24-12-2011: NAVIDAD VII, CUENTO DE VANIDAD

cancha baloncesto

Este cuento es contínuación del anterior publicado el 31 diciembre 2009
Navidad VI, Mr Grunge

video

No había muerto nadie ese año que se recuerde. Al menos nadie a quien se eche de menos en la solitaria casa de nuestro amigo. No había muerto nadie y sin embargo la muerte merodeaba el viejo patio de nuestro amigo. Cada vez más cerca de la puerta de entrada. Cualquiera que se hubiera pasado por allí no hubiera reparado en ello porque aquella presencia no llevaba guadaña sino una pelota de baloncesto. Seguía allí la misma cancha, pero ahora las hojas del otoño y el oxido la cubrían de olvido. Hacía ya dos años que el último partido que se jugó en aquellas canastas. Nuestro amigo había prometido sacar del baúl de los recuerdos su antiguo silbato de cuando fue árbitro de la liga inglesa en los años setenta del siglo pasado para pitar el encuentro. Pero no apareció por la mansión. Las promesas son sólo promesas. Y en aquellos día había recibido una oferta que no podía dejar escapar. El destino le había deparado una nueva oportunidad. Nuestro amigo tenía muchos defectos, y quizá cometía muchos errores, pero era contumaz y no se rendía jamás. Esa era su gran virtud. Sabía que le quedaban pocas fuerzas, pero su última llama, como a él le gustaba llamarla, la verían millones de espectadores. De modo que cambió su residencia y dejó una breve nota en la puerta. “Ya no vivo aquí abajo. Autorregulaos vosotros”.  Nuestro amigo se trasladó a la parte alta de la ciudad y, aunque volvía de vez en cuando a recoger el correo, cada vez lo hacía con mayor desgana y menor frecuencia. Sabía que su mansión se había convertido en un refugio de nostálgicos y de indeseables atraídos por el aura mágica de zona. Allí había prendido la primera chispa de su última llama y eso en cierto modo lo convertía en lugar de peregrinación. Pero todo estaba abandonado. No obstante, y eso era realmente sorprendente, incluso así el sitio tenía su embrujo. Dependiendo de las estaciones y del tiempo el jardín se tornaba un erial o un bosque encantado. Tal vez por esa misteriosa fascinación era incapaz de no regresar, y aunque lo hacía cada vez con menor frecuencia y mayor desgana, siempre, siempre, acababa regresando. Eso sí, nunca por mucho tiempo. La nostalgia enciende llamas del pasado y él estaba empeñado en continuar siendo una estrella del presente. Quedarse allí suponía una especie de retiro. Y ese no era su mundo todavía.

Un día como hoy apareció como una estrella fugaz por la mansión para dejar una tarjeta de navidad colgada en la valla de la entrada. Ni siquiera se atrevió a entrar a saludar a los que allí se encontraban. Sabía que la gente saltaba la valla para reunirse en el patio. Y efectivamente allí los vio. Tras las espesas ramas de los setos estaban Incubus, Tío Willy, Darkbeat y El Corrector brindando y felicitándose las fiestas. Ya la verán cuando salgan – pensó mientras tatareaba el Silent Night. Fue Tío Willy quien oyó ruido en el exterior. Salió corriendo pero no alcanzó a ver a nuestro amigo, sólo escuchó el motor de un coche alejándose por la calle.

“Felices Navidades. Nos escribimos el Día de Navidad a las 6 de la tarde, Opening Day de la NBA, primer partido televisado, New York Knicks-Boston Celtics”.

La nota la firmaba con su propio apellido. Un apellido convertido en un número: 13t. Ese era el nombre de nuestro amigo, aunque a él ahora le gustaba más llamarse por su nuevo nombre, una cifra distinta: 47,800. “Yo no me llamo Ramón Trecet, me llamo 32.200″ – dijo una vez cuando el brillo de su última llama alcanzó esa cifra. Podría parecer que se trataba de grados Kelvin, pero en realidad la cifra correspondía a la cantidad exacta de seguidores en la parte alta de la ciudad.

Unos arriba, otros aquí abajo, más lejos o más cerca, nos veremos el día de Navidad y quizá os cuente la historia del que se atrevió a entrar en la mansión y descubrió que el baúl de la memoria seguía allí y en su fondo todavía guardaba un silbato y una botella de whiskey de malta vacía. Por más que las silencien, las palabras son sólo promesas, siempre vuelven, como un círculo.

Mientras, la muerte sigue jugando con una pelota de baloncesto.

Continuará…

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79 Comments on "24-12-2011: NAVIDAD VII, CUENTO DE VANIDAD"

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Guest
12 years 8 months ago

La Academia le ruega al dj que ponga la música a toda hostia para que no se lean su deliberaciones.

Guest
12 years 8 months ago

Feliz Año a Todos, es el deseo de Pana, “A Mi Bola”, la sole, y de todos los técnicos que hacen posible el programa jajajajajajajajajajaja

Mojo Radio Flags, Feliz Círculo Nuevo.

Guest
SLUMDAR
12 years 8 months ago

Feliz año a todo el personal que me hace pasar estos ratos agradables. Incluso a los que no 😉

No vemos como si no hubiera pasado nada…el año que viene.

Un gran abrazo a todos.

Guest
12 years 8 months ago

¡Feliz Año Nuevo a todos!
Que lo empecemos bien y lo terminemos mejor y, especialmente, que tengamos salud.
¡Un abrazo!

Guest
rodolfofierro
12 years 8 months ago

Feliza año nuevo por anticipado. Y que veamos el 2013. Un abrazo

Guest
Dark
12 years 8 months ago

Feliz 2012 a tod@s ¡¡¡

Que tengamos amor y sexo a tutiplén.

http://www.youtube.com/watch?v=BpR6RCwREyw

Guest
12 years 8 months ago

Hola coleguis.
Esta vez he tenido una entrada de año muy tranquila, ya que no fui de marcha descontroladísima, como era la costumbre.

Pues na, que se me ha ocurrio poner el Himno de Mojo Radio Flags.
http://www.youtube.com/watch?v=OgGvml0cOKA
Feliz Año, pero de verdad de la verdadera.

Guest
Anonymous
12 years 8 months ago
Guest
Anonymous
12 years 8 months ago

Anonimo es uno de los habituales, al que nunca pensaríais le gustan los Pixies.

Guest
Anonymous
12 years 8 months ago

Aunque lo suyo es año nuevo es colgar esto

http://www.youtube.com/watch?v=UO1mvXAsfCc

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