La ACB llega otra temporada más sin hacer demasiado ruido aunque los grandes aficionados al baloncesto tuvieran desde hace tiempo ya esta semana marcada en rojo. Esto no es fútbol por mucho que los grandes favoritos sean las secciones de los dos grandes trasatlánticos del fútbol español y la promoción en los medios sigue siendo demasiado escasa. Si no se está muy pendiente de la actualidad del baloncesto nacional es fácil perderse pero mientras siga habiendo quien la cuente hay manera de encontrarse. No hay novedades en el formato de la competición ni cambios muy significativos en las reglas, salvo la ampliación del instant replay para ayudar a los árbitros, así que tampoco le va a pillar a alguien con el pie cambiado la competición para seguirla esta temporada. Tampoco cambian mucho las perspectivas deportivas en esta nueva campaña, con los dos grandes futboleros partiendo como grandes favoritos a una ACB que no conoce otra final con oponentes diferentes desde 2011. No hay muchas dudas que entre los dos estará el campeón aunque existe algún invitado que puede resultar muy molesto.

Fuente: apuestasbaloncesto.com

El Barça parte como actual campeón tras sorprender en la final de la temporada pasada al Real Madrid, llamado a arrasar con todo y que terminó con el regusto amargo de la decepción. El triunfo reforzó su aureola de equipo competitivo sobre todas las cosas desde que Xavi Pascual ocupa el banquillo azulgrana. Si la moral de los culés estaba por todo lo alto tras lograr el último titulo liguero, ésta se disparó exponencialmente con los refuerzos de lujo que llegaban al Barça. Doellman, MVP de la pasada Liga Regular y pretendido por media Europa; Satoransky, ya maduro tras su magnífica última temporada en Cajasol; y Pleiss, uno de los mejores pivots de la ACB y que junto a Tomic forma una pareja temible en el puesto de 5, de gran altura y talento. DeShaun Thomas completaba una lista de refuerzos que convertía la plantilla azulgrana, probablemente, en la más potente del baloncesto europeo. Un plantel larguísimo, de hasta 15 jugadores contando a los jóvenes, y lleno de recursos para asaltar todas las competiciones. Si ya se podía considerar favorito aludiendo a su papel de campeón tras la llegada de los nuevos fichajes parecía un equipo espectacular, casi inabordable para sus rivales. Incluso un Real Madrid tocado en su ánimo. Sin embargo la Supercopa demostró que por muy buenos que sean los nuevos no se acoplan inmediatamente. El duro revés sufrido en Vitoria ante el Real Madrid evidencia que aún falta trabajo por hacer. Doellman aún deberá acostumbrarse a no ser la gran referencia como ocurría en Valencia. De momento, en Barcelona son otros los que parten el bacalao. A Satoransky le sobran las virtudes pero debe madurar en las grandes citas. Llull le dio un máster tras arrollarlo en la final de la Supercopa. Y Pleiss habrá de buscar su protagonismo en un rol más secundario a la sombra de Tomic. Xavi Pascual tiene todo el crédito para lograrlo con trabajo pero necesitará su tiempo. Lo tiene, hasta abril no se reparte los premios gordos como bien sabe el entrenador culé. Y con mimbres como Navarro, Huertas, Tomic, Oleson, Abrines,, Nachbar o Lampe más los nuevos resulta más sencillo llegar a tiempo. Será cuestión que los nuevos se pongan el mono de trabajo que han dejado colgado tras su marcha jugadores tan físicos como Dorsey, Sada  o Papanikolau.

