La jornada de la resaca copera nos ha dejado el mal cuerpo típico de las peores borracheras. No pudo tener una reanudación más bochornosa tras reanudarse la competición liguera. Sucedió en Bilbao. El derbi vasco estaba sentenciado desde el final del tercer cuarto. La notoria superioridad de Bilbao Basket había acabado con un Baskonia que veía truncada su buen momento, labrado tras semanas de evidente recuperación. Escenario para un final tranquilo. Sin embargo pasará a las portadas de las secciones deportivas de los informativos (para esto seguro que sí tienen hueco para la ACB) por un lance muy desagradable. Comenzó con un toque a destiempo de Senghelia a Dejan Todorovic en un contraataque de Bilbao Basket a unos segundos del final. No le hizo gracia al montenegrino, que se encarga con Shengelia. La reacción del alero georgiano no pudo ser más desafortunada. Su puñetazo a Todorovic desencadenó un tumulto donde se repartieron golpes por todos lados y los jugadores se llevaron todo por delante, incluido un niño de siete años que asistió atónito y estupefacto al bochornoso espectáculo. Una imagen lamentable que nos retrotrae a las tanganas de los años 80, a las reyertas de la NBA en los 90 (donde en muchas ocasiones estaban implicados los Knicks y terminaba incluso Pat Riley repartiendo estopa), la trifulca del derbi madrileño de 2004 donde Rubén Garcés le propinó una patada voladora a Herreros o los follones en el túnel de vestuarios del Buesa Arena entre jugadores del Baskonia y Real Madrid. Otra escena para la leyenda negra. Como dice Nita en la Bitácora esto no puede pasar sin sanciones a tan bochornoso hecho. En la NBA no les temblaría el pulso. Claro que la ACB es muy diferente…
Obradoiro 67 – Joventut 71: Un inicio poco brillante, con mayor intensidad que juego, le vino bien a Obradoiro para dominar durante los primeros minutos. El Joventut despertó de unos instantes iniciales de letargo con los chispazos de Kirksay y Mallet (16 puntos) que dieron la vuelta al marcador y adelantaron al Joventut. Los locales no estaban nada finos en el tiro. Flojos porcentajes que paliaban los tiros libres pero las numerosas pérdidas de balón de Obradoiro facilitaban el pequeño colchón que empezaba a fabricarse el conjunto verdinegro. Sin embargo no terminaron de aprovechar la circunstancia los hombres de Salva Maldonado y Obradoiro reaccionó tras un 7-2 en el inicio del segundo cuarto pero que sería respondido por los visitantes en otro momento de zozobra del equipo gallego (24-32, min 14) que estuvo varios minutos haciendo la goma recurriendo a los tiros libres y aprovechando los errores de su rival. Estos se hicieron más numerosos en cuanto se acercaba el descanso. Demasiadas pérdidas de balón que le vinieron de perlas a Obradoiro. Le permitieron llegar al descanso por delante sin que nadie lo esperara (38-37, min 20) pero su mínima ventaja no sirvió como acicate para mejorar en la segunda mitad. El juego de ambos equipos fue aun peor tras el descanso. Demasiados errores y escaso acierto durante todo el tercer cuarto. Salió mejor parado Obradoiro debido a dos triples seguidos de Corbacho pero los tiros libres le permitieron al Joventut salir a flote y mantener la desventaja en un margen muy pequeño al entrar en el último periodo. Entonces apareció un viejo rockero que está dando un gran resultado en el equipo de Badalona. Savané (10 puntos, 2 rebotes, 4 tapones, 16 de valoración) sacó petróleo dentro de la zona cuando llegó el momento de la verdad. Dos jugadas de 2+1 del senegalés, junto a un triple de Llovet, pusieron por delante a la Penya que, sin embargo, no fue capaz de rematar. Un robo de balón y posterior contraataque de Rafa Luz Freire igualó a 67 a minuto y medio del final. De nuevo el Joventut se la jugaba a un cara o cruz al final del encuentro. Pero otra vez la fortuna le sonrió en un final apretado. Tuvo mayor cuajo que un Obradoiro que no planteó bien los últimos ataques. Una penetración de Kirksay y dos tiros libres anotados por Mallet llevaron de nuevo a la senda del triunfo liguero al Joventut.
