UCAM Murcia debutaba en unos playoffs ante todo el Real Madrid en el Palacio de los Deportes. Un rival y un escenario que provocan en no pocas ocasiones un miedo escénico irremediable que se acentúa en la lucha por el título. Pero UCAM Murcia no lo ha notado en absoluto. Ha canalizado la falta de presión de forma que salga a relucir su mejor juego. Pocos rivales le han causado tantos problemas al equipo madridista en unos cuartos de final de la ACB como el conjunto de Katsikaris. Descaro, mucho acierto y fortaleza mental para hacer sufrir a toda la hinchada madridista hasta el último segundo. Llegaba en un muy buen momento y lo ha ratificado. Metió al Madrid en un lío muy serio cuando se puso 14 arriba al inicio del segundo cuarto y tampoco sucumbió al desánimo cuando parecía que el equipo blanco se marchaba irremediablemente hacia su primer triunfo en la serie mediado el último cuarto. Resistió para mantener hasta el final la incertidumbre en uno de los partidos más espectaculares que recuerdo en unos playoffs. Gran puesta en escena de UCAM Murcia aunque la victoria no cayera de su lado. Le va a costar trabajo a los de Laso pasar ronda. De momento el domingo esperará un ambiente muy animoso en Murcia para el debut en su cancha de UCAM Murcia que se ha presentado en los playoffs sin complejos.

Barça 99 – Fuenlabrada 65 (1-0): Dos triples en los dos primeros ataques azulgranas avisaron de lo que estaba por llegar. Fuenlabrada comenzó el partido noqueado desde el vestuario. Sus primeros minutos fueron lastimosos. No era capaz de anotar y perdía balones con mucha facilidad. Jota Cuspinera tuvo que pedir tiempo muerto cuando el parcial de inicio llegaba a 11-0. La situación era desastrosa para su equipo. El Barça anotaba cómodo desde la línea de tres y Perperoglou hacía lo que quería con Paunic, al que superaba en todo. El Fuenla tardó más de tres minutos en anotar su primeros puntos con un triple de Popovic. La resistencia desde el perímetro era estéril ante la superioridad abrumadora del Barça dentro de la zona. Perperoglou continuaba siendo un problema para el rival. Los trece puntos del alero griego en el primer cuarto catapultaban a un Barça muy cómodo en la pista, demasiado cómodo ante una defensa que resultaba un simple simulacro (31-12, min 9). No le costó mantener la ventaja aunque bajara el acierto en la línea de tres. Navarro estuvo especialmente aciago pero no importó. Samuels tomaba el relevo al dominio de Tomic cerca del aro y las pérdidas no cesaban en los visitantes que sólo anotaban desde el tiro libre (49-25, min 18) y no reaccionaron hasta que se acercaba el descanso. Pero el parcial de 0-7 se antojaba escaso como para despertar a Fuenlabrada, muy lejos de su mejor momento. Se enrocó en la línea de tres, su refugio predilecto. La precipitación en el tiro facilitó el trabajo del Barça que sólo tenía que buscar a Tomic (15 puntos, 9 rebotes, 3 robos, 30 de valoración). Así le gustan los rivales al pivot croata, tan blanditos que puede manejarse a sus anchas por la zona. Cuspinera acabó frustrado. Recibió una técnica tras protestar vehementemente una falta de Navarro, que por cierto la había hecho adrede e incluso reconoció levantando el brazo. Minucias para un encuentro muy tranquilo para los azulgranas. El altísimo porcentaje en tiro de dos, 19/24 bien avanzado el tercer cuarto, demuestra la fragilidad defensiva rival (74-49, min 30). El abuso del triple de Fuenlabrada llegaba a lo insoportable, sobre todo porque el desacierto era evidente. Ninguna de sus piezas clave estaba para alardes. Llorca, criado en la cantera culé, era el único capaz de anotar en el equipo madrileño en los primeros instantes del último cuarto. Ayudó a reducir mínimamente la desventaja en unos minutos de excesiva relajación de los suplentes azulgranas que ya pensaban en el siguiente partido. Un tiempo muerto de Xavi Pascual espabiló a sus jugadores. La diferencia superó los 30 puntos para acelerar el aparatoso desplome. El Barça completaba su trabajo con varios triples que hurgaban en la herida. Eriksson disfrutó de unos minutos en los que lucía puntería desde el perímetro. Baño y masaje para el Barça en una eliminatoria que tiene pinta de un recorrido muy corto.

