Mientras Carlos Santana aún retumbaba en las paredes del Oracle Arena, podíamos observar como Steve Kerr regresaba al banquillo de Golden State para el segundo partido de la serie. Estaba claro que era un partido fundamental para ambos equipos. No sorprendía ver a unos Cavaliers más agresivos de inicio, que contaban con el mayor acierto de Lebron James y Kevin Love para ponerse por delante. El equipo local tardaba en encontrar el ritmo adecuado, pero un acertado Klay Thompson les mantenía en el partido. Steve Kerr solicitaba un tiempo muerto y en el regreso a la pista se notaba otra actitud en el cuadro local. Con más manos en la defensa del balón, y una mejor circulación de estte en ataque, se daba lugar a un parcial de diez a dos en dos minutos apoyado en la mejor versión de Draymond Green. Pese a los intentos de Tyronn Lue por mejorar, obtando por un quinteto más dinámico con Richard Jefferson y Channing Frye, los Warriors llegaban al segundo cuarto con seis puntos a su favor. Todo gracias a la aparición de Stephen Curry en el partido.
El paso por los banquillos enfriaba a un Green despistado que veía como le sacaban su tercera falta personal con apenas diez segundos de juego. Por suerte para los de la bahía de Oakland, Cleveland trabajaba poco sus ataques y los suplentes locales disfrutaban intimidando para doblar la ventaja en apenas dos minutos. Lebron tenía que regresar a la pista para que su equipo comenzase a anotar. Golden State se mostraba con poco cuidado del balón y Kerr decidía poner en pista a los titulares; pero la tónica no cambiaba. Los Cavaliers se acercaban y, ni el despiste de Lebron por una jugada que consideraba mal señalizada, evitaba que al descanso la diferencia entre ambos equipos fuese de una canasta triple.
Tras el cuarto de hora de meditación en los vestuarios, llegaba el cuarto que debía marcar las distancias en favor de algún equipo. Era el cuarto preferido por los Warriors y por ello no sorprendía verlos mejor de salida. JR Smith cometía su cuarta falta personal, Kevin Durant se aliaba con Curry para llevar la distancia por encima de los diez puntos y el técnico visitante necesitaba para el partido. Cleveland sacaba un quinteto más bajo para reducir las diferencias aprovechando que Green también cometía su cuarta falta personal. Steve Kerr necesitaba recordar a su equipo lo que se jugaban, y Durant lo entendía perfectamente. Lideraba un parcial de siete a cero tras el parón, todo apoyado en una defensa siempre atenta a los cambios y las ayudas. Lebron comenzaba a dar síntomas de cansancio (Lue lo sentaba faltando un minuto de cuarto), los Cavaliers se precipitaban y la quinta falta personal era la unica mala noticia para Golden State al finalizar el tercer acto.
La afición local se relamía con los catorce puntos de ventaja que contaban a su favor. Eso obligaba a reducir el paso por el banquillo de los titulares visitantes. Apretaban los Cavaliers en defensa y, de no ser por los cortes a canasta de Ian Clark, la diferencia no se hubiese mantenido ni dos minutos; y es que Kyrie Irving estaba jugando sus mejores minutos del partido. Kerr se veía obligado a poner a los titulares antes de tiempo, y el equipo respondía. Klay Thompson y Kevin Durant se mostraban implacables en ataque y defensa, la diferencia se asomaba a las dos decenas. Lue realizaba un intento por parar el partido, pero Durant y Curry parecían querer resolver el partido. Irving y Love sarovechaban la relajación local para rebajar la diferencia. El tiempo muerto local era obligado. Green regresaba a la pista y, restando cuatro minutos, el técnico visitante rendía el partido. Cleveland volvía al hogar con el dos a cero en contra. Invitado inesperado: David West, Steve Kerr (Warriors)
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1 Comment on "FINAL NBA 2017. Segundo partido: Sin perdón."
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Golden State ha empezado fortísimo pero la prueba de fuego viene en estos partidos en casa de Cleveland. Se nota que los Warriors están mentalizados para ganar y que con Durant, LeBron debe doblar esfuerzos, con la fatiga que le supone. Cleveland necesita parar a Curry o Durant y que sus secundarios hagan un partido perfecto.
Pero al año pasado también se veía así la final y acabó con Cleveland ganando 4-3 en Oakland. El tercer partido será clave para ver la respuesta de los Cavs al poderío de Golden State.