Antes de comenzar las semifinales se atisbaba que la forma de llegar a la final podía tomar un camino muy diferente en cada eliminatoria. La impresión no ha sido nada desacertada. El Real Madrid ya está en la final por la vía del cloroformo tras batir por 3-0 a Unicaja. El bombardeo desenfrenado de Carroll en el segundo partido dio la tranquilidad para pelear en el ambiente siempre cargado y caliente del Martín Carpena. No dejó pasar una sola oportunidad. Ni el apoyo constante de la afición local ni el partido trabado y farragoso presentado por Unicaja evitaron el triunfo del Real Madrid que alcanza una nueva final en la Liga ACB. El camino es bien distinto en la otra semifinal. Baskonia y Valencia Basket están inmersos en una serie larga y áspera que aún tiene capítulos por añadir. La ventaja conseguida por el equipo valenciano tampoco supone un seguro de vida para un club acostumbrado a pegarse tiros en el pie y que tiene un enfrente un rival duro como el granito y al que le sobra carácter. Nada descabellado un quinto partido que puede llevar la semifinal al límite del agotamiento. Los vaticinios previos se han cumplido. Dos caminos distintos para llegar a una final que pueden tener su peso en la lucha por el título.

2º Partido:

Baskonia 90 – Valencia Basket 70 (1-1): Además de escocer en Vitoria, la victoria a domicilio de Valencia Basket en el primer encuentro de la semfinal obligaba a los de Sito Alonso a vencer para no convertir el pase a la final en un sueño imposible. La tensión se hizo palpable en los primeros minutos, llenos de imprecisiones y errores. Estaba claro que iba a resultar una eliminatoria muy dura y ello provoca un exceso de responsabilidad. Diot (16 puntos, 6 asistencias, 4 rebotes, 17 de valoración) comenzó muy inspirado. Anotó dos triples que pusieron por delante a los visitantes pero la defensa de Baskonia no tardó en ponerse las pilas aunque fuera a costar de cometer personales. Salió ganando puesto que Valencia Basket no estuvo nada acertado en el tiro libre. Hasta cinco consecutivos falló, un regalo que no dudó en desaprovechar Baskonia. Las pérdidas de balón ahondaron los problemas visitantes, que se vieron a rebufo ante la efectividad de los hombres de banquillo de Baskonia. Dubljevic trató de frenar la caída en las postrimerías del primer cuarto. Sato salió a pista muy acertado y consiguió adelantar de nuevo al equipo taronja pero los problemas regresaron a Valencia Basket con la lesión de Vives. Un problema considerable puesto que ya sólo quedaba un base en la plantilla. A Pedro Martínez le tocaba comerse la cabeza, debía cuidar a Diot que llevaba la voz cantante en ataque durante todo el segundo cuarto. Baskonia empezaba a crear estragos en el tiro exterior. Ricky Ledo (24 puntos, 5 rebotes, 3 asistencias, 24 de valoración) fue una pesadilla en el perímetro, va justificando su fama de anotador que se granjeó en la liga turca tras unos primeros partidos muy discretos. Hanga (18 puntos, 5 rebotes, 5 asistencias, 29 de valoración) acompañó al puertorriqueño al final del segundo cuarto para asegurar la ventaja local al descanso (46-41, min 20). Valencia Basket aún aguantaría bien el tipo durante los primeros instantes del tercer cuarto pero fue perdiendo pie paulatinamente. Baskonia imprimió la intensidad necesaria para hacerse con el control del partido. Shengelia ganó la partida en el juego interior. Un parcial de 11-0 propiciaba la primera ventaja seria del encuentro (58-46, min 25). Le costaba encontrar buenos tiros a los visitantes, que sufrían el acierto en el perímetro del equipo vitoriano. Sato era el único recurso en ataque para hacer frente a un rival más intenso y sólido en la pista. Valencia Basket empezó a acordarse del inconveniente que suponía contar con un solo base sano. Sin Diot en pista sufrió. Ni Sastre ni San Emeterio funcionaron como soluciones improvisadas. En cambio a Sito Alonso le sobran directores. Puso a dos bases en pista y Baskonia controló el juego casi sin oposición. No le costaba mantener a raya a un rival que sólo anotaba a cuentagotas y con mucho sufrimiento. Sólo Diot y Sato dieron la talla en el equipo valenciano, ninguno más ayudó. Otra racha anotadora de Ledo, mediado el último cuarto, dejó el encuentro visto para sentencia. El parcial de 12-0 hacía trizas definitivamente el choque (82-62, min 37). No había oposición en un rival hundido por la lesión de Vives y escasa presencia en la zona. Diop, que sigue cobrando protagonismo en Baskonia, hizo trizas a los pivots visitantes. La recta final sólo sirvió para que Rafa Martínez consiguiera su triple 700 en Liga ACB. Baskonia salva los muebles con esta victoria pero el triunfo de Valencia Basket en el primer partido supone un tesoro.