Fuente: vavel.com

El otro grande futbolero, el Real Madrid, estuvo muy cerca de acabar con un proyecto que ilusionó a todo el madridismo de un plumazo. Las derrotas en las finales de la Euroliga y Liga ACB a punto estuvieron de costarle el puesto a Laso, muy cuestionado por la gestión de la plantilla y señalado como el principal culpable del decepcionante final de temporada. Finalmente se mantiene en el cargo pero bajo la sospecha de ninguneo dentro del club y que cualquier contratiempo podía volver a llevar la nave blanca a la zozobra. Tampoco mejoró el ánimo de los madridistas la política de fichajes. Nocioni es un jugador más que contrastado pero ya muy veterano y que ha perdido peso como ala-pivot. No parecía que Laso fuera a disponer de él como alero, donde se consideraba que podía ser más provechoso para tapar la carencia seria de la plantilla en ese puesto. Maciulis es un digno alero suplente pero nada más. Sobre K.C. Rivers se cernía la incógnita de si a su faceta de tirador le podría añadir el trabajo de Darden, ahora en Olympiacos. Y sobre Campazzo si sería capaz de mostrar su atrevimiento y prodigiosa técnica en un campeonato mucho más duro que el argentino. La comparación con los refuerzos del Barça sacó de quicio a un sector del madridismo que se tiró de los pelos y predijo el apocalipsis y el regreso a las humillaciones de su eterno rival en la infausta época de Messina. Parecía que la diferencia era mayor entre culés y madridistas que de estos al Valencia Basket hasta la llegada de Ayón para reforzar el juego interior con un nombre de lujo. Sin embargo todos los negros presagios se han disipado con la Supercopa, tras la trabajada victoria ante el equipo valenciano y el meneo sin paliativos al que sometió al Barça en la final para lograr el primer título de la temporada. Un equipo que cuenta con Llull, Rudy, Sergio Rodríguez, Felipe Reyes, Carroll o Bouroussis no puede ser una piltrafa y bien lo demostró en Vitoria. Ya no está Mirotic, que inicia el sueño americano en Chicago, pero el perímetro madridista continúa siendo letal, quizá el más poderoso del baloncesto europeo. Cuando defiende con intensidad y puede correr sigue siendo imparable. Con la autoestima recuperada y mayor calma entorno a la figura de Laso el Real Madrid sólo necesita ser él mismo para luchar por todo en una temporada especial por la disputa de la Final Four en Madrid. Volverá a librar duelos épicos con el Barça en la lucha por cada título.

Fuente: zonadostres.com

Dije que podía haber un invitado más que molesto al festín de los dos grandes y ése es el Valencia Basket. Hay quien lo desestima y le coloca en una segunda fila, equiparado a Unicaja o Baskonia como afirma Miguel Ángel Paniagua, pero lo considero un equipo muy capacitado para amargar la vida a cualquiera, incluso en la lucha por una competición de largo recorrido. Se fue Doellman, su gran referente, a reforzar al Barça. Tampoco siguen otro jugador importante como Lafayette, y otro secundario pero necesario para dar minutos de refresco como Triguero. Pero gran parte de la columna vertebral se mantiene en el equipo valenciano. Sato, uno de los mejores aleros del baloncesto europeo y un lujo para el club, Rafa Martínez, Pau Ribas, Dubljevic, Aguilar, Lishchuk, Lucic o Van Rossom son piezas muy apreciables que fueron importantísimas en un equipo que la pasada campaña llegó a opositar incluso al título de Liga y que probó las mieles del éxito en la Eurocup. Se ganaron el crédito sobradamente para tomarles muy en serio. Además han vuelto a acertar con los refuerzos. Kresimir Loncar es un pivot hábil y duro que refuerza en gran medida el juego interior. Físicamente también aportará mucho músculo Harangody, un 3-4 muy fuerte con pasado NBA. Buycks debe ocupar el rol de microondas tirador que abra defensas y rompa partidos y Guillem Vives, jugador revelación la pasada temporada, representa la apuesta de futuro del club. Si se echa un vistazo a la plantilla nos encontramos con un banquillo por el que suspiraría cualquier entrenador de primera línea. Este Valencia Basket no es ninguna broma, como no lo es en la pista con su tremenda intensidad en defensa y su ataque veloz, versátil y muy efectivo. Perasovic le ha imprimido su sello al equipo taronja hasta convertirlo en un bloque talentoso, bien trabajado y competitivo que puede representar la tercera vía en el baloncesto español, ese papel de grano molesto que ocupó el Baskonia durante muchos años.

