A la vista del éxito que ha tenido la entrada de las 10 Mejores películas de la década pasada, he decidido continuar esta selección yéndome ahora a la década de los 90. Una época en la que todos éramos mucho más jóvenes, por lo que el recuerdo es inevitablemente nostálgico. Esta década la empecé viendo La Bella y la Bestia y la terminé con El Club de la Lucha, así que salta a la vista el camino recorrido entre uno y otro momento: de la infancia a la Universidad pasando por la adolescencia.

Cinematográficamente, fue una época muy agradecida, más adelante detallaremos película por película pero ya se puede decir que las hubo de todos los colores, con una gran variedad de géneros, desde el considerado último gran western, Sin Perdón, hasta la película por excelencia de la era informática, Matrix, pasando por tres de los últimas películas clásicas de Hollywood: El paciente inglés, Titanic y L. A. Confidential.

Mucha variedad, por tanto. ¿Calidad? Toda la exigible y más. Si en la entrada anterior decía que fue una época de transición para los grandes directores, los 90 en cambio fueron una edad dorada de la gran generación que empezó en los últimos 70 (Altman, Eastwood, Spielberg, Coppola, Allen, Polanski, Scorsese, Scott. etc.) pero también llegó el despertar de una nueva hornada de creadores más jóvenes que alcanzaron su primera madurez: Tarantino, Weir, Gilliam, Cameron, Fincher, Ang Lee, Mel Gibson y las primeras películas de Mendes, Nolan o Shyamalan.

En relación con esas 2 listas, es posible dividir la década alrededor del año 1995 en 2 períodos, en el primero de los cuales dominaron todavía “los clásicos” y en giochi gonfiabili el segundo ya convivieron con la “nueva hornada”. Seguiré esa divisíón para delimitar los 90 en dos lustros con una entrada para cada uno y dos Top Ten. Creo que se ajusta bastante bien a la historia cinematográfica de la década, y además las razones de espacio pesan lo suyo. Como me decía el compañero @Javier Clemente, hay demasiada calidad en los 90 como para reducir la lista a 10 películas, si hiciera un solo Top en justicia debería ser de al menos 25 filmes, y la entrada sería inabarcable.

Vamos por tanto con la primera lista. Como en la entrada anterior, algunas advertencias. Primera, el primer lustro abarca los años 1991-1995. Quedarán fuera, por tanto, algunas grandes películas del año 1990, como Bailando con lobos, que por otra parte nunca he conseguido ver completa, o El Padrino III. Segunda, mis conocimientos de esta época son limitados, como decía más arriba en estos años todavía veía pelis para niños sobre todo y por tanto no pude visionar varios imprescindibles hasta algunos años después. Algunas nunca he llegado a verlas y por tanto, aquí más que nunca pido recomendaciones a los lectores del blog.

Tercera, no se molesten en buscar Pulp Fiction en la lista. No soy muy fan de Tarantino y siempre me ha resultado incomprensible el revuelo que levanta esta película, con buenos diálogos, escenas muy bien resueltas, cierta originalidad en su estructura temporal, pero… overrated. Tarantino no ha inventado nada en el cine que yo sepa, aunque muchos así lo creen. Y cuarta, como en la década siguiente me centraré en el cine norteamericano, con una sola excepción que entra en el bonus, para el resto vuelvo a pedir vuestras recomendaciones.

Vamos por tanto con la primera lista. De nuevo, por orden cronológico:

TOMATES VERDES FRITOS (1991)

Director: Jon Avnet.

Intérpretes: Mary Stuart Masterson, Mary-Louise Parker, Kathy Bates, Jessica Tandy, Chris O´Donnell.

Género: Drama.

Empezamos con un clásico de los que ponen 1000 veces en la tele en sesión de tarde. Una mujer de mediana edad (Kathy Bates) encuentra un alivio a su aburrida existencia en las visitas que realiza a una residencia de ancianos, donde escucha las historias de Ninny Threadgoode (Jessica Tandy), una mujer misteriosa que tuvo una apasionante juventud en los años 30 y 40. Esta es la época en la que se ambienta la base argumental de la película: la historia de la lucha por salir adelante que libraron dos mujeres del Sur Profundo, Idgie (Mary Stuart Masterson) y Ruth (Mary-Louise Parker).