Fuente: lainformacion.com

Baskonia 81 – Gran Canaria 76 (1-0): Baskonia entró al partido con la intención de ponerse el mono de trabajo como corresponde a la lucha por el título. Mucha intensidad para maniatar a un Gran Canaria que empezó timorato. Aíto volvió a repetir aquel farol de la final de Copa donde dio la titularidad a Pasecniks. La broma no duró ni tres minutos. Para entonces Baskonia amenazaba con marcharse en el marcador (11-2, min 5) porque Gran Canaria estaba inoperante en ataque. Sin embargo la entrada de los hombres de banquillo supuso un revulsivo. Seeley (18 puntos, 3 rebotes, 3 asistencias, 22 de valoración) ejerció como desatascador del juego ofensivo, una labor que se le da muy bien. Mejoró el trabajo defensivo visitante y el desacierto pasó al equipo vitoriano que se bloqueó de mala manera hasta dilapidar en muy poco lo logrado en el esperanzador comienzo. 2-15 de parcial hasta final de cuarto y el mando voló a manos de Gran Canaria. Le costó estabilizarse a Baskonia. No consiguió hacerse con las riendas del encuentro en el siguiente periodo. Faltaba constancia en ataque y sólo pudo hacer la goma para procurar mantenerse cerca. Gran Canaria no estaba ni mucho menos brillante pero le bastaba con detalles para seguir por delante. Las acciones de Seeley o un par de triples de Kuric le permitían a Gran Canaria plantarse con seguridad en un choque de cuchillo entre los dientes. Hasta terminado el descanso no logró Baskonia imponer mayor autoridad en la cancha. Entró en pista mucho más agresivo, defendiendo con la misma eficacia que en el comienzo de partido. Las pérdidas y los problemas para anotar dentro acosaron a Gran Canaria que sufrió un parcial de 10-2 de inicio que clarificó el panorama de Baskonia. La mejoría de la situación permitió el regreso a las canchas de Shengelia, aclamado en el Buesa Arena. Gran Canaria resistió con la fortaleza mental que le caracteriza. Las acciones de Eulis Báez recortaron la diferencia. Siempre se mantuvo al acecho el equipo visitante pero cada acercamiento era frenado por un triple de Darius Adams (24 puntos, 4 asistencias, 23 de valoración) que mantenía a raya al rival. Resultaba desesperante el acierto del base de Baskonia, no fallaba en momentos delicados. Un 9-0 de parcial hasta final del tercer cuarto ponía algo de luz en el camino para los de Perasovic (58-48, min 30) pero si alguien piensa que un contratiempo desanima a los de Aíto está muy equivocado. No hay forma de sacar de un partido a Gran Canaria. Volvió a meter el miedo en el cuerpo de Baskonia con un 2-9 de comienzo en el último periodo pero Baskonia no tardaba en volver a estirar la diferencia. Ya con dos bases en pista, los locales manejaban ventajas cercanas a los diez puntos pero sin acabar de rematar el encuentro. Gran Canaria siempre regresaba. Seeley y Eulis Báez alimentaban las opciones de su equipo de llegar con vida a la recta final. Adams acudió de nuevo como aguafiestas para evitar un susto. Bourousis (10 puntos, 12 rebotes, 17 de valoración) apareció en los instantes finales para imponer autoridad en la zona pero no había forma de doblegar a un rival incansable. Un triple de Báez y otro de Newley ponían el 79-76 a 12 segundos del final. Para desesperación de Baskonia había que picar piedra hasta el final. Bourousis acabaría sentenciando desde el tiro libre para dar el primer triunfo al equipo vitoriano pero la terquedad de Gran Canaria invita a pensar en que le queda mucho por decir en la eliminatoria.