Fuente: deportesdiariodecanarias.es
Andorra 80 – Manresa 64: Duelo trascendental para la permanencia en el Principado de Andorra entre los dos moradores de la zona de descenso. Los locales mandaron desde el primer momento gracias a su última incorporación, el macedonio Stojanovski (24 puntos, 2 rebotes, 2 asistencias, 26 de valoración, MVP de la jornada compartido) que se erigió desde el principio como el líder en ataque del equipo andorrano. Sus diez puntos anotados en el primer cuarto mantuvieron con ventaja a Andorra pero un par de triples de Manresa igualarían de nuevo el marcador al inicio del segundo periodo. Sólo fue un pequeño parón en la progresión del equipo local. Andorra recurrió al tiro exterior para bombardear el aro rival. Su acierto en el triple, en especial de Stojanovski y Shaun Green (17 puntos, 4 rebotes, 16 de valoración), le disparó en el marcador. Manresa volvió a atravesar uno de sus habituales baches en ataque y la situación se le complicó en demasía con el descanso a las puertas (40-26, min 18). Manresa aguantó como pudo para que los males no fueran aún mayores llegado el intermedio. Sin embargo la segunda mitad no pudo empezar mejor para los hombres de Pedro Martínez. Salida en tromba que supuso un 0-9 de inicio en el tercer cuarto que devolvía la emoción al encuentro en apenas tres minutos (43-41, min 23) pero el efecto de este explosivo comienzo se quedó en simple gaseosa. Andorra recurrió a los mismos recursos que tan bien le funcionaron en la primera mitad. De nuevo el tiro exterior causó estragos en Manresa que no tardó en atascarse en ataque otra vez. Los triples y los ataques rápidos castigaban a los visitantes, diluidos como un azucarillo en el agua. Un 18-4 de parcial pa cagarse rompía definitivamente el encuentro antes siquiera el tercer cuarto y por mucho empeño que pusiera Álex Hernández para retrasar la inevitable. Poco le que quedaba por ofrecer a Manresa, sus limitaciones le pasaron mucha factura. Andorra pudo disfrutar de un final tranquilo para acabar su mala racha de resultados que duraba ya demasiado. Stojanovski se encargó de poner la guinda a su fabulosa actuación en los instantes finales. El duelo vital por la salvación quedó en manos andorranas.
Fuente: deportesdiariodecanarias.es
Barça 71 – Gipuzkoa Basket 58: La resaca de la derrota en la final de Copa se vivió en el Palau Blaugrana con un ambiente frío y desangelado. Ni motiva la situación actual ni un Gipuzkoa Basket, con el que protagonizó en la primera vuelta posiblemente el peor partido disputado esta temporada. Tampoco lo haría la primera mitad del equipo azulgrana. Su primer cuarto fue una auténtica montaña rusa, encadenando parciales a favor y en contra con la misma facilidad. Así no había manera de abrir brecha. Es más, Gipuzkoa Basket vivía muy cómodo. Le bastaba el acierto de Taquan Dean y la lucha de siempre bajo tableros de Doblas (13 puntos, 5 rebotes, 18 de valoración) para alcanzar una pequeña ventaja en el segundo cuarto. La imagen local no daba para alegrías. Muy mal en el triple, dando continuidad al nefasto porcentaje que le condenó en la final de Copa. Faltaba intensidad y alegría en ataque, el juego era demasiado espeso. Sólo los escasos recursos de su rival impidieron que llegara el Barça al descanso con daños de consideración (34-36, min 20). De los bostezos ya no se libró nadie y no se calmaron al inicio de la segunda parte que continuó por el mismo camino de aburrimiento y juego mediocre. La desesperante falta de ideas ofensivas permitió que el equipo donostiarra mantuviera el duelo igualado hasta la mitad del tercer cuarto, cuando llegó el único momento de lucidez del Barça. Lo personalizó Abrines (16 puntos, 5 rebotes, 23 de valoración) que volvió a ejercer de revulsivo para sacar a los azulgranas de una situación soporífera. Abrines se llevó por delante a un rival que ya estaba muy atascado ofensivamente y que sólo anotó 22 puntos en toda la segunda mitad. La explosividad del escolta del Barça en unos pocos minutos bastó para decidir el choque con un duro parcial de 21-6 (61-47, min 30). No hizo falta más y tampoco hubo mucho más que ver. Tras el golpe de mano de Abrines llegó de nuevo el pestiño a la cancha en un último cuarto muy pobre para olvidar. El Barça ahogó las penas de la derrota ante su eterno rival con tintorro del malo. De las victorias más grises e insulsas de esta temporada.