Por tanto, una crónica de las difíciles relaciones de género, raza y condición social en una época previa a la gran ebullición de los 50 y 60 en Estados Unidos. Tiene lejanas semejanzas con otras películas más recientes, como Criadas y Señoras, aunque es muy superior a esta última por la sensibilidad con la que su sorprendente realizador (Jon Avnet, que no ha vuelto a dirigir una película ni remotamente semejante a esta) trata el tema, La relación entre las dos mujeres del pasado y las dos del presente, que es el meollo de Tomates Verdes Fritos, te llega al corazón, con todas sus ambigüedades (uno no puede evitar pensar que Idgie está enamorada de Ruth, aunque la cosa nunca llega a concretarse).

Lo mejor: las cuatro actrices protagonistas, incomprensiblemente ignoradas en los Oscars de aquel año, salvo Jessica Tandy.

Lo peor: que la película se haya visto condenada en España a clásico de sobremesa.

TERMINATOR 2: JUDGMENT DAY (1991)

Director: James Cameron.

Intérpretes: Arnold Schwarzenegger, Linda Hamilton, Edward Furlong, Robert Patrick, Lance Henriksen.

Género: Acción/Ciencia Ficción.

Primera peli de ciencia ficción de esta lista, Terminator 2 suponía para su joven realizador, el canadiense James Cameron, el reto de mejorar el resultado de la primera parte, que ya era excepcional. Para ello esperó 7 años en los que los efectos visuales, claves en una película de este tipo, mejoraron muchísimo, y permitieron crear al T-1000 (un inhumano Robert Patrick), el implacable perseguidor llegado del futuro para cargarse al adolescente John Connor (Edward Furlong) si antes no lo impiden su terrible madre Sarah y su ahora aliado, el T-101 (el gran Schwarzie, que nació para hacer este papel).

Cameron repite aquí la jugada de Aliens y hace una secuela más cargada de acción pura y con menos retórica de ciencia ficción o suspense. El resultado es, una vez más, magistral, como ocurre siempre que este realizador tiene tiempo y dinero para preparar sus faraónicos proyectos. Las escenas de acción son impecables y la película se pasa en un suspiro sin perder un segundo el interés. Inevitablemente, hay paradojas temporales, pero son relativamente secundarias. Todo está al servicio de la desigual lucha entre el robot menos avanzado y el último modelo de exterminador, que por supuesto no será al fin indestructible. Y el famoso Sayonara, Baby de Schwarzenegger y el emocionante final de su personaje se convirtieron en un clásico.

Lo mejor: que aunque la técnica ha avanzado mucho en 20 años, no parece que la película se vaya a quedar vieja.

Lo peor: el lío con la mano del T-101 y el que Cameron no pudiera o quisiera levantar una tercera parte a la altura del resto de la franquicia… por no hablar de la cuarta.

THELMA & LOUISE (1991)

Director: Ridley Scott.

Intérpretes: Susan Sarandon, Geena Davis, Harvey Keitel, Michael Madsen.

Género: Road Movie.

Contentaré a sus fans del blog y meteré una peli de Ridley Scott. Más en serio, estamos ante una de las cimas de la carrera del director británico, tan brillante técnicamente (esos paisajes de las Grandes Llanuras) como todas sus principales obras, pero con una scivolo gonfiabile historia que funciona a la perfección y dos actrices totalmente entregadas a la causa. El argumento: dos mujeres se toman un descanso de sus decepcionantes vidas y escapan en coche a la aventura… por el camino se verán envueltas en un tiroteo y finalmente se convertirán en fugitivas de la justicia, y abocadas a un final trágico, aunque glorioso.

El guión de Callie Khouri (como siempre Scott funciona mejor cuando se limita a lo que mejor sabe hacer) es excepcional y va graduando perfectamente la progresión dramática, lo que parece una tranquila peli de carretera se va convirtiendo en una odisea con tintes épicos, a la que se ven arrastradas dos tías normales y corrientes, una (Geena Davis) un poco más lanzada, otra (Susan Sarandon) más sensata. Los personajes masculinos son más débiles, aunque tenemos una jugosa aparición de un jovencísimo Brad Pitt, y dos sólidas performances de Michael Madsen, entonces en la cresta de la ola, y Harvey Keitel.

