CONFERENCIA ESTE

Los Bulls se presentaban en Brooklyn sin Hinrich. Por ello decidieron que era mejor aplicarse en defensa y no permitir penetraciones. Así el tiro exterior predominaba, pero una pérdida y los rebotes ofensivos que conseguía López daba una ligera ventaja a los locales. Tras el tiempo muerto de rigor aparecieron los interiores de Chicago que iban recortando. La respuesta de Williams y Watson fue doblar balones y ampliar la ventaja local a siete puntos. Con Boozer cargando el rebote ofensivo los visitantes volvieron a situarse cerca pero un inmenso López lideró un parcial de siete cero que colocaba a los Nets cinco puntos por encima. En el inicio del segundo cuarto Robinson y Humphreys eran las armas para anotar, el base cerca del aro y el pivot a cinco metros. Con ocho minutos por delante Chicago disfrutaba de una ventaja de dos puntos pero la vuelta de López y el apoyo de Humphreys permitieron a los locales irse con ocho puntos a reflexionar. El que reflexionó , y mucho, fue Thibodeau. Su equipo salió del vestuario más agresivo colocándose a cinco puntos aprovechando una gran serie de tiro (11 de 16 al final del cuarto). Para sofocar el incendio que prendía en Chicago estaba López con el rebote bajo el aro contrario y un Williams inspirado de cara al aro. Así se mantenían cuatro puntos de ventaja tras estos doce minutos de pelea. El último cuarto comenzaba con un triple a tabla que parecía presagiar tormenta en Brooklyn. Por suerte estaba Blatche que con seis puntos seguidos daba aire a la afición Un nuevo empujón de los Bulls aprovechando el individualismo de Joe Johnson fue cortado por un Blatche que se hacía grande y llevaba la ventaja a los siete untos a falta de cinco minutos. Con Blatche cojo y los Nets olvidando a sus interiores se llegaba los minutos decisivos. Brook López y cinco puntos consecutivos de Gerald Wallace resolvieron.

Invitado inesperado: Kris Humphreys, Andray Blatche y Gerald Wallace (Nets)

Para abrir el sexto partido en Chicago sucedió algo inesperado. Cinco canastas seguidas sin fallo entre ambos equipos producto de unas defensas sin energías. Eso provocaba que el marcador se mantuviese igualado hasta que en el último minutos Brook López abría un hueco de seis puntos a favor de los visitantes. En el segundo cuarto las defensas apretaron un poco y la respuesta fue distinta en ambos equipos; los Nets fallaban tiros y Chicago perdía balones. Eso favorecía a los locales que se aproximaba a mitad de cuarto aprovechando la ruptura de la defensa de Robinson. No fue hasta los tres minutos mechanical bull for sale finales que los ataques consiguieron soltarse y los Nets consiguieron llegar al descanso con la misma distancia que tenían al empezar el cuarto. Al principio del tercer cuarto pisar la zona con el balón era complicado. Los porcentajes bajaban a gran velocidad y el primero en reaccionar fue Thiboeau. Con movimiento de balón los Bulls encontraron alguna posición interesante que les permitía ponerse a un punto quedando dos minutos. Los Nets llevaban doce tiros consecutivos falladas y encontraron la solución en una pérdida que permitió una bandeja sencilla. Con eso los nervios visitantes se calmaron y consiguieron guardar cuatro puntos para administrar en el último cuarto. Los tres primeros minutos fueron de mucha lucha y muchos nervios. Por suerte para Brooklyn sus exteriores clavaron dos triples y la ventaja creció a ocho puntos. Chicago respondió yendo a la guerra con sus interiores y los Nets no volvieron la cara pero si se olvidaron del juego interior en ataque. La diferencia quedaba en dos puntos a falta de dos minutos con gran esfuerzo de López para mantenerla. Lugo cinco puntos seguidos de Blatche pusieron a los Bulls a un triple de mandar el partido a la prórroga. Belinelli falló y se jugaba un séptimo partido en Brooklyn.