Fuente: gipuzkoasport.com
Real Madrid 94 – CB Canarias 85: La fiesta de celebración por la reciente Copa conseguida continuaba con el recibimiento triunfal al campeón, con pasillo del rival y ofrecimiento del título a los aficionados blancos. Los fastos despistaron un tanto a los madridistas porque el equipo blanco no comenzó fino. En ataque no se acertaba desde fuera y las pérdidas de balón eran más de las aconsejables. En defensa, Sikma no tardó en convertirse en un problema. El pivot estadounidense anotaba los siete primeros puntos de CB Canarias que mandaba durante los primeros minutos. Los madridistas arreglaron el problema con un par de triples pero no pusieran tierra por medio pese a que Sergio Rodríguez (17 puntos, 5 asistencias, 17 de valoración) se movió a sus anchas durante todo el primer cuarto. Richotti (21 puntos, 3 rebotes, 3 asistencias, 21 de valoración) tomó el relevo anotador de Sikma y le complicó la vida al equipo blanco que no mostraba demasiada intensidad en defensa. El escolta argentino se bastó para que su equipo se marchara un punto por delante al final del primer cuarto. Alejandro Martínez comenzó a mover el banquillo y dar descanso a sus jugadores clave al inicio del siguiente periodo. La decisión no le dio buen resultado alguno. CB Canarias se atascó sin Richotti ni Sikma en la pista, autores de 21 de los 26 puntos que llevaba su equipo. Tardó cuatro minutos en anotar, el tiempo que llevó al Madrid a endosarle un parcial de 9-0. Tuvieron que volver a pista los dos puntales ofensivos de CB Canarias. El cambio resultó espectacular. Sikma (22 puntos, 5 rebotes, 17 de valoración) amargó la existencia a todos sus defensores. Ayón no pudo con él durante el primer cuarto. Bouroussis acudió con flojera defensiva y Sikma hizo lo que quiso con él. De Mejri mejor no decir ya nada. Sikma anotó 19 puntos en la primera parte y arrancó aplausos del respetable en el Palacio de los Deportes. Otro pivot que se encaminaba a firmar el partido de su vida, como Tomic o Marjanovic en los encuentros anteriores. Sikma contagió a sus compañeros que jugaron con velocidad y una facilidad asombrosa aprovechando las facilidades que volvió a dar el Real Madrid atrás en la primera parte. CB Canarias siempre le complica la vida en su propia cancha y este partido amenazaba con envenenarse (41-48, min 18). Un par de buenas acciones de Sergio Rodríguez redujeron daños y dejaban la desventaja al descanso en un margen muy escaso.
