Había ambiente de fiesta en Cleveland de cara al  tercer partido de la serie que les enfrentaba a los Celtics. Los visitantes traían la baja de fundamental de su estrella, Isaiah Thomas, que era suplida por Marcus Smart. Además Amir johnson regresaba al quinteto titular y todo ello llevaba a pensar al público local en otra clara victoria para celebrar. Sin embargo los primero minutos mostraban al equipo de Massachussets muy serio. Con paciencia en ataque iba dando contestación a los Cavaliers. Aunque pronto llegaban los errores en el lanzamiento exterior, Kevin Love y Kyrie Irving no desaprovechaban la ocasión. Boston veía la primera escapada local con preocupación y su único motivo de satisfacción era ver a Lebron James bajo control. Gracias a los robos de balón  de su defensa, y al acierto de Avery Bradley, los Celtics se mantenían a once puntos al término del primer cuarto. El segundo acto traía malas noticias para Stevens, Amir Johnson se tenía que ir a los vestuarios. Sin embargo, los verdes se mostraban igual de sólidos que en el primer cuarto. Su defensa cerraba cualquier camino a su canasta y el acierto exterior local no era suficiente para contener a Boston. Jae Crowder desde el interior, y Gerald Green desde el exterior, bajaban la diferencia de los diez puntos. Tyronn Lue pedía un parón para ordenar a su equipo y meter a todos su titulares. Entre Irving y Love volvían a disparar la distancia entre ambos equipos hasta los dieciseis puntos. Stevens encontraba soluciones en el acierto exterior de Kelly Olynyk y Smart, pero apenas lograba bajar la diferencia al descanso.

El paso por los vestuarios mostraba a unos Celtics faltos de agresividad y desacertados. Al Horford era la única respuesta ante unos Cavaliers que se ponían con veinte puntos de ventaja. Olynyk regresaba a la pista para abrir espacios a su compañeros, pero no funcionaba. Aunque los triples locales no entraban, Tristan Thompson hacía daño bajo canasta y Horford no acertaba. Las diferencias se mantenían y Stevens se la jugaba con Jonas Jerebko como acompañante de Olynyk. El acierto exterior de Boston volvía de manera inesperada (con un Smart espectacular), Lebron e Irving se empeñaban en chocar contra la defensa y la diferencia se reducía a la mitad. Cleveland vivía de los tiros libres, el partido se calentaba y un murmullo se extendía por la cancha. Los Celtics se asomaban a los doce minutos finales a sólo cinco puntos. El partido se volvía loco, los balones perdidos eran una constante y Deron Williams quería calentar a Jerebko. Thompson se convertía en el rey de la pista porque nadie anotaba y el pivot sueco de Boston devolvía el cariño  a Williams con un bloqueo a traición. Regresaban los titulares poco a poco, Smart volvía con acierto y al bando local le entraban las dudas en la circulación de balón. Los Cavaliers tampoco encontraban acierto exterior y Olynyk ponía por delante a los visitantes. Lo único que impedía que los Celtics tomasen distancia era el rebote ofensivo local. Los nervios llegaban a los verdes y precipitaban sus ataques. Sin embargo Cleveland no tenía el acierto necesario para abrir hueco e Irving también se aceleraba. Boston llegaba al minuto final con una mínima ventaja. Stevens armaba una jugada para aprovechar a un Horford descansado tras el parón, JR Smith recogía un balón suelto para empatar el partido con un triple, el técnico visitante necesitaba diseñar otra jugada de banda. Una cosa sencilla y efectiva, penetración de Bradley para que abriese el balón al tirador abierto. Jerebko era el protagonista inesperado de la jugada y daba las gracias por la oportunidad con un acierto; pero la canasta era de dos. Ahora Lue tenía que demostrar su valía de entrenador para los de Ohio. Y la jugada era igual de simple; Lebron encaraba a Horford y el balón llegaba a Williams en la esquina. Sin embargo el base local no tenía tiro y abría el balón a Irving, que se iba directo hacia la canasta para empatar el partido restando veinte segundos. Con once segundos por jugar se venía otro tiempo muerto de Stevens. Esta vez la jugada era más compleja, Bradley salía desde debajo del aro para recibir casi frontal al aro tras un bloqueo. Bradley lanzaba un triple que, tras golpear un par de veces en el aro, daba la primera victoria en la serie a los Celtics. Invitado inesperado: Kelly Olynyk, Jonas Jerebko (Celtics)

Lebron James se mostraba plenamente concentrado de caral cuarto partido de la eliminatoria. En Boston las novedades venían con la inclusión de Kelly Olynyk en el quinteto titular. Y las cosas no comenzaban mal para los Cavaliers, cinco puntos seguidos de Kevin Love daban ventaja a los locales. Sin embargo, los Celtics despertaban tras dos minutos de letargo. En cuatro minutos endosaban un parcial de once a cero a unos Cavaliers superados bajo canasta, que veían como un agresivo Avery Bradley finalizaba bajo su aro. El tiempo muerto de Tyronn Lue soltaba la agresividad de Kyrie Irving, los contactos subían otro nivel y Al Horford se iba al banquillo con dos faltas personales. Boston mantenía su ventaja con un Jae Crowder inspirado y, como los triples locales no entraban, el primer cuarto finalizaba con ventaja visitante de diez puntos. En el segundo cuarto las defensas se imponían pero, como el balance defensivo de los Celtics no era bueno, Cleveland se aprovechaba. Stevens buscaba paciencia en sus jugadores, Lebron hacía dos faltas en tres minutos para colocarse con tres y Lue lo dejaba en pista. Un error, apenas un minuto más tarde cometía su cuarta falta por chocar contra la defensa visitante y se iba al banquillo. El ataque local se atascaba, la única solución ofensiva para los de Ohio era su base. Boston se aceleraba, y los Cavaliers amagaban con reaccionar, pero no era suficiente. Pese a ello, Lebron no estaba descontento. Su equipo había aguantado la desventaja en la decena de puntos.

El regreso de los vestuarios mostraba la versión más agresiva de las estrellas locales. El ataque visitante iba perdiendo orden, y con ello efectividad. Los Celtics no encontraban tiros claros, además les costaba cerrar el rebote y su intimidación bajo canasta era nula. Ni un mate fallado por Lebron frenaba la reacción local. Subía la tensión defensiva local y a mitad de cuarto Cleveland estaba por delante. Irving estaba tan caliente que in pisar el pie de teerry Rozier le frenaba. El público se ponía de pie; un triple de Irving a ocho metros dejaba a los Cavaliers con siete puntos de ventaja para el último acto. Boston recobraba orden, y puntos, a base de triples. Sin embargo, Lebron se ponía a máximo rendimiento y la diferencia local alcanzaba los dos dígitos. El protagonismo de los árbitros no influía en el marcador y Lebron comenzaba a repartir juego a sus compañeros. Restando tres minutos comenzaban los nervios en el bando visitante, los tiros se aceleraban y Cleveland se ponía tres a uno en la serie. Invitado inesperado: Iman Shumpert (Cavaliers)