Invitado inesperado: Andray Blatche (Nets)

En Brooklyn el ambiente no dejaba respirar antes del séptimo partido. El comienzo parecía querer decirle a Joe Johnson que no era la mejor noche para tirar. Mientras los Nets tardaban en despertar los Bulls mostraban sus cartas. Juego interior y cargar el rebote ofensivo. En un partido a todo o nada era lo normal. Chicago iba sacndo unas cortas diferencias mientras Deron Williams trataba de centrar el ataque local. Un poco para López, otro poco para Gerald Wallace y lo que queda para mí. Así al final del primer cuarto los visitantes sacaban cuatro puntos. El segundo cuarto profundizaba en la sensación de que los visitantes sabían lo que se jugaban. Los ataques de Brooklyn se convertían en una innumerable sucesión de jugadas individuales. Como es natural una vez que dejaron entrar los visitantes se despegaron con una muy buena circulación de balón El tiempo de Carlesimo llegó con diez puntos de desventaja a cuatro minutos del final de cuarto. Nada cambió la ventaja se fue a los diecisiete puntos al descanso si verse ayudas en la defensa y con escaso juego de equipo. El tercer cuarto mostró otra forma de jugar en los locales. López recibía en el poste y la circulación permitía triples liberados de Wallace. Los Bulls se pusieron nervioso y Thibodeau paró el partido. Con cinco minutos de cuarto jugados los Nets estaban a siete. Chicago se estabilizó con un par de chispazos de Butler y volvieron a sostenerse con sus interiores. Los últimos doce minutos de eliminatoria se presentaban con el público conectado y los jugadores de ambos equipos enchufados. La ventaja era visitante, siete puntos de tranquilidad. La primera canasta del cuarto tardó tres minutos, la segunda cinco; ambas fueron de Chicago. Los diez puntos de ventaja a falta de siete minutos permitían tener descansando a Robinson y Belinelli. Eso se notó en los minutos decisivos parando todos los intentos de López con buenas decisiones.

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Invitado inesperado: Jimmy Butler, Marco Belinelli (Bulls)
ELIMINATORIA CERRADA: CHICAGO GANA CUATRO A TRES

Dos minutos tardó el Madison Square Garden en ver una canasta de los Knicks. Sin embargo la tensión en el público era mínima, Boston todavía no había anotado tras cuatro minutos y Rivers gastó un tiempo muerto. Bass fue el primero en reaccionar y con cuatro puntos seguidos acercaba a los visitantes a siete puntos. Tras ocho minutos y medio anotó alguien en los verdes que no era Bass. Como los neoyorquinos fallaban tiros sencillos la diferencia se redujo a dos puntos tras el primer cuarto. En el segundo cuarto Garnett comenzó a imponerse dentro, sacando del partido a Kenyon Martin. Eso debió revitalizar a Pierce que a cinco minutos para finalizar el cuarto puso la primera ventaja visitante con un triple. En los últimos minutos Anthony se atascó contra la gran defensa visitante y Pierce repartía juego de modo que los Celtics se iban seis puntos por delante. A la vuelta del periodo de meditación los locales subieron su defensa provocando pérdidas de balón en los visitantes. Rivers respondió metiendo a Terry por Bradley pero no funcionaba y Nueva York se ponía a dos puntos. La solución vino cuando un tiempo muerto pedido para no perder la bola en saque de fondo trajo consigo el descanso de Garnett y la entrada de Terrence Williams. Esto abrió los espacios de ataque a los Celtics que, aprovechando el desacierto de Anthony y JR Smith, se iba con nueve puntos para administrar en el último cuarto. Si los Knicks habían fallado los siete últimos tiros del cuarto anterior en este no iban mejor. Además Carmelo se lesionaba el hombro izquierdo en el primer minuto, todo eran malas noticias que se resumían en un 16 a 4 de parcial en ocho minutos. Quince puntos de ventaja faltando nueve minutos parecían suficientes, sin embargo unas pérdidas de balón absurdas permitieron la recuperación local. Se situaban a ocho jumpers for sale puntos quedando seis minutos pese a que Anthony ya jugaba solo. Por suerte Green y Terry estaban inspirados y con unos triples resolvieron el partido. Tres a dos para los de Woodson y partido en Boston para finiquitar la eliminatoria.