Fuente: encestando.es
Antes que el partido volviera a la actividad, los infantiles ofrecieron la Minicopa lograda en Las Palmas. Un éxito que confirma el gran trabajo de Alberto Angulo como responsable de la cantera. Como de costumbre, el Real Madrid salió en tromba en la segunda parte. Se puso serio en defensa y liberó el devastador poder ofensivo que muestra en el tercer cuarto de cada partido. Alejandro Martínez paró el encuentro tras el 8-0 que amenazaba con desatar otra tormenta perfecta. Respondió su equipo con acierto desde la línea de tres pero los locales estaban desatados en ataque. Rudy (19 puntos, 7 rebotes, 26 de valoración, MVP de la jornada compartido) sacó la ametralladora para fusilar desde el triple. Felipe Reyes (15 puntos, 4 rebotes, 17 de valoración) realizaba su labor incansable en el poste bajo. La diferencia oscilaba entre los 7 y 9 puntos pero CB Canarias no se fue del partido. Aprovechó los tiros libres y las pérdidas de balón de su rival. Sikma ya no veía aro pero Lampropoulos, que anotó 11 puntos en el tercer cuarto, se erigió como sustituto en la anotación. CB Canarias insistió en ser muy pesado. Había logrado sobrevivir a la avalancha ofensiva madridista (72-70, min 28). Muy meritorio pese a encajar 32 puntos pero el desgaste le pasaría factura en el último periodo. Faltó el fuelle y sucumbió ante la intensidad que no cesaba del equipo blanco. Sus pérdidas de balón provocaron que el Madrid jugara a gusto, castigando al equipo de La Laguna con insistentes contraataques. El parcial de 17-6 era mortal de necesidad. CB Canarias no tenía fuelle para reponerse. El Real Madrid no logró aumentar la brecha, se enredó en arabescos que causaron demasiadas pérdidas de balón. El final se tornaba tan previsible que el trío arbitral decidió improvisar. Dejó sin castigo una patada de frustración al balón de Beirán que casi le vuela la cabeza a las cheerleaders y la técnica se la acabó llevando Maciulis por recalcar el hecho a los árbitros. Tras la bronca de los aficionados madridistas acabaron compensando señalando poco después otra a Sikma que protestó ostensiblemente tras llevarse un castañazo en la zona rival. Lo estaban deseando. La quinta personal del pivot estadounidense acababa con cualquier atisbo de emoción en un final que se hizo demasiado largo y el personal estaba deseando irse a comer. Decisiones como el tiempo muerto pedido por Alejandro Martínez a seis segundos del final con todo el pescado vendido son difíciles de entender. A veces a los entrenadores no hay quien les comprenda. Demasiado largo el desenlace para otra victoria más que adorna el casi inmaculado 2015 que lleva hasta ahora el Real Madrid.
Fuente: vavel.com
Bilbao Basket 93 – Baskonia 75: Aún ajenos e ignorantes al tormentoso final que nos aguardaba, el derbi vasco por excelencia echaba a andar con claro dominio local. Los puntos de Dairis Bertans, que se enfrentaba a su hermano Davis, facilitaron ventajas cómodas a Los Hombres de Negro (12-5, min 4). Sin embargo reaccionó Baskonia mediado el primer cuarto y logró marcharse por delante al finalizar tras un mate espectacular de Mike James que bien podía ser la imagen del encuentro de no ser por lo que nos esperaba. El encuentro se enfangó en el siguiente cuarto. Mucho contacto e intensidad defensiva que llevó el partido a un duelo cuartelero. Baskonia no se movió bien en ese terreno y no le ayudó nada el nefasto porcentaje en el tiro de tres, 1/12 al descanso. Bilbao Basket se adaptó mejor y encontró en Mumbrú un referente fiable en ataque para marcharse al intermedio por delante. Ya en la segunda mitad llegó el tirón definitivo de Bilbao Basket que comenzó enchufadísimo, muy trabajador en defensa. Su labor de entrega le permitió contraataques, bien finalizados por Hervelle (12 puntos, 5 rebotes, 5 asistencias, 19 de valoración) en su