Fuente: diariofotofinish.com

Real Madrid 107 – UCAM Murcia 103 (1-0): Una nutrida presencia de seguidores de UCAM Murcia en el Palacio de los Deportes reflejaba que la primera participación del equipo murciano en unos playoffs suponía un hito histórico en el conjunto murciano. Nada que ver esta ilusión con la costumbre en estas lides del Real Madrid. Sin embargo el debut no intimidó al equipo de Katsikaris. Campazzo no tardó en deleitar con sus números circenses. Uno de sus destellos espectaculares sirvió como asistencia para la primera ventaja de UCAM Murcia en un playoff. El Real Madrid recuperó brevemente la delantera aprovechando algunos fallos en el tiro exterior del rival o la superioridad de Maciulis sobre Rojas cuando llevaba al defensor dentro de la zona pero a los visitantes no les asustó llegar a un intercambio de canastas. Incluso salió ganando ante la falta de ajuste de la defensa rival. Sergio Rodríguez (22 puntos, 10 asistencias, 28 de valoración) sofocaba en un primer momento las llamas del acierto murciano anotando desde fuera pero eran demasiadas las facilidades que encontraba UCAM Murcia. Campazzo manejaba la situación con facilidad. Los pivots hacían daño cuando salían a la línea de tres. Los pivots abiertos siempre significan un problema para la defensa madridista. Los jugadores que aparecían del banquillo aportaban algo en todos los casos. El Real Madrid se estaba complicando a vida y se metió un buen lío con un errático comienzo de segundo cuarto. Un par de pérdidas sumadas al acierto inagotable de su rival y el partido comenzaba a adquirir un tono oscuro para los madridistas. 0-9 de parcial que despertó la preocupación en la afición local (21-35, min 12). UCAM Murcia empezaba a créerselo para júbilo de la parroquia murciana que no daba crédito. Las alarmas sacaron de su letargo a los de Laso que aumentaron el empeño en defensa. Lograron detener la hemorragia y se metieron de lleno en la vorágine anotadora. Carroll (20 puntos) sacaba el fusil para encañonar a larga distancia. Había comenzado el bombardeo. Katsikaris pidió tiempo muerto para evitar que la diferencia se redujera a la nada en pocos minutos pero el Madrid ya había cogido la onda. Otro triple de Carroll llevó el añadido de una personal en la lucha bajo el aro. La jugada le costó cara a UCAM Murcia. Felipe Reyes sacaba canasta y personal en la segunda acción. Falló el tiro libre pero Doncic sacaba falta tras atrapar el rebote. Aquí no se cortaba nadie. Otro punto de castigo en una acción muy cara (38-39, min 15). En tres minutos el gozo en un pozo. UCAM Murcia se sacudió el acoso local con ocho puntos seguidos de Antelo pero el Real Madrid no estaba dispuesto a rehuir el intercambio de golpes. Los devolvió con juego veloz y agresividad en la presión a los bases. Un contraaque conducido muy inteligentemente y finalizado por Ayón completaba la remontada (49-47, min 19). Y pudo ser peor para los de Katsikaris. Los tiros libres fallados, sobre todo por Ayón, y los triples que se le salieron a Carroll en los últimos instantes impidieron que el marcador no reflejara la igualdad absoluta al descanso. UCAM Murcia experimentaba la frustrante sensación de jugar el partido de sus vidas y marcharse a vestuarios con el marcador empatado a 49.

Fuente: lainformacion.com

El Madrid salió en la segunda mitad dispuesto a no permitir la alegría ofensiva rival de los primeros veinte minutos. Más intensidad defensiva que provocó problemas en la circulación de balón de UCAM Murcia. Llull, que pasó inadvertido en la primera parte, empezó a hacer de las suyas. El 9-3 de salida podía marcar un punto de inflexión pero no se amilanaron los de Katsikaris. Dos triples desde la esquina reanimaron al conjunto murciano. El Real Madrid mantenía los problemas para defender a los pivots rivales cuando se abrían. Faverani y Antelo tienen buena mano si se les permite lanzar cómodos. UCAM Murcia recuperaba la delantera brevemente pero el Madrid respondía con acciones de 2+1. Los visitantes empezaron a acumular demasiadas personales. Benite se colocó con cuatro. Campazzo cometió la tercera a falta de tres minutos para acabar el cuarto y Katsikaris lo reservó. Llull aprovechó el marcaje de Cabezas, que ya no está para defender a jugadores tan explosivos, para lucir en todo su esplendor. Cogió toda la responsabilidad del ataque madridista para incendiar el encuentro. Sus penetraciones resultaban indefendibles. Incluso llegaba el típico tiro de Llull que provoca un “a dónde vas, loco” y acaba en una canasta espectacular. Si hacía falta un mechero Llull (26 puntos, 4 rebotes, 4 asistencias, 29 de valoración) acudió con un lanzallamas. Katsikaris no tardó en recurrir de nuevo a Campazzo pero el base argentino se obsesionó con resolverlo todo él solo. Se precipitó más de la cuenta y UCAM Murcia entraba en un camino hacia la perdición. El Madrid se escapaba irremediablemente de la mano de Sergio Rodríguez (22 puntos, 10 asistencias, 28 de valoración) que manejaba el ritmo a su antojo. Katsikaris empezaba a poner cara de esto no tiene remedio (86-72, min 32) pero Laso le dio incertidumbre al choque poniendo en pista a la vez a Thompkins y Taylor. Demasiada ventaja al rival, no se sabía ni qué hacen por la cancha. Scott Wood levantó a su equipo con ocho puntos seguidos. Tenía que defenderle Taylor, evidentemente.