Invitado inesperado: Jason Terry, Brandon Bass (Celtics)

El Boston Garden ardía por conseguir la tercera victoria consecutiva y forzar el séptimo partido para cerrar la boca a los neoyorquinos más lenguaraces. De partida los Knickerbockers estaban muy concentrados en ambos lados de la cancha y tomaban las primeras ventajas. Boston perdía balones y apenas disfrutaba de tiros cómodos; permitiendo contraataques que ponían nueve puntos a favor de los visitantes con cinco minutos de juego. el tiempo muerto de Rivers con cambiaba la dinámica y en nueva York aprovechaban el acierto en el tiro exterior de Prigioni para ponerse arriba por dieciséis puntos a falta de cuatro minutos. Carmelo se sentaba pese a ello al final del primer cuarto la diferencia se instalaba en catorce puntos. El segundo cuarto empezaba con los verdes más intensos con la segunda unidad y un Green muy activo. Se colocaban a diez puntos a falta de diez minutos. Los robos de balón y el buen momento de Anthony y Randolph permitieron alcanzar a Nueva york los dieciocho puntos de ventaja a siete minutos del final. Entonces dos triples de los locales colocaron el partido a diez puntos nuevamente con tres minutos por jugar. El acierto de Anthony colocaba a los Knicks con doce de ventaja al descanso (24% Boston).Tras el paso por vestuarios la defensa neoyorquina volvió a subir y, con un Prigioni activo, la diferencia subió a dieciséis a diez minutos para el final de cuarto Los veteranos de los Celtics calentaban el ambiente y resucitaban el partido poco a poco. Entonces unos balones perdidos y el acierto exterior de Shumpert dejaron a Boston a veinte puntos al final del tercer cuarto. Al inicio del último cuarto Shumpert iba agresiva al aro y la ventja aumentaba a veintiséis puntos a falta de diez minutos. La relajación llegó a Nueva York pasándose cinco minutos sin anotar; perdiendo balones y fallando bajo canasta. Mientras en Boston Pierce, Green y Bradley tomaban los mandos y situaban el partido a seis puntos. Por suerte Shumpert robó un balón para dejar una bandeja sencilla que tranquilizaba a los visitantes. Los últimos minutos los resolvieron Anthony y JR Smith para ,finalmente, liquidar la eliminatoria.

Invitado inesperado: Pablo Prigioni, Iman Shumpert (Knicks)
ELIMINATORIA CERRADA: NUEVA YORK GANA CUATRO A DOS