Fuente: lasnoticiasdejaviermesareig.com

Real Madrid 101 – Unicaja 72 (2-0): La segunda entrega en el Palacio de los Deportes nada tuvo que ver con lo ofrecido en el primer encuentro. Del juego trabado y lento del choque anterior, tan del gusto de Unicaja, se pasó al desenfreno ofensivo del primer cuarto de este segundo partido de la eliminatoria. Poca entrega defensiva, intercambio constante de canastas. El Real Madrid entregado a Llull otro partido más, su ataque volvía a girar entorno al base que anotaba la mitad de los puntos del equipo blanco. No es la mejor señal que lo acapare todo aunque esté incomensurable. Le hacía falta ayuda puesto que a Unicaja no le costaba mantenerse pegado en el marcador (20-21, min 8), se manejaba bien aunque no es el tipo de partido que le interesa. Llegó la dinamita en cuanto Laso movió el banquillo. Doncic (11 puntos, 6 asistencias, 5 rebotes, 23 de valoración) dio otra marcha más al juego. Parece que ya va asimilando el golpe que supuso su decepcionante Final Four. Pero el Real Madrid aún guardaba su arma de destrucción masiva, esperó al segundo cuarto para ponerla en funcionamiento. Carroll apareció en pista con la escopeta cargada llena de munición. No hizo prisioneros. Nada más entrar obsequió al Palacio de los Deportes con un triple. Una pésima noticia para el rival, que no se imaginaba hasta qué punto llegaba la inspiración de la muñeca más mortífera y elegante de la Liga ACB. El parcial de 14-2 colocaba la diferencia por encima de los diez puntos al comienzo del segundo cuarto. Unicaja naufragaba ante la intensidad que le habían dado los hombres de refresco al equipo blanco. Y eso que aún Carroll estaba reservando sus cartuchos. Esperó al tramo final del segundo cuarto para ajusticiar a un rival que trataba de buscar la forma de sobrevivir como hiciera en el primer choque. No daría opción un Carroll desatado, indefendible. Sometió a los de Joan Plaza a un bombardeo mortífero. Cuatro triples en los últimos minutos, tres de ellos en el minuto final. El Palacio de los Deportes se rindió a la efectividad destructora de uno de sus jugadores predilectos. Carroll (29 puntos) hizo añicos a Unicaja con un exhibición magistral. 6/7 en triples y un 2+1 para 21 puntos en todo el segundo cuarto, una masacre en toda regla. Se marchó entre reverencias y aclamaciones. Había destruido hasta los cimientos a un rival duro como el granito en el aspecto mental (57-33, min 20). Unicaja no se recuperó del bombardeo destructor de Carroll, no le quedaban fuerzas ni argumentos. Incluso Plaza había arrojado la toalla. El Madrid mantuvo su marcha imparable en el tercer cuarto, manejando el partido con una suficiencia apabullante. Disfrutó con un intercambio de canastas que mantenía diferencias muy abultadas, por encima de los veinte puntos. Acabó beneficiando al Madrid que estuvo abrumador en el juego interior. Ayón y Randolph hicieron fosfatina a los pivots de Unicaja, alicaídos y superados durante el tercer cuarto. Falta le hacía a los pivots del Real Madrid este baño de autoestima tras las calamidades sufridas ante Fenerbahçe y Andorra. Unicaja era un pelele en manos de los hombres de Laso (73-41, min 25) que podían disfrutar de muchos minutos de tranquilidad. El último cuarto quedaba para el lucimiento individual. Unicaja encontró el momento para la liberación y el desquite individual pero no logró reducir un ápice la enorme ventaja. Doncic también tenía cuentas que saldar. Carroll redondeó su enorme partido, que entra por derecho propio en un puesto muy alto en su lista de grandes exhibiciones. Vital para que el Real Madrid viaje con tranquilidad a Málaga. Unicaja no consiguió el premio de arañar un triunfo y se enfrenta a un imposible, dar la vuelta a un 2-0.