Lo mejor: el final, la música, la fotografía.

Lo peor: el agujero negro en el que cayó Scott después de esta película.

DRACULA DE BRAM STOKER (1992)

Director: Francis Ford Coppola.

Intérpretes: Gary Oldman, Winona Ryder, Anthony Hopkins, Keanu Reeves.

Género: Terror.

No podía dejar de poner en la lista la última (desgraciadamente) obra maestra de Coppola. El genio neoyorquino se atrevió a hacer una nueva versión de la archiconocida historia, con el vampiro más famoso del mundo de protagonista. A pesar de su título, desconozco si esta versión es especialmente fiel a la novela original. En todo caso, el tono que le da Coppola es absolutamente del XIX, convirtiendo al monstruo de la tradición y los cuentos en un héroe romántico que vende su alma a las tinieblas para llorar eternamente a su amada perdida, Elisabetha (impresionante Winona Ryder).

Buena parte del gancho de la película se debe a la pareja protagonista. Gary Oldman, actor con un físico inquietante, se encargó del papel principal, y es el mejor Drácula que he visto nunca. Sin duda parte del mérito es del maquillaje, con la famosa caracterización de los “moños” que ha dado lugar incluso a parodias varias.

Sea como sea, la película empieza de una manera muy poco canónica y parece que va a ser ante todo una historia de amor, pero el director acaba ajustándose a los códigos del cine de terror para desarrollar la típica historia de lucha del Mal (Drácula) contra el Bien (representado por Winona/Mina y el cazavampiros Van Helsing/Anthony Hopkins). Una peli de terror clásica, al fin, con escenas tremendamente inquietantes (la primera aparición de Dracula viejo, las noches toledanas que pasa el pobre Keanu Reeves en el castillo, la muerte de Renfield en el manicomio, etc.) pero que en su rush final vuelve un poco al principio, al elegir Mina la oscuridad junto a Dracula. Final abierto, por tanto, de una película tan inmortal como su protagonista.

Lo mejor: la pareja protagonista, el vestuario, el prólogo, la escena a cámara hiperrápida, el homenaje al cinematógrafo…

Lo peor: Keanu Reeves, pero la historia requería un actor limitado y sin carisma como él, para que la elección de Mina fuera más evidente.

LO QUE QUEDA DEL DÍA (1993)

Director: James Ivory.

Intérpretes: Anthony Hopkins, Emma Thompson.

Género: Drama.

El americano (pero enamorado de lo británico) James Ivory adapta la excelente novela de Kazuo Ishiguro, sobre la vida de un mayordomo (impecable Hopkins) a lo largo de los años anteriores y posteriores a la II Guerra Mundial. Un hombre representativo de un mundo que se acaba, el de la sociedad aristocrática británica a la que sirvió durante la mayor parte de su vida, que al final de la misma no podrá evitar preguntarse si todos sus sacrificios valieron la pena.

El fin de una época, por tanto, es el que da su característico tono crepuscular a la película. La historia de amor imposible entre mayordomo y ama de llaves está narrada con enorme delicadeza, y debe su potencia también al trabajo de unos inmensos Anthony Hopkins (en el cenit de su carrera por entonces, sólo hay que repasar la lista de sus películas en 1991-93) y Emma Thompson (también en sus mejores años). Un ejemplo, por tanto, de cómo los americanos pueden imitar con éxito las mejores películas british. Y el film, muy oscarizable, tuvo 8 nominaciones pero debió inclinarse ante el poderío de la ganadora del año, la siguiente de la lista.

Lo mejor: la ambientación y los actores.

Lo peor: ¿Qué ha sido de James Ivory?

LA LISTA DE SCHINDLER (1993)

Director: Steven Spielberg.

Intérpretes: Liam Neeson, Ben Kingsley, Ralph Fiennes, Embeth Davidtz.

Género: Drama.

Tampoco podía faltar en la lista esta película, que marcó un antes y un después en el cine sobre el Holocausto y en la carrera de su realizador, el Rey Midas de Hollywood. Vaya por delante que no creo, como la mayoría de críticos y muchos espectadores, que ésta sea la mejor película de Spielberg. Ese honor se lo daría a alguno de sus mejores filmes de entretenimiento, ya sea Indiana Jones III, Tiburón, ET o Encuentros en la Tercera Fase.