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Los interiores de los Pacers llegaban con mucho que demostrar al quinto partido ante sus aficionados. Pronto se notó que Atlanta no podría pararles y las primeras ventajas afloraron ya que Josh Smith y Jeff Teague no se veían acompañados en el ataque. Fue la salida de Ivan Johnson la que permitió con su defensa frenar algo a Indiana y dejar a su equipo con un punto de ventaja al sonar el final de cuarto. El segundo cuarto presentaba la novedad de Jeff Pendergraph de alero alto para frenar a Josh Smith en el poste. Eso liberaba a George en defensa y le dejaba respirar para el ataque. En un minuto Drew paró el partido. A la vuelta del tiempo muerto Smith le hizo dos ganchos con la izquierda en la cara a Pendergraph y Vogel le retiró del campo, los Hawks estaban por delante gracias a los balones perdidos de Indiana. Faltando siete minutos Smith se sentó con dos faltas y el equipo se olvidó de atacar el aro. Como West si lo hacía en el otro lado de la cancha los locales pegaban un tirón de cinco puntos. La llamada de atención de Drew mejoró el ataque durante un minuto pero no podían contener el recital de David West en el poste bajo. Al descanso los visitantes llegaban pidiendo la hora, haciendo de los siete puntos a remontar un muro muy alto. EL muro se veía infranqueable cuando con treinta segundos de tercer cuarto Smith cometía torpemente su tercera falta. Pese a no sentarse en el banco el equipo se desconcentró. Las puertas atrás funcionaron en el ataque de Indiana y los Hawks se limitaban a tiros exteriores que ampliaron la diferencia a trece puntos. Con ese panorama Smith se quitó de en medio. Cometió dos faltas en un minuto sentándose con cinco más una técnica por respondón. Con ocho minutos de cuarto por delante los nervios afloraron. En los siguientes minutos se repartieron a gusto ambos equipos y los árbitros no sabían muy bien lo que pitaban. Los exteriores de los Pacers aumentaban la diferencia y el despertar de Horford la reducía. La renta de catorce puntos parecía escaso botín para los problemas sufridos por los visitantes. El último cuarto se llenó de golpes y fallos por ambos equipos hasta que los Pacers rompieron el partido definitivamente.

Invitado inesperado: Josh Smith (Pacers)

En Atlanta contaban con seguir la buena racha ante los Pacers en casa y llevar la eliminatoria al séptimo partido. Como es normal en un partido de tanta tensión las defensas marcaban la pauta, los despegues eran mínimos y tras doce minutos los visitantes iban un punto por delante. En el inicio del segundo cuarto Indiana subió su intensidad corporal en defensa, las manos aparecían por todos lados y tras tres minutos Drew paró el partido. La diferencia era de cinco puntos en aquel momento y se mantenía tres minutos más tarde. Fueron minutos locos donde los tiros no entraban y los balones se escurrían entre los dedos. Al descanso los Pacers aprovecharon una buena racha de sus interiores y que Atlanta no metía un tiro para tomar ocho puntos de ventaja. Esa racha se mantuvo en el inicio del tercer cuarto. Pasaron a dominar por quince puntos en tres minutos y nuevamente el entrenador local tenía que llamar a sus tropas. El toque de atención no funcionó y el partido reventó. Los de Drew estuvo ocho minutos entre segundo y tercer cuarto sobreviviendo con cuatro puntos. Con 50 puntos al final del tercer cuarto era imposible pensar en remontar quince puntos. Verse con el partido perdido liberó las muñecas de los Hawks y aprovechando el desconcierto visitante se colocó a siete puntos a falta de cinco minutos. Vogel pedía tiempos muertos que no conseguían hacer que los suyos recuperasen el juego interior. Por suerte cuando quedaban dos minutos y Atlanta estaba a dos puntos resurgió la defensa. Los locales ya no anotaron e Indiana pasaba ronda.

Invitado inesperado: Lance Stephenson (Pacers)
ELIMINATORIA CERRADA: INDIANA GANA CUATRO A DOS

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CONFERENCIA OESTE

Los Warriors llegaban al quinto partido en Denver con todas las opciones abiertas para resolver a domicilio la eliminatoria. La inclusión de McGee en el quinteto inicial local fue la sorpresa que introdujo George Karl para impedirlo y funcionó. El rebote ofensivo era local y junto al cierto de Chandler consiguió abrir las primeras distancias. Nueve puntos muy jugosos a cuatro minutos para finalizar el cuarto. La intimidación y algunas pérdidas propiciaron más ocasiones de despegue de los Nuggets con un Koufos que aprovechaba los balones doblados de sus compañeros. Viendo que en los visitantes sólo respondía Barnes no resultaba extraño el dominio por catorce puntos al final del primer cuarto. El segundo cuarto no cambió el paisaje. Bogut y Curry se enfadaron por el juego sucio de los pivots locales y la ventaja se estiró a los dieciocho puntos. Con un poco de Chandler y poco movimiento de balón en los visitantes la ventaja al descanso era de veinte puntos. A la vuelta de los vestuarios el cansancio afectaba a ambos equipos y la intensidad bajaba. Esto afectó más a los locales que vieron como tras siete minutos los Warriors se colocaban a nueve puntos. Entonces surgió Iguodala que con cinco puntos y una asistencia alejaba de nuevo a los locales. El último cuarto se presentaba con diecisiete puntos para remontar y los de Marc Jackson salieron nerviosos. Pérdidas y malos tiros se extendían por toda la cancha. Un parcial de 15 a 2 en cuatro minutos volvía a poner esperanza para los visitantes. La quinta falta de Curry no les frenaba y se ponían a cinco puntos quedando cinco scivolo gonfiabile minutos. En ese momento volvieron los nervios y el rebote para permitir tomar ventaja a los Nuggets. Chandler liquidó el partido en el último minuto con un triple desde la esquina. Golden State seguía con ventaja para finalizar la serie en casa, tres a dos.