Fuente: diariomadridista.okdiario.com

Un par de malos ataques complicaban una situación plácida a los madridistas. Les salvó que Campazzo cometía tantos errores como aciertos por exceso de protagonismo. Laso dio entrada a Llull otra vez. Los Sergios se enfrascaron en un intercambio de canastas con un infalible UCAM Murcia. Parecía suficiente pese a que los de Katsikaris buscaban descaradamente las faltas a Ayón (100-92, min 39) pero se resistía el equipo murciano a bajar la cabeza. El cuarto triple de Antelo, dos tiros libres errados por Ayón y una bandeja de Campazzo (25 puntos, 9 asistencias, 4 robos, 33 de valoración) devolvían la incertidumbre a 32 segundos del final. Cabezas se precipitó cometiendo una personal rápida sobre Carroll pero el alero falló uno de los tiros libres. Antelo llevó los nervios a la grada con su quinto triple. Sergio Rodríguez se precipitó buscando una entrada a canasta cuando UCAM Murcia no cometió personal inexplicablemente. Le salvó una personal muy discutida por el banquillo visitante. No falló desde el tiro libre. El Madrid no quería saber nada de un triple a última hora, como el de Murcia en la Liga Regular que forzó la prórroga. Maciulis cometió personal sobre Campazzo que tiró por si colaba. Y coló. Los árbitros señalaron tres tiros para incredulidad de todo el mundo. A UCAM Murcia se le presentaba la oportunidad de igualar pero Campazzo falló el segundo tiro libre. Otra vez a buscar la falta. Thompkins era el siguiente en pasar por la línea. Fiabilidad absoluta, no le tembló la muñeca. En esta ocasión Maciulis no tardó en cometer falta sobre Campazzo para evitar otra decisión inexplicable. El base argentino volvió a acusar los nervios. No sabremos si tiró a fallar el segundo, yo no lo creo por la forma de lanzar, pero el rebote de Maciulis acababa con las opciones de UCAM Murcia. El alero lituano anotó los dos tiros libres para suspiro de un Palacio de los Deportes que sufrió lo indecible ante un novato que no se dejó presionar en absoluto y promete dar mucha guerra en esta eliminatoria.

