El Real Madrid golpea primero en la final de la ACB y se lleva la primera victoria, un sinónimo de título según la tradición de la competición liguera desde la era ACB. Venció en un encuentro en el que casi siempre dio la sensación de tenerlo bajo control pese al pobre nivel que mostraron ambos equipos en la segunda mitad. Sólo corrió peligro el partido para el equipo blanco en los últimos minutos con la irrupción de Hezonja que volvió a dar muestras de su enorme carácter echándose al Barça a sus espaldas en un momento muy complicado en el que parecía derrumbarse ante la que se presumía escapada definitiva del Real Madrid. Estuvo cerca de lograr la remontada él solito pero no resultó suficiente. No tuvo la compañía necesaria para voltear el duelo y al Madrid le bastó con la chispa individual que le sobra por todas partes y los numerosos errores de su rival para rematar. Los de Laso se adelantan resistiendo al recital en los últimos minutos de Hezonja, seguramente uno de los pocos que resten por verle al joven fenómeno croata antes que ponga rumbo a la NBA.
Real Madrid 78 – Barça 72 (1-0): Viernes a las siete de la tarde. Hora que será muy apropiada para otros acontecimientos pero se hace extraña para iniciar una final de la ACB. Quizá por ello tardó en asentarse el encuentro unos minutos. No hubo dominador en los primeros instantes. Ninguno de los dos se hacía con el mando en el marcador. El Madrid no terminaba de aprovechar los rebotes ofensivos y la escasa producción de los azulgranas dentro de la zona. Extraña conociendo el poderío físico del Barça pero la aportación de los pivots no era trascendente. Las dos faltas tempranas de Tomic sacaron al pivot croata del partido. Nunca estuvo metido en él. Un tapón recibido al unísono entre Nocioni y Mejri le dejó retratado. Sin embargo el Barça lograba aguantar echando mano al tiro exterior. El marcador se había convertido en un columpio, las alternativas se sucedían en margenes muy escasos hasta que el perímetro madridista hizo saltar por los aires la igualdad en el electrónico. Tres triples consecutivos del Real Madrid pusieron en pie a la afición madridista. 11-0 de parcial que le daba una ventaja suculenta a los de Pablo Laso (27-17, min 9). Un estirón aún prematuro pero que marcó el resto del choque. La frustración hizo mella en los azulgranas. Pleiss y Ayón iniciaron un principio de altercado que se zanjó con una técnica a cada uno. El Barça lograba reducir cuando llegaban un par de acciones poco afortunadas del Madrid pero le faltaba regularidad, consistencia. Un par de triples de Hezonja, alguna acción de Huertas o de Navarro, pero siempre daba la impresión que era el Real Madrid quien tenía la situación bajo control. La diferencia no salía del margen de los 5-7 puntos que mantenía cómodamente el equipo blanco. Xavi Pascual no lograba cambiar la dinámica. Mantuvo demasiados minutos a Tomic, demasiado lastrado por las dos personales. Flojeó en defensa. El entrenador azulgrana tuvo que sentarle después que Carroll anotara tres canastas en su cara cerca del aro. Tampoco los sustitutos de Lampe mejoraron su prestación. Doellman estuvo negado, ni la sombra del jugador que maravilló en Valencia. Acabó sustituido por Nachbar que sufrió cada vez que Felipe Reyes le metía dentro de la zona. Huertas sí mejoraba a Satoransky en la dirección pero Sergio Rodríguez (12 puntos, 8 asistencias, 17 de valoración) dominaba el tempo del encuentro. Y siempre estaba Rudy (17 puntos, 4 rebotes, 21 de valoración), la eterna pesadilla culé esta temporada, para hacer daño en momentos puntuales y dolorosos. Una canasta de Lampe sobre la bocina cerró la primera parte que controló con comodidad el Real Madrid.