Invitado inesperado: Wilson Chandler, André Iguodala (Nuggets)

La fiebre amarilla estaba entusiasmada ante la posibilidad de ver a su equipo pasar ronda en casa. Ante la inclusión como titular de McGee, Marc Jackson respondía en este partido con Landry. No tardó cinco minutos Landry en irse al banco ante la imposibilidad de frenar el rebote ofensivo de Denver. En su lugar salía el rookie Draymond Green en su versión más descarada, recordando los tiempos de Michigan State. Inmediatamente George Karl cayó en la trampa y puso a Chandler de cuatro abierto. La ventaja de siete puntos iba y venía con factores inesperados como ver a Koufos clavar un triple sobre la bocina de posesión. Tras doce minutos los Warriors perdían por cuatro puntos. En el segundo cuarto los visitantes iban con agresividad al aro y a robar el balón. En tres minutos la diferencia se situaba en ocho puntos y seguía ampliándose. Repentinamente la figura de Bogut emergió para dominar ambos aros y rescatar a Golden State que al descanso se encontraba a dos puntos. No habían pasado dos minutos de tercer cuarto cuando Faried cometía su cuarta falta personal. Fue como una señal; Jackson puso una zona, Bogut cerró el rebote y Curry ejecutó dos triples que ponían a Golden State con seis puntos de ventaja. El tiempo de George Karl no importaba, los Warriors se habían liberado y el pequeño diablillo también. Junto a Bogut construyó una ventaja de once puntos para defender en el último cuarto. Y salieron a defender atacando el aro. A los tres minutos la ventaja había crecido a dieciocho puntos. Jack empezó a contemporizar con el ataque local y los Nuggets jugaron sus últimas cartas sin miedo. En menos de seis minutos se remontaron trece puntos. Entonces surgió Draymond Green para, con seis puntos consecutivos, dar una cómoda ventaja de ocho puntos a su equipo que administró muy mal. Por suerte para los locales Chandler se jugó la última posesión en cinco segundos y falló dos tiros para empatar dando opción a los Warriors a resolver con los tiros libres.

Invitadoinesperado: Andrew Bogut, Draymond Green (Warriors)
ELIMINATORIA CERRADA: GOLDEN STATE GANA CUATRO A DOS