mayoría, que estiraron rápidamente la diferencia (48-37, min 23). Ibon Navarro no encontró remedio pese a pedir tiempo muerto para frenar la marcha irrefrenable del rival. Baskonia estaba negado en ataque, nulo en el tiro exterior, y sufría ante la marcha desenfrenada que había impuesto Colom. El base andorrano se hinchó a conectar con Marko Todorovic (14 puntos, 6 rebotes, 2 tapones, 22 de valoración) que le hizo un traje a todos los pivots visitantes durante el tercer cuarto. Bilbao Basket jugaba a una velocidad inasumible para el equipo vitoriano que ya había naufragado poco antes de llegar al final del periodo. Los Hombres de Negro se gustaban y divertían. Les salía todo, incluso las jugadas espectaculares que protagonizaba Latavious Williams. También podían ser lo más recordado del encuentro pero tristemente no fue así. El partido ya estaba ventilado (75-51, min 32) y Bilbao Basket levantó el pie del acelerador y su relajación le llevó a perder demasiados balones. Baskonia redujo las diferencias, pensando que aún era posible salvar el basket-average. Pero no logró bajar de los doce puntos, la diferencia que necesitaba. Ni siquiera eso podía conseguir. Se llegaba a los últimos segundos con Miribilla entregada y un final glorioso y tranquilo para Bilbao Basket. Hasta que llegó el momento, el triste momento.
Fuente: mundodeportivo.com
A siete segundos del final, Dejan Todorovic buscaba finalizar un contraataque con una bandeja. Shengelia lo impide con una falta un tanto intempestiva que molesta al montenegrino que no duda en encararse con él. La reacción de Shengelia no pudo ser peor. Puñetazo a Todorovic que desencadenó los acontecimientos. Los dos banquillos saltaron a la pista como posesos, montando un tumulto caótico donde los golpes caían por todos lados. La trifulca se llevó por delante todo lo que había tras la línea de fondo. La imagen de un niño de siete años en medio de la refriega, de los golpes de un enloquecido Ilmane Diop, de la maraña de jugadores repartidos entre los que golpeaban y trataban de separar, quedó como la triste imagen que recordaremos todos. Un bochorno que no se alivia con el gesto de perdón de Shengelia al niño. El alero georgiano y los dos banquillos fueron descalificados debido a la multitudinaria pelea. Todo había quedado en el olvido. Sólo se recordará este arranque de ira que avergüenza a todo aficionado. Sólo queda esperar que se obre con tino para depurar responsabilidades de la locura que estropeó un partido de baloncesto.
Fuente: eurosport.yahoo.com
Estudiantes 76 – Valencia Basket 81: La sesión vespertina en el Palacio de los Deportes ofrecía otra oportunidad al Estudiantes para ejercer de matagigantes ante un rival de empaque. En todas esas victorias sonadas comenzó peor que su rival y tampoco fue una excepción ante Valencia Basket que empezó mandando gracias a un 0-7 inicial que no tardaría en atajar Estudiantes con los puntos de un habitual, Aradori, y otro no tanto en el aspecto ofensivo, Diamon Simpson (18 puntos, 5 rebotes, 18 de valoración). Pese a ver neutralizado su buen inicio de encuentro, los visitantes volvieron a tomar el mando apoyándose en su juego interior. Dos jugadores que lucieron en el único encuentro que disputó Valencia Basket en la Copa, Aguilar (14 puntos, 5 rebotes, 17 de valoración) y Dubljevic (15 puntos, 10 rebotes, 19 de valoración), llevaron el peso anotador en los hombres de Carles Durán. La brecha no era grande pero el Estudiantes no era capaz de cerrarla. Un segundo cuarto más físico y espeso le vino mucho mejor a Valencia Basket que seguía cargando el juego por dentro. Loncar (18 puntos, 3 rebotes, 24 de valoración) creaba muchos problemas en la zona siempre que no encontró la oposición en pista de Simpson (30-39, min 18). Salvo el estadounidense los pivots locales lucieron muy poco así que en la