Fuente: altaspulsaciones.com
No cambió el desarrollo del encuentro tras el descanso pero la dinámica sí fue distinta. El Real Madrid conservaba su colchón de 5-7 puntos pero desapareció la alegría anotadora. Ambos equipos quedaron enfrascados en un pobre rendimiento anotador. El Barça seguía sin producir dentro de la zona, con Tomic irreconocible. Cuando Doellman trataba de remontar el vuelo se topó con dos buenas acciones defensivas de Slaughter que le frenaron en seco. No había acierto pero al Barça le salvó la falta de ideas del Real Madrid en ataque durante el tercer cuarto. Laso trató de atajarla sustituyendo a Rudy por Sergio Rodríguez pero fue en vano. El 7-5 de marcador parcial a los siete minutos del tercer cuarto refleja claramente la falta de tino e ideas en ataque. Este bagaje mediocre le vino mejor al Barça que pudo mantenerse vivo y relativamente cerca aunque fuera incapaz de romper el maldito colchón en el que se movía el encuentro. Sin embargo no desaparecía la certeza que el Real Madrid tenía bien agarrado el encuentro. Le bastaban un par de chispazos para volver a poner tierra de por medio. A mitad del último cuarto llegaba un tirón que se antojaba como definitivo al alcanzar los madridistas su máxima diferencia (66-55, min 34). El encuentro caía por su propio peso. Navarro abandonaba el encuentro con un pinchazo en la fascia del pie que le convierte en incógnita para el segundo partido. La Bomba está lejos de su mejor momento pero no se encontraba quien tomara el testigo del liderazgo del equipo. Huertas seguía mejorando la prestación de Satoransky pero sus apariciones eran contadas. Oleson estaba desaparecido. Abrines, postergado al ostracismo del banquillo. El juego interior no aportaba lo necesario en ataque. Tuvo que ser el más joven, pero el más sobrado de carácter, quien tomara la responsabilidad. A Hezonja (18 puntos con 5/6 en t3, 5 rebotes, 23 de valoración) no le temblaron las piernas ni la muñeca cuando reclamó el protagonismo, acaparando los ataques. Tres triples consecutivos del joven genio croata colocaron en un brete a los madridistas que no eran capaces de frenarle. Incluso con la mano del defensor encima anotaba Hezonja. Soberbio una vez más en la pista del Palacio de los Deportes. Una canasta de Oleson llevaba la incertidumbre a la grada (70-68, min 38). Cuando menos se esperaba el Barça llegaba muy vivo a la recta final. Visto que el juego colectivo no funcionaba en ataque el Madrid optó por las acciones individuales. Una bandeja de Sergio Rodríguez dio aire al equipo blanco pero respondió Pleiss con un palmeo a un lanzamiento de Hezonja. Tras un rebote ofensivo, Rudy no se cortó en penetrar estuviera quien estuviese delante. Encontró la personal tras llevarse uno de sus habituales trastazos. No le tembló el pulso para anotar los dos tiros libres. Tuvo una doble ocasión el Barça para seguir en la brecha. Oleson no anotó en su entrada a canasta pero el rebote fue azulgrana. Hezonja no dudó en lanzar de tres pese a tener la mano del defensor encima. En la anterior ocasión no impidió que anotara pero no siempre iba a funcionar. El Madrid no dejó escapar el rebote aunque Sergio Rodríguez sí lo hizo con su segundo tiro libre tras la falta recibida cuando salía a toda pastilla hacia campo rival. Satoransky echó por tierra las escasas opciones que le restaban a su equipo mandando un melón a la grada. Los tiros libres del Real Madrid certificaban el primer triunfo de la final que históricamente suele resultar vital para el título en la ACB.
Fuente: telecinco.es
Y DIGO YO…:
- Hezonja se ha acostumbrado a dedicar recitales ante el Real Madrid esta temporada. Lo puede hacer ante cualquiera porque el talento le sobra pero su lucimiento resulta espectacular ante el equipo blanco. Xavi Pascual debió estar atento a esta circunstancia porque le mantuvo en pista 25 minutos, incluidos los decisivos. Lo que no se explica es la marginación a la que le ha sometido su técnico en tantos partidos.
- Me gustaría saber quién es el lumbreras que ha decidido el horario de las siete de la tarde para el primer partido y los dos programados en el Palau Blaugrana. Es una hora terrible para un día lectivo. En TVE se siguen cubriendo de gloria con la difusión del baloncesto.
- Felipe Reyes se convierte en el 9º máximo anotador de la Liga ACB superando a todo un mito como Epi. Dato suficientemente claro para resaltar que estamos ante uno de los grandes nombres del baloncesto español. Y que algunos dentro del madridismo aún sigan señalándole como la fuente de todos los males al primero de sus escasos días malos…
- Pedro Martínez no continuará como entrenador de Manresa por decisión propia. Su labor ha sido muy importante para cambiar la cara de un equipo que anduvo como alma en pena las dos temporadas anteriores y que se salvó del descenso en ambas ocasiones en los despachos. Con Pedro Martínez lo pudo hacer en la pista con la recordada victoria sobre el Real Madrid en el Palacio de los Deportes aunque durante la temporada demostró más hechuras que en campañas anteriores. Mucho le tienen que agradecer a uno de los mejores entrenadores españoles y que quizá no tiene todo el reconocimiento que merecería.
- Ourense presenta todo lo necesario para oficializar el ascenso y Fuenlabrada amenaza con paralizarlo judicialmente por defecto de forma. Burgos también sopesa acudir al juzgado tras su tercer ascenso frustrado pero puede acabar encontrándolo de rebote vista la delicada situación por la que atraviesan CB Sevilla y Gipuzkoa Basket. El tema de los ascensos podría formar parte de una película de los hermanos Marx. Esta falta de seriedad en un aspecto tan importante no le hace ningún bien a la ACB.
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