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En Los Angeles se esperaba el quinto partido con pasión. Randolph llevaba dos partidos cargando con el ataque de los Grizzlies de modo que se tomó un descanso. El objetivo de ambos equipo era cerrar el acceso a la zona y los exteriores cobraron importancia. La igualdad era normal tras un cuarto y sólo los problemas para cerrar el rebote de los Clippers parecía presentar un posible motivo de ruptura del partido. Los suplentes de los Clippers presentaban una buena distribución de balón en el segundo cuarto que era respondida en Memphis con la imparable presencia de Randolph bajo aros. Los porcentajes de tiro de los Grizzlies se iban al 29% quedando cuatro minutos para el descanso. Pese a ello dominaban por un punto ya que en los angelinos sólo respondía Paul que se iba a descansar con 21 puntos de los 48 de su equipo. La baja por faltas de los interiores de Del Negro le daban a Memphis seis puntos de ventaja para la segunda parte. Tras la charla de Hollins en los vestuarios los Grizzlies se acordaron de Marc Gasol. Junto con Randolph rompía a unos Clippers que, con Griffin renqueante, seguía atado a Paul. Un parcial de once a cero parecía romper el partido cuando llegó la quinta personal de Marc Gasol. Lo realmente roto era Griffin que se iba a vestuarios a mitad de cuarto con su equipo perdiendo de once. En el último minuto del cuarto hubo un amago de reacción local cortado por una carrera loca de Bayless. Se comió el campo de un fondo al otro en cuatro segundos para poner la diferencia en ocho puntos. La salida del banquillo fue local. Con cuatro puntos en un minuto asustaban a un Hollins que pedía tiempo. Por encima Marc cometía la quinta falta quedando diez minutos. Entonces Hollins respondió con cuatro abiertos con Randolph como boya bajo el aro. Percutía una y otra vez y ganaba la posición manteniendo arriba a Memphis. De repente, como para bajar la agresividad, un balón se quedó colgado del aro tomando el pelo al público que esperaba que se venciese. Tras la anécdota hubo un último intento comandado por Paul y Crawford pero fue respondido por el rebote ofensivo y un Prince acertado en el tiro. Tres victorias seguidas para Memphis que se ponían tres a dos con el siguiente partido en casa.

Invitadoinesperado: Tayshaun Prince (Grizzlies)

Los Clippers se presentaban en Memphis para el sexto partido con Griffin en el banquillo. Eso se notó de inicio, Paul estaba muy solo. Por encima los exteriores locales estaban hiperactivos en ataque. Así a mitad de cuarto los Grizzlies disponían de ocho puntos de ventaja. Con Barnes y Griffin en pista Paul consiguió los espacios que necesitaba para finalizar cerca del aro, obligando a Hollins a pedir tiempo muerto. La diferencia se quedó en tres puntos para los de Tennesse al finalizar el cuarto. Los Clippers arrancaron con fuerza el segundo cuarto gracias al acierto exterior de Matt Barnes. Los angelinos buscaban a sus exteriores abiertos para el triple mientras Memphis cargaba todo dentro. Naturalmente llegó un momento donde los tiros lejanos no entraron y los Grizzlies tomaron una ventaja de cinco puntos al descanso. A la salida del tercer cuarto volvió a ocurrir lo mismo. Paul se encontraba atrapado y no encontraba ayuda. Memphis aprovechaba cada balón suelto para correr y cada corte hacia el aro para anotar o sacar falta. En una de esas transiciones fugaces de los ositos a Billups le pitaban flagrante. La ventaja llegaba los dos dígitos. Griffin saltó a la cancha caliente y unas chispas empezaron a surgir en la defensa visitante. Pronto saltaron los fuegos artificiales a ras de suelo. Randolph no es mal compañero para tirar unos fuegos. Tras ese momento de esparcimiento ambos se dedicaron jugar como saben y los favorecidos fueron los visitantes con la ayuda del rebote ofensivo. A tres minutos para el final de cuarto se colocaban a ocho puntos. Con sólo cincuenta segundos por jugar de cuarto y los Clippers a seis puntos surgieron los secundarios locales para llevar la diferencia a trece puntos. Paul se puso al mando y la diferencia se redujo a seis puntos faltando cinco minutos. Bayless y Conley. cada uno con un triple, llevaron la tranquilidad a Memphis. El que no se quedó tranquilo fue Paul que quiso montar un número para despedirse. Mala despedida para los angelinos.