Fuente: lainformacion.com

3º Partido:

Valencia Basket 75 – Baskonia 69 (2-1): Un espectacular vídeo, proyectado sobre la pista de la Fonteta, sirvió como aperitivo a los dos partidos que se disputarán en Valencia. Se nota que esta eliminatoria tiene aroma a duelo de los grandes. Este preámbulo motivó a Valencia Basket. Tras unos primeros minutos muy igualados tomó el mando al son que tocaba Diot. El jugador francés va recuperando su mejor nivel en estos últimos partidos, algo que cobra más importancia con la lesión de Vives. Valencia Basket gozaba de un excelente equilibrio en el juego ofensivo y desesperaba en defensa a un Baskonia que acusaba las numerosas pérdidas de balón, hasta siete en todo el primer cuarto (21-10, min 7). Diot pasó por el banquillo para tomarse un respiro y Pedro Martínez echó mano de Sastre y San Emeterio como parches en el puesto de base. La falta de un jugador específico en la dirección ocasionó numerosos problemas a los locales, que empezaron a sentir el aliento de su rival en el cogote demasiado pronto. Despertó el tiro exterior de Baskonia y tres triples seguidos obligaron a Pedro Martínez a parar el partido. No sirvió de mucho porque sin base puro su equipo estaba completamente perdido, sin ideas ni acierto para superar la buena defensa de Baskonia que se había asentado al fin en la cancha. Shengelia lograba dar la vuelta al marcador. Larkin (16 puntos, 5 asistencias, 5 rebotes) mostró la importancia de contar con un buen base. Las soluciones improvisadas no son buen remedio ante un base tan rápido y eléctrico. Un parcial pa cagarse de 3-19 obligó a Pedro Martínez a echar mano de Diot. Los problemas ofensivos de Valencia Basket eran acuciantes, sólo anotaba desde el tiro libre. Tardó 7:40 en anotar su primer tiro de campo en el segundo cuarto. Casi se puede decir que salió bien librado consiguiendo que Baskonia no se marchara en el marcador al descanso (34-37, min 20). Resultaba el intermedio un respiro para los locales, necesitaban parar y afrontar de otra forma la segunda mitad. Lo hicieron. El regreso de Diot devolvió el control del juego a Valencia Basket, tan serio y equilibrado como en el primer cuarto. Dubljevic empezaba a marcar territorio dentro de la zona. San Emeterio (15 puntos, 5 rebotes, 17 de valoración) volvió loco a Beaubois que cometió la cuarta personal y tuvo que ser sujetado por Larkin cuando intentaba encararse con el árbitro.