En todo caso, la que nos ocupa es una de las mejores de su extensa filmografía, un emocionante retrato del horror de los campos de trabajo nazis con 3 puntos de vista: el de las víctimas (donde destaca un excelso Ben Kingsley, que no fue nominado al Oscar); el de los verdugos (con el show de Ralph Fiennes, que bien pudo ganar), y el de Oskar Schindler, empresario sin escrúpulos y bon vivant que se encontrará un poco sin querer en el papel de salvador de sus protegidos trabajadores. Una historia real, aunque la adaptación despertó las inevitables polémicas, que rinde homenaje a todo un pueblo condenado a la esclavitud y la muerte y a las personas que aliviaron su sufrimiento. Y el resultado es inolvidable y recibió 7 Oscars muy merecidos.

Lo mejor: cualquiera de los parlamentos de Ralph Fiennes/Amon Goeth, y en general la crudeza sin concesiones con la que se narran los hechos.

Lo peor:  que este Spielberg sólo lo vemos después muy de vez en cuando (Munich, Salvar al soldado Ryan) y sus divertimentos en cambio no se acercan a su nivel de los 80 y primeros 90.

CADENA PERPETUA (1994)

Director: Frank Darabont.

Intérpretes: Tim Robbins, Morgan Freeman.

Género: Drama carcelario.

La película más valorada por los usuarios de imdb.com es uno de los clásicos imprescindibles de la década. Nominada a 7 Oscars, se fue de vacío en aquella Gala que consagró a Forrest Gump como ganadora… pero el tiempo ha puesto las cosas en su sitio. El guionista y director Frank Darabont, ahora muy conocido como creador de The Walking Dead, adapta una novela de Stephen King sobre un hombre injustamente condenado a la perpetua en la prisión de Shawshank, que debe adaptarse a un entorno durísimo de crueldad y explotación, pero también de compañerismo, pues la película es un canto a la amistad en tiempos difíciles entre el personaje de Robbins y el de un magnífico Morgan Freeman.

Cadena perpetua tira con cargas de profundidad contra la corrupción, ineficacia y crueldad del sistema penitenciario de la época (los 40 y 50) a la vez que contra el sinsentido de esta pena. Pero todo eso importa menos que la lucha de los protagonistas Andy y Red por sobrevivir en lucha contra un diabólico alcaide con muchos trapos sucios, sus secuaces, y el resto de ángeles y demonios que pueblan la prisión de Shawshank. El punto culminante de la función es la inverosímil fuga de Andy de la prisión, gracias a Rita Hayworth. Fantástica.

Lo mejor: el guión, que funciona como un reloj, y el espléndido reparto.

Lo peor: que ya no se hacen películas como esta.

DOCE MONOS (1995)

Director: Terry Gilliam.

Intérpretes: Bruce Willis, Madeleine Stowe, Brad Pitt.

Género: Ciencia ficción.

No puedo ser objetivo con esta película. Simplemente, la adoro. Es desde mi punto de vista la mejor película de ciencia ficción de los 90 (una década con muchas y muy buenas películas de este género), la mejor película de su realizador y la mejor de la extensa carrera de Bruce Willis.

Basada en un mediometraje francés, La Jetée, Doce Monos narra la odisea de un tío del que sabemos poco más que su nombre, James Cole (impecable Bruce Willis, que nunca ha estado más puteado… y ha estado muy puteado) metido en un lío del que entiende poca cosa. Un prisionero, un loco, un visionario, obsesionado con sus misteriosos sueños, viajando en el tiempo entre una Tierra desolada por un virus mortal en 2035 y el año 1990, adonde es enviado por error por unos maquiavélicos científicos.

Una típica historia de hombre que debe salvar el mundo, por tanto, pero que oculta un montón de capas de sorpresa reservadas al afortunado espectador que la vea por primera vez (y la segunda, y la tercera, y…). Como es posible que mucha gente no la haya visto, no desvelaré aquí todos los detalles, simplemente diré que Cole cree encontrar en un siniestro psiquiátrico del pasado al alucinado responsable de la plaga, un Brad Pitt totalmente pasado de vueltas que recibió la primera nominación al Oscar de su carrera. Él es el líder del misterioso Ejército de los Doce Monos, la principal amenaza para la humanidad… o eso parece.