Fuente: marchadeportiva.com

Tras este trío sí podemos identificar un grupo en una segunda fila que aspira claramente a entrar en los playoffs. Unicaja es el más poderoso de todos. Joan Plaza, que acaba de renovar hasta 2016, logró reflotar al equipo malagueño la pasada temporada tras años de rumbo errante y lo clasificó para semifinales en ACB donde dio mucha guerra al Real Madrid. Salvo la marcha a última hora de Zoran Dragic a la NBA, donde acompañará a su hermano Goran en Phoenix, conserva prácticamente intacto el núcleo duro del equipo (Granger, Fran Vázquez, Suárez o Toolson). Para reforzar el equipo ha optado por mezclar nombres consagrados como Vasileiadis, Stefansson o Stefan Markovic, con estadounidenses que se han bregado en ligas menores como Calebb Green o Will Thomas, con todo por demostrar en una liga poderosa como la ACB, para ocupar los puestos de 3-4. Quizá su talón de Aquiles esté en el juego interior, faltan alternativas de nivel a Fran Vázquez, pero hay madera para consolidarse de nuevo entre la aristocracia de la ACB. Gran Canaria ha visto algo menguado el poderío interior de la pasada temporada con la marcha de Xavi Rey y Nacho Martín pero la baja más significativa fue Pedro Martínez tras su cese por motivos extradeportivos, muy desacertados para tomar la decisión. Sin embargo la elección del sustituto es más que acertada. Aíto García Reneses es el hombre idóneo para mantener al equipo grancanario entre los ocho primeros. Además la secretaría técnica ha vuelto a trabajar muy bien. Kendall, Kuric o Txemi Urtasun son nombres consagrados que aportan profundidad a un equipo que volverá a ser muy incómodo, en especial en casa aunque ahora juegue en el flamante Gran Canaria Arena. Baskonia es toda una incógnita. En los últimos años ha iniciado una cuesta abajo que cuesta mucho frenar. La imagen ofrecida en la Supercopa, ante su público, fue lastimosa. Es un equipo sin hacer y lleno de americanos que, de momento, van a la suya dentro de la cancha. Crespi el Histerias, sustituto de Scariolo, tiene un duro trabajo por delante. Deberá conjuntar un equipo y cubrir bajas tan notables como Nocioni o Pleiss. No me parece tarea sencilla y más conociendo a Crespi que no es un genio sumando las individualidades en favor del equipo. Tengo dudas razonables sobre si entrará en playoffs. La temporada pasada le costó mucho y en esta no me desprende buen olor. El CAI Zaragoza cierra el grupo. Joaquín Ruiz ocupa el puesto que dejó por sorpresa José Luis Abos tras serle diagnosticada una grave enfermedad. Tiene la tarea de mantener el listón de su predecesor y conjuntar un equipo casi nuevo y que ha sufrido bajas tan importantes como las de Rudez, Sanikidze o Roll. Además el regreso de Shermadini tendrá que esperar un par de meses. No se ha reforzado nada mal, sin embargo, con jugadores de garantías como Jason Robinson, Landry o Sastre, que buscará explotar definitivamente en la capital maña. Los serbios Katic y Jelovac también han apuntado buenas maneras dentro de la zona y formarán un juego interior muy poderoso junto a Norel y Shermadini cuando se recupere. Tiene buenos mimbres para entrar en playoffs sin problemas, me inspira confianza.