Fuente: vavel.com

Valencia Basket 79 – Unicaja 75 (1-0): No tardó Unicaja en mostrar a la Fonteta que esta eliminatoria era una auténtica trampa. Nadie quería al equipo malagueño en el enfrentamiento de cuartos de final y razones había por nombre, plantilla y momento de juego. Metió miedo muy pronto con dos triples que valían un 0-6 para abrir boca. Unicaja creo auténticos problemas con su increíble acierto desde la línea de tres. Entre Nedovic y Alberto Díaz mantenían en jaque a los locales que atravesaban problemas para afrontar la buena defensa de los hombres de Joan Plaza (6-14, min 6). Valencia Basket buscó con mayor frecuencia el juego interior para enmendar el mal comienzo. Al menos consiguió sacar personales que llevaran a la línea de tiro libre pero Unicaja seguía en sus trece desde el perímetro. Efectividad asombrosa la del equipo malagueño en el primer cuarto, 7/8 en triples en los primeros diez minutos que le permitían mantener una pequeña ventaja durante todo el periodo. Resultaba desesperante para Valencia Basket. No lograba imponer su juego, los bases de Unicaja controlaban la situación. Nedovic, Markovic y Alberto Díaz llevaban el peso de su equipo que no entregaba el mando en el marcador. A Valencia Basket le faltaba fluidez pero Unicaja se contagió a lo largo del segundo cuarto. El partido entró en una fase “a tontas y a locas” donde las pérdidas de balón eran la constante. A los locales les vino mejor el desconcierto para igualar de nuevo el partido aunque dos tiros libres de Kuzminskas le daban una mínima ventaja a Unicaja al descanso (35-37, min 20). La dinámica cambió en la reanudación. Valencia Basket se encontró mucho más cómodo cuando entró a pista Diot mediado el tercer cuarto. El francés consiguió frenar a los bases de Unicaja que seguían llevando la voz cantante en el ataque visitante. San Emeterio apareció para dar las primeras ventaja a Valencia Basket en todo el encuentro. Sus puntos significaron el inicio del despegue. Unicaja encontraba problemas para frenar el juego interior local. Demasiadas personales que aprovechaban los de Pedro Martínez desde el tiro libre (56-48, min 28). Parecía que Valencia Basket se había asentado definitivamente pero Unicaja volvió a la carga en el último cuarto. Se entregó a Nedovic (22 puntos, 3 asistencias, 23 de valoración), un viejo conocido en Valencia que ha alcanzado un momento dulce de juego en las últimas semanas. El choque enloqueció con la apuesta de Plaza por un equipo bajito, eminentemente exterior. Regresó el acierto en el triple y la inquietud a la Fonteta cuando Unicaja daba la vuelta al marcador (63-65, min 35). Se había declarado una guerra de nervios. Las alternativas en el marcador eran constantes. Un secundario, Shurna, tomaba la responsabilidad del ataque local para hacer frente al acierto de Unicaja desde el tiro exterior. Nedovic y Shurna eran los grandes protagonistas en la recta final del choque. Un triple del serbio adelantaba a Unicaja en el último minuto. Shurna (16 puntos, 4 rebotes, 3 asistencias, 20 de valoración) buscó la respuesta de la misma forma. Le tocó el premio gordo. Triple y personal que podían valer el partido pero le faltó completar la tarea. Falló el tiro libre y quedaba otra oportunidad para Unicaja. Nedovic volvió a ser el encargado de buscar la canasta pero forzó demasiado ante la defensa de San Emeterio y no la encontró. Todo quedaba en manos de Valencia Basket que agotaba la posesión hasta encontrar a Justin Hamilton. El pivot se sacó de la manga un gancho que sentenciaba el choque a ocho segundos del final. Valencia Basket se apuntaba el primer punto tras salir airoso de un partido muy tenso y complicado pero sabe que le quedan muchas dificultades por delante. Ya comprobó hace dos semanas las dificultades que plantea el Martín Carpena.

Fuente: lasprovincias.es

Y DIGO YO…:

• Es bien conocido que los playoffs es una fase de momentos. La gran mayoría ha llegado con el cuchillo bien afilado. En cambio Fuenlabrada da la sensación de estar de vacaciones desde hace semanas, muchos jugadores están fundidos o pasados de forma. Es como si aquel triple inesperado de Sastre en Miribilla hubiera cambiado el orden natural de estos playoffs.
• En el próximo programa de Cuarto Milenio se abordará el increíble caso de Trey Thompkins. Por razones que escapan al entendimiento humano disputó casi todos los minutos de la segunda mitad. Roza lo paranormal puesto que ante UCAM Murcia ni atacaba ni defendía. Aún buscan explicaciones en el Palacio de los Deportes aunque resulta todavía más sorprendente que Taylor pise siquiera la cancha.
• Tras una primera parte muy discreta Llull se marcó una segunda mitad estelar. 23 puntos en los dos últimos cuartos donde fue sencillamente indefendible. Lección de talento, explosividad y anotación inagotable. Ha regresado la versión de los playoffs de la pasada temporada, la peor noticia para los rivales.
• Entre Antelo y Campazzo anotaron 52 de los 103 puntos de UCAM Murcia, más de la mitad de los puntos de su equipo. Con 27 y 25 puntos, respectivamente, confirmaron la famosa máxima de la extramotivación de todo el que salió del equipo blanco. Antelo, criado en la cantera madridista, y Campazzo, que ha explotado con los minutos que encontró en su cesión en Murcia, realizaron uno de los partidos más brillantes de sus carreras. Si es que no hay peor cuña que la de la misma madera en la Casa Blanca.