Lo mejor: el final, absolutamente cruel. En general, todo.

Lo peor: Nada.

LOS PUENTES DE MADISON (1995)

Director: Clint Eastwood.

Intérpretes: Meryl Streep, Clint Eastwood.

Género: Drama romántico.

La imprescindible presencia de una película de Eastwood en esta lista. Muy criticada por lacrimógena, sensiblera, etc., a mí me encantó cuando la vi, por supuesto lloré, y me parece una de las mejores películas románticas de la década. Narra el breve encuentro de un fotógrafo vagamundos (Eastwood) y un ama de casa entrada en años (Meryl Streep, en su única colaboración con Clint hasta ahora). Con los bonitos paisajes del condado de Madison, Iowa, de escenario de fondo, Los puentes de Madison tiene una estructura narrativa en forma de diario secreto de Francesca Johnson, el personaje de Meryl, que sus hijos en la jeux gonflables ficción van leyendo tras encontrarlo entre sus efectos personales a su muerte. Una historia de amor donde todo gira alrededor de la elección que debe hacer Francesca, su deber como esposa y madre (no hay que olvidar que la película se ambienta en los 60) o buscar una posible mayor felicidad escapándose con un completo desconocido.

Película, por tanto, perfecta para amas de casa descontentas con su vida. También buena para ver en pareja, aunque cuidado que puede alentar la insatisfacción de las hembras… Bromas aparte, he elegido esta película porque me emocionó, porque es la única de su género que ha filmado este director, y, last but not least, por Meryl Streep. La actriz USA más importante de los últimos 25 o 30 años no fue olvidada por la Academia, pero se tuvo que conformar con la nominación, pues aquel año la competencia en su categoría era la más dura que he visto en mi vida: Elisabeth Shue, Sharon Stone, Emma Thompson y la señora de la que hablaremos más abajo.

Lo mejor: Meryl, Clint es muy buen actor pero aquí se limita a cubrir el expediente, tampoco el papel era el más indicado para él. La música y los paisajes.

Lo peor: inevitablemente, nunca se citará a la altura de las otras cimas de Eastwood.

PENA DE MUERTE (1995)

Director: Tim Robbins.

Intérpretes: Susan Sarandon, Sean Penn.

Género: Drama.

Película para levantar ampollas en USA, es el mejor acercamiento al delicado tema de la pena de muerte que he visto nunca. La filmó el actor Tim Robbins, del que hablamos más arriba, que desgraciadamente no se ha prodigado demasiado detrás de las cámaras. Para sacar adelante el film, contó con un material simple pero efectivo: una historia sencilla pero muy poderosa y dos actores que se comen la pantalla y que merecieron ambos el Oscar de aquel año, pero sólo Sarandon lo consiguió.

La religiosa Helen Prejean (impagable Susan Sarandon, insisto) realiza una visita de rutina al corredor de la muerte, donde inicia una compleja y peligrosa relación con un convicto que espera la inyección letal, Matthew Poncelet (alucinante Sean Penn, en la mejor interpretación de su carrera, mucho mejor que las de sus dos Oscars). A partir de ahí se inicia una larga y compleja batalla contrarreloj, en dos planos, el puramente judicial y el de la monja por aclarar la culpabilidad o inocencia del preso. Duelos actorales impresionantes, mucha emoción y un final devastador, se tenga la opinión que se tenga sobre la pena de muerte. Obra maestra.

Lo mejor: el reparto, sin duda, pero también la valentía de Robbins, que nunca se ha mordido la lengua a la hora de expresar sus opiniones.

Lo peor: que no se ponga en todas las escuelas de USA como asignatura obligatoria… y después cada uno que piense lo que quiera.

BONUS

Las 5 siguientes, por orden cronológico, serían: El silencio de los corderos (1991), Léolo(1992), En el nombre del padre (1993), Tierras de penumbra (1993), y Seven (1995).

¿Qué os parece? ¿Cuál sería vuestra lista? ¿Qué recuerdos os traen estas pelis noventeras? Se admiten anécdotas de la época y, por supuesto, recomendaciones.

NOTA:

Puedes consultar la segunda parte aquí: EL MEJOR CINE DE LOS 90 (II). Incluye encuesta.