reanudación los colegiales recurrieron al perímetro que sería clave en su recuperación tras el descanso y el merecido homenaje a la sección femenina de Estudiantes. Una defensa más agresiva, que permitía robar y correr, y tres triples dieron la vuelta al marcador tras un inicio fulgurante de 15-4. En el Ramiro ya se estaba cocinando un nuevo golpe de mano a un rival ilustre (50-43, min 24) pero el equipo valenciano se recompuso. Frenó el fulgor alocado que había desarrollado su rival y fue reduciendo poco a poco la diferencia hasta que un triple de Rafa Martínez sobre la bocina de final de cuarto le daba de nuevo el mando a Valencia Basket. El último cuarto se presentaba igualadísimo, muy emocional, como le gusta al Estu pero esta vez no supo hacerse con las riendas del encuentro en los minutos calientes. No estuvo excesivamente fino, muy dependiente de Simpson y Aradori que estuvieron muy solos en ataque. Falta la aportación de los habituales en los finales heroicos como Nacho Martín o Javi Salgado. Por no hablar de Van Lacke, lesionado y fuera de combate para mes y medio. Valencia Basket supo controlar mejor los minutos finales, Los jugadores interiores hicieron valer la ventaja adquirida para no dejar escapar la victoria. Valencia Basket sí logró triunfar donde la mayoría de los equipos de arriba han pinchado esta temporada.
Fuente: eldia.es
Unicaja 77 – Gran Canaria 68: Dos equipos que no salieron bien parados de la Copa se encontraban en el regreso a la competición liguera en el Martín Carpena. El comienzo fue el típico de dos equipos aún tristones y dubitativos, de juego a medio gas y poco brillante. Unicaja dominaba recurriendo a su acierto desde el triple pero cinco malos minutos cambiaron la tónica que llevaba el encuentro. Se atascó ante la defensa rival, muy abierta y presionante, Salin tuvo unos momentos de lucidez y Gran Canaria le endosó un 1-10 de parcial que le ponía por delante. Joan Plaza lo solucionaría recurriendo a Toolson (18 puntos, 5 asistencias, 19 de valoración), que rompió el intercambio de canastas que se había establecido en una de esas rachas que caracterizan a los buenos tiradores y que pueden provocar un daño severo en el rival. Dos triples del alero estadounidense antes del final del primero tiempo pusieron una diferencia apreciable al descanso (42-30, min 20). Gran Canaria no se recuperaría del golpe que supuso la aparición de Toolson que no dejó de hacer daño en el tercer periodo. Unicaja no brillaba pero le bastaba con jugar al tran tran para no dejar acercarse a su rival. Entre Toolson y Kuzminskas (19 puntos) se bastaron para mantener las diferencias por encima de los diez puntos todo el tercer cuarto sin mucho problema. A lo máximo que acertaron los de Aíto fue a hacer la goma al inicio del último periodo pero siempre a una distancia prudencial que volvió a estirarse cuando Plaza puso de nuevo en pista a algunos damnificados de la Copa como Granger o Fran Vázquez que pusieron fin definitivo al encuentro para garantizar un final tranquilo. No fue la mejor versión de Unicaja pero le bastó para mantener una jornada más el liderato. Gran Canaria sale de puestos de playoff y más le vale mostrar una cara mejor para volver entre los ocho primeros.
Fuente: eldiario.es
Otros resultados: CAI Zaragoza 86 – Fuenlabrada 69, CB Sevilla 83 – UCAM Murcia 96.
Sin cambios en la parte alta de la clasificación. Unicaja (19-3) se mantiene líder con una victoria de ventaja sobre el Real Madrid (18-4) y tres sobre Barça y Bilbao Basket que se sitúan con 16-6. Baskonia (11-11) cierra la zona de playoffs aunque igualado con Gran Canaria. Donde sí hay cambios es en los puestos de descenso, a los que vuelve a caer Fuenlabrada para acompañar al colista Manresa. Ambos con 5-17 y a una victoria de salir del hoyo.
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