prórroga) (1-3): Baskonia dominó de inicio gracias al provecho que sacó de varios rebotes ofensivos. Aunque lanzó demasiado de tres, el conjunto de Pedro Martínez golpeaba primero en un partido tan espeso como el tercero de la serie. El Barça no terminaba de encontrarse cómodo. No aprovechaba el rebote ofensivo y perdía demasiados balones. Facilidades que permitieron al Baskonia seguir por delante. Janning mantenía por delante a su equipo con cierta solvencia. La facilidad para anotar de tres allanaba el camino. Baskonia controlaba el encuentro y a un rival que sólo actuaba a impulsos. La sucesión de pérdidas de balón no frenó al equipo vitoriano. Despertó Vildoza para dejar todo como estaba. El tiro de tres de Baskonia seguía creando estragos en el aro azulgrana. Diferencia enorme con el tiro exterior del Barça, que apenas funcionaba. Un triple sobre la bocina del descanso de Beaubois fue la última muestra del desarrollo del encuentro. El Barça lo intentaba pero sentía impotencia ante un rival más seguro y acertado (34-44, min 20). Tuvo el valor de no rendirse. Salió con mayor dinamismo en ataque pero continuaba sufriendo el sensacional acierto de Baskonia en el perímetro. Dos triples más pusieron la máxima diferencia en el marcador (39-50, min 23) pero el Barça consiguió reactivarse gracias a Hanga. El alero húngaro recordó por momentos en esta eliminatoria a la versión enérgica y entregada que le convirtió en un referente en Vitoria. Transmitió una agresividad en defensa que colapsó durante unos minutos el ataque de su ex-equipo. Un triple de Moerman puso la guinda a un parcial de 10-0 que devolvía al encuentro al Barça. Tuvo incluso una ocasión para igualar el partido pero no aprovechó la oportunidad. Baskonia logró mantenerse por delante con los tiros libres y el buen trabajo de Voigtmann bajo tableros. Aire fresco para recuperar el resuello. Los de Pedro Martínez empezaron lanzados el último cuarto. Un triple de Timma y un 2+1 de Shengelia permitió a los visitantes recuperar los diez puntos de ventaja (55-65, min 31). Un tesoro en un partido tan áspero. Baskonia entró pronto en bonus pero le dio igual. No pensaba bajar el tono de dureza e intensidad atrás. A Tomic (11 puntos, 9 rebotes, 11 faltas recibidas, 27 de valoración) le cayeron golpes por todos lados. Frustrado, propinó un cabezazo en medio campo a Diop. Pasó desapercibida la acción y Tomic se libró de una expulsión muy clara.
Fuente: diariosigloxxi.com
El nivel de dureza era extraordinario. Muchas faltas que alargaron un partido plomizo pero de alto voltaje. Shengelia (22 puntos, 7 rebotes, 9 faltas recibidas, 33 de valoración) también se llevó su ración de jarabe de palo. El Barça apostó por una mayor presión defensiva, en busca de un recurso desesperado. Provocó tres pérdidas seguidas. Le faltó acierto para aprovechar los errores de Baskonia pero la fiereza atrás le mantuvo con vida. Un triple de Heurtel puso el 70-73 a un minuto del final. Un resbalón de Beaubois dio esperanzas al Palau Blaugrana pero Heurtel se llevó un soberano tapón de Shengelia que enfrió los ánimos. El partido parecía visto para sentencia tras anotar dos tiros libres Janning pero Baskonia se complicó la existencia de forma absurda. Shengelia falló un tiro libre y Timma cometió personal sobre Claver en el rebote. No falló Claver (14 puntos, 7 rebotes, 19 de valoración) que reducía la desventaja a dos puntos. El disparate llegó al nivel máximo con un mal saque de fondo que acabó en robo de Moerman. Balón a Navarro que asistió a Claver para que mateara a placer. 76-76, el Palau Blaugrana eufórico ante tal milagro insospechado. Aún tenía 20 segundos Baskonia para un último ataque. Shengelia buscó el triple pero se quedó corto. El último intento forzado de Beaubois no tuvo mejor suerte. Baskonia había desperdiciado una victoria segura por sus propios errores. La prórroga se le podía hacer cuesta arriba. La inyección de moral impulso al Barça que comenzó dominando el tiempo extra. Su intensidad atrás hizo sufrir a Baskonia pero varias malas decisiones tiraron por tierra el buen comienzo. Los pivots de Baskonia aprovecharon los regalos para poner por delante a su equipo. Al Barça le sentó muy mal. Sin la euforia de la remontada, notó que se había terminado la gasolina. El acierto desapareció en el momento más inoportuno. Hanga falló dos tiros libres. Un triple errado por Navarro enterró definitivamente el equipo azulgrana. Esta vez no le tembló el pulso a Baskonia para cerrar el partido desde el tiro libre. Regresaba a una final ocho años después.