Fuente: lainformacion.com

Los nervios cundían en el equipo vitoriano que empezó a tomarla con los colegiados. Hanga se llevó una técnica tras tirarse un rato protestando. Para colmo Larkin tuvo que abandonar la cancha noqueado tras un duro choque con Dubljevic. Baskonia había perdido el rumbo. Un triple de San Emeterio puso la máxima ventaja en el marcador y allanaba el camino hacia el triunfo (55-42, min 26) pero apareció el carácter de Baskonia. Diop mantuvo al conjunto vitoriano desde el tiro libre. Ledo apareció para guiar un parcial de 0-10 que metía de nuevo en el partido a Baskonia. De nuevo la diferencia se recortaba cuando Valencia Basket no disponía en pista de un base puro. Dos triples le dieron aire a los locales antes del final del tercer cuarto pero las faltas comenzaron a perseguirles al inicio del periodo definitivo. Apenas tardó en entrar en bonus en minuto y medio. Ya llevaba siete faltas antes de cumplirse tres. La Fonteta estaba con la mosca detrás de la oreja, Baskonia se mantenía cerca en el marcador con los tiros libres aunque sus errores en la línea provocaron que el susto no fuera mayor. Pero cuando más apretaban los de Sito Alonso siempre apareció Diot. A cada acercamiento respondió el base francés para mantener a Valencia Basket por delante. Pese a que Baskonia llegó vivo al último minuto topó con la inspiración de Diot (16 puntos, 5 asistencias, 3 rebotes, 18 de valoración) que siempre anotaba en el momento oportuno. Otro francés, Beaubois, puso el 69-67 con un triple desde la esquina a medio minuto del final. Más presión para Valencia Basket que volvió a buscar a Diot. El francés tuvo de nuevo la solución en sus manos. Gran pase a Oriola que anotó una canasta prácticamente definitiva. Por si fuera poco, Diot provocó que perdiera el balón Baskonia en el saque de banda. Ya no se le podía escapar el triunfo a Valencia Basket que se encuentra a un paso de llegar a la segunda final de su historia en la Liga ACB.

Fuente: plazadeportiva.com

Unicaja 73 – Real Madrid 76 (0-3): No había mañana para Unicaja, sólo le valía vencer para seguir con vida en la eliminatoria. Así se lo tomó desde el comienzo. Un tapón sobre Llull y un 3+1 de Alberto Díaz (9 puntos, 4 rebotes, 4 asistencias, 16 de valoración) suponían el mejor punto de partida posible. Al Real Madrid le costó entrar en el partido, parado por el ritmo espeso que imponía Unicaja y superado en el rebote. Tres minutos y medio tardó en anotar sus dos primeros puntos pero los fallos continuados de Unicaja frenaron al equipo malagueño. Sobre la pista la lucha era encarnizada, en especial en las zonas. Tampoco había alivio en el tiro exterior, sobre todo por parte del Real Madrid que no acertaba una en el triple. Muchos fallos y pérdidas en ambos equipos que se mantenían en el segundo cuarto. Porcentajes pésimos de tiro que dejaban un marcador paupérrimo. Sin embargo Unicaja salió del atolladero desde el perímetro. Carlos Suárez apareció para aprovechar las facilidades que encontró para lanzar desde fuera. Tres triples seguidos del alero de Aranjuez abrían una brecha muy valiosa para este tipo de partido tan trabado (25-17, min 15). En cambio el tiro exterior del Madrid seguía sin funcionar de modo alguno. Acabó la primera mitad con un descorazonador 2/13 en triples. El partido no tomaba buen cariz para los visitantes y Laso metió carácter con Llull y Nocioni. Sangre fresca de un veterano indomable para activar al equipo. También las ideas se renovaron. Visto que no había manera de anotar desde fuera buscó el equipo blanco el juego interior. Llegaron buenos pases dentro que aprovecharon Nocioni y Ayón (10 puntos, 7 rebotes, 17 de valoración). Los pivots consiguieron reducir la desventaja y el daño casi a la nada al descanso (33-31, min 20) pero los problemas del equipo blanco en el tiro exterior no escapaba a la atención de Joan Plaza que no dudó en ordenar una zona 2-3 en defensa. No le importaba que el Real Madrid tirara desde fuera, los de Laso seguían sin acertar en el triple. Unicaja controlaba la situación con comodidad. Alberto Díaz manejaba el ritmo del partido y encontraba con facilidad a Musli cerca del aro. Un parcial de 11-3 volvía a complicar la existencia a un Madrid espeso. Randolph continuaba tan errático como en la primera parte, Maciulis ni se atrevía a mirar el aro y Llull no acertaba en la dirección. La zona permanente de Plaza era un generador continuo de problemas con el que se chocaba el Real Madrid (52-43, min 28).