Invitado inesperado: Tony Allen , Jerryd Bayless (Grizzlies)
ELIMINATORIA CERRADA: MEMPHIS GANA CUATRO A DOS

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Oklahoma quiso dejarle claro a Beverley que no era bien recibido y ante el abucheo general estte respondió anotando la primera canasta de los Rockets. Pronto lograron distanciarse los visitantes con un gran acierto exterior mientras los Thunder respondían a tirones de Durant. Como Houston se olvidaba de combinar con los interiores McHale tuvo que llamar al orden. nuevamente se distanciaron a siete puntos con un Harden acertadísimo, y nuevamente cayeron en el error de no anotar en la zona. Sólo la agresividad de Aaron Brooks permitía mantener cuatro puntos de ventaja tras los doce minutos iniciales. En el segundo cuarto Durant dejaba libres a los tiradores suplentes pero estos no acertaban y Brooks seguía nutriendo la anotación en la zona con buenos pases a Greg Smith. Ocho puntos era la diferencia que hizo a Scott Brooks ir a la mesa a parar el partido. Ese respiro permitió empatar el partido con cuatro minutos a pleno rendimiento de Durant y la defensa. Entonces despertó García con cinco puntos seguidos mientras Martin seguía sin acertar tirando solo. Con el cuarto triple de Harden se llegó al descanso, los Thunder tenían siete puntos que superar. Los dos minutos iniciales de cuarto alteraron los planes de Oklahoma. Durant no era suficiente para aguantar frente al cierto exterior visitante. La ventaja crecía por encima de las dos cifras. Cualquier solución que no implicase a Durant por parte local era inútil. Mientras los Rockets redescubrían la anotación interior. Tras unos minutos de desconcentración visitante, un triple de Harden y una penetración de Brooks daban un alivio de doce puntos para encarar el último cuarto. Y era necesaria esa ventaja ya que se lesionó Brooks, García andaba preocupado giochi gonfiabili por un golpe en su muñeca y Harden se precipitaba en el ataque. Por suerte los secundarios de Oklahoma seguían desaparecidos. Viendo que la diferencia no se reducía Brooks decidió defender haciendo faltas a Asik para aprovechar sus malos porcentajes. Con esa táctica se colocaron a seis puntos quedando cuatro minutos. Entonces,, sorprendentemente, se olvidaron de las faltas y la victoria se fue definitivamente a Houston con García de protagonista final.

Invitado inesperado: Omer Asik , Francisco García (Rockets)

Con cuatro minutos de sexto partido Houston estaba la mando por nueve puntos. La culpa era de los malos ataques visitantes en cuyas filas se notaban ciertos nervios al no poder encontrar fácilmente a Durant. Además Asik dominaba dentro y el juego sin ataduras de Parsons en ataque facilitaba a los Rockets nueve puntos de ventaja. Curiosamente fue sentar a los titulares y mejorar Oklahoma. Ajustaron las líneas de pase para robar balones y como en ataque no había una referencia clara impedía la anticipación de la defensa local. El resultado fue una reducción de la diferencia a tres puntos cuando se sentaron a descansar. La tendencia continuaba en el segundo cuarto, con un Reggie Jackson que no tenía dificulatades para presentarse bajo el aro contrario. Apoyándose en el rebote ofensivo de Collison los Thunder se iban. Unicamente el acierto exterior local conseguía dejar a Houston a cuatro puntos. Parsons no bajaba el nivel ofensivo y los Rockets tomaban la delantera por seis puntos tras cuatro minutos de cuarto. El tiempo muerto era obligado pero no solucionó nada. Justo cuando Oklahoma parecía perder la concentración surgieron Reggie Jackson y Durant para remontar y poder finalizar por delante el cuarto. Un buen trabajo de equipo hizo que los Thunder ampliasen la mínima ventaja que llevaban hasta los ocho puntos en menos de dos minutos. Según se acercaba el final Harden tomaba más decisiones individuales y Fisher le iba ganando la batalla. Como además El viejo Derek acertaba los tiros abiertos las ventaja se fue a quince puntos a falta de cuatro minutos.

Invitado inesperado: Derek Fisher, Reggie Jackson (Thunder)
ELIMINATORIA CERRADA: OKLAHOMA GANA CUATRO A DOS

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