Fuente: piratasdelbasket.net
PREVIA DE LA FINAL:
Real Madrid y Baskonia disputarán la final de la Liga ACB esta temporada. Un duelo clásico en la competición liguera y muy repetido en los playoffs pero sólo se ha celebrado en una ocasión, en 2005. Una final inolvidable que se recordará por el último minuto del quinto partido y el célebre triple de Herreros que le dio al Real Madrid un título inverosímil tras remontar ocho puntos en apenas 50 segundos. Ha pasado mucho desde entonces. El autor de aquel triple trabaja en los despachos como uno de los creadores del equipo que está marcando una de las etapas más gloriosas del Real Madrid. Pablo Laso, mito en Vitoria, tiene un rival nuevo en la pelea final por el título. Se presenta un duelo de pizarras muy interesante con Pedro Martínez, uno de los grandes entrenadores españoles y que ya le ganó por la mano con Valencia Basket la pasada temporada. Real Madrid y Baskonia son dos equipos con gusto por el baloncesto veloz y la búsqueda del tiro exterior aunque sus características son diferentes. Baskonia es un equipo con un poderío físico muy elevado. El Madrid apuesta por una plantilla larga donde prima el talento ilimitado. Dos caminos diferentes para llegar al mismo lugar. Se presenta una final muy dura. El arsenal físico de Baskonia y el potencial de su tiro exterior le convierte en un rival arduo para cualquiera aunque el último precedente entre ambos no sea nada positivo para Baskonia, derrotado en el Palacio de los Deportes por un rival que ya estaba reservando jugadores y energías para la Final Four. Hay duelos muy interesantes. Tavares se va a enfrentar a un juego interior muy fuerte y rocoso. Lo tendrá más complicado que en las dos anteriores eliminatorias. Hará falta un Ayón al nivel mostrado ante Gran Canaria. Shengelia será pieza clave en el desarrollo de la final. Los ala-pivots del Madrid tendrán una prueba muy exigente en la defensa al ‘4’ más poderoso de Europa. Beaubois y Vildoza también suelen realizar buenos partidos contra el equipo blanco. Tienen deberes los jugadores exteriores en defensa. El quebradero de cabeza de Baskonia lo representa Doncic. Lo es para cualquiera pero el equipo vitoriano no tiene bases o escoltas especialmente agresivos en defensa y físicamente Doncic los supera. No es raro que suela deslumbrar contra Baskonia. El acierto en el tiro exterior en estos playoffs del conjunto de Laso es el punto más peligroso. Rudy y Carroll están de dulce. Si se suma Llull los problemas pueden ser irresolubles. Todo un reto puesto que es difícil frenar al juego exterior madridista, sobre todo si el Madrid se pone a correr. No espero una final sencilla para nadie, son dos equipos muy competitivos. Apuesto por emoción, tensión y dureza en una final que bien puede agotar los cinco partidos.
Y DIGO YO…:
- La última vez que Baskonia llegó a la final de la Liga ACB fue en 2010. Entonces rompió todos los pronósticos para batir por un rotundo 3-0 al Barça que se había proclamando campeón de Europa y que parecía inabordable. El famoso 2+1 de San Emeterio supuso el último gran título del equipo vitoriano. Superó el factor campo en contra ante un rival todopoderoso. Como ahora, en 2018…
- Baskonia perdió 21 balones en el cuarto partido, algunos de ellos realmente absurdos. Incluso cayó en infracción de ocho segundos en tres ocasiones, algo que no he visto antes desde que se modificó la norma y se rebajó en dos segundos el límite de diez en 2001. Increíble que lograra vencer el partido con una cifra así aunque también explica que se llegara a la prórroga con todo a favor.
- La de Navarro puede no ser la única despedida importante. Ante Tomic acaba contrato y los rumores le sitúan fuera del club la próxima temporada. Números importantes pero impacto escaso. Llegó al Barça para, según sus palabras, ganar títulos y puede irse con una Liga ACB, una Copa y una Supercopa. Escaso botín. Y lo peor es que en el Real Madrid nadie le echa de menos.
- El cuarto partido entre Barça y Baskonia alcanzó las dos horas y media de duración. Vale que se disputó una prórroga pero este tiempo de partido NBA convirtió el choque en insufrible en ocasiones. Exceso de parones y tiempos muertos que alargó el desenlace. Y ya son varios los partidos esta temporada en los que me he encontrado algo parecido. Puede acabar con la paciencia de cualquiera.
- Continúan las despedidas de técnicos. Joan Peñarroya no continuará en el banquillo de Andorra la próxima temporada. Se marcha el entrenador que devolvió al club andorrano a la élite y ha estado al frente de la etapa más brillante del club en la Liga ACB. Carácter explosivo y juego veloz y ofensivo que merecen un banquillo con aspiraciones.