Fuente: diariosur.es

Laso tardó en cambiar piezas. Uno de los sustituidos fue Llull, un riesgo considerable pese a que el base no estaba fino. Sin embargo la reacción llegó de inmediato sin él en pista. Aparecieron dos hombres clave para cambiar el paso del Madrid. Randolph comenzó a anotar pero su mayor contribución fue en defensa, obsequiando con su catálogo de gorros a los jugadores de Unicaja. Cuando quiere es un factor desequilibrante. Doncic aportó todo lo que no consiguió Llull. Sus acciones individuales hicieron brecha en la defensa zonal de Unicaja. Plaza tuvo que cambiar a defensa individual pero la marcha del encuentro ya no beneficiaba al equipo malagueño. Una canasta de Felipe Reyes adelantó por primera vez al Real Madrid en el partido. El público empezó a emprenderla con los árbitros, sobre todo tras llevarse una técnica Plaza por protestar (56-59, min 33). Eyenga mantuvo a Unicaja dentro del partido hasta que Nedovic puso el picante. Entre ambos adelantaron de nuevo a los locales pero el Madrid devolvió cada golpe. Un triple de Nedovic fue contestado por otro de Carroll. Otro triple de Eyenga encontró por respuesta tres tiros libres de Doncic. Todo pasaba por las manos de Nedovic en el equipo malagueño pero faltó un punto de calma. No todas las decisiones del serbio eran acertadas y el Madrid encontraba la oportunidad para dar la puntilla. Los tiros libres afianzaron al equipo blanco pero Nedovic no había dicho su última palabra. Anotó dos triples, el segundo desde más de ocho metros, para presionar a los de Laso. Llull no falló. Aunque pudiera fallar el segundo para dejar pasar el tiempo (sólo quedaban dos segundos) no dudó en anotar. El intento a la desesperada de Carlos Suárez desde su campo fue simple fuego de artificio. El Madrid tomaba el Martín Carpena para reservar una plaza en la final.

Fuente: lainformacion.com

Y DIGO YO…:

• Desde 2011 el Real Madrid no falta a una final de la Liga ACB. Seis finales consecutivas jalonadas por tres títulos y otro actualmente en disputa. Hegemonía incontestable en una de las etapas más doradas en el equipo blanco.
• Unicaja anotó en el tercer partido 13 triples por 12 tiros de dos. Estremecedor, en otra época son cifras que no llevaban a ninguna parte. Cosas del baloncesto moderno aunque de poco le sirvió ante el Real Madrid que le ha superado tanto con un recital de triples de Carroll en el segundo duelo como estando ineficaz en el tiro de tres en el tercero. El juego interior aún tiene su espacio en el baloncesto actual, ya lo demostró Fenerbahçe.
• Carlos Suárez fue durante años el alero de futuro del baloncesto español aunque nunca fue del gusto de Scariolo que siempre le negó un puesto en la selección. La temporada pasada atravesó su desierto particular en la adaptación al puesto de ala-pivot pero esta campaña ha rendido con solvencia en su nueva posición. Acaba contrato y seguramente sea una de las piezas codiciadas del mercado este verano.
• Diot fue uno de los responsables de la buena marcha de Valencia Basket en la primera vuelta. Disfrutaba del momento de su carrera hasta que una lesión previa a la Copa cortó su trayectoria esta temporada. Tras muchos partidos buscando su mejor forma parece que ha llegado en el momento decisivo del curso. Falta le hace a Valencia Basket tras la lesión de Vives que deja al francés como único base del equipo. Hasta ahora las soluciones improvisadas no dan buen resultado. Su importancia es mayor que nunca en el equipo valenciano.