Fuente: teinteresa.es

Después encontramos ese grupo de equipos que no sabemos donde acabará, bien capaces de entrar en playoffs o sufrir como condenados por la permanencia. De todas formas es un grupo heterogéneo. Con el regreso de Sekulic, que se marchó a mitad de temporada cuando era líder de valoración al Fenerbahçe para chupar banquillo, el CB Canarias recupera la pieza clave de un bloque que se mantiene casi intacto (Saúl Blanco, Richotti, Uriz, Lampropoulos, Rost, Sikma,..). Con el pivot montenegrino se clasificó por primera vez para la Copa y bien que podría repetir, más si cabe tras buenos fichajes como los de San Miguel o Beirán. Apunta a playoffs, bien podía estar en el grupo anterior. Luego tenemos a dos históricos que sobreviven a duras penas a sus problemas económicos. El Estudiantes ha tenido que inventarse un equipo prácticamente nuevo con casi nada. Confía en la veteranía de Javi Salgado y Nacho Martín para no pasar apuros. Para lograrlo tendrá que esperar que su pareja de americanos funcione y la cantera complete lo que falta. Historia parecida a la del Joventut que se ha reforzado poco pero recurriendo a viejos conocidos de la casa como Mallet o Sergi Vidal. Su veteranía y la de los Miralles, Kirksay y Savané para guiar a los jóvenes de la inagotable cantera verdinegra (Llovet, Ventura, Barrera, Álex Suárez) y descargarles de la presión de un histórico que sobrevive como puede. Del rendimiento de sus fichajes americanos dependerá que pueda aspirar a algo más que un año tranquilo. Baloncesto Sevilla, el antiguo Cajasol, completó una temporada muy buena con un equipo prácticamente sub-21 y el futuro pintaba halagüeño pero la llegada de un fondo de inversión estadounidense al equipo sevillano ha cambiado todo. Está ahora mismo sin entrenador tras no aceptarse la inscripción como tal de Scott Roth y ha cambiado su apuesta por un equipo más veterano con el fichaje de cuatro estadounidenses, incluido Pullen. El rendimiento del Baloncesto Sevilla es toda una incógnita aunque tengo curiosidad por seguir la evolución de Hernangómez y Porzingis. UCAM Murcia también podría estar en este grupo por plantilla pero ya es una costumbre que cada año acabe sufriendo. Ha vuelto a fichar nombres interesantes (Neto, Cabezas, Bamforth) pero el equipo murciano suele penar convertido en una banda con demasiada frecuencia así que habrá que esperar si Diego Ocampo tiene mayor fortuna a la hora de encontrar la tecla adecuada que sus predecesores. Por último situó a un Bilbao Basket que ha vivido un verano de pesadilla tras la decisión de la ACB de excluirle de la competición por motivos económicos. Tras el recurso a instancias deportivas superiores fue readmitido. Hubiera sido un golpe para la ACB acabar de esta manera con el maravilloso ambiente de Miribilla. Tras pasar los malos momentos, en los que se puso en cuestión la viabilidad y el futuro del equipo, ya puede pensar en el aspecto deportivo una temporada más. Pese a la cantidad de problemas conserva la parte importante del bloque. Siguen los Raúl López, Hervelle, Mumbrú o Gabriel, todos ellos muy comprometidos con el club, junto al irregular pero anotador Bertans. Ha fichado con bastante cabeza (Colom, Latavious Williams, Andjusic, Todorovic,..) y cuenta con un plantel más que apañado, con una buena mezcla de veteranía y juventud. Los de Sito Alonso, nuevo entrenador, si logran olvidar los meses de problemas extradeportivos pueden ser un candidato serio a entrar en los playoffs. Con el apoyo incondicional de Miribilla pueden contar siempre.

Fuente: lavozdegalicia.es

El último grupo lo forman los equipos que, salvo sorpresa, están llamados a luchar por la permanencia (si es que hay descensos. El canon ACB, ya se sabe…). Fuenlabrada es un habitual en este grupo pero suple su falta de recursos económicos con un gran trabajo en la secretaría técnica que le permite salvarse en muchas ocasiones con aparente comodidad. Se apuntó un buen tanto con la renovación de Panko y ha tirado de veteranía para reforzarse con los fichajes de Baron, Miso, Akindele o Clark, entre otros. Entre los dos últimos está la apuesta para acabar con los problemas endémicos del club del sur de Madrid en el juego interior. Moncho Fernández se encuentra con un marrón de cuidado porque Obradoiro sólo conserva tres jugadores de la pasada temporada: Corbacho, Pumprla y Rafa Luz Freire. Los fichajes son una lista de retales así que la temporada se presenta complicada salvo que vuelva a explotar la pareja de americanos. Algo más de suerte en los refuerzos ha tenido Ponsarnau en Gipuzkoa Basket. Jordi Grimau, Taquan Dean y Josep Franch saben perfectamente de qué va esto y la cesión de Dani Díez puede permitir al alero madrileño explotar de una vez tras un año en el que Laso apenas contó con él pero en el que debutó con la selección. La renovación de Doblas es todo un triunfo, retuvo a una institución en el club donde ha sido un pilar sólido durante muchos años. Si trabaja tan bien como la pasada temporada se puede salvar con solvencia. Manresa, repescado por segunda vez consecutiva, se encuentra ante el reto de salvarse por méritos propios con una plantilla construida entera a la carrera. Pedro Martínez regresa al club donde saltó a la fama hace 20 años. Falta hará su magisterio para mostrar un nivel competitivo, la ACB no puede permitirse otro zombi como el Valladolid del año pasado. También estará en las manos de los Dewar, Roger Grimau, Biviá, Ogilvy o Poeta. Al menos parece que cuenta con jugadores más hechos y cuajados que la pasada temporada pero el equipo es nuevo y construirlo lleva su tiempo. Y para acabar, la novedad esta temporada. Andorra regresa a ACB con el reto de mantener la categoría. Sada, Trías y Kaloyan Ivanov ponen el punto de veteranía en un equipo lleno de jugadores procedentes de LEB Oro o sin experiencia en una Liga tan potente.

Este es todo el aperitivo, ahora queda que el balón vuele con el primer salto inicial. Se abre el telón de la temporada 2014